Dieciocho

-Pero él...

-Ya basta Ash, si quieres decirme algo ¡dímelo! Y no te pongas celoso de todo aquel que este conmigo. ¿Acaso soy de tu propiedad tuya? dime -grité furiosa.

-...

De él solo pude observar un silencio incómodo, ví que se mordía el labio inferior, estaba impaciente y muy molesto, pero se contuvo por primera vez se contuvo ante mí. No dijo media palabra. Solo huyó. Pude notar cierta impotencia tras verlo correr.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top