El resto del día (Tn) lo paso en su habitación, no salió ni a almorzar ni a cenar por muchas que fuesen las insistencias de los chicos.

Al día siguiente, a la hora del desayuno no salió, por lo que Law se preocupó por ella y sin pensarlo dos veces tomó varios onigiris, un vaso de zumo de piña y salió del comedor bajo la mirada divertida de sus amigos.

Tocó en la puerta pero no hubo respuesta alguna asique usando su técnica entró fácilmente. Vio a la chica sentada en la silla frente al escritorio con la cabeza apoyada en sus brazos durmiendo tranquilamente.

Law se acercó con cuidado de no hacer ruido y dejó la bandeja a su lado, se acercó al armario y tomó una manta que puso con delicadeza sobre los hombros de la chica.

Se quedó viéndola desde arriba sin darse cuenta de que tenía una ligera sonrisa, con su dedos acarició delicadamente la mejilla que tenía al descubierto provocando que la chica suspirase ante aquel contacto. Law notó lo suaves y cálidas que eran sus mejillas, tal y como parecían ser en las fotos que tenía de ella en su habitación.

Volvió a acariciar sus mejillas pero hubo algo que hizo que su corazón se detuviese. Ante la caricia, (Tn) abrió los ojos con pereza, parpadeó un par de veces y se incorporó sintiendo la manta resbalar de sus hombros.

La chica se percató de la presencia de Law y lo miró frunciendo el ceño aún presa del sueño. Su expresión se relajó al percibir el dulce aroma del arroz que había a su lado. Giró la cabeza viendo los onigiris y percatandose de la manta mientras Law estaba estático sin saber qué hacer.

(Tn)- ¿Me has traído la comida...? -susurró.

Law.- Si, no saliste ayer para comer asique me tome la libertad de traerte algo...

(Tn) se quedó en silencio unos segundos mirando la comida. - Qué irónico... -susurró.

Law- ¿A que te refieres? -susurró dándose cuenta de que quizás esa fuese la primera conversación que estaban teniendo tras once años.

(Tn)- La primera vez que te di comida de pequeños fueron oniguiris. -tomó uno entre las manos.

Law abrió los ojos al darse cuenta del pequeño detalle del que se dio cuenta la chica.

(Tn)- Aunque tuviste una bonita forma de agradecer me todo lo que hice por ti. -susurró llevándose el onigiri hacia los labios percibiendo así su dulce aroma más de cerca.

Law- (Tn)...

(Tn)- Tuviste que levantar más los brazos, seguí viva. -dijo cortándole.

Law- ¿Por qué dices eso? -susurró sin entender sus palabras.

(Tn)- ¿Crees que fue bonito para mi despertar en un barco de la marina? -dijo bajando el onigiri apoyando sus brazos en su regazo. -¿Crees que fue bonito despertar sabiendo que tú me habías herido...? -dijo apenas sin voz. Miró a Law. - Pensaba que todo aquello era una pesadilla, pensaba que tú no podías haberme hecho eso... pero lo peor de todo fue enterarme por la prensa de la muerte de Cora-san...

A Law bajó la mirada siendo incapaz de mantener contacto visual con ella.

(Tn)- Vosotros erais todo lo que tenía, erais mi familia... cuando llegué allí no tenía a nadie. -hizo una pausa bajando su mirada a su onigiri. 

Law- Ese día estaba muy nervioso y muy enfermo, no sabía como reaccionar correctamente contigo... perdí el control...

(Tn)- Nunca te comportaste bien conmigo.

Law bajó la mirada.

(Tn)- A pesar de todos los rechazos que me dabas siempre seguí junto a ti... tenia pensado de seguir junto a ti pero hiciste algo que no pude perdonar.

Law se sentó en la cama que había al lado de ella mientras apoyaba sus brazos en las piernas. Se quedaron varios segundos en silencio mientras la chica daba un pequeño mordisco al onigiri sintiendo como el sabor se empezaba a extender por su boca.

Law- Le conté a Cora-san lo que te había hecho. -la chica lo miro sintiendo un nudo en la garganta al oír su nombre. -Me regaño, me regañó tan duramente a pesar de estar herido... me hizo prometer que te buscaría y que no debía parar hasta dar contigo. -hizo una pausa. - Dijo que los dos debíamos estar juntos...

La chica no pudo evitar dar un sollozo al recordarlo llevando una mano a los ojos para limpiar las lágrimas que comenzaron a caer, algo que hizo que Law se levantará y fuese hacia ella.

Law- No dejé de buscarte, no me rendí en estos once años, por eso estás aquí. -susurró agachándose a su lado sintiendo que quizás todo se arreglaría, un sentimiento que duró menos que un suspiro.

(Tn)- No te acerques...

Law- (Tn)...

(Tn)- Vete... no quiero verte...

Law asintió con una mueca y se levantó y caminó hacia la puerta, se detuvo en esta esperando las últimas palabras de la chica, se giró a verla y su corazón se comprimió al verla llorar, unas lágrimas que vió por primera vez cuando eran pequeños y él le impidió acercarse a él, pero ahora los papeles se habían cambiado.

Mientras tanto en el buque de la marina...

Smoker- Tashigi, ¿puedes atender unos minutos el den den mushi?

Tashigi- No me digas que por fín te irás a dormir. 

Smoker- No, tan solo me duele la cabeza. -dijo levantándose.

Tashigi suspiró.- LLevas dos días sin dormir trabajando en la búsqueda de (Tn), necesitas descansar.

Smoker- No puedo dormir tranquilo sabiendo que ella está con él.

Tashigi- Smoker-san, no podemos encontrarla si Trafalgar no sale a flote, es imposible dar con él.

Smoker bajó la mirada.- Lo se, pero prefiero estar ahí cuando lo haga.

Y sin decir más salió del despacho dejando a la chica sola.

Caminó por los pasillos hasta su habitación y cerró la puerta con pestillo. Se tumbó en su cama y de la mesita que tenía a su lado abrió un cajón y sacó una hoja que había allí. La observó por unos segundos sintiendo su respiración entre cortarse. Cerró los ojos y guardándola nuevamente en el cajón y decidió dormir un poco mientras su mente no le dejaba lograrlo.

Mientras tanto en el submarino...

La chica iba caminando por los pasillos de aquel lugar hasta dar con una puerta cuyo letrero llamó su atención.

Abrió la puerta y prendió las luces, lo primero que llamó su atención fue la amplia mesa circular que había en el centro siendo rodeada por estanterías repletas de libros. Se acercó a una de ellas sin cerrar la puerta y miró el reverso de los libros averiguando de que trataban. Tras unos minutos descubrió que la mayoría de aquellos libros eran de medicina moderna y unos pocos de geografía sobre las diferentes islas y sus historias.

Tomó uno de medicina moderna y lo abrió con curiosidad.

Mientras tanto Law salió de su habitación con el pelo húmedo tras haberse dado una ducha, la conversación que tuvo con la chica le había dejado muy confuso y dolido pero sin poder evitar dejarle un dulce sabor de boca al haber intercambiado algunas palabras con ella.

Cuando cambió de pasillo vio algo que le llamó su atención, se acercó a paso lento y asomó con cuidado la cabeza hacía el interior de aquella puerta abierta. Vio a la chica tomando uno de sus libros mientras lo leía estando de pie frente a la estantería. 

Se quedó allí por unos momentos observándola, miraba sus manos acariciar las hojas del libro antes de pasarlas, miró su rostro tranquilo mientras leía aquellas palabra.

Cerró el libro colocándolo en su lugar y miró varias baldas por encima de su cabeza, buscó algo por el suelo bajo la atenta mirada del chico. Se acercó a un extremo de la repisa y tomó una escalerilla que había allí. La puso frente a la estantería y subió los cuatro peldaños y apesar de eso se puso de puntillas alargando su mano intentando tomar un libro.

Law no pudo evitar sonreír al ver a la chica morderse su labio interior mientras estiraba su cuerpo intentando llegar. Pensó en acercarse y ayudarla pues él le sacaba por lo menos unos treinta centímetros pero justo cuando fue a dar un paso hacía en interior de la biblioteca se percató de algo que no se había dado cuenta antes. La camisa que le dejó Pinguin a la chica estaba subida por el levantamiento del brazo dejando a la vista parte de su ropa interior.

Law sintió las mejillas calentarse levemente y tragó duro sin poder apartar la mirada de aquella zona. Se obligó a apartarse de la puerta y apoyó la espalda contra la pared mientras se llevaba una mano a los ojos maldiciéndose a si mismo por aquel pensamiento fugaz que le pasó por la mente.

Suspiró profundamente tres veces y entró a aquel lugar.

La chica bajó el brazo y lo miró frunciendo el ceño.

Law- ¿Quieres que te ayude? -dijo lo más tranquilo que pudo.

La chica se bajó de la escalerilla y se cruzó de brazos sin mirarlo. Law se acercó a la estantería y tomó el libro provocando un bufido de la chica.

Law- Ten. 

(Tn) lo tomó aún con su ceño fruncido y miró a otro lado. - Gracias... -murmuró antes de alejarse y sentarse en una silla.

Law no quería irse por lo que se acercó a ella y se sentó en una silla que había a su lado provocando una mirada enfadada de la chica que decidió ignorar.

Law- No sabía que te interesara la medicina moderna.

(Tn)- No sabes nada de mi, que es muy diferente. -susurró mirando su libro.

Law- Quiero conocerte más.

(Tn) no respondió.

Law- (Tn), no quiero alejarme de ti, ahora que te he encontrado no quiero que te marches.

(Tn)- Soy una marine, algún día te daré caza.

Law bajó la mirada por unos segundos. -¿Me llevarás a Impel Down?- susurró.

(Tn) no respondió.

Law- (Tn)...

(Tn)- No me dejas leer.

Law apartó el libro que tenía en las manos provocando que ella lo mirara frunciendo el ceño.

Law-Responde.

(Tn) lo miró por unos segundos y suspiró bajando la mirada. -No.

Law sonrió un poco. - ¿No?

(Tn) suspiró un poco. -¿Qué pretendes?

Law- Nada. -sonrió un poco devolviendole el libro. - Mañana iremos a alguna isla para que te compres algo de ropa y lo que necesites.

(Tn)- No quiero ir a comprar, mañana será el día en el que me marche.

Law- Me temo que eso no será posible. 

(Tn) frunció el ceño mirándolo. -No eres nadie para retenerme aquí.

Law- No quiero que te marches.

(Tn)- Dijiste que me quedaría aquí tres semanas.

Law sonrió un poco.- No, dijimos que en tres semanas tendríamos la fuerza suficiente para ir a alguna isla sin problemas, no dijimos nada de dejarte marchar.

(Tn) lo miró confusa y alarmada.- ¿Por qué... por qué eres así?- susurró.

Law-Quiero que te quedes aquí, conmigo.

(Tn) se levantó.- No quiero quedarme aquí contigo...

Law se levantó y caminó hacía ella.- No quiero volver a alejarme de ti.

(Tn) se alejó de él sintiendo sus ojos empañarse pensando que todo aquello era una pesadilla. - No... no quiero.

Law la miró con una punzada de dolor en el pecho.

(Tn)- ¿No vas a parar de hacerme daño...?

Law se detuvo en seco, abrió la boca para hablar pero no encontraba las palabras.

(Tn)- Te odio... -varias lagrimas comenzaron a caer por sus mejillas. - ¡Te odio!

Salió de la biblioteca dejando a Law con una presión en el pecho sintiendo lo que sentía la pequeña en la infancia, rechazo y odio.