Capítulo 6


  
Estarrossa sacó su cabeza del suelo y río con exageración mientras observaba a su supuesto hermano. El rubio mantenía su mirada seria, nadie noto los pequeños flashback que lo hicieron recobrar el sentido

- No hay duda que eres ese Meliodas- Limpio su barbilla- Ese que era temido por los Arcángeles y los Mandamientos. El hermano mayor que siempre he admirado. Me disculpo por llamarte tonto

Eso dijo, pero en el fondo el todavía no se daba por vencido, su mirada era retantadora, pero el rubio no sucumbió

- No me jodas- Zeldris se levantó con dificultad- Aunque el te reconozca, yo no lo haré, jamás lo haré- Estaba lleno de rabia y furia acumulada- Meliodas, seguro que solamente quieres poder para liberarse a ti y a esa mujer de la maldición ¿No?

Zeldris trono sus dientes con frustración, hasta el sabía que no podía hacer nada frente al actual Meliodas

- Así es- Admitió sin pudor- Por eso vine a robarte la magia que te dio nuestro padre. Pero ya entendí, me equivoque completamente. Aunque te robe esa magia, no tendré suficiente poder para deshacer la maldición

- Cállate- Aún así el no se podía rendir aún si sabía que no podía ganar se abalanzó sobre su hermano- Cállate!- Soy yo quien se convertirá en Rey Demonio

Blandito su espada contra el mayor, y una pequeña batalla entre ambos seres tan poderosos se desató, aún a pesar de los intentos desesperados de Zeldris, el rubio era mucho más fuerte. Dobló su mano con la espada y la aparición entre su propio pecho y la espalda del castaño

- Zeldris, se la razón por la que te alegras tanto a ser Rey Demonio- Dijo tranquilo

- Cállate- Exigió, no podía permitir que se supiera

Escuchando la petición del menor, Meliodas susurró algo en su oído, sorprendiendo al otro, que abrió sus ojos de par en par. Lentamente lo liberó y dejó que se fuera. El se detuvo a pensar un momento

- Zeldris-sama que pasó?- Pero eso no fue respondido, en cambio....

- Muy bien, te ayudaré- La aterrada Elizabeth lució impresionada- Ya no yendo necesidad de luchar

- Que mosca te pico?- Estarrossa intervino- Acaso te sobornó- Otra vez fueron ignorados

- Pero es como tu dices- Miro de reojo a Meliodas- Aunque tengas mi magia prestada, no se compara al poder de nuestro padre. ¿O piensas entrenar hasta que puedas tomar su puesto?

- Eso tomaría demasiado tiempo- Su voz era calmada y no movía ni un músculo- No tenemos ni tres días. Quiero que ustedes dos reúnan a los Mandamientos- Miro a sus dos hermanos

- A que te refieres?- Cuestionó Estarrossa

- En el pasado nuestro padre entregó la mitad de su poder para poner fin al caos que reinaba en el inframundo. Sin embargo ese poder podía ponerlo en peligro a el también, para poder continuar con su plan sin verse afectado por la traición, dividió su poder en diez partes, creo a diez guerreros.....Los diez mandamientos. Si reúno a los diez mandamientos tendré el mismo o más poder que el Rey Demonio

- Oye Zel, eso es realmente posible?- El menor de todos levantó su hombros

- Yo tengo los Mandamientos de los traidores, Gowther, Gloxinia y Drole- El castaño elevó su mano y en ella aparecieron las esferas que representan a tales personas

- En serio?, Muestrame- Caminó rápido en su dirección y cuando estaba lo suficientemente cerca el los hizo desaparecer- Eso es interesante, enseñarme a hacerlo también

Zeldris lo miro con indiferencia y superioridad

- Por que me ves así? Que tiene de malo que me enseñes?

El castaño tomo un poco de distancia y comenzó a hacer movimientos con sus manos, de su boca salían palabras en otro idioma

- Oye ¿Qué demonios haces?- lo miro mejor- Del, ¡¿A casos tomarás el mío?!

Efectivamente, junto sus puños sobre su estómago y una luz cegadora se hizo paso en el salón, pero...

- No pasó nada- Dijo sin más

- Para poder obtenerlo, quien lo porta debe estar de acuerdo o estar fuera de combate- Se alejó lentamente con sus ojos cerrados- Existen varias condiciones

- Di eso desde el comienzo, me asustaste

- Sin embargo, ¿Qué harás?- Se posicionó delante del más fuerte- Tengo los Mandamientos de Gowther, Drole y Gloxinia porque se opusieron al Rey Demonio, los demás le tienen una gran lealtad. Si se niegan no podrás obtenerlos

- Oigan...¿No puedes tomarlos si los matas?- Estarrossa se giro

- Que?!- Zeldris lo miro con desaprobación, un duelo de miradas se formó en la habitación

- Bueno, creo que lo dije mal. Me refería a que su se podría si alguien fuese derrotado- Rectificó

- Si uno de los mandamientos muere, su mandamiento queda en su cuerpo, pero es fácil de tomar. Empezaremos por los derrotados, Galand, Melascula y Grayroad

- Yo tengo el de Grayroad- Intervino Meliodas

- Que?- Los otros se giraron a verlo

- Lo tomé precisamente para este momento- Hizo aparecer la marca en una esfera púrpura oscura

- Meliodas- Llamo en un susurro decepcionada Elizabeth

- El resto busquenlos ustedes- Ordenó

- Que pasa Meliodas. ¿Acaso no puedes emcargarte

- Crees que alguno se lo dará tranquilamente al traidor del Clan de los Demonios?- Añadió con razón- Por eso quiero que ustedes se encarguen. Cuanto con ambos

- Parece que comprendes bien tu situación


El cielo nocturno era inmenso, con una gran luna iluminando todo

- Parece que algo interesante va a suceder...- Comenzó a hablar Estarrossa cuando se había quedado sólo con Zeldris- El traidor regresó y ahora quiere ser nuestro rey- Dijo con diversión

- Déjame advertiete Estarrossa- Su hermano le quitó importancia- No intentes quedarte con ningún mandamiento

- Esa es la única advertencia que me harás?- Alzó una ceja- Pensaba que dirías algo más

- Olvídate de esa hada- Ahí estaba lo que Estarrossa había estado esperando- Incluso sin sus recuerdos Meliodas es demasiado protector con ella

- No puedo creer que haya reaccionado así- Puso ambas manos en su cintura- Esperaba que no supiera de quien estábamos hablando

- Lo más importante es....Por Que la quieres para ti?

- Porque esa chica es sin duda especial- Recordó como sonrió su hermano una vez al verla- Además de que.....

- Que?- Cuestionó el otro

- No te importa- Extendió sus alas negras y se adelantó


Mientras tanto en la taberna de los siete pecados capitales. Merlin conjuraba algo con Hawk al frente. Un humo violeta lleno la sala

- Oye Ban- El puerco habló

- Que pasa maestro?- Sonreí como siempre

- Asegúrate de regresar, entendido? No podré comer sombras ricas sin ti

- No te preocupes- Puso una mano en su cabeza- Juro que regresare. Te encargo a Eleine hasta entonces- Miro a King

En la otra esquina de la sala, un hada temblaba de miedo

- ________ estas segura de esto?- Jaqueline puso una mano sobre su hombro, estaba desesperada por detenerla- Estas temblando- Tomó amabas manos de la chica

- Nunca he estado más segura de algo- Le sonrió restandole importancia

- Puedo acompañarte....- Hizo una pausa, giro su cabeza, buscando que decir- Podría ser de ayuda, yo......

- Jaquis- Apretó sus manos- Estoy aterrada, el inframundo me da pavor pero necesito hacer esto- Peino sus cabellos- Creo que tu y yo sabemos que yo nací por una razón, soy fuerte y lo podré sobrellevar, pero no es el caso contigo

- _______ por favor....- Estaba a punto de llorar de nuevo

- No te preocupes, regresare antes de que me extrañes- La abrazó- Anda mira, ya no estoy temblando

Era cierto ya no está a temblando. Se encontraba mucho más tranquila. Justo en ese momento Merlín terminó el conjuro y ambos fueron transportados

- Que estamos flotando?- Cuestionó Ban- No, esto es el inframundo

_________ desplegó sus alas para tomar a Ban de los hombros y hacer que ambos calleran de pie en el lugar


- Por favor Meliodas- Rogó Elizabeth- Reconsidera esto!- Gritó con todas sus fuerzas- No puedes convertirte en Rey Demonio

- No hay otra forma- El se mantenía mirando al suelo- Entiendelo- Levantó su rostro para observarla- Te prometí que sin importar que rompería la maldición, además.....

Ella suspiro frustrada

- Yo también tengo miedo a morir- Negó con la cabeza- No. Tengo miedo a renacer y perder mis recuerdos. Mis padres, mis hermanas,  Hawk, Diane, Elaine. No quiero olvidar a ninguno de los Siete Pecados Capitales

De repente ya se encontraba llorando, de sus ojos brotaban unas bellas y cristalinas lágrimas

- Pero lo que más me asusta es no volver a verte jamás- Llevo una mano a su pecho- Es posible que me salve si deshaces la maldición, y no perderé mis recuerdos. ¿Pero que te pasará a ti si te conviertes en Rey Demonio?

- Tu escribes tu propio destino Meliodas- Sonrió

- El poder del Rey Demonio es inmenso. Probablemente no pueda seguir existiendo en este mundo

- Aunque a veces las cosas tienden a fallar, aunque a veces tropezamos y cometemos errores

- Entonces que sentido tendría deshacer la maldición?- Cerró sus ojos, para mi no tiene sentido vivir en un mundo sin ti

- En esos momentos, sientes que la vida terminó, que quieres llorar con todas tus fuerzas..«Con lo que me esforce, trabaje tan duro», es tan frustrante que sientes que no puedes seguir hacia adelante, que todo acabó

- No te preocupes por eso- Elizabeth no entendía nada- Debido a la maldición de tu madre, siempre te enamoras de mi. Todos esos sentimientos desapareceran cuando la maldición sea eliminada. Así que no te preocupes

- Pero justo en esos momentos, en ese tiempo de inseguridad aparece una luz, una razón para continuar caminando en este inseguro mundo

- Lo dices en cerio?- Agachó su mirada- Dices que alguien me forzó a amarte?

- De lo contrario sería imposible que siempre te enamores de mi al renacer

- Entonces por que?. Pudiste haberme dejado a un lado cuando te pedí ayuda. De todas formas habría renacido al morir. No tenía que ser yo, podías amas a alguien más y vivir junto a esa persona

- Tu eres la razón por la cual quiero cambiar el destino Meliodas. Tu eres la luz que tanto busqué en mi vida. Te amo

- No tiene sentido- Se levantó y quiero su marca, de repente sus ojos eran verdes

- De que hablas?

- Pensé amarte, pensé que te había escogido- El recuerdo de aquella chica vino a su mente- Pero me equivocaba.....Mi cabeza lo olvidó pero en mi corazón seguía ese sentimiento de que algo faltaba, de que no estaba completo, como si me hubieran arrancado lo más importante para mi, y durante más de 3000 años pensé que era Elizabeth, pero no es así

- Meliodas- La diosa lo sabía pero aún así no quería escucharlo

- He guardado estos sentimientos por más de 3000 años, tanto tiempo y su sonrisa sigue grabada en mi pecho como si fuera un puñal- Sonrió- Pensé que te amaba con todo mi ser hasta que volví a verla aquel día, justo en ese momento el tiempo se detuvo para mi y cuestione cada paso que había dado en mi vida

- Entonces su la escoges a ella por que llegas tan lejos por mí?- Gritó frustrada- Si recuperaste tus recuerdos porque te aferrarse a esta promesa?

- Porque también quiero salvarla- Recordó las palabras de su vieja amiga

- Salvarla de que?- Abrió sus brazos con duda

- De su propio destino y de lo que es- El lo sabía

- Aún sin sentimientos, tu....- Se lanzó al suelo y el recobró la marca demoníaca

- Aún sin sentir nada la siento- Dijo serio- Porque ella es lo único que tengo

- Colaborare con los Siete Pecados Capitales para impedirlo- De pronto la albina se encontraba segura- No se bien cuál es el destino de _________ ni por que estas dispuesto a llegar tan lejos para impedirlo pero....

- No hagas ninguna tontería- Tomó su mano pero ella se separó bruscamente y lo amenaza con la mano

- Si te sientes mejor golpendome puedes hacerlo

- Idiota- Una inmensa luz brotó de chica y cuando el rubio fue a detener el hechizo de cierta forma vio la silueta de __________ y se dejo golpear

Elizabeth se dispuso a correr para encontrar a sus amigos




Palabras del autor

Ta dah, un capítulo bastante corto. Lleno de misterios y dudas, soy mala

Aquí comienza la carrrera

Dudas....

Críticas.....

Comentarios.....

Sugerencias......

Perdón si todo esto ya lo sabían, pero no quería perder el hilo de lo canon

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top