Martes por la mañana, ya estaba de mal humor y el día apenas comenzaba.

Empezamos por el hecho de que <<de nuevo>>, se me había hecho tarde y no tuve tiempo para ver si quiera que ponerme.

Lo segundo, no pude desayunar y si no comía algo pronto, alguien iba a salir lastimado. Necesitaba algo en mi estómago.

Y tercero, al llegar a clases recordé toda estupida que hoy tenia hora libre al empezar el día.

Vaya estupida que eres, Lisa.

Así que, en resumen, no había por que, si quiera, levantarme tan rápidamente, pude haber escogido más calmada mi ropa y no tomar lo primero que veía y comer algo para no morir de hambre.

Pero, como mi suerte es la mejor, (nótese el sarcasmo), nada de eso sucedió.

Llegue con cara de "odio a todos", unas ojeras prominentes bajo mis ojos y mi cabello hecho un desastre.

El día no podía ir peor.

Creo que debería dejar de decir eso.

—Lisa...— canturreaba felizmente Will.

—Aléjate, no ando de humor— le advertí.

—Ush, que genio— bromeó haciéndome enojar aún más.

—¿No tienes a alguien más a quien joder?— pregunté incrédula.

—No.

—¿Entonces que quieres?

—Que vuelvas a ser mi novia.

—Ja, que buen chiste— solté una risa sin humor.

—Se que aún me quieres.

—Vete ahora, Pieterse. Si no quieres qu...—antes de que pudiera terminar mi advertencia, alguien interrumpió.

—Lisa— me saludó Cody, abrazándome por los hombros haciéndome sonreír.

—Hola— le salude, ignorando el problema anterior.

—¿Tu que quieres?— pregunto a William.

—Contigo nada, rubio. ¿Qué haces con ella?— pregunta demandante.

—Es mi amigo— respondí. —Aunque no es de tu incumbencia.

—Vaya, ¿tan rápido cambiaste a Dawson? Siempre supe que eras una...— fue interrumpido por un grito estruendoso.

—Cuida tus palabras— le advirtió Cody señalándolo con el dedo, demandante.

—¿O si no que?— lo reto.

—Te las verás conmigo, deja de molestarla o te las verás— se acercó considerablemente a William en modo de advertencia y mirándolo fijamente.

—Tranquilo, Cody. No vale la pena— hable tomándolo del brazo, para distanciarlos un poco.

—Bien. Pero a la próxima que te falte el respeto, no me detendré.— me dijo.

—Vámonos ya.

Caminamos hacia el campo de fútbol, para poder sentarnos en las gradas y poder hablar amigablemente.

—¿Que fue eso?— le pregunte estupefacta.

—Nada, solo lo puse en su lugar.

—Mira, gracias por defenderme, enserio lo aprecio. Pero la violencia no es la solución— le regañe.

—Lo se, pero me enojo que te hablara de esa manera. Debe respetarte.— habló molesto, con sus ojos azules brillando con enojo.

—Vaya, no me lo espere— solté una risa.

—¿Qué? ¿Qué es tan gracioso?— preguntó extrañado, pero sonriendo.

—El día que me hablaste en detención, te comportaste con... demasiada libertad diría yo— dije riendo.

—Si, y lo siento por eso. Nunca tuve la oportunidad de disculparme por cómo te traté ese día— dijo cambiando su semblante a uno serio.

No lo espere, pero me gusto que lo dijera.

—No te preocupes, pero no lo vuelvas a hacer. Ni conmigo, ni con ninguna otra chica, ¿okey?— pregunte posando una de mis manos en su hombro y el asintió. —Si una chica no te da permiso de tocarla, no lo hagas.

—Okey— dijo y su sonrisa volvió.

—Bien, ahora dejemos los temas serios— dije y el rio. —Y hablemos del plan.

—Bien, tú mandas Smith. ¿Que haremos?— pregunto.

—Primer pasó es que, Jennifer y Matthew se enteren. ¿Como lo haremos?— pregunte un poco nerviosa, mordiéndome las uñas.

—¿Qué le pasó a tu cabello?— pregunto tocando mis puntas, riendo.

—¡Cody, ponme atención!— me queje.

—Se ve peor que un arbusto mal cortado— bromea y yo le pego con el codo. —¡Auch, eso dolió!— exclama.

—Pues necesitaba captar tu atención— me quejo, exasperada.

—Tranquila, yo me encargo de eso— respondió y me guiño un ojo.

—¿Que harás?— pregunte entrecerrando los ojos y fulminarlo con la mirada.

Cody se acercó a mi y me susurró algo al oído.

—Oh no, eso no.— me queje, negando.

—Vamos, Lisa. Es solo caminar por los pasillos abrazados.

—El punto es que se enteren, Matthew y Jennifer— le recordé, tratando de regular mi respiración. —¡No toda la escuela, genio!— exclame molesta.

—Pero lo harán— aseguró.

—Creerán que solo me utilizas, ¿estás consciente que todos saben que te acuestas con todas?— pregunte incrédula.

—No son todas.— respondió y yo, lo miré con cara de: Really? —Bien, pero solo fueron cinco chicas, y una era Jennifer.

—Eso tampoco ayuda.

—No estamos hablando de las chicas con las que tuve sexo, estamos hablando sobre el plan— dijo hablando demasiado rápido.

—Bien, pero no haremos lo que tú quieres.— advertí.

—¡Es solo un abrazo por el hombro!— exclamó.

Pensé por un momento su propuesta, viendo el lado positivo y el lado negativo.

—Bien.

—¿Bien? ¿Eso significa que aceptaste?—pregunto, extrañado.

—Si, pero solo lo haremos una vez— aclare.

—Como tú mandes— elevó las manos en el aire en son de paz.

—Hagámoslo.

—Vamos— me ofreció su mano, y nerviosa la tomé y me levante de la banca.

Ya no hay vuelta atrás.

Comencemos.

*

Entrar por las puertas del instituto, abrazada por uno de los chicos más deseados de la escuela, es extraño.

Múltiples pares de ojos se posan en nosotros, o específicamente en mi.

Empiezo a sentir el nerviosismo subirme desde la punta de los pies, hasta la cabeza. Empiezo a ponerme nerviosa y a jugar con mis manos, sin prestarle atención a mi alrededor.

Aunque no los vea, ellos no dejan de hacerlo. Siento como si estuviera yendo a mi sentencia de muerte.

Bien Lisa, deja de estar tan paranoica. Eso no ayuda en nada.

Observo a Cody a mi lado, luciendo tranquilo, imperturbable y confiado. Mientras que yo soy un manojo de nervios sin controlar.

¿Saben lo que es que nadie te conozca y que de repente, seas el centro de atención?

¿No?

Pues así me siento ahora mismo.

Alguien susurra algo en mi oído, haciéndome temblar por un escalofrío.

—Tranquila, confía en mi. ¿Sí?— susurra Cody, tratando de tranquilizarme.

Yo asiento dándole una leve sonrisa llena de nervios.

Por los pasillos algunas personas prestan toda la atención posible en nosotros, otros nos ignoran, y los demás están estupefactos.

Hay varias personas que logró reconocer, que observan con distintas emociones en su rostro.

Vanessa, nos mira extrañada. Pero no le toma tanta importancia.

Jennifer, con su ceño fruncido y fulminándome con la mirada. Notablemente hirviendo en celos.

Aylin, me mira confundida por la situación pero lo hace con una sonrisa, indicándome que no está tan molesta.

Y Matthew.

No quería ni mirarlo a los ojos, me daba un vuelco en el estómago haciendo que quiera vomitar.

Sus ojos avellanas, reflejan confusión.

Pero sobre todo, decepción.

Está decepcionado de mi.

Siento una punzada en el estómago cuando lo veo cerrar rápidamente su casillero, antes de que nosotros pasáramos a un lado suyo.

Miró durante largos minutos, el casillero, su casillero.

¿Habré hecho lo correcto?

Si, estoy haciendo lo correcto, el estaba con Jennifer como si nada.

¿Pero no estaré precipitándome?

¡Mierda, Lisa! Tienes que hablar con el. Ahora.

—Lo siento, debo irme— informó a Cody, antes de separarme de él.

—Claro.

Corro, buscando entre todos los estudiantes a mi chico de cabello rebelde y oscuro, y ojos avellana.

Pero no lo encuentro.

En su lugar en encuentro con ciertos zapatos Prada y bolso Gucci ante mi.

Ignoro su presencia para seguir buscando a Matthew, pero ella no piensa irse.

—¿Te crees muy lista?— pregunta suficiente, con una mano en su cadera.

—¿Disculpa?— respondí, extrañada.

—¿Crees que tú me causas celos?— pregunto, con su semblante serio.

—Pues, por como lo veo— la examino de pies a cabeza, como ella lo hace— Si te causo celos, Grey.

—Ajá. Crees que ya ganaste la batalla, pero yo ganaré la guerra, Smith. No me detendré, hasta defender lo que es mío.— responde, tratando de intimidarme.

—Cody no es de tu propiedad.

—Si, lo es.

Siento rabia en mi ser, quiero arrancarle las extensiones falsas a esta perra y antes de que pueda detenerme, las palabras salen de mi boca.

—Maldita tóxica— la ofendo.

—¿Qué dijiste?— pregunta, como si no hubiera escuchado nada.

—Eres una maldita tóxica— replique. —Cody, no es un objeto o algún juguete para que lo trates de la manera en que lo haces. Merece algo mejor que tu.

—¿Tóxica?— pregunta.

—Olvídalo, no voy a darte explicaciones— brame harta y dando la vuelta dejándola con la palabra en la boca.

Le había callado la boca.

Y se había sentido excelente.

Posteriormente a mi momento de victoria, continué mi búsqueda sin éxito.

Derrotada, me encamine a buscar a Cody.

—¿Por qué tan triste, Smith?— pregunto Cody, al ver mi expresión.

—Creo que Matthew se enojo.

El hizo cara de: ¿No me digas? Y yo molesta le levante el dedo medio.

—Ya tranquila, son celos.— trato de animarme.

—¿Y si no hice lo correcto y solo confundí la situación?— pregunté, resignada.

—Pues... al menos te divertiste haciendo un plan conmigo— ánimo, guiñando un ojo.

Reí, Cody era todo un caso.

—En eso tienes razón.

—Siempre la tengo— se alaga a el mismo y ruedo los ojos divertida.

—Bien, fase uno del plan: hecha.— tomo mi cuaderno y tacho esa parte.

—¿De verdad anotaste el plan en un cuaderno?— cuestionó, extrañado.

—Tu lo haces a tu modo, y yo lo hago al mío.

Guardo en mi bolso el cuaderno y empiezo a cuestionarme todo.

¿Necesitaría hablar con Matthew?

No lo sabia, pero ya no podía dar vuelta atrás.

El plan ya había comenzado.

╔═══❖•ೋ° °ೋ•❖═══╗
Bonjour! 😊💞 ¿Cómo están, bellas criaturas?😅

¿Qué opinan de la fase uno del plan?😈

Ya quiera empezar a escribirlo😈👌

¿Qué opinan de todo?, ¿creen que Lisa hizo bien?😱

¿Creen que Matthew este celoso?🤔

No olviden votar si les gusto💖

Besasos💋

Angie_D🐼💜