_Capítulo 01

Ruido, todo a su alrededor emitía algún tipo de ruido o sonido. Empezando por la puerta de su piso la cual en ese momento cerraba con llave para después guardarlas y ponerse los auriculares. Vivía solo desde hace no mucho tiempo, pero después de todo aquello era lo que mejor le podía venir al propio Keith. Sus padres y su gran compañía en Corea no les permitían estar mucho tiempo con él lo que hizo que el pelinegro se buscara la vida para seguir un camino. No recordaba mucho de lo que hacía antes en esa vida pero si tenía el deseo de continuar con sus estudios, con ese pensamiento consiguió entrar a la universidad que quería en América.

No le costó mucho de convencerles y a veces el mismo tenía la sensación de que era un estorbo para ellos y no un hijo. Caminó tranquilamente hasta la parada del autobús y ahí esperó paciente su llegada mientras la música conseguía relajar su cansado cuerpo. En verdad no le importaba pues siempre había sido un chico solitario y pocas veces se relacionaba con alguien si no era estrictamente necesario. Aún así estaba confuso, sus pensamientos aún estaban en ese sueño, ese chico le conocía de alguna manera y el mismo oyó su nombre salir de esa persona.

Comenzó a ver como su autobús llegaba, este paró como siempre frente a él y después de subir continuó su camino. Aquella línea no era demasiado transitada por la gente así que logró sentarse fácilmente, al hacerlo notó todo el cansancio de nuevo en su cuerpo.

"Tengo que descansar de alguna manera o me acabaré volviendo loco..." pensó.

Tras bajar del autobús se quitó los auriculares, su mirada se dirigió al abarrotado campus que a esas horas tenía una buena afluencia de gente. Varios grupos de amigos pasaron cerca de él en dirección a algunas facultades mientras reían y gritaban alegremente. A la vez que iba avanzando a su clase se fue fijando en la gente que iba y venía, distinguiendo algunos profesores y al propio equipo de fútbol con sus habituales chaquetas del equipo. Su mirada acabó en un pequeño grupo de chicos que hablaba con alguien a quien conocía, al acercarse pudo distinguir la figura de Shiro, el amigo de sus padres quien trabajaba como joven coordinador en aquella universidad.

-Buenos días -Saludó Keith de forma educada.

Esto hizo que aquellas personas se giraran y Shiro al verle sonriera.

-Arriba esos ánimos jajajaj buenos días - Shiro le devolvió la sonrisa mientras se acercaba a darle la mano -. ¿Qué tal el curso? ¿Te has adaptado ya? Ya sabes que si necesitas ayuda...

-Si sii, todo va perfectamente, siento su preocupación.

Una de las personas que había en el grupo se acercó a él de forma curiosa saliendo detrás de Shiro.

-Ay porque seré tan maleducado... Keith te presento a Pidge una chica muy buena con la tecnología y Hunk, –Dijo señalando a ambos chicos a su lado- él esta aquí para convertirse en un gran chef, acaban de incorporarse al nuevo curso.

-Encantada – Sonrió Pidge mientras se acomodaba sus enormes gafas. –Es un placer conocer a un nuevo compañero más, espero que nos llevemos bien.

La mirada de Keith dudó pero asintió de forma educada.

-Encantado también... espero que os valla bien aquí en la Voltron's academy.

-Veo que vas mejorando tus habilidades sociales Keith – Apuntó Shiro. – Pero igualmente ¿Qué ha sido ese espíritu? Pareces cansado y...

Con una mirada silenciosa directa a sus ojos Keith consiguió callarle.

-No importa estoy bien –dijo cortándole- No quiero llegar tarde, con permiso. – se excusó mientras daba media vuelta y se desviaba por el camino hacia su facultad.

Lo último que quería era preocupar a Shiro quien tanto le ayudó a adaptarse de nuevo y se había preocupado porque él estuviera bien cual hermano mayor que miraba por su hermano pequeño. Shiro le siguió con la mirada unos pasos más hasta que desapareció de su vista y suspiró.

-Disculpadle, no suele ser así. – Sonrió de manera que no notaran su preocupación. – Bueno chicos aquí empieza vuestra aventura como universitarios, espero sobreviváis y si tenéis alguna cuestión ya sabéis donde encontrarme. Ah se me olvidaba, intentad transmitirle esto también a Lance, imagino que se habrá dormido.

-Sin problema, muchas gracias por todo profesor – Sonrió aquel emocionado Hunk – Hemos quedado luego para comer, así que no habrá ningún problema.

-Me alegra oír eso jejej con esto me retiro entonces chicos mucho ánimo.

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En timbre sonó y ahí estaba al fin fuera de aquella atosigante aula, comenzó a recoger sus cosas sin prisa al contrario que sus compañeros quieres salían del aula en manada como si tuvieran demasiada prisa para llegar a ninguna parte, cuando hubo guardado los utensilios en su mochila salió de allí sin antes despedirse del profesor. Eso le recordó que aquella mañana había sido muy cortante con Shiro y eso le hacía sentir culpable, debía disculparse apropiadamente más tarde.

Ya caminando para salir de la universidad, su estomago rugió recordando que aquella mañana como todas no había desayunado y su estomago necesitaba de la comida. Suspiró pesadamente mientras se dirigía con pasos pesados a la cafetería por los anchos pasillos ya vacíos al haber acabado el turno de las clases de la mañana. Al entrar en la cafetería todo el silencio de los pasillos pasó a ser el bullicio de toda una universidad, por un lado estaban algunos comentando y gritando a la vez que comían, otros corrían o hablaban de diversos temas llegándole a sus oídos palabras sueltas. Keith algo tímido, intentando no ser notado se acercó a la cola de la comida y cogió su bandeja. Esto llamó la atención de la chica que tenía ahí delante quien pareció reconocerle al instante.

-Oh si eres Keith – Sonrió. –Soy Pidge, no sé si te acuerdas de mi de esta mañana, estábamos hablando con el profesor Takashi*.

-Ah sí, es verdad, hola de nuevo. –La sonrió.

-¿Quieres comer con nosotros? – Le miró a los ojos casi suplicando. – El profesor nos habló muy bien de ti, estudias algo parecido a lo que hago yo pero tu más a las aeronaves y dios tiene que ser tan fascinante, sobre todo la propulsión los engranajes el motor...

-Si bueno, estudio para ser piloto, o esa es la idea... porqué nos dan demasiada teoría.

Fueron pasando con las bandejas mientras Pidge le iba tratando de tener un tema de conversación con aquel silencioso chico. Al final Keith accedió a las insistencias de la chica y se animó a comer con ellos, socializar un poco nunca venía mal y Shiro era una de las cosas por las que siempre le insistía, pues el chico no solía tener muchos amigos.

Ya con la comida en la mano se dirigieron hacia la mesa y Keith vislumbró al lado de Hunk un chico que aún no conocía aunque dentro de él asomó un halo de nostalgia, eso le disgustó pero prefirió ignorarlo pues no era el momento de pensar en ello.

-Ese de ahí es Lance, ignora su estupidez, esta estudiando lo mismo que tu me parece – Le contó Pidge mientras señalaba con su mirada hacia la mesa donde pudo reconocer a Hunk, el chico también de aquella mañana.

A su lado un chico de piel morena y con el pelo oscuro que no paraba de reír por alguna razón. Ambos se sentaron a la mesa frente a aquellos chicos pero eso no calló a ninguno de los dos chicos.

-Por dios decidme que no seguís riéndoos de lo mismo que cuando me fui... por favor negádmelo – Soltó Pidge.

-Lo siento Pidge el chiste era muy bueno jajajaj – Dijo el chico de la camiseta amarilla sonriente. – Hola, ¿qué tal? – Dijo a Keith extendiéndole la mano, la cual Keith estrechó. – Espero que nos llevemos bien.

-Joder ¿Ya hace tanto tiempo? Jajaj bueno como sea, bienvenido al grupo, creo haberte visto también entre los de aeronáutica, también estoy en el equipo de futbol de la universidad –Dijo mientras señalaba la marca de la chaqueta que llevaba puesta. -¿No te han invitado al equipo? Tienes buena forma física para jugar y eso les encanta a las chicas... – Dijo sonriente a la vez que movía sus cejas de arriba abajo.

Keith dudó un momento pero sin apartar su vista e aquellos ojos azulados consiguió contestar de manera tranquila.

-Creo que paso... no me interesan– Contestó cortante intentando que no le insistiera más sobre el tema.

-Oh vamos, no es solo por las chicas, también hay espíritu de equipo y es divertido jugar, ¿qué haces tú en tu tiempo libre? – Dijo un sonriente Lance mientras ponía uno de sus brazos alrededor de los hombros de Keith para acercarse más a él.

Por un momento sintió una ráfaga eléctrica en el interior de su cuerpo, notando como se ponía nervioso al contacto con el contrario. Pequeñas imágenes rondaron por su cabeza lo que hizo que su hombro izquierdo, aquella maldita extremidad comenzara a dolerle como el demonio. Sus negros ojos se comenzaron a clavar en los azules de Lance, fulminándolo con la mirada a lo que este tranquilo la sostenía con un halo de tristeza haciendo que Keith se sorprendiera aunque prefirió no mostrarlo demasiado.

Lance por su parte sintió un calambre por todo su brazo que hizo que en un instante se le quedara la piel de gallina mientras intentaba comprender esa mirada que sostenía, algo reconocía en él y aún así no sabía qué.

-Ey vamos... no te hice nada.

-Has hecho suficiente - Respondió de manera cortante lo que produjo que el moreno quitara el brazo pero no se moviera de su sitio sin parar de mirarle. En el momento en el que parecía empezar una pelea entre ellos sobre quien era más idiota de los dos Pidge se interpuso entre ellos.

-Chicos la comida se enfría – Aclamó Pidge con la esperanza de que ambos no pelearan acabándose de conocer en ese instante. En parte funcionó y ambos comenzaron a centrarse más en sus platos. –Por cierto Lance... ¿Qué tal con Tíffani? La de segundo...

-Uff la que te tengo que contar... - La cara de Lance se puso seria un instante. –Resulta que no le interesaba yo, al parecer el segundo capitán ahora es más guay que yo, pues que se la quede... estoy harto de esa rubia.

Con esto surgió un cambio de tema radical que transformó el ambiente de la conversación por completo y pasaron a hablar de la gente que formaba la universidad de la que aunque Keith formaba parte no tenía ni idea de que hablaban. Después pasaron a hablar de la comida, donde Hunk demostró tener buenos conocimientos de la materia mientras Lance admiraba todos los platos que había podido probar de su amigo. Keith se mantuvo callado y solo hablaba cuando alguno de ellos le preguntaba su opinión a lo que Lance siempre parecía pensar lo contrario y vuelta a empezar. Al parecer entre aquellas tres personas había ya una buena confianza de llevar años juntos y se veía a la legua con solo ver lo bien que se llevaban entre ellos.

Por un momento Keith se sintió un extraño ya que era nuevo en aquella mesa de amigos. Igualmente notó como aquel moreno le irritaba cada vez más con su forma de ser y agradecía por momentos la presencia de Pidge y Hunk que armonizaban cada momento que estuvieron ahí sentados al comer.

-Valla valla, así que os he encontrado a todos juntos. – La voz de Shiro salió de detrás de ellos. – ¿Qué tal estáis chicos? Veo que al fin estáis todos adaptados incluido tu ¿eeh? – Su mano revolvió de manera cariñosa el ya desaliñado pelo de Keith lo que hizo que este se apartara para dejarle sitio y que todos lo vieran mejor.

-No hacía falta lo del pelo – Dijo mientras intentaba dejar su pelo como estaba antes.

-Como sea jejej Lance me han pedido que te diga que hoy se cancela vuestro entrenamiento así que ya tienes la tarde libre como estos – Señaló a los demás con la mirada.– Bueno a Keith os lo tengo que quitar un segundo pero por lo demás es todo vuestro. – Dijo mientras les dedicaba una amplia sonrisa.

Keith sabía bien el porqué de esa sonrisa, por una vez desde el accidente él estaba entre amigos y compañeros lejos de lo que era la familia junto a los amigos cercanos como él. Eso al japonés le hacía muy feliz.

-¡Toma! – Soltó Lance entusiasmado a la vez que levantaba su puño hacia arriba en señal de victoria sorprendiendo a todos los presentes. – Oh si perdón... - Añadió volviendo a su anterior postura algo avergonzado.

-Siendo así es un buen momento para plantear la ¡Noche de pizza! – Propuso Hunk.

-¡Siiiii! – Contestaron todos al unísono.

-¿Si? Creo- Dijo un tímido Keith.

-Profesor Takashi, usted también esta invitado, ha hecho muchas cosas por nosotros – Dijo Pidge dirigiéndose a Shiro al mismo tiempo que le miraba a los ojos. – Le debemos una buena.

-No gracias jejej sois jóvenes y universitarios así que disfrutar todo por mi, a mi aún me queda mucho trabajo por hacer aquí. – Indicó a la vez que ponía su mano en el hombro de Keith. – Deberíais esperarle fuera mientras hablo con él, solo será un momento y creo entender que el coche de Lance tarda en arrancar.

-Nooo oye no os metáis con Josefa – Dijo pronunciando su nombre en español al tiempo que ponía morros. – Es sensible y agradezco que aún este en marcha.

*El nombre completo de Shiro es "Takashi Shirogane".