9. ¡Tú eres...!

Off camina a paso firme sin quitarle la mirada de encima al hombre alto que se encuentra junto a Gun, cargando en ese momento al pequeño niño. No sabe exactamente a dónde va. Gun abrió la reja permitiéndole entrar, pero él no le ha dirigido la palabra, ni siquiera ha volteado a mirarlo. La escena que vio, la misma escena por tercera vez en su vida, la misma maldita escena se repetía y él estaba harto de solo ser un espectador que dejaba todo pasar.

Esta vez no sería igual, estaba realmente furioso.

Veo que Off está parado detrás de la reja frente a mi casa, no puedo creer que se encuentre aquí. Verlo ahí empuñando las manos a los costados de su pantalón, sin decir nada, me recordó por un momento el día en que nos dijimos adiós.

«Había pasado una semana desde que le dije a Off que debíamos tomarnos un tiempo separados, yo volvería a casa con Tay porque desde que mi abuela murió él se encontraba prácticamente solo, y pues nosotros teníamos que pensar acerca de nuestra relación. Llevábamos tres años juntos y Off aún no era capaz de besarme en público, se incomodaba cuando yo lo tomaba de la mano o intentaba darle un beso. Era muy distinto cuando estábamos solos. Durante todo nuestro tiempo de novios yo había sido comprensivo en ese sentido, pero últimamente yo estaba muy sensible, así que cuando él me rechazó delante de sus amigos en la cafetería de la universidad, no lo soporté más y tomé la decisión. Pasamos enojados tres días, dormíamos juntos, pero no hablábamos, eso era muy raro pues nunca nos habíamos ido a dormir sin solucionar un malentendido. Todo era distinto. Tanto así, que me hacía sentir enfermo.

Hablé con mi hermano para preguntarle qué medicamento tomar para las náuseas y la respuesta de él fue ¿estas embarazado Gun? Escucharlo decir eso me abrumó, pero en realidad nunca me había sentido de esa manera. Me dolían los pezones, se sentían sensibles. Odiaba el olor a canela y no soportaba el sabor de la leche. Sin embargo, quería comer chocolates y pasteles, me dolía la cabeza y lloraba todo el tiempo. Y ni qué decir de las malditas náuseas que llevaba sintiendo cada mañana. Busqué en internet los síntomas que estaba teniendo y claramente eran los de una mujer embarazada. Compré una prueba rápida de embarazo —¡una locura! A lo que te lleva la excesiva información derramada en google— y el mundo se me vino encima cuando en la tirita se marcaron dos líneas escarlatas.

No sabía qué hacer y llamé a Joss, después de todo él era ginecólogo y se estaba especializando en fertilidad, podría ayudarme a entender lo que sucedía. ¿Acaso era cierto?

No podía decirle a Tay y prácticamente me estaba separando de Off, así que confié en mi amigo. No me quedaba de otra.

Off había notado mi cambio y me preguntó qué me pasaba, pero no quería, no podía hablarlo con él, no hasta estar completamente seguro de lo que estaba sucediéndome. Le dije que iría a casa para visitar a mi hermano, pues hacía días que no pasaba por ahí, pero me dirigí a ver a Joss.

Dejé que las lágrimas invadieran mi ser ¿Cómo era posible que yo siendo un hombre estuviera embarazado? había escuchado sobre algunos casos de embarazo masculino, había leído sobre eso, pero también escuché que no todos llegaban a término. Joss me explicó todo lo que tenía que saber y me aconsejó contarle a Off porque el proceso de embarazo iba a ser complicado y yo iba a necesitar alguien cerca que me apoyara en todo. Pero no podía arrastrar a Off conmigo en esa situación. Off estaba estudiando y le iba muy bien, él deseaba mucho convertirse en arquitecto y yo no podía interferir con su sueño, menos si no tenía la plena seguridad de que el embarazo fuera a alcanzar los nueve meses.

» Me despedí de Joss, ya convencido de la decisión que había tomado y me acompañó hasta la salida. Las lágrimas nuevamente empezaron a salir y Joss me abrazó fuertemente antes de decir adiós. Él secó mis lágrimas con sus largos dedos y me dio un beso en la frente, como siempre hacía, desde que éramos niños. No sé por qué Off estaba ahí, pero, al dejar de abrazarnos Joss y yo, fuera de su departamento —porque justamente ese día no tenía turno en el hospital y estaba en casa— con un ligero carraspeo, las manos haciendo puños a cada lado de su cuerpo y una mirada sombría, nos dejó saber que también estaba en el lugar.

—¡Me mentiste Gun! ¡Me engañaste! Justamente con él. ¡Te Odio! —fueron sus duras palabras y yo me sentí morir cuando lo escuché decirlas.

Y fue así que todo entre nosotros acabó.

Quería decirle a Off lo que realmente estaba sucediendo, pero sus palabras me dolieron mucho y simplemente me perdí en mis pensamientos y ya no presté más atención a lo que él decía. No fue grosero ni violento, me llevó a casa y simplemente me dejó de hablar. No dijo nada aun cuando vio que tomé las maletas y salí del departamento. Había pensado mucho en la separación, lo amaba, pero en ese momento necesitaba poner distancia. Todo fue muy sorpresivo y lo que más me temía —al pensar contarle la verdad— estaba sucediendo sin siquiera haber intentado decirle que estaba embarazado.

Off me odiaba y yo sufría, ambos estábamos con el corazón hecho pedazos.»

Tay sale de la casa al escucharme gritar una y otra vez el nombre de alguien que no pensó volver a escuchar nombrar. Llega a tiempo para sostener en brazos al bebé y entrar en la casa, porque está seguro que la escena que seguiría a continuación no sería la apropiada para él.

—¿Estás loco, Off? ¿Qué sucede contigo? Reacciona por favor.

Casi se me salían las lágrimas. Nunca había visto a Off comportarse así, sentía que había fuego en su mirada, no escucha lo que estoy diciendo, no presta atención a mi estado, lo asustado que me encuentro justo ahora, simplemente está dejándose llevar. Quién sabe qué estará pensando, pero yo no puedo permitir que siga actuando de esta manera, así que, me paro frente a él y lo sostengo poniendo ambas manos en su pecho. Él sigue serio y con las manos hechas puño, baja la mirada y son lágrimas las que veo. Me duele, allí donde antes había furia contenida ahora hay lágrimas amenazando salir.

—¿A-ayer no significó nada? —dice a punto de llorar— ¿Qué soy yo para ti? ¿Me hiciste venir hasta aquí solo para vengarte de mí? ¿Para burlarte en mi cara? ¡Maldita sea Gun, responde ahora mismo! ¿Qué significa esto? —mi corazón late a mil por hora.

—Off tranquilízate, por favor. —Le pido, intentando acercarme más, pero Joss sostiene mi brazo tratando de separarme de Off y él lo mira con furia antes de soltar bruscamente su agarre de mi brazo.

—¡No te metas en esto! —estalla furioso, Off— ¡Tú! no te conformaste con quitarme a Lynn, separaste a Gun de mí, hace dos años y ahora... ¡ahora hasta tienen un hijo!

¿Lynn? ¿Cómo? ¿A qué...?

—Off estás equivocado.

—Cállate Gun —me dice enfadado y cae de rodillas en el verde pasto, está llorando y cubre su rostro con ambas manos—. Te pedí perdón, vine hasta aquí, pensaba que tal vez podrías perdonarme y juntos volveríamos a casa. Estaríamos juntos otra vez, pero-

—Off no-

—No quiero escucharte Gun, te acostaste conmigo, recién ayer nos dijimos te amo y hoy me entero que, estas casado, con el hombre que nos separó, y lo peor de todo, ya hasta tienen un hijo juntos. Solías pensar en que adoptaríamos, tendríamos dos hijos que nos llamarían papá. ¡Me traicionaste Gun! No me queda nada más, ya no puedo seguir aquí.

«Me he quedado sin palabras, no sé qué decir. Ahora entiendo lo que sucedió. No fue su culpa, fue mi error. Yo soy el culpable de nuestra separación. Lo dejé pensar que Joss y yo teníamos una relación.»

Off se levanta. Me da la espalda y lo veo caminar hacia la puerta. Estoy paralizado y Joss me toca el hombro "Ve, Gun", me dice, pero las piernas no me responden. Él está yéndose, estoy viendo su espalda, es la misma escena, pero esta vez no soy yo el que se está marchando. Es él y no puedo dejar que pasen otros dos años y Off siga tomando como verdad algo que no es cierto, así como lo hice yo. Pensé que me odiaba...

—O-Off —digo en un susurro, pero ni siquiera Joss que está junto a mi logró escuchar mi voz resquebrajada.

—Off... —lo intento de nuevo, pero él está a punto de salir.

—¡TU ERES SU PAPÁ! —Grito con todas las fuerzas que lograron salir, mis pulmones se han quedado sin aire y siento que voy a caer, pero justo antes, veo a Off girarse y luego, todo va desvaneciéndose frente a mí.

—G-Gu-n

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ

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¿Creen que va mejorando?

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