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 "Evelyn, despierta."

   Algo presionaba en mi mejilla. Suspiré y empujé la fuente de mi despertar con el dorso de mi mano.

  "Despierta de una puta vez, joder," Harry dijo y me sacudió. "Vamos a perder nuestro vuelo."

  "Psicópata," Me quejé y me levanté del asiento del aeropuerto. El techo era brillante, pero la habitación estaba aburrida y tranquila. Mi cuello me dolía de quedarme dormida en una silla.

  "Lo siento, no estaba escuchando," dijo mientras nos acercamos a la octava puerta en fila detrás de una pareja. "Por eso quiero decir, ¿Qué coño acabas de decir?"

  Un hombre incorporado bloqueando mi vista sonrió a una mujer de pie junto a él.Le oí murmurar nosotros y ella se rió.

  "Oh, Dios mío, cállate," Espeté en tono de broma. "Eres peor que mi hermano." Eso provocó algo pero hice mi mejor esfuerzo para ignorarlo.

  "Puedo hacer lo que me salga de los cojones, ya hemos pasado por esto," me dijo.

  Un altavoz alarmó a la gente en el interior. "La puerta ocho está ahora abierta a-"

  "LAAAAALALALA," Harry gritó y me cubrió los oídos, empujando mi cara en su pecho.

  "Ugh!" Lo empujé. "¿Cuál es tu problema?" Las cabezas se volvieron hacia nosotros con ira.

  "No puedo dejar que sepas a dónde vamos," dijo, "hemos llegado hasta aquí contigo siendo ajena al tema."

   La gente empezó a mirar hacia otro lado, pero un muchacho me miró demasiado tiempo. Harry me agarró de la cintura y me llevó a su lado, manteniendo al mismo tiempo sus ojos en el muchacho que ni siquiera estaba mirando directamente hacia mí y tenía una muchacha al lado.

   "Celoso," murmuré.

   "No son celos," susurró. "Amenazo."

   "Amenazando," corregí.

   "Estás siendo engreída." Él entrecerró los ojos.

   Sonreí. "Lidia con eso."

   Él sonrió de vuelta, se mordió los labios, se inclinó y susurró seductoramente, "Es jodidamente molesto."

   "Deja la mierda de jurar", le dije. La línea se movió hacia arriba.

   "Código", dijo.

   "¿Qué?"

   "Cuando diga código, recuerda las siguientes palabras: hago lo que me sale de los cojones."

   "¿Ya tienes tus tarjetas de embarque?" una mujer detrás del mostrador nos pidió a través de su sonrisa.

  Harry golpeó dos billetes sobre el escritorio. "No."

  Le clavé mi codo en sus costillas y él sonrió a la señora. Ella se sonrojó bajo su maquillaje y escaneó las entradas.

  "Por aquí, señora", me dijo secamente, perdiendo toda amabilidad en su voz, y señalando al marco de la puerta.

  "Gracias", le dije y seguí a Harry por el pasillo improvisado al exterior.

  El viento era fuerte y empujó mi pelo en todas direcciones, la ropa aleteando como las banderas naranjas que nos dirigen a la entrada del enorme avión. Los aviones de este tamaño se utilizan para salir del país.

  "Deberías ser más amable con la gente," Le dije por encima de los sonidos del viento. "Especialmente si están siendo amables contigo."

  "Código", gritó de vuelta.

  "Y camina más lento", le dije. "Las personas más bajas tienen las piernas más cortas y ritmos lentos. No soy diez pies de alto como tú."

  "Si no te has dado cuenta", dijo, apisonando los mangos de mi equipaje y lo agarró por la cabeza, "Te estoy sujetando las maletas. Agradecelo."

  Mantuvo ambas bolsas hasta que llegamos a la parte superior de las escaleras de metal. "Yo creo que podría haber tenido un equipaje con, como, dos camisas en ella", le dije.

  "Estoy tratando de ser un caballero, vale, sh," me dijo, nuestras voces ahora tranquilas en el avión. La gente nos miraba caminar a través del estrecho pasillo hasta llegar a la final del avión.

  Después de que Harry colocase nuestras maletas en el área de equipaje, él comenzó a quejarse - en voz alta - sobre la proximidad entre nuestros asientos y los aseos, diciendo que él sería capaz de "escuchar a la gente cagando" así que le dejé sentarse junto a la ventana.

  "¿Has estado en un avión antes?" Le pregunté por curiosidad mientras abroché mi cinturón de seguridad. Me asomé por encima del hombro y por la ventana, sintiendo un nudo en mi estómago viendo camiones por las escaleras y puertas de distancia desde el avión.

  "joder, si," refunfuñó. El avión se tambaleó hacia delante y se aferró a los bordes de su asiento.

  "Miedoso," sonreí. "Eso es adorable."

  Harry giró la cabeza hacia mí. "Está bien, tenemos que aclarar algunas cosas, aquí." Él me señaló. "No me llames adorable. Nunca."

  "O qué?" pregunté.

  Se me quedó mirando. "No me repliques", murmuró.

  "¿O qué?" Me mordí el interior de mi labio inferior para dejar de sonreír.

  "Lo vas a descubrir si no mantienes tu boca cerrada." Cerró los ojos y juntó las manos sobre el regazo.

  "Estoy aburrida". Apoyé la cabeza en su hombro. "¿Qué haces en un avión?"

  Harry abrió los ojos y vio como las azafatas empezaron a pararse en los pasillos. "Por lo general, sólo me follo a una de ellas en la parte de atrás", dijo con indiferencia.

  Me aclaré la garganta y me reí. "Sí, seguro que sí."

  "¿Te divierte eso?" Él sonrió.

  "Lo que más me divierte es que crees que puedes conseguir cualquier chica que quieras."

  "Te tengo a ti," , dijo y levantó la mano con el anillo.

  "¿Qué más se puede hacer?" Yo pregunté.

  Harry tiró de un mando a distancia desde el asiento. "Jugar en éstos." Giró alrededor en sus manos y aplastó los botones debajo de sus pulgares. "La mierda esta."

  "Pensé que ya habías estado en un avión."

  "Lo he hecho, diferente de éste."

  "No se enciende-" sonríe, "-hasta que el avion despegue." Todavía sonriendo. "Deja de sonreír, persona sucia."

 "Código", dijo.

  Suspiré y miré como las azafatas mostraban cómo abrochar correctamente el cinturón de seguridad y lo que hacer en casos de emergencias.

  Sentí algo presionar mi mejilla.

  "¿Qué?" Pregunté.

  "¿Por qué le estás mirando a él?" Harry preguntó con severidad y miró a un azafato masculino en el pasillo, sosteniendo un folleto.

  "Harry, está enseñándonos como jodidamente sobrevivir."

  "No lo mires," demandó.

 "Bien, entonces, cuando el avión se caiga sólo voy a estar aquí sentada como meh."

  Silencio.

  "Qué estás haciendo?" , dijo.

  "Oh my glob, qué?" [a/n: sí, globo]

  "Estás viendo a la chica, ahora. ¿Qué eres, bi?"

  "Ugh-"

  "Para," dijo.

  "Codigo," dije.

  "Codigo es mi puta idea!"

  "Cierra la boca, culo, oh, Dios mío!"

  "Codigo."

  "Tengo hambre", me quejé y saqué el menú. "Muy caro."

  Harry sacó una nota y la sostuvo entre dos dedos. "Cómprate algo bonito", dijo. "Oh, y tráeme Pringles. Los que tienen cebolla."

  "Tengo mi dinero propio, gracias," dije desabrochado el cinturón de seguridad.

  "No, no te vayas." Él me tiró hacia abajo y grite mientras caía sobre sus rodillas. Las personas en frente de nosotros se asomaban a través de las sillas en nosotros.

  "Harry."

  "Si?"

  "Suelta mi brazo, por favor."

  "No."

  "El avion se esta moviendo, gilipollas." Me fui a mi asiento. "¿Por qué eres tan molesto t--?"

  Él me tiró hacia abajo y me plantó un beso en la boca. "Hablas demasiado."

  "Shhh, el avion esta despegando," dije. "Querías tomarme de la mano?"

  "Ha, ha. No."

  El avión se movió hacia adelante y Harry miró al frente. "¿Me veo asustado?" sonrió, obviamente orgulloso.

  "Si."

  El avión trasladó un largo camino y se detuvo. La pierna de Harry rebotó y su mirada parpadeó para mí. "Dame tu puta mano", él se rindió y me cogió la mano. Sonreí hacia él, pero no le dije nada para molestarlo. "Yo sólo odio el hecho," él decía, "que estamos en esta caja de metal gigante en el puto aire y algo tan simple, como el peso extra, puede jodernos todo."

  "Está bien tener miedo de algo," dije.

  "No tengo miedo."

  "Harry-"

  "Dije que odio el hecho de que podíamos morir hoy porque algunos maricones piensen furtivamente que el exceso de peso en sus putos equipajes ayuden", dijo con la mandíbula apretada. "Yo no he dicho que tuviese miedo de los aviones."

   Parpadeé mientras di cuenta de algo. "Tienes miedo de la muerte," dije en voz baja. Su pierna dejó de rebotar.