51


—¡Basta! ¡Aaah! —exclamé en un sollozo desgarrador, suplicando que el dolor se detuviera. Near solamente se había dedicado a provocarme dolor y agonía, llevaba más de dos noches en las mazmorras, llenando los vacíos con gritos de dolor y llanos en súplica de piedad—¡AAH! — grité de nuevo al sentir como el tacto de su mano sobre mi pecho daba una descarga eléctrica me quemaba los ejidos, mi corazón bombeaba sangre irregularmente, sentía como mi piel se quemaba y se deformaba por el paso de electrones a la carne, era una quemadura, irritaba y dolía. Todo causaba en mí un dolor horrible, todo me consumía, cada rose de Near contra mi piel era semejante a mil cuchillas y agujas clavadas en mi cuerpo, dejando cicatrices y heridas. Tenía moretones, mi cuerpo se encontraba desgarraba, me había sentido mareada por la falta de sangre en mi cuerpo, gracias a que Near no se contenía a probarla en cada vez que me hería.

Aún así, seguía de pie y eso es una virtud que muy pocos pueden adquirir.

—Resistes bien Persson— dijo con una ligera risa, al igual, pude escuchar como pronunciaba con asco mi apellido, era obvio, venía de la familia que despreció a su madre. El rostro de Near estaba manchado con mi sangre, su respiración era cortante, algo raro entre los vampiros, porque ellos no necesitaban respirar, solamente era la notoria excitación que tenía por lastimarme y causarme dolor, él encontraba el placer en el sufrimiento—.Eres una buena niña— levantó mi rostro con el filo de un cuchillo, sacándome un ligero quejido, había cortado mi barbilla—. Creo que ya es hora— sonrió.

—Vete al diablo— susurré en un intento de valentía, él sonrió soltando un suspiro, al instante su puño se impactó en mi estómago, siendo empujada contra la pared, tanta fue su fuerza que logró romper parte de las rocas con las que estaba hecha el castillo.

—Aght! — exclamé de dolor, mis dientes chocaron entre ellos, mi espalda tronó e irradió un sufrimiento tormentoso, un suplicio de tortura. Aún era humana,era inevitable sentir dolor.

—Tu valentía me ha llegado a aburrir— habló en voz baja, viéndome insignificativamente—¿Quieres entretenerte mejor?, déjame controlar tus hilos, los mejores títeres son los que dejan sus hilos sueltos.

—Ya hice el maldito trato contigo— el sabor metálico inundó mi boca, lo que más sentía era un dolor de cabeza, debido al impacto de mi cuerpo contra la pared,estaba débil, pero seguía de pie—. Haz lo que te plazca, sólo dame mi parte del trato.

—Creo que haz sido mi cliente más cuerda— se acercó a mí, tomó mi rostro rostro por primera vez con delicadeza y chocó sus labios contra los míos, me mantuve neutra el maldito rose de sus labios contra los míos causaba en mí una sola cosa: 'Asco'.

        Sentir su  boca invadir mi cavidad bucal era insignificante, solamente podía sentir repulsión, el mayor dolor era el que había recibido mi cuerpo.

—Tu sangre es deliciosa— sonrió como lo caracterizaba, cínico, loco y amante de la locura, era un maldito hereje disfrutando el dolor ajeno, él se alejó de mi boca—. Es dudosamente familiar, pero después de todo somos familiares, es normal reconocer el sabor de sangre de mamá, pero la tuya es sutilmente diferente, tienes que darle gracias a esa engendra que está dentro tuyo— se puso a mi altura conservando la distancia, solamente me dedicó la mirada una mirada penetrante, leyendo mi miedo y dolor, pues de seguro mi mirada solamente podía irradiar eso—. Curioso, no quiere que la vea— susurró—. ¿Tendrá miedo?

—Es una cobarde por naturaleza— escupí al suelo la saliva con sangre que aún había en mi boca, tratando de borrar el asqueroso sabor de la lengua de Near, me fue inevitable sonreír cuando el fluido ensució el zapato lustrado de Near.

—¿Te digo algo chusco Jade? — su tono de voz se volvió más serio e indiferente, fuertemente y de la nada, me dio una patada en el diafragma, sacando todo mi aire, había sido un golpe fuerte, tanto que mi boca se volvió a inundar de sangre debido al daño que mis órganos internos habían sufrido, escupí sangre nuevamente, escuché algunos de mis huesos tronar, como si fueran unas pequeñas ramas. Él se quedó un momento en silencio, escuchando y deleitándose como tosía fuertemente y tomaba fuertes bocanadas de aire—. La sangre guarda un sin fin de códigos e historia, recuerda y almacena casa enfermedad que te invade, tu genética, por eso busco dentro de toda tu red de información la fórmula que usó ese maldito Plastic Buttler para revivirte.

        Sólo pude escuchar, escucha como la voz de Near fuera un eco, distorsionado pero audible, al fin me pude sentir débil, al fin pude sentir las ganas de morir de nuevo,, esa ganas que me había tanto tiempo perder. Mi vista se tornó oscura, borroso  y sólo lograba enfocar al suelo. Tenía frío, temblaba y me dolía respirar.

—Si quiero buscar como es debido tendré que lastimarte, y eventualmente morirás— su voz volvió a ser tranquila—. En cuestión de segundos eso sucederá, por eso necesito hacerte fuerte Jade, y la única manera de hacerlo es si te vuelves un Sangre Pura— acarició mi labio inferior, limpiando la sangre que se había derramado de mi boca. Con mi cansada vista pude observar cómo saboreaba el sabor metálico que esa pequeña gota le había proveído—. Conviértete en mi marioneta, déjame entrar en tu mente, mover sus hilos para liberarte.

       Me miró a los ojos, apenas pude ver con claridad, todo a mi alcance estaba borroso, la falta de oxígeno no me permitió ver más que una destellante luz azul, un brillo que venía de los ojos de Near. El destello brilló por unos segundos, después fue oscuridad.



         Me sentí en paz por un segundo, después comencé a caer por el vació inmenso en la oscuridad, hasta terminar en el suelo, el dolor se había ido, vestía otro vestido, uno más bonito, simple, pero ya no se trataba de un trapo cubierto de sangre y polvo.

          Me encontraba dentro de mi mente, ya conocía el lugar, era oscuro y la única luz se concentraba en un sólo lugar, la jaula en donde se encontraba el alma de Violetta.

Como un insecto embobado, seguí la luz, hasta chocar con Violetta, prisionera, con un símbolo destellante color negro que resaltaba de su piel blanca y lechosa. El mismos símbolo que Leonard había puesto para que no saliera el alma de Violetta.

—No soy una cobarde— habló en un tono dulce, vestía igual que yo, su cabello azabache caía como caireles camuflándose en la oscuridad.

—Tu iniciaste esto— dije tomando lo barrotes para verla mejor—. Tu egoísmo, tu sed de venganza, tus falsas promesas. La que debería de pagar el precio eres tú, debería de abrir estos barrotes para que Near te mate de una buena vez.

—Near piensa que reencarnar es igual a revivir, si me entregas te matará y yo tomaré tu cuerpo, como defecto a esa decisión aprenderá uno o dos cosas para poder manipular la muerte y la vida a su beneficio y capricho— habló haciendo eco en mi cabeza, su voz era dulce y cálida, me hacía querer llorar, el sentimiento de estar unidas seguía a pesar de todo lo sucedido, ella seguía siendo una parte de mi vida, al igual que y lo era de la suya.

—¡Todo esto por el amor de un hombre! — exclamé golpeando los barrotes.

—¡Mira quien habla! —exclamó poniéndose de mi, haciendo estremecer todo el lugar, los barrotes cascabelearon, nuestras miradas se encontraron, y entonces lo vi. Su ojos, color jade como mi nombre, ahora se encontraban negros, por defecto, pude sentir un dolor en el hombro y cuando devolví la vista a Violetta, pude ver en el reflejo de ahora sus ojos avellana, que mis fanales eran de color verde—. Yo reencarné porque tenía algo que me ataba, no quise que la muerte me quitara a Jason, fue nuestro lazo el que me permitió estar a su lado, aún en otra vida, si dedicas toda tu vida a un solo sentimiento en tu vida, el mismo sentimiento se ocupará de llevarte a donde desees

—¿Me estás diciendo que reencarnaste por amor? —pregunté a lo cual ella asintió con una sonrisa—. Que estupidez.

—El amor no es una estupidez, lo es cuando dejas de enamorarte—habló.

—¡Eso no soluciona lo que pasa más allá de este inmensa oscuridad!— exclamé dando un golpe en los barrotes, todo volvió a temblar, pero ambas ni nos inmutamos.

—Reencarnar no es lo mismo a revivir.

—¿Qué quieres deci...? — no pude terminar, al instante ya estaba de regreso en mi cuerpo, me fue inevitable sentir los mismos síntomas que se habían presentado cada vez que regresaba a mi estado físico, la debilidad que ya conocía, fue un mareo y una cachetada por Near los que me comenzaron a sentir vivía.



—Interesante charla— hizo una pausa para observar como vomitaba lo que había comido hace días, el mareo y el irritante dolor en mi cuerpo hicieron que saliera de mi estomago todo el estrés almacenado, de igual forma, el mareo que ocasionaba mis viajes a mi alma no eran algo cómodo— . Pero Jade, cariño, eso no es lo que buscaba— sujetó mi cabello, dando un tirón hacia atrás, en un segundo pude sentir como el resto del vómito volvía a bajar por mi garganta, sintiendo asco y ganas de sacarlo de mi cuerpo, pero el ligero dolor que causaba en mi cabellera me hizo resistir—¡Muéstrame!— dió un grito de furia, haciéndome sentir un escalofrío, sólo tardó un segundo intentando ver por mis fanales y al otro estampó su rodilla en mi rostro, rompiendo me la nariz.

               El dolor me hizo comenzar a respirar por la boca, el sabor del vómito seguía presente, volví a regresar el alimento almacenado en mi estómago junto con algo de sangre que bajaba al suelo por el daño de mi nariz.

—¡Ya basta! —exclamé siendo incontrolable el sollozo, lloré amargamente agitándome en un intento de romper las cadenas, Near rió ante mi desesperación. El cascabeleo de las cadenas por mis movimientos bruscos en búsqueda de libertad, era como una sinfonía para él, el coro de mi llanto era sublime y encantador, mientras que mi rostro herido y manchado de sangre, lágrimas y vómito eran para él el mejor maquillaje que pudo cubrir mi rostro—¡No comprendo qué quieres que te muestre!

—¡El recuerdo de ese hijo de perra devolviendo te la vida!

—¡Estaba muerta! — lloré más fuerte, pidiendo por un segundo volver a el día en el que William me mató y que nunca hubiera puesto la pastilla para resucitarme en mi cuerpo.

—Te lo dije cariño, todo está en tu deliciosa sangre, ahora sé porque Jason la bebía con tanta frecuencia, tendré'remos que adelantar el trato, de lo contrario no podrás vivir.

—¿De qué hablar? —pregunté en un tono frágil, seguía derramando lágrimas, como si era causara un poco de piedad en Near, pero al parecer solo lograba impacientarse, más sin embargo, el dolor se iba con cada lágrima que derramaba.

—El trato es que me des algo para cumplir tus deseos— habló con calma, observando como cada lágrima baja de mi rostro—. Siempre adquiero primero mi parte, pero esta es una ocasión especial, vas a ser mi marioneta Jade, y te ensuciaras de sangre por mi y al mismo tiempo te encargarás de borrar tu marca.

—¿Qué?— musité.

—La única forma de borrar una marca es matando a el que te la hizo— sonrió—. Cuando le dije eso a Wesh pensé que él iba a matar al sucesor de la Familia Norte, pero al parecer él tenía intereses diferentes, aún así podemos matar a un pájaro de un solo tiro, si tu borras tu marca habrá un bacante en los herederos de los Sangres Puras, y el único que queda entre ellos soy yo, después de todo, soy el hijo de Vincent Gravez del Este, legítimo sucesor de los Hemisferios.

—Vas a matar a Justin— esforcé mi voz, no podía respirar, los huesos me dolían, llorar era una forma de desahogo. Me sentía suspendida en el aire, por hilos.

—No, tu vas a matar a Justin del Norte— tiró de mi cabello y me forzó a verlo, sabía que volvería a usar su poder, así que cerré mis ojos fuertemente.

                 Near soltó una carcajada ante mi intento de no dejarme manipular, me dió una cachetada, pero apreté mis párpados. No sabía que hacer, el plan de Wesh se había ido a la basura, no había segunda opción, Near podía leer mis pensamientos, todos esperaban que yo matara a Near, no podía esperar refuerzos, pues en cuanto llegaran serían atacados por las fuerzas de Near, ya sabía del poder que tenía, no tenía idea de qué hacer.

            Por mucho que quisiera deshacerme de la marca, no podía dejar que Near llegara al poder. De pronto otro golpe se estampó en mi rostro, sentí miedo, la oscuridad y el dolor era lo único que tenía presente. Debía pensar un plan, pero Near me tenía acorralada, enjaulada, prisionera, ni en mi interior estaba a salvo.

—Abre tus ojos Jade, abre tus ojos, fanales del desespero que refleja el desespero por no encontrar salvación— habló acercándose, sentí de la nada como ejercía presión con su mano sobre su cuello, solté un quejido y apreté mis párpados junto con mi quijada, él apretó mi garganta, impidiendo que pudiese respirar por mi boca, intenté introducir algo de oxígeno por mi nariz, pero solo logre que de esta escurriera sangre—. Todo ser humano busca la luz, solo debes de abrir los ojos y te darás cuenta de que no estás sumergida en la oscuridad.

—Ugh—me quejé al sentir como mi cuerpo se debilitaba, mantuve mi vista ciega, resistí, hasta que sentí algo afilado perforar mi hombro—¡Aahh! — grité al sentir como una daga en rojo vivo quemaba y cortaba mi piel, abrí los ojos por sorpresa, pude ver la risa psicópata de Near, mi piel quemándose y mi sangre hervir por el rojo vivo del metal.

Un brillo color azul volvió a cegarme.

Me sentía suspendida por hilos.

'Soy tu dueño'

Sonó en un estruendo en mi cabeza.

'Te hicieron daño, yo puedo ayudarte a sanar'

Se repetía en la oscuridad, me encontraba sumergida en ella, suspendida por hilo, sintiendo que volaba con miedo a caer.

'MÁTALO'

—¡AAAH! — grité despertando el trance. Caí al suelo, percatándose que ahora estaba en otra habitación, era de noche, la luna entraba por la ventana, un hermoso balcón fue el que me recibió. El dolor se había ido, ya no tenía heridas, portaba nuevamente mi traje de cazadora, tenía conmigo una espada, mi cabello estaba recogido y llevaba conmigo un collar, en él un aro, lo tomé con mis dedos y me di cuenta de que era mi anillo, el que mi padre me había puesto para poder controlar a Jason. Entré en pánico un momento,, dándome cuenta de donde estaba. Sin titubear entré a la habitación, me escondí, procurando no hacer ruido.

                   Me encontraba en el castillo del Norte, frente a mi se encontraban las cenizas de Evangeline, el corazón no pudo latir más rápido, mis piernas flaquearon y mi estómago amenazó a vomitar nuevamente por los nervios.

'¡Mátalo!'

                Resonó en mi cabeza, un dolor agudo me inundó, me quejé cuidando de no hacer ruido, me sentía aturdida, todo me daba vueltas.

'Nadie está en su habitación, ve a matarlo'

—Perdóname Evangeline— dije frente a las cenizas de la nombrada, me fui inevitable derramar una lagrima, la cual rápidamente fue limpiada por mi mano.

             Como un insecto inmerso en la oscuridad de la noche, seguí a la luz que me indicaba Near, me encontraba inerte, recuerdo muy poco de ese momento, el miedo, la fría noche, como mis pies se movían sin mi autorización, sintiendo el frío del piso por andar descalzos, recuerdo que me infiltré en el castillo con ayuda de Near, una ayuda que no necesitaba.

Me encontraba manipulada, enredada y suspendida por mis propios hilos.

         Lo bueno del castillo Norte era que su personal era muy limitado, no había nadie en los pasillos, supuse que porque todos se encontraban buscando cómo derrotar a Near, pero en lo que ellos planeaban y buscaban refuerzos, yo me escabullía con mi arma en mano, como la muerte merodeando hasta dar con su destino.

Fue sencillo llegar a la habitación de Justin, Near se había encargado de guiarme. Cuando entré Justin se encontraba en su ventanal, leyendo un libro grueso, vestía de negro, como si estuviera de luto, irónico, pues estaba a punto de ir a su funeral.

—Es lindo verte de nuevo cariño— saludó dando vuelta, cerrando el libro con una de sus palmas, sonriéndome—. Aunque no me sorprende, todas las perras regresan con sus dueños— sonrió mirándome de pies a cabeza.

—¿Donde se encuentran los Cazadores? — cuestioné ignorando su argumento.

—Tranquila princesa, todos están ocupados, piensa que estás ganando tiempo, todos menos Leonard, pero neh, las personas soberbias se olvidan de escuchar a los más cuerdos y más cuando están en lo cierto.

—Sólo estamos tu y yo— resumí con un tono perdido, sin vida y ni color.

—Los demás están tan ocupados entrenando, planeando y discutiendo cómo derrotar a Near, de hecho acabamos de terminar una junta sobre eso, jamás vi a los líderes tan estresados.

—Sabes a lo que vengo—hablé extendiendo mi espalda, él sonrió al verla y sólo se resignó a suspirar.

—Te lo dije— rió un poco—. Era de esperar tu regreso.

—No quiero matarte— susurré—. Pero si esta espada corta tu cabeza podré liberarme de tu marca y de las responsabilidades que conlleva ser tu maldita pareja.

—Pero ya no habría herederos y dudo que Leonard quiera volver a ser sucesor, pero estoy muy seguro de que Near lo habrá con gusto— se sentó en la orilla de su cama, mirando por el umbral de su ventana, dándome la espalda para solamente contemplar el cielo nocturno al que tanto estaba acostumbrado—. Te amé Jade.

—No empieces con tus mamadas— regresó mi hermoso tono de voz que hacía que mi padre me lavara la boca con jabón el polvo. El maldito engreído pensaba que estar manipulada por un vampiro creepy iba a hacer que me tragara sus estupideces.

—Hablo en serio— rió como si fuera lo único que supiera hacer—. Quiero que sepas que lo hice, pero como humana comprenderás que todo es efímero, incluso el amor.

—Mira, sé lo que hiciste y tus intentos de enamorarme fueron lindos, pero eres un idiota hijo de puta, me violaste, marcaste, dejaste estéril, mandaste a que me aprisionaran, y ahora es mi turno de devolverte el favor, así que mírame a los ojos, porque van a ser lo último que verás en este maldito mundo.

—Bueno— suspiró—. Ahora que sé que vienes a matarme, creo que podré sacarme el mal sabor de boca que me dejó tu sangre cuando hice todo lo que acabas de mencionar— se levantó de su cama, percatándome de que ahora tenía una pistola en su mano. Era obvio, había hecho un monólogo para sacar la pistola bajo su colchón.  Apuntó la pistola a mi, pude darme cuenta rápidamente que no tenía el sello de los cazadores, se trataba de un arma normal.

              Wesh me había enseñado que la noche en donde William, Jason y él hicieron las armas de nueva generación se había impregnado un sello simbólico a las armas, haciendo más fácil diferencial entre las que mataban humanos y las que mataban vampiros.

La que Justin portaba era un arma que podía matarme,

—Los Sangres Puras de alto rango no pueden portar armas— recordé lo que había encontrado en el libro con el registro de todos los Sangres Puras, en dicho libro también venía información sobre ellos, las reglas costumbres y muchas otras cosas más.

—Bueno, pensé que si derrotaba a la marioneta de Ner entonces no habrá tanto peligro después, así que contacté a una vieja amiga para que me ayudará a conseguirla— sonrió admirando el arma—. Jamás maté a un humano, pero creo que siempre hay una primera vez.

         De la nada tiró el gatillo, el estruendo que hizo al disparar la bala me alertó, pero no me moví, bastó con un barrido en el aire con la hoja de mi espada para que la bala rebotara en uno de los cojines de la habitación, procurando que no hiciera ruido, el sonido de un arma proviniendo de la alcoba de un Sangre Pura iba a crear un caos, y a final, iba a volver a ser encarcelada en el castillo.

—Wesh te enseñó bien— sonrió triunfante, algo estúpido dado que había esquivado sin el menor esfuerzo su ataque.

—¿Qué 'vieja amiga' te dio eso Justin? —Pregunté poniendo en guardia—. La última vez que alguien usó esas dos palabras juntas frente a mí, tenía a Jason bebiendo mi sangre, más te vale decirme.

—¿Crees que Near es el único en ese viejo castillo?

—Idiota te ves por contestar una pregunta con otra— hablé concentrada en cada movimiento que hacía su cuerpo, no dejaba de apuntar a mi cabeza, al igual que yo a la suya.

—Piensa un poco Jade, eres lista— habló con calma.

—¿Y arriesgarme a perder tiempo— cuestioné su intención—Jah— exclamé jactada—. No soy estúpida, sólo tengo la cara de serlo.

—Ya conociste a todos los herederos de los hemisferios, los Sangres Puras en la siguiente línea sucesora—habló con un tono frívolo. Al instante sentí una descarga eléctrica en mi cabeza, como si un interruptor hubiera movido todo el mecanismo.

—Ella desapareció en la noche en que Evangeline Gravez murió— dije tratando de recuperar el aire, tenía un mal presentimiento, me había olvidado de ella.

—No, solamente no se supo noticia de ella, y como William sospechaba, ella fue la que estuvo detrás de todo esto, de la muerte de Evangeline y ahora de la tuya— pronunció como un poeta recitando un soneto lleno de oscuridad, como un profeta de la maldad.

—¿Por qué Naila del Sur te daría un arma para matarme? — pregunté procurando que la sorpresa no bajara mi guardia, aún sostenía con fuerza mi espada, atenta, sin que el miedo me gobernara, siendo fuerte ante la tempestad que se me presentaba.

—Por dos buenas razones, la primera porque se volvió loca, pero por Near, y ahora que eres su nuevo juguete ella piensa que te quedará con él—habló disparando nuevamente otra bala. Mi cuerpo dio un paso atrás y volví a golpear la bala a uno de los sillones, perforando y causando que saliera volando un poco del relleno. Parecía un juego de béisbol.

—¿Razón número dos? —pregunté volviendo a donde me encontraba. Algo que te enseñaban como Cazadora es que nunca debes dejar que tu enemigo te haga retroceder.

—Ama tanto a Near que le va a proporcionar la mejor diversión que le pueda dar— habló acercándose más a mí, bajó el arma y se dedicó a verme desde lo alto de su estatura—. Es un teatro de títeres— susurró estando cerca de mi.

Rápidamente, casi como un rayo, levantó sutilmente el arma, casi no me doy cuenta, si no hubiera sido por desviar un segundo la mirada al arma. Sentí como el tiempo se detenía poco a poco, la adrenalina recorrió todo mi cuerpo y como un reflejo, un impulso y un destello mi mano fuertemente tomó el brazo de Justin, de inmediato el castaño se sorprendió, jaló su brazo unos centímetros y yo tomé mi espada con fuerza.

'Mátalo'.

Sin dudar, sin conocimiento, como un títere suspendido en el aire, manipulado y moviéndose sin saber lo que es la libertad, intercepté su brazo con mi espada, cortando su extremidad.

Mi vista por un segundo se tornó nublosa, tardó unos segundos en volver a enfocar. La que había cortado el brazo de Justin no había sido yo. Había sido Near controlando mis hilos.

—¡Perra! —exclamó Justin con dolor, tomando con su otra mano su ahora amputado brazo. Sentí algo en mi mano, al mirar pude sorprenderme de como sostenía el brazo de Justin—¡Maldita zorra, lo vas a lamentar!

'Mátalo'

—No quiero—susurré perpleja. No sabía lo que pasaba.

'Mátalo'

—¡Empieza de decir tus plegarias Jade! —exclamó Justin del otro lado de la habitación, pude ver algo raro.

               Su ojos se habían tornado de un brillo azul, intenso y luminoso, su boca mostraba unos afilados colmillo y de su única mano se asomaba unas garras. Temblé de miedo al ver lo que mis ojos apreciaban.

—No puede ser—susurré sorprendida, tomando fuertemente mi espada, buscando cualquier ruta de escape, aunque huir era una locura, era imposible, de hacerlo los Cazadores se darían cuenta y Leonard no tardaría en llegar y encerrarme nuevamente.

                   La única forma de salir era si mataba a Justin, pero nunca había visto algo como eso, parecía un monstruo, todo en él despedía un aura que nunca había presenciado. Se mostraba aterrador, en una faceta desconocida, limitándose a gruñir y jalear como un animal hambriento.

Parecía un 'Fenómeno'.

—¡Muere! —exclamó dando un salto hacia mi, buscando desgarrarme con ahora sus grandes garras, su brazo se había regenerado en un abrir y cerrar de ojos, fue mi espada la que se encargó de detener su ataque. Por primera vez pude sentir la fuerza de un Sangre Pura, no podía contra ella, mi cuerpo con facilidad fue empujado dos pasos atrás.

                       A modo de defensa, hice una estocada al cuerpo de Justin, el cual nuevamente resistió con sus enormes garras, haciendo temblar la hoja de mi espada.

—Nght— dije apretando los dientes, resistiendo a su ataque—¡Ah! —grité con fuerza, la misma fuerza que usé en mi espada, dando un corte superior, alejando a Justin al recibir un ligero daño en su rostro. Había fallado, pues yo había apuntado al cuello.

—Ahora es mi turno—dijo ásperamente mientras limpiaba de su rostro la sangre que escurría desde su rostro gracias a la cortada que le había proporcionado mi espada.

'Mátalo'

—¡Cállate de una puta vez Near! —grité esquivando nuevamente el ataque de Justin, esta vez solamente con mi cuerpo, pues no me había dado tiempo de blandir mi espada—¡AAH! —grité tomando valor, blandí mi espada hacia él, pero sus uñas sirvieron para poder hacer un contra ataque. Decidida se acerqué hacia él, dando una estocada que que esquivó a mano limpia, fue inevitable sorprenderme.

                   Justin me miró con el ceño fruncido, sus ojos tornados de un brillo azul me hizo sentir un escalofrío. Con fuerza traté que safar de su agarre mi espada, pero él no tardo en levantarme desde esta para arrojarme al otro extremo de la habitación.

                  En el suelo,con mi espada a un metro de mi, me dispuse volver a levantarme para ir por ella, pero esta acción fue interrumpida por Justin.

                      Él estaba sobre mi cuerpo, evitando que pudiera huir, escapar o simplemente defenderme. Aprisionó mis brazos, extendiendo los con fuerza, sujetándolos con sus manos, cortando sin intención mi piel, pues sus garras habían servido de candado para que no me moviera. Mis piernas, golpeaba y pateaba su dorso y parte de su pecho, tratando que se moviera, lastimar lo o al menos sacarle un quejido, pero fue en vano, como todo lo que había hecho hasta el momento.

—Ahg— me quejé al sentir su rodilla presionar mi estómago.

—Dime princesa, ¿alguna vez has sentido curiosidad por saber cómo es ser un Sangre Pura? —preguntó con un tono de voz frívolo, nervioso y alterado.

—Justin, reacciona— pedí asustada, podía ver a la perfección sus afilados colmillos, como su sudor bajaba por su rostro. Se veía inestable y ansioso, igual que un Fenómeno clase F, como si su instinto más primitivo finalmente lo hubiera dominado.

—Pagaras por todo Jade, una vez que te muerda podrás pertenecer me, podrás despedirte de tu vida, serás un simple objeto, y una vez Near sea derrotado por los Cazadores, serás mi perra y me darás muchos herederos para poder gobernar los hemisferios—habló con un tono de demencia, con una mirada dislate y vesánica.

—No lo hagas—susurré mirándolo a los ojos, sintiendo la molestia por el insistente resplandor de sus ojos.

—Te convertiste en la marioneta equivocada—dijo finalmente antes de acercarse a mi cuello.

—¡No! —exclamé al sentir sus colmillos contra mi piel, mi corazón comenzó a bombear fuertemente, mi respiración era tan rápida que pensé que iba a darme un paro—¡AAH! —grité cuando sus caninos perforaron mi piel, el ardor no tardó en llegar, era diferente a cuando Jason me mordía, esta vez, era como sentir metal fundiéndose en mi piel, como mi sangre hervía, sentí mi sangre escurrir por mi cuello, Justin no se había molestado en beber, solamente en morder.

                 Mi cuerpo, lo sentía frágil, quebradizo, sentía que moría, como si un fuego me consumiera, sintiendo como el mismo infierno me devoraba a cada segundo. Sentía como mi cuerpo cambiaba, el latido de mi corazón resonaba en cada parte de mi cuerpo, haciendo estragos en mi cabeza, al poco tiempo comencé a tener pequeños movimiento bruscos.

                  Recordé como mi padre había describido la noche en que Jason que convirtió en vampiro, siendo preso de convulsiones y ataques frenéticos, supe que mientras más tiempo sus colmillos estuvieran perforando mi piel, más dudaría el dolor.

—¡¡AAHH!! —grité amargamente, sin importar llamar la atención de los Cazadores de afuera.

                   Como pude, logré estirarme lo suficiente, pudiendo tomar mi espada, Justin se encontraba más que concentrado bebiendo ahora mi sangre, sin soltar el agarre de sus colmillos.

'Mátalo'.

—¡¡YA BASTA!! —grité desgarradoramente, sintiendo como mi garganta sufría la consecuencia, mientras que mi espada degollaba la cabeza de Justin.

               Después de haber movido mi espada contra el cuello de Justin, pude darme cuenta de cómo su agarre se hacía débil, hasta el punto de que finalmente pude sentir como sus colmillos se alejaban de mi cuerpo. Tosí sangre y traté de recuperar mi respiración, derramando lágrimas amargas por el dolor que había causado.

Al mirar nuevamente, sólo pude ver el cráneo de Justin separado de su cuerpo, ahora sin vida.

Felizmente ya no pude sentir las cadenas de Justin, su marca había desaparecido.

—Ngt—me quejé llevando mis manos a mi cuello, del cual escurría sangre a mares. Comencé a toser, a respirar sin ritmo, ahogándome en sangre, sintiendo como esta misma se calentaba, como mi corazón sufría un ataque y era dominado por un dolor, semejante a un rayo partiéndolo en dos.

                Mi cuerpo, comenzó a sentirse raro, mi mandíbula comenzó a doler, sentía como mi dentadura cambiaba, como si mis colmillos se volvieran más grandes. Ya sentada en el suelo, al lado del cadáver de Justin, comencé a sentir las primeras convulsiones, como mi cuerpo perdía el control, temblaba y se movía sin mi control, sintiendo miedo, miedo a convertirme en un monstruo.

Sed, tenía sed.

—Sabes lo que debes de hacer Jade— se escuchó la voz de Near, el cual se encontraba frente a mi, mirando indiferente, disfrutando el secreto el espectáculo que le estaba proporcionando—. Si no lo haces sufrirás más, te convertirás en algo terrible, y tu único destino será matar sin tu control.

—¡Ahh! —grité sintiendo un dolor punzante en mi pecho. Jadeando aire, en un intento de controlar me.

Sed, una sed incontrolable.

—Bebe— me ordenó—. Hasta que su cuerpo se reduzca a cenizas, hasta que te vuelvas en alguien poderosa y sin pecados.

—¡No! —exclamé en un intento de mantenerme cuerda.

—Hazlo cariño, de lo contrario habrá sido en vano.

—¡No! — volví a gritar, mi cuerpo cayó, y mis brazos lograron sostenerlo, mi cabeza quedó agachada y comencé a sentir un mareo, al poco tiempo comencé a toser, tanto que vomité sangre, chorros y chorros de sangre, haciendo que aumentara mi sed por la misma.

—¡Bebe de una puta vez Jade! —exclamó Near tomando el cuerpo de Justin, arrojándolo a mi, pude verlo, como creaba un charco en el suelo. Olía delicioso, era dulce, mi garganta pasó saliva, sentí un impulso por beber, era como una droga, podía saborear el sabor sin ni siquiera haberlo probado—.Tu cuerpo ya lo sabe, sabe que quieres beber su sangre, deleitarte con ella, que baje por tu garganta como el licor más adicto que podrás probar, es tu salvación Jade, bebe y olvida te evolucionar, de ser un Fenómeno, solo bébelo y toda tu grotesca existencia comenzará a tener sentido— habló cínico, no dudó en introducir su mano en el pecho del cadáver y sacar de este un órgano, olía dulce, por inercia levanté la vista y pude ver el corazón de Justin.

Era hermoso, se veía deliciosa, la boca se me hacía agua. Quería devorarlo, saborearlo y sentirlo bajar por mi garganta.

Bona apetite— dijo Near extendiéndome el corazón, yo lo tomé sin dudar y lo llevé a mi boca, deleitándome por el sabroso sabor que proporcionaba—. Hasta la última gota.

Y así fue.

—Joven Justin, ¿está todo bien? —se escuchó la voz de William del otro lado de la puerta.


Y  con eso acabamos el capitulo de hoy. Muchas gracias por la paciencia.

Este capitulo tardó más de lo esperado porque habían partes que había puesto pero no eran necesarias, debatía sobre las escenas y recurrí a muchas opiniones sobre las escenas de acción, pero este es el producto final, espero que les haya gustado.

¡Jade se volvió un Sangre Pura!

OMG aun no me lo creoo

ESTAMOOS EN LA RECTA FINAL.

No quiero irme sin dejar una breve entrevista a una pareja muy muy querida, y algo quebradiza en los últimos capítulos, así es.

A continuación, una entrevista a Leonard y William:

Autora: Hola chicos.

William: Hola

Leonard: Hey

Autora: Es un gusto tenerlos aquí, ¿qué le pareció el capitulo?

Leonard: Neh, he tenido mayor participación, pero fuera de eso, creo que las cosas se pondrán muy intensas.

William: A veces me pregunto si no tiene una trama alterna para las cosas.

Autora: Gracias por los comentarios ácidos, pero no estamos aquí para una reseña del capítulo, estamos aquí para conocerlos mejor, ¿quieren hacer esto individualmente o por pareja?

Leonard y William: Por pareja.

Autora: Son tan lindos, muy bien, comencemos, ¿cómo se conocieron?

Leonard: Él servía a la familia Norte cuando mi madre llegó a pedir refugio por la masacre que había ocurrido en el hemisferio Este, yo aún era un bebé y Will cuidaba de mi.

William: Conforme pasaba el tiempo me volví su cuidador y comenzamos a socializar mucho.

Autora: ¿Amor a primera vista?

Leonard y William: No.

Autora: Se nota que se conocen muy bien, supongo que no fue amor a primera vista porque cada quien tenía sus responsabilidades.

Leonard: Así es, yo estuvo toda mi vida comprometido y Will solo era mi mayordomo, pero las cosas se dieron y a pesar de todos los problemas que se presentaron estamos juntos.

William: Bueno, ahora mismo no, nos hemos tomado un tiempo por razones que ya conocen, pero seguimos amándonos sin importar que.

Autora: ¿Quien es el más dormilón de los dos?

Leonard: Will

William: Concuerdo, suelo dormir más que él, aunque Leo es el más holgazán.

Autora: ¿Qué es lo primero que se les viene a la mente cuando dijo el nombre 'Wesh'?

William: Morado.

Leonard: Fiemo, asqueroso y repugnante fiemo.

Autora: ¿Qué piensan de Jade?

William: Es una buena amiga.

Leonard: Odio que la shipeen con Will, es como una tortuga bebé en la rueda de un hamster, es rara pero no puedes odiarla, ¿quien odia a una tortuga bebé?

Autora: ¿Cuál es la película favorita de su pareja?

Leonard: Will ama el castillo ambulante.

William: ¿Deadpool?

Autora: ¿Por qué dudas?

William: Porque siempre cambia de película favorita, un día puede ser  South Park y al otro puede ser Como entrenar a tu dragón o Spiderman into the spider verse.

Leonard: Es cierto, me gustan muchas películas, pero en este momento es Deadpool.

Autora: Dime Leonard ¿William alguna vez te ha incitado?

Leonard: Sólo una vez (ríe nervioso) no diré mucho, sólo que había un ligero de por medio.

William: No puede ser (susurra, quiero aclarar que no lo hago siempre, sólo cuando la ocación lo a merita, no soy un fanático de las medias o los trajes provocativos.

Leonard: Claro que no sweetie

Autora: Para terminar chicos ¿qué es lo que más les gusta del otro?

Leonard: Todo de él me fascina, pero si tuviera que elegir algo en especial, creo que la forma en la que siempre se mantiene fuerte a la tempestad, nunca conocí a nadie tan decidido, es una persona que siempre veo trabajar sin parar, y aún así tiene tiempo para estar en casa y demostrarme lo mucho que me ama, eso es lo que más me gusta de William, que aún en un día difícil, recurre a mi para recargar energías.

William: Su enorme pe...

Autora: ¡Gracias por todo chicos!, fue una entrevista muy dulce.

ESO FUE TODO POR HOY!!

ESPERO LES HAYA GUSTADOO

La verdad quería seguir con esta pareja, pero no no no no, en el siguiente capitulo se hará entrevista a Wesh 7u7, esperenloo .

Recuerden que si quieren dejar alguna pregunta pueden depositarla en el corazón: 


❤❤❤AQUÍ


NOS LEEMOS LUEGO :3

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top