Astrid se sentó en el asiento del copiloto al lado de Rocket, dirigiéndose hacia el Dark Aster que ahora se cernía sobre Xandar. Una vez lo suficientemente cerca de la nave, Yondu disparó una ráfaga desde su nave que desconectó el escudo protector que la rodeaba.

—¡Síguela! —dijo Yondu—. Abajo.

—Agárrate, rubia —dijo Rocket, y envió la nave cayendo en picado debajo del escudo.

—Rocket, date prisa —gritó Peter.

Su nave y otras dos volaron al costado de la nave, antes de que Astrid presionara el botón que activaba los blásteres. Las otras dos naves se unieron, con la intención de hacer un agujero en el costado de la nave.

—Vamos —dijo Astrid—. Vamos.

Cuando finalmente se abrieron paso, Rocket y Astrid gritaron—: Quill, Yondu, ¡ahora!

—¡Son demasiados, Rocket! —gritó Gamora—. Nunca llegaremos allí.

Astrid miró por la ventana para ver que el Nova Corps había sacado a su ejército para ayudar a pelear la batalla. Ella sonrió cuando escuchó a alguien hablando por la radio.

—Peter Quill, habla Denarian Saal de los Nova Corps —dijo un hombre—. Que conste que aconsejé que no confiáramos en ti.

—¡Entendieron mi mensaje de "imbécil"! —gritó Peter emocionado.

—Prueba que me equivoco —dijo Saal.

Rocket y Astrid volaron por el campo de batalla, eliminando tantas naves de Ronan como pudieron. Mientras Rocket volaba, Astrid manejó las armas, y cuando no fallaron un solo tiro en veinte rondas, Rocket se rió en agradecimiento.

—Eres buena en esto, rubia —comentó Rocket—. ¿Quién diría que alguien tan bonita sería tan buena para volar?

—Oye, deja de coquetear con mi chica —espetó la voz de Peter.

—¡Y mi hermana! —añadió Apollo.

Astrid miró por encima de ellos mientras una sombra oscura oscurecía todo, y sus ojos se abrieron con sorpresa—. Oh, no.

El Dark Aster se dirigía al suelo, y los Nova Corps se había entrelazado para formar un bloqueo para tratar de evitar que el Dark Aster tocara la superficie de Xandar. Incluso cuando miró hacia arriba, Astrid pudo ver las naves de Ronan bombardeando la ciudad, provocando explosiones al impactar.

—Rocket, tenemos que ayudarlos —dijo Astrid.

—Lo sé —dijo Rocket, volando su nave hacia la superficie mientras Astrid eliminaba tantas naves enemigas como podía—. Mantén a Ronan arriba, Saal. Nosotros nos ocuparemos de la gente aquí abajo.

—No puedo creer que esté recibiendo órdenes de un hámster —dijo Saal.

Rocket detuvo la nave justo encima del río, apuntándolo hacia arriba—. Disparen antes de que toquen el suelo.

El resto de los Devastadores se unió a ellos y ayudaron en el intento de evitar que la flota de Ronan llegara a la ciudad y causara más daños, y sus esfuerzos resultaron relativamente exitosos ya que pudieron eliminar la mayoría de las naves antes de que salieran a la superficie.

Una nave Devastadora los acompañó y explotó, y una parte de la nave golpeó la ventana junto a Rocket y rompió el vidrio. Por encima de ellos, el bloqueo de los Nova Corps había comenzado a desmoronarse.

—¡Rocket! —gritó Saal.

—Espera, Saal, solo...

Rocket no tuvo la oportunidad de terminar antes de que el bloqueo explotara y Saal gritara.

—Dios —jadeó Astrid—. Peter, tienes que darte prisa. La ciudad fue evacuada pero nos están dando una paliza.

—Gamora no abrió la puerta —replicó Peter.

—Subamos —dijo Astrid—. Ahora mismo.

—De acuerdo —dijo Rocket, y su nave salió disparada hacia el cielo.

Astrid siguió disparándole a las naves enemigas, hasta que ella y Rocket estuvieron en curso de colisión directa hacia el centro de la nave. Rocket gritó mientras volaba la nave directamente a través del agujero que había sido abierto en la nave, chocando contra Ronan mientras lo hacían. No fue un aterrizaje suave, y tanto Astrid como Rocket quedaron inconscientes antes de que la nave se detuviera.

Tan pronto como se despejó el polvo, Peter se puso de pie, corriendo hacia los restos de la nave y subiendo a la cabina, encontrando a Astrid y Rocket en sus asientos. Cuando vio la sangre correr por el rostro de Astrid, jadeó.

—No, no, no, no —jadeó Peter, quitándole el cinturón de seguridad y sacándola suavemente de los escombros mientras Apollo recogía a Rocket.

Gamora había arrastrado a Drax, agachándose junto a él y Groot mientras Apollo y Peter se unían a ellos con Rocket y Astrid. Peter se sentó con Astrid en sus brazos, apartándole el pelo de la cara.

—Por favor, no estés muerta —susurró Peter—. Vamos. Despiértate. Por favor no estés muerta.

Astrid gimió, sus ojos se abrieron—. ¿Peter?

—Oye —dijo Peter en voz baja—. Oye, estás bien.

El Dark Aster estaba cayendo y todavía estaban a bordo. Groot comenzó a crecer, sus ramas se extendieron para formar una esfera a su alrededor, como para protegerlos del impacto. Las luciérnagas parpadearon en la pequeña esfera, y Astrid agarró la chaqueta de Peter con fuerza mientras las ramas los envolvían a ambos y los aseguraban en su lugar.

—No, Groot —dijo Rocket—. No puedes. Morirás. ¿Por qué haces esto? ¿Por qué?

Groot secó una lágrima del rostro de Rocket—. Nosotros somos Groot.

Y con eso, impactaron con Xandar, y lo siguiente que supo Astrid fue que estaba tendida en el suelo rodeada por los escombros del Dark Aster. Ella gimió mientras rodaba sobre su costado, empujándose hacia arriba. Aunque Groot los había mantenido con vida, Astrid todavía sentía que su pierna estaba en llamas, y cuando miró hacia abajo, su tobillo estaba torcido en un ángulo extraño.

—¿Astrid? —preguntó Peter, arrastrándose hacia ella—. ¿Estás bien?

—Acabamos de estrellar una nave contra una nave más grande, ¿y me preguntas si estoy bien? —preguntó Astrid, antes de gemir—. No, creo que tengo un tobillo roto y tal vez algunas costillas.

—Aquí, vamos —dijo Peter, ayudándola a ponerse de pie—. Te conseguiremos ayuda. Se terminó.

Pero no sabían que estaba lejos de terminar. Mientras intentaban levantarse de su aterrizaje forzoso, Ronan emergió de los restos del Dark Aster, muy vivo y aún blandiendo la Gema del Poder. Mientras Astrid sostenía el hombro de Peter, vio a Ronan y gimió.

—Tienes que estar bromeando.