Condenados

Hubo una época en la que nosotros solíamos ser solo caricaturas, personajes fantásticos cuyo propósito era brindar grandes momentos de alegría para las personas, fueron buenos tiempos, cuando solo existíamos en aquellos dibujos animados que solo vez en la pantalla. El mundo era perfecto, todo se encontraba en equilibrio. A veces nuestros sueños no son lo que creemos, es muy diferente la realidad de la ficción.

Solo éramos dibujos inocentes, hasta que fuimos condenados...

Las intenciones de uno de nuestros creadores, Joey Drew, en un principio eran puras, creía que al traernos a su mundo las cosas cambiarían para bien. Sin embargo, con sus constantes fracasos su mente se fue nublando y oscureciendo, su conducta ya no era la misma. Debido a eso recurrió a los métodos inadecuados para lograr su cometido, aquello a lo que llamó "exitoso"... Nosotros. En un principio todo parecía ir bien, el precio había sido "pagado" con aquel sacrificio y nuestras vidas eran la recompensa más grande que tuvo nuestro creador.

Las cosas marcharon bien por un tiempo, los tres solíamos ser muy felices juntos, hasta que descubrimos la "maldición" con la que estábamos condenados.

Todo inició en lo que parecía ser otro día "normal" para nosotros.

Flashback:

- ¿Qué es lo que haremos hoy Joey? - pregunté algo emocionado, mi filosofía es cada día es una gran aventura por vivir. Soy una caricatura, ese siempre ha sido nuestro propósito, vivir las aventuras que el creador nos haga protagonizar, aunque... desde que llegamos a este mundo nuestras aventuras ya no son las mismas de antes.

- Me temo que nada fuera de lo común Bendy, necesito hacerles unas pruebas a ti y a Boris - mencionó un poco serio.

- Vamos, Boris y yo estamos en perfectas condiciones, somos caricaturas, no tenemos enfermedades. - mencioné sarcástico mientras hacía un par de piruetas, odiaba estar quieto, después de todo, soy un demonio, me encanta hacer travesuras.

Joey suspiró rendido, de cierta forma él sabía que yo tenía razón, desde que fuimos creados nos ha estado monitoreando constantemente y siempre estamos igual, bastante "sanos". - Está bien, ve a jugar con Boris - comentó liberándome de aquella tediosa rutina de revisión.

¡Gracias Joey! - y sin más me dirigí a buscar a Boris, ¿donde se habrá metido ese lobo?, con su gran tamaño no debe ser difícil de encontrar. Tardé un poco pero, por fin terminé hayandolo, justo en el antiguo escritorio de Henry - ¡Aquí estas!, oh Boris, te he buscado por todas partes, ¿qué haces aquí? - pregunté curioso.

Hola Bendy... no hacia nada, sólo que este era el antiguo lugar donde mi creador trabajaba, siento que al estar aquí, puedo estar cerca de él... me hubiera gustado haberlo conocido - dijo con tono nostálgico. Odiaba ver a Boris así, él es mi mejor amigo, el único de hecho, jamás me ha gustado verlo triste.

- Oh vamos, ¡anímate!, ya escuchaste a Joey, él solo está de viaje por un tiempo, pronto vendrá y cuando lo haga, ¡le daremos una gran sorpresa! - traté de animarlo un poco, como siempre creo que lo logré, vi que me miró con una sonrisa.

- Está bien... tienes razón - mencionó levantándose del escritorio - Sabes... hoy tengo ganas de tocar un poco de música, ¿quieres acompañarme? - dijo levantando una ceja, él obviamente conocía mi respuesta.

¿Bromeas?, ¡esperaba que dijera eso! - dije dando un pequeño salto.

Boris sacó su clarinete, de hecho, él tocaba más instrumentos, casi todos eran de viento, ¿que ironía no?. Henry lo hizo así como una referencia al Lobo del cuento de "Los tres cerditos", el malvado lobo que soplaba para derribar casas. Él había tomado ese concepto y lo había transformado en algo nuevo, el lobo que soplaba y soplaba pero para tocar música y traer gran diversión a los niños y a mí, pues, ¿qué puede hacer un demonio bailarín sin música?. Lo mismo hizo Joey conmigo, su imaginación siempre fue diferente a la de los demás, sus creaciones rompían por completo todos los estereotipos que se tenían en ese entonces. La sociedad siempre ha tenido muchos prejuicios, y nuestros caricaturistas buscaban la forma de corregir esto en las nuevas generaciones, "los niños son el futuro". Nuestro propósito además de entretener era enseñar que los lobos no siempre son los malos de la historia, y que los demonios, no siempre son como los pintan, hay algunos que solo deseamos bailar y hacer reír a los demás. Nuestros creadores tenía muchas cosas en su contra, nadie creía que un demonio y un lobo se volverían un éxito de la televisión tomando en cuenta la educación que se tenía en aquellos días. Pero ante todos eso salimos adelante, los niños nos aceptaron y nos ganamos su cariño. Ahora que estábamos vivos seguiríamos creando más momentos de gracia para las personas. Debíamos estar listos y ¿por que no practicar un poco ahora?

- Ya sabes que hacer amigo... ¿estás listo? -

- Nací listo - contesté confiado

¿Tú, listo?... eso lo dudo... ¿acaso no usarás tu tutú también? - comentó en tono sarcástico.

- Cállate Boris, eso no es nada gracioso... esa vez me obligaron - dije algo molestó y ofendido por el comentario, aquel tutú fue el que usé en la cinta "The dancing demon" los creadores creyeron que un demonio disfrazado de bailarina sería sin duda algo cómico, y no se equivocaron, pero desde entonces se la pasan haciéndome bromas al respecto, eso me molesta.

- Jajajaja, esta bien, vamos... 1, 2, 3, 4 - Y la música empezó a sonar, era divertido bailar, ese era unas de mis características, algo para lo que había nacido; mis bailes traían gran diversión al público, además el danzar me hacía sentir bien... me hacía sentir libre. Lo mismo sucedía con Boris, a diferencia de que su propósito era tocar música, aunque de vez en cuando sacaba alguno que otro paso de baile; aun así nos complementábamos, músico y danzante. El tiempo parecía detenerse en ese instante, no existía nada más en el mundo para nosotros que la música y el baile.

De pronto algo en el piso me hizo salir de aquel momento de alegría, una sustancia negra fluía por el piso... era tinta, lo primero que vino a mi mente fue la máquina, quizás un fallo hizo que se derramara, pero no era así, la tinta provenía de mi. Yo literalmente estaba "derritiéndome", mi tinta estaba siendo derramada. Al ver eso Boris dejó caer su clarinete al piso y se acercó a mi

- ¡Bendy!, ¿que te pasa? - dijo asustado - tranquilo, todo estará bien, no te preocupes, buscaré a Joey - vi como salió corriendo por ayuda y lo único que hice fue dejarme caer de rodillas, me estaba debilitando.

- ¡Bendy! - exclamó Joey al verme en ese estado - ¡Boris, ayúdame a llevarlo al laboratorio! - ambos me cargaron y me llevaron a ese pequeño cuarto donde el creador hacía sus pruebas con nosotros. Siempre nos dijo que éramos perfectos, pero también nos decía que podíamos mejorar, que él se encargaría de hacer que fuéramos aún más perfectos de lo que ya solíamos ser, ¿cuando entenderán los humanos que la perfección es algo inalcanzable? - Me recostaron en una plancha de metal y rápidamente Joey me comenzó a suministrar algo de tinta.

- Joey... - mencionó Boris, él también estaba empezando a gotear tinta

- Oh no, tú también - dijo con tristeza el creador - ven, siéntate, te daré algo de tinta.

Después de un rato logramos reponernos y nos sentíamos mejor que nunca, pero... lo que descubrimos ese día sin duda nos condenó.

Joey nos explicó que al investigar un poco, descubrió que nosotros eramos inmortales, no podemos morir como los otros seres que habitan este planeta, pero... para poder seguir siendo como somos, dependemos completamente de la tinta, eso nos mantenía fuertes, así como la comida a los humanos; de otro modo, sufriríamos en gran agonía debilitándonos cada vez más, pero no podríamos morir para acabar con el dolor. Sin duda la máquina siempre debía estar funcionando para que nuestra existencia como tal siguiera siendo la misma.

Ser inmortal... eso implica muchas cosas, en un principio es una buena noticia, vivir para siempre no suena nada mal, pero... una vez comprendido esto te das cuenta de la gran tortura que se puede volver, Joey moriría algún día y Boris y yo nos quedaríamos solos, ¿cómo podríamos sobrevivir por nuestra cuenta?, al menos los dos nos tendríamos el uno al otro, una eternidad con Boris no suena tan terrible, al menos estaría acompañado por mi mejor amigo. Sea como sea, no teníamos opción, no podemos morir, estamos condenados, tenemos que buscar la manera de continuar.

Habíamos descubierto algo importante ese día, pero aún nos faltaba mucho por conocer sobre nuestro pasado y sobre el creador o mejor dicho... el traidor. Pagarás caro por todos tus pecados Joey, conocerás al verdadero demonio que llevo dentro.

-Bendy

^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^
Hola mis pequeños demonios de tinta!!!!! >w<

Al fin llegó el día, nuestro querido amigo Bendy a vuelto!!!

Quiero decirles que estoy muy emocionada, aunque creo que no soy la única ya que como todos saben el capítulo 2 ya se ha estrenado y es... Grandioso!!! >w<

Decidí sacar este libro justo hoy por el motivo que ustedes y conocen. Quería hacer algo especial para festejar UwU

Antes de irme quiero mandar un saludo a:

8Mena8

melisita2808

BubblegumMew

Ustedes me dan inkspiración para continuar escribiendo sobre BATIM :3

Espero que les haya gustado el capítulo, por favor voten y comenten su opinión.

Sin más que decir se despide de ustedes su amiga PesadillaNocturna.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top