13.

¿Recuerdas cuando me diagnosticaron... eso? Estaba destrozada. Hecha pedazos. No era como un dolor de cabeza, o una rotura de hueso. Era algo mucho más grave. Yo estaba rota por dentro. Como si hubieran sacado el alma de mi cuerpo y no sintiese nada. Cuando os lo conté nadie lo podía creer.
"¿Cómo? ¿Por qué?"
Preguntabais. Quería daros respuestas, pero no podía. Ni siquiera yo lo sabía. Fue inesperado para todos. Todos intentaron animarme, mientras que otra parte del grupo lloraba desconsoladamente. Pero tú, por primera vez; no hiciste nada. Literalmente nada. Ni si quiera te acercaste a mi, ni lloraste; ni nada. Me miraste, y te fuiste.
Me rompiste el corazón. Eras la persona que siempre me subía la moral si estaba mal, o que me abrazaba en los peores momentos. Y en el momento que peor estaba, te marchaste sin decir palabra. En ese momento no lo entendía. No entendía el porque. Y eso me rompió aún más el corazón.
Los siguientes días no te acercaste a mí. No me hablabas. Te alejabas de todos. Y si intentaba hablar contigo o acercarme, huias corriendo. Me dolió más que la enfermedad. Era horrible.

Pero no podía culparte, al fin y al cabo, fue culpa mía, ¿no?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top