Mitsuya quedó en blanco, la castaña escuchó la conversación, se encontraba bastante nervioso pero no dejaría que ella lo notara.

Yuzuha lo veía a los ojos, con una mirada tierna pero muy lastimada.

— ¿Cómo te sientes?—  Preguntó Mitsuya evadiendo la pregunta por parte de ella.

Ella sonrió un poco al notar que el chico fugó su pregunta, pero no pasó desapercibida la reacción de nerviosismo de él al hacerle la pregunta, además de que ya había escuchado de la propia boca de él, decir que la amaba. Y eso la hacía sentir satisfecha.

— Me duele mucho el cuerpo, sobre todo la cabeza y las piernas — Takashi observaba el cuerpo de Yuzuha, se encontraba bastante herido.

— Tienes que tomar este desinflamatorio y aplicar esta crema, fueron órdenes del doctor —  Decía Mitsuya, mientras veía fijamente a Yuzuha a los ojos.

— Gracias.

— ¿Gracias porqué? No e hecho nada.

— Me estas cuidando — Sonrió inclinando su rostro hacia abajo.

Las mejillas de Mitsuya se ruborizaron un poco, sabía que indudablemente lo haría por ella.

— Siempre que pueda, lo voy a hacer Yuzuha, cuando me necesites..... ahí estaré.

Los ojos de la castaña lo miraban detenenidamente, interiormente sentía lo que se ele podría llamar mariposas en el estómago, de la felicidad que el le transmitía con esas palabras al salir de su propia boca, sentía, se declaraba completamente feliz y tranquila.

— ¿Quieres comer algo? —Pregunto él.

— Tengo hambre, pero casi no puedo mover la boca...... me duele.

— Prepararé algo de sopa.

Takashi flexionaba sus piernas para quedar de pie y dirigirse a la cocina.

— No, Mitsuya, espera.

Él detugo su paso, y giro un poco su cuerpo para encontrarse con ella.

— Aún no prepares nada, quedate aquí, conmigo, un rato más, no te vayas.

— Yuzuha, solo haré sopa en caldo, tienes que comer.... Y no me tardaré.

— ¿Tienes hambre tú?

— Para nada.

— Entonces no la hagas todavía.... Quedate conmigo, no me dejes otra vez.

Esas palabras mataron a Mitsuya, y no la pensó, para tomar asiento por un lado de ella.

— Necesito ayuda para aplicar la crema, ¿Podrías?

— Por supuesto.

Contestó sin pensar en dónde tendría que aplicar la crema desinflamatoria.

— ¿Donde te la aplico?.

— Comenzamos con los brazos,porfavor.

Las manos varolines de él comenzaban a aplicar suavemente, masajeando sus pequeños y delgados brazos. Esos bracitos que tanto le encantan, para él Yuzuha era como si fuera de cristal , frágil, delicada, que tienes que tocar suavemente, si no podías quebrarla y dañarla, para él, ella era todo eso y más.

— ¡Auch! — Exclamó de dolor — Cuidado.

— Disculpa Yuzu.

La castaña observaba el rostro de él, cabellos lavanda , notó que se dejó crecer un poco el cabello, miraba su perfil, el cual le encantaba, para ella, Mitsuya, era un chico malo, con apariencia mala, pero muy noble y bueno, un amor de persona, y que siempre razonaba antes de actuar, siempre fue muy maduro.

Jamás olvidaría el día en que, la defendió de Taiju, a pesar de que la escucho decir que le gustaba Takemicchi, pero a las semanas, Hakkai le dijo a Mitsuya, que sólo se lo dijo porque estaba pequeña, y le daba pena que él supiera sus verdaderos sentimientos hacia él, y puso lo del cabello como pretexto.

— ¿Ahora donde más hay que aplicar?

— E-en l-las p-piern-nas—Tardtamudeo con mucha pena,  aunque ya estuvo hace tres años con Mitsuya, sentía muy vergüenza , tenía mucho sin verlo, y mucho que no veía su cuerpo.

El carmesí se apoderó de las mejillas de él al escuchar donde había que aplicar la crema.

— ¿Segura? ¿No preferirías aplicartela tú?—  Pregunto muy nervioso.

Ella solo negó con la cabeza.

— No, quiero que tú lo hagas, porfavor.

Takashi no se pudo negar al observar su carita tan tierna, con un morete en la cara.

Hecho un poco de crema en la yema de sus dedos y comenzó a aplicarla, pasó saliva por su garganta, se sentía un poco nervioso,  habia que aplicar un poco de crema cerca de la entre pierna donde tenía un golpe muy duro, tenía mucho que no tocaba esa parte del cuerpo de Yuzuha, al comenzar aplicar crema ahí, su mano comenzó a tener una sensación un poco caliente, pues estaba muy cerca de la ingle de la joven, y ella comenzó a calentarse un poco, el tacto, era sin duda el de Mitsuya, tan delicado, y suave, Yuzuha sólo estaba muy sonrojada, sentir esa mano muy cerca de su intimidad , la hacía sentir despertar muchas cosas.

Mitsuya, también se sentía que la temperatura comenzaba a elevarse dentro de su cuerpo, moría por quitarle el short para dormir a Yuzuha y hacerla suya una vez más, pero sabía que no podía, estaba muy herida y la lastimaria mucho más.

Lo que más intriga a Mitsuya es como el imbecil aquel pudo lastimarla hasta la ingle, le preocupaba que le lastimara sus partes más íntimas.

Preguntas querían comenzar a entrar a la mente de Mitsuya sobre Dante, cuando ella tomó de la mano de Mitsuya, y la puso sobre su intimidad.

El lavanda  quedó impactado, y no esperaba ese momento.

— Bésame.

No podía creer lo que estaba escuchando, Yuzuha le estaba pidiendo algo que durante años había esperado y anhelado tanto.

Ella, se había calentado tanto con el tacto de él que ya no resistió más, y actuó, poniendo la mano de él, sobre su sexo. Olvidando el dolor físico que tenía.

— Bésame Mitsuya, porfavor, hace años que esperaba verte, y besarte de nuevo..... Hazme tuya.

Esas palabras encendieron la intimidad de él.

Sacó su mano del sexo de ella y la comenzó a besar, suavemente para no lastimarla, comenzaron a sentir que el calor les comenzó a recorrer por todo su cuerpo, tenían rojas hasta las orejas, tanto tiempo anhelando un beso, por lo menos un beso, y no podían dejar pasar la oportunidad.

Yuzuha retiro la camisa de Takashi como si estuviera necesitada de él , dejando descubierto el cuerpo tan trabajado de Mitsuya, dejando ver su formado pecho y su abdomen plano y bien formado, con delicadeza, Mitsuya le quito la blusa de tirantes a Yuzuha, dejando ver su delgada, pequeña y pero bonita cintura, su abdomen plano, y sus pechos pequeños, pero redondos, esos pechos que lo enloquecian tanto.

Mitsuya, se detuvo un momento. Quiso contemplar el cuerpo de ella, observaba cada detalle de su golpeado cuerpo, no lo miraba  por ver sus golpes, lo miraba  para admirarlo , años queriendolo ver, y por fin, nuevamente, era suyo, era suyo de nuevo cada rincón de esa piel tan suave y tersa.

Él sonrió,  se le cristalearon sus ojos lavanda, Yuzuha lo noto, y con sus dos manos, tomó de la cara de él y la planteo un pequeño, tierno y muy suave beso.

— Sí — Contestó Mitsuya.

— ¿Sí qué? — Preguntó Yuzuha un tanto confundida.

— Si te sigo amando..... Y jamás dejé de hacerlo.

Cruzaron sus miradas , Yuzuha no lo pudo evitar, y  lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas , se sentía tan plenamente feliz, lo que tanto deseo escuchar por tres años, ya lo escuchó.

Unieron de nuevo sus labios ,y  Yuzuha le retiro el cinto a Mitsuya,  comenzando  a bajar su pantalón, para luego bajar su bóxer, pero la acción fue detenida por Takashi.

— ¿Estas segura de esto?.

Yuzuha asintió con la cabeza.

— Siento que te lastimare, estás muy herida.

Yuzuha permaneció en silencio . Era tan tierno cuando se preocupaba así por ella.

Ella le sonrió y dio un beso en los labios.

— Quiero hacerlo, quiero sentirte dentro de mí, quiero que me hagas tuya una vez más, quiero sentir tu calor adentro. Porfavor, déjame sentirte una vez más Mitsuya.

Esas palabras encendieron a Mitsuya, y delicadamente, bajo el short de Yuzuha dejando ver su sexo, unieron sus laviso y sus manos se tocabam mutuamente , pequeños gemidos salían de la boca de la castaña , al sentir los dedos de Mitsuya dentro de su intimidad, el sentir la como se babeaban al entrar y salir provocaba más al lavanda .

—Mmm— Pequeños gemidos se escuchaban en la silenciosa habitación.

Mitsuya retiro sus dedos y comenzó a pasar sus labios por todo su cuerpo, tan delicadamente como podía , desde sus pies, piernas y sobre todo, una de las cosas del cuerpo que más le gustaba de Yuzuha, era su pequeño pero redondo trasero,  al tener de nuevo esos glúteos sobre él, masajeo de ellos mientras planeaba suaves besos sobre él, mientras que una de sus manos la llevaba al clitoris de ella y masajeaba ardientemente.

— Ahhh, Takashi — Jadeaba su nombre.

Su dedo de en medio e índice entraban y salían dentro de ella, humedesendose, sintiendo lo acalorado que se encontraba su intimidad.

Tras finalizar con sus glúteos, fue a explorar su espalda haciendo una camino de saliva con su lengua , hasta llegar a su cuello, de ahí paso a su desnudo pecho comenzando a tocarlos tan necesitadamente, una de sus manos seguían en el clitoris de ella. Masajeando pasando a su vagina sintiendo los líquidos vaginales.

— Mi Mitsuya.... ¡Ahhh! ¡Ahhhh! — Gemia extasiada.

Los gemidos de ella encendían más a Takashi, y eso hacia que él hiciera disfrutar más a ella.

— Yuzuha — Jadeada— eres una Diosa para mi— Decía Mitsuya mientras bajaba con su lengua a su vagina, comenzando a besar y a penetrar con su lengua, los gemidos de Yuzuha comenzaron a hacerse más y más fuertes y deseosos.

— Mitsuya.... — Jalaba aire— hazme tuya porfavor, ya no.... Ya no puedo más, necesitto sentirte dentro de mi porfavor.

— Lo que mi Diosa pida.

Delicadamente Mitsuya comienza a colocarse para introducir su miembro dentro de ella , y tenía que hacerlo muy delicadamente, el tamaño y la mala posición podrían lastimar a Yuzuha.

Lentamente comenzó a darle pequeñas y lentas embestidas con ese miembro color rosita que tanto movía a Yuzuha y tanto la mojaba.

Takashi encorvo su cuerpo, quedando frente a frente, la castaña enterraba sus uñas en la fuerte espalda de él.

—. ¡Ahh! Yuzuha. Mami, que rica estas! — Decía entre fuertes jadeos, ya no podía contenerse.

— Metela toda Mitsuya. Ya, no te detengas, sin piedad.

Mitsuya cumplio con su petición y la penetro completamente.

Sus estocadas eran más duras e intensas, Mitsuya elevó su cuerpo hacia arriba, cruzando las piernas de ella en sus hombros.

El rostro lleno de placer de Yuzuha le provocaba más exitacion.

El sudor comenzaba a mezclarse entre ambos cuerpos.

Ambos  soltaban grandes órgasmos, tanto tiempo deseandose y extrañandose, no pudieron contra eso. Yuzuha estaba tan mojada. Y el miembro de Mitsuya dilataba mucho.

Llegó al clímax, Mitsuya no pudo con los órgasmos de Yuzuha, no se contuvo.

— Yuzuha, me quiero venir.

— Vente dentro de mi, porfavor, déjame sentirte dentro de mí.

Más se encendió y así lo hizo, ambos comenzaron a soltar enormes órgasmos.

Durante e clímax.

— Mitsuya, te amo.

— Yuzuha, te amo.

Terminaron al mismo tiempo.

Y ambos terminaron muy cansados, Mitsuya se quedó acostado alado de Yuzuha se abrazaron y se besaron, se quedaron dormidos por dos horas . Fueron felices de nuevo.

El teléfono de Mitsuya comenzó a sonar. Interrumpiendo el momento.

Draken

Contestó pero en voz baja para no despertar a Yuzuha.

—

¿Que pasó Draken?

— ¿Estas con Yuzuha aún?

— Si, aquí estoy, disculpa por haberte cancelado, la verdad, tenía que venir a ver a Yuzuha. Después te explico que pasó.

— Esta bien no pasa nada, solo quería decirte que traje a Emma a cenar al restaurant de Smiley, y estuve hablando con Angry.

Nerviosamente Takashi pasó saliva por su, garganta.

— ¿Ah sí? Con Angry..... Y¿Que pasó?.

— No te pongas nervioso Mitsuya, Angry no te odia, le dije que querías venir a hablar con él, pero se te había presentado algo con Yuzuha y no podías venir.

— ¿Esta ocupado? ¿Podrías pasármelo?.

— Seguro, de hecho lo tengo aquí enfrente deja te lo paso.

— ¿Mitsuya?

— Angry.... Escucha yo.

— No tienes que decir nada Mitsuya, yo entiendo perfectamente la situación, tu no fuiste el de la culpa.....fue Hannah, ella, abuso de tu estado de ebriedad .

— Si lo sé, pero tampoco me justifico— Fuertemente suspira — Esa noche te dije que fueras con ella, que hicieras el intento, y yo fui el que terminó llevandosela a la cama.

— No te preocupes Mitsuya, siempre dentro de mí corazón, sentiré algo por ella, pero, ya no es alguien quien yo quiera ya en mi vida, creo que abrí los ojos, y no es muy buena mujer, lo que hizo estuvo muy mal.

— Gracias Angry,

— No no tienes nada que agradecer, por cierto, luego vienes a comer y traes a Yuzuha jijiji.

Colgó la llamada.

— Angry me colgó.

— ¿A quien te llevaste a la cama?—  Pregunto Yuzuha.

Mitsuya engrandecio sus ojos.

— ¿Yuzuha? ¿No estabas dormida?.

— Lo estaba, pero dio la casualidad que me desperté en cuanto dijiste que le habías aconsejado a Angry llegarle a alguien y tú fuiste el que se la llevó a la cama —Decía Yuzuha viendo a Mitsuya con enojo.

Mitsuya suspira.

— Mira, te explico que ocurrió.

El lavanda comenzó a darle explicaciones a la castaña de porque se metió con aquella chica y Yuzuha solo escuchaba.

— ¿Te pusiste así por mi? ¿Enserio?

— Puedes preguntarle hasta a Chifuyu, creo que es de los que más le hablas de la Toman. Todos vieron como me puse.

— ¿Ya no la ves?

— Jamás la volví a ver, solo hable con ella y le explique lo que pasó.

— ¿Como lo tomó ella?

— Pésimo, me dijo que me pudriera, me llamó imbecil y me colgó la llamada.

— Hakkai me había dicho que tenías novia.

Mitsuya comienza a reír.

— Desde que te fuiste de mi vida, no e tenido vida amorosa, ni sexual, no me a interesado nadie, además de que me enfoque tanto en mi carrera, en mis hermanas, en ayudarles que no podía pensar en otra cosa. Nadie me interesaba, además esperaba que algún día, termináramos con ese trato que habíamos hecho.

Los ojos ámbar se clavaron en los lavanda.

— ¿Ya tienes hambre Yuzu?

— Ya ahora sí.... La actividad sexual me dio hambre.

Mitsuya sonrió y lamio sus labios.

— Prepararé la sopa, ¿Esta bien?

Asintió . Y Mitsuya se retiraba para preparar la cena.

La castaña se sentía tan feliz, pero a la vez estaba un poco preocupada,  Dante había estrellado su celular y le daba un poco de miedo que llegara al, departamento de Hakkai de nuevo, aunque está vez se sentía muy protegida por Mitsuya, ella sabía perfectamente que podía dejar a Dante cuando quisiera, pero no quería afectar la carrera de Hakkai. Se encontraba en un enorme dilema. El peli azul dentro de poco se iría a San Diego, pero lo bueno que volvería en menos de un mes.

Su cabeza comenzaba a tener una revolución.

Mitsuya aprovecho que mientras hacía la comida, le mandaba mensaje a Taiju.

Tengo confirmado lo que tus hermanos te escondieron durante varios meses Taiju, Dante golpeaba a Yuzuha.

Mitsuya.

Ese maldito bastardo, en 1 semana yo llego a Japón, pero si antes de eso puedes molerlo tú a golpes a él, te lo agradecería muchísimo. Mi hermana sufrió mucho conmigo, no quiero que vuelva a pasar lo mismo, tras yo haber entendido mis errores gracias a ti, no puedo permitir que alguien le haga un daño más de nuevo.

Taiju.

No te preocupes Taiju, si me vuelvo a topar con ese imbecil, no se la va a acabar.

Mitsuya.

El lavanda quería saber porque Yuzuha no podia dejar a su novio, le preocupaba en exceso.

— Que rico huele—Dijo Yuzuha llegando a la cocina. .

En los labios de Mitsuya se pintaba una sonrisa.

— Muchas gracias Yuzuha...... Yuzuha hay algo que te quiero preguntar ¿Puedo?

Ella dedico su mirada a él .

— ¿Dime?

— ¿Porqué no dejas al estúpido de tu novio?

Yuzuha desvío su mirada a otro lado. Mitsuya se mantenía confundido observando sus gestos corporales.

—Claro..... era de suponerse la pregunta del millón de dólares ¿no? lo que todo mundo tenía dudas, intrigas, ¿Porqué no dejó a Dante?

— Así es, y quise ser directo.

— No Puedo decirte.

— Yuzuha, estoy harto de tanto misterio, quiero saber porque no lo dejas, ya te metiste conmigo Y.... ¿Piensas seguir con él? ¿Me amas no?

— Más que a nada en el mundo Mitsuya —Sus ojos se cristalean.

— Entonces ¿Porqué no lo dejas?

Cerró de sus ojos, y suspiro fuertemente buscando encontrar la calma interior.

— No puedo Mitsuya, no lo puedo dejar, si lo dejo, la carrera de Hakkai se perderá.

— ¿Porqué? Porfavor dime, dime Yuzuha, yo te puedo ayudar..... ya te perdí una vez, no quiero que vuelva a pasar. El solo recordar la última vez que te vi, antes de este tiempo, me pone muy mal.

La frente de Takashi la única junto con la de ella.

— El día que Hakkai te platico que yo, me puse muy ebria y Dante descubrió mis mensajes..... Ese mismo día, Dante ya tenía un plan para cuando yo planeara dejarlo, se aprovecho de mi hermano, de su estado de ebriedad, y lo hizo firmar una farsa que hizo el mismo, en una donación para caridad para personas con cáncer, donde se vieron involucrados más de 600 millones. Dante tiene esas hojas firmadas, si yo lo dejo, hará que todo mundo se entere y la carrera de Hakkai se verá afectada, y por si fuera poco, lo meten a la cárcel, por fraude.

Yuzuha comenzaba a llorar.

— Hakkai no hizo nada, nada de nada, el solo se embrago, y ni cuenta el de lo que firmó, la donación se hizo, pero por eso Dante vive como quiere, Dante y otras personas que estuvieron involucradas en esto, Kokonoi creo que ni siquiera sabe lo ocurrido, Dante me dijo que si alguien sabía esto, me mataría y mete a la cárcel a Hakkai. Conmigo el se obsesiono, esta tan obsesionado conmigo, que cada que me ve, se acuerda de los mensajes le hierve la sangre y me quiere matar a golpes cada que se acuerda, porque dice que se lo humille demasiado.

— Ese pendejo — Dijo el lavanda enojado.

— ¿Ahora entiendes porque no lo puedo dejar? Y Dante no es iluso , claro que no lo es, tiene copias de ese contrato con Hakkai, una vez le queme uno, y me mostró que tenía más copias.

— ¿Porqué no se lo has dicho a Hakkai?

— ¿Estas loco Mitsuya? ¡CLARO QUE NO! Mi hermano a sufrido ya bastante ¿Como crees que le diré esto? Yo por Hakkai soy capaz de soportar lo que sea. Y si es necesario soportare mas esto.

—¿Y por ti? ¿QUE ERES CAPAZ DE SOPORTAR POR TI YUZUHA? — Levanto su voz.

La castaña besa los labios de Mitsuya, planteandole un lindo y tierno beso.

— Yo con tal de ver a mi hermanito feliz— Llegó su delicada mano a la mejilla de él — mi felicidad la hago a un lado, aunque eso implique sacrificarte a ti.

Yuzuha comenzaba a derramar lágrimas amargas,  cierra los ojos por segundos y nuevamente los abre. Noto los ojos de Mitsuya lagrimosos, el también quería llorar.

— Te amo, te amo tanto, pero porfavor, ya vete.

Mitsuya quedo completamente confundido.

— ¿Eh? ¿Quieres que me vaya?

— No quiero, la verdad es que no quiero, pero ya no quiero que sufras por mi culpa. Quiero que seas feliz.

— Yuzuha, mi felicidad está a lado de ti.

La castaña  cierra los ojos y abraza a Mitsuya.

— Y la mía a tu lado, pero entiéndeme Mitsuya, no puedo dejar a Dante, no puedo, por mas que quiero, no puedo. Mi hermano es primero ante todos.

— Podemos buscar una solución los dos. Es mas los tres.

— Ni se te ocurra decirle algo a Hakkai, él, no tiene que saber esto. Ni nadie, porfavor, dejame a mí aquí, ya buscaré una solución y si no la hay, estoy condenada a estar aquí, hasta que Dante me mate, porfavor Mitsuya, vete, no voy a dejar a mi novio , no podría tolerar la idea de ver a mi hermano, tras las rejas.

— Yuzuha ¿Estas loca? No puedo dejarte sola,no puedo dejarte con ese bastsrdo.

— No te estoy preguntando, porfavor, vete antes de que llegue Hakkai, y vea nuestra situación, lo que pasó hoy, fue grandioso, gracias Mitsuya, deseaba tanto sentirte de nuevo, te lo juro, fui feliz una vez más. Hacia mucho tiempo que no hacía el amor, y que me hicieran sentir como una reina— Sonrió. Llevando ambas manos al rostro de él — Jamás lo olvides te amo, y siempre será asi, pero no puedo corresponderte. No puedo. Vete, porfavor vete. No quiero causarte más problemas.

Takashi permanecía en silencio, con los ojos nublados, confundido y bastante roto por dentro .

— ¡VETE!.

Mitsuya se contuvo las lágrimas retirándose.

Yuzuha se quedó llorando a más no poder , dobló sus rodilla y callo al piso, no podía más con su agonía , dejó ir al amor de su vida de nuevo, pero todo lo hacía por su hermano, indudablemente ella siempre a dejado su felicidad por tener primero la de su hermano no permitiria ver a su hermano tras las rejas, eso sí que no JAMÁS.

Mitsuya llegó a su departamento, todo ido, viendo a su escritorio, observando el trabajo que tenía pendiente, el vestido de noche.

—*¡MIERDA! El vestido—Pensó llevando una de sus manos a su frente tallando de ella.

Quedaban pocos días para su entrega y aún no lo terminaba, del coraje que traía trabajo toda la noche en él, hasta que dieron las cuatroc de la mañana y el cansancio lo durmió.

Continuará.