Ira Takahashi- 高橋

*ೃ༄PLAYLIST

This is Revenge— (Hiroaki Tsusumi).

Bær— (Hildur Gudnadottir).

Your Majesty— (Rupert Gregsson-Williams).

Etude, Op.25— Winter's Wind (Chopin).

Dark eyes— (André Kostelanetz).

Eleanor Rigby— (The Beatles/Cody Fry).

SHUM— (Go_A)

*ೃ༄NOMBRE Y APODO

Ira Takahashi. Hasta el día de hoy, no sabe realmente si su madre eligió ese nombre porque sonaba bonito, o si lo hizo en recordatorio del IRA (Irish Republican Army) de su infancia. En cualquier caso, es un nombre muy corto que no tiene apodos, así que todos suelen llamarla por él nada más.

Sus hombres la llaman, por supuesto, señorita Takahashi, o Takahashi-sama

*ೃ༄EDAD

Cuenta con 26 años cumplidos un 15 de Agosto, lo que la deja con ocho años de ilegalidades encima, y con 22 años de entrenamiento en diversas artes marciales. 

*ೃ༄GÉNERO Y SEXUALIDAD

Mujer cis, y que ella sepa es heterosexual; la verdad no ha experimentado tanto en su vida, pero de momento está muy preocupada con otros asuntos como para ponerse creativa.

*ೃ༄APARIENCIA Y VESTIMENTA

Ira es una mujer poco común. A pesar de ser de estatura media en 1.70m, es una verdadera valkiria con 65Kg de puro músculo. Su porcentaje de grasa corporal es muy bajo, conservando solo lo necesario para proteger sus órganos y conservar su período; es bastante sorprendente que, con tantas pesas y calistenia, haya conservado sus pechos bastante intactos. Se entrenó desde muy pequeña para ser fuerte y poderosa, no para la estética, por lo que posee un abdomen extremadamente marcado, brazos fuertes de musculatura tonificada y una espalda prominente; el poder crudo que tiene su físico se ve a través de su ropa, y en la agilidad natural que posee, incluso corriendo con tacones (cosa que detesta). Pero con un taconazo bien puesto en el cráneo, ha knockeado hombres del doble de su tamaño.

Su tez es clara, con un leve tono rosado en el rostro y los nudillos; pero cuando la adrenalina toma el control o cuando está en plena con alguien, el rubor suele extenderse al resto de su cuerpo también, especialmente por su esternón y por el medio de sus oblicuos. 

La cara de Ira es lo más impactante y peculiar que tiene su físico, sin duda alguna. Angulosa y delgada, tiene unos pómulos altos que cortan el vidrio, una nariz fina y recta, y un mentón puntiagudo. Sus cejas son finas y perfiladas, del mismo color negro azabache que su cabello, que lleva corto hasta el reborde mandibular. Tiene ojos grandes pero almendrados, de un intenso color verde que suele complementar vistiéndose mucho del mismo color.

Su estilo es más bien clásico cuando se trata de vestimenta, optando por piezas no tan reveladoras y simples, adornando con joyería; le gusta combinar sus zapatos con sus top, a excepción de cuando se viste de negro (que es frecuentemente), porque ahí va por un look monocromático y se viste de negro completo simplemente. Suele usar tacones, últimamente como ha estado arrancando por un buen tiempo, anda con zapatos más cómodos para poder tener movimiento con más facilidad; pero no ha dejado de vestirse con elegancia en la medida de lo posible.

*ೃ༄HISTORIA

El señor Gyuga Takahashi nunca se imaginó que en un viaje de negocios a Dublin, acabaría por enamorarse de posiblemente la única persona que jamás amó. Conoció a Joanna en la reunión de negocios, donde estaba trabajando como traductora para un magnate del tabaco con el que el señor Takahashi tenía cuentas pendientes. La apariencia de la mujer fue lo primero en flecharlo, al igual que el encantador acento que poseía al hablarle en japonés. Sintió un click que nunca más volvió a repetirse, así que no iba a dejar pasar esa oportunidad.

Salió con ella durante toda su estadía en Irlanda, y continuó visitándola o enviándole su jet privado para que ella viajara a Tokyo. Así estuvieron un par de meses, cuando Gyuga le pidió matrimonio y se casaron.

De aquella unión nació Ira un par de años después. Para Jo, saber que estaba embarazada si bien era una alegría, también significó un problema; tenía que elegir por dos personas esta vez. Ella había escogido libremente enrollarse con uno de los hombres más peligrosos del mundo, metiéndose a la vez en un mundo oscuro e impredecible; pero sería injusto que su bebé creciera en ese ambiente también, aunque ella supiera que no podría mantenerla alejada para siempre. No existía ninguna posibilidad de que Ira al crecer tuviese una vida normal.

Así que llegaron a un acuerdo mutuo con el señor Gyuga. Joanna regresaría a Irlanda, donde criaría a su hija lejos de la Yakuza, y él visitaría de manera periódica para conservar los lazos. Obviamente, las cosas no fueron tan fáciles en la práctica como lo fueron en la teoría. Rápidamente fue necesario que Joanna e Ira fueran acompañadas en todo momento por una escolta de guardaespaldas, que tuviesen un coche blindado, y para cuando Ira cumplió los cuatro años, que aprendiera defensa personal.

Entrenar a una niña en taekwondo con un entrenador personal es... duro. Desde una temprana edad, Ira aprendió lo que era la disciplina física y emocional, la fortaleza que se necesitaba para levantarse del suelo con todo el cuerpo jugándote en contra. Aprendió lo que era el sacrificio, dejando todo de lado en más de una ocasión y negándose a la mayoría de las salidas con niñas de su edad, por quedarse en casa reventándose los nudillos contra la madera.

Entrenó y entrenó hasta obtener su cinturón negro. Pero después vino el kickboxing, el judo, las clases de tiro, el uso de los kunai y eventualmente, el amor de su vida: las agujas senbon. 

Para cuando Ira cumplió los 18 años, el señor Gyuga ya se había decidido; quería que su hija fuese digna de ser su sucesora, y que fuese capaz de pelear por el puesto cuando él eventualmente muriera. Sabía, después de todo, que los demás miembros de la organización probablemente se opondrían a ser liderados por una mujer, especialmente por una que mantendría a los Takahashi en el poder. Se fue a vivir a Tokyo, e inicio su integración a la mafia.

A los 20 años de Ira, Joanna fue víctima de un intento de asesinato en Irlanda, dónde se había quedado por voluntad propia, y la descubrieron muerta a la mañana siguiente. Takahashi ya había determinado que su hija era más que capaz, y la envió a matar al hijo de puta que había enviado al sicario a acabar con su madre. Sería la primera verdadera muerte que Ira repartiría, y desde ese día en adelante, nunca más se quitó el gusto por matar a sangre fría.

Acompañada de varios hombres, Ira se infiltró en la mansión del mafioso de segunda mano que se había metido con la Yakuza, y lo descuartizó; literalmente. Fue una de las pocas veces en las que Ira optó por el método más sucio y más desordenado que conocía, en lugar de hacerlo rápido y limpio; quería que sufriera, y lo consiguió.

Así estuvo, trabajando con su padre, liderando la Yakuza y haciéndose valer, hasta que su padre falleció de manera repentina de un ataque cardíaco, cuando Ira tenía 26; la tragedia la pilló de viaje en Rusia, haciendo negocios. No ha logrado volver a poner un pie en Japón desde ese día, porque su cabeza automáticamente adquirió un precio enorme, y los intentos de asesinato se quintuplicaron. Optando por irse a la segura, Ira lleva cerca de seis meses escapando por el mundo, saltando de país en país, mientras espera a que las situaciones internas de la Yakuza se ordenen para volver a Japón.

Y sentarse en el trono de su padre.


*ೃ༄PERSONALIDAD

El humor negro es una parte esencial de su forma de ser, capaz de reírse hasta de las cosas más nefastas, incluso de su propia desgracia o de sus propios límites; posee un carácter altivo y férreo, dura hasta los huesos, y probablemente por eso no tiene problemas con lidiar con las situaciones por medio del humor.

Mordaz y socarrona, el poder que siempre ha tenido le concedió una lengua afilada y un muy reducido interés por el cuidado. Es arriesgada y temeraria, cosa que para muchos de sus guardaespaldas es un verdadero dolor en el culo. Orgullosa y vengativa, Ira no pide ayuda ni da segundas oportunidades. Le cuesta muchísimo perdonar, pero es de la filosofía del "devolver"; si le pegan un puñetazo, te devolverá diez, y quizás después de molerte a coñasos en el suelo, se replanteará la posibilidad de perdonarte. Prefiere, sin duda alguna, morir de pie que vivir de rodillas.

Aunque su educación académica haya sido muy pobre y no destaque por su conocimiento sobre el mundo, es una persona muy habilidosa. Rápida y analítica, siempre está buscando soluciones a los problemas o a dónde ir a continuación. Además que, con su increíble fuerza bruta y agilidad, Ira puede literalmente crear salidas para los aprietos; reventar una ventana, echar abajo una puerta, perforar un muro, son todas cosas fáciles para la señorita Takahashi.

Es muy mal hablada, no le interesa cuidar sus modales con el resto; opina que su apariencia, su refinamiento en la mesa y sus códigos de mafiosa reflejan toda la sofisticación que posee, y no va a hacer un esfuerzo por cuidar su vocabulario. Ni muerta.

Lógicamente, como buena mafiosa, es una sádica y hedonista sin remedio; siente un profundo placer al ver el miedo en los ojos de aquellos que la conocen, se siente poderosa y no hay nada mejor que eso en el mundo de Ira. Su amor por el poder no tiene límite, y justifica todo de ese modo. Pero, como buena sádica, también tiene un lado masoquista. Le gustan las cosas difíciles porque siente satisfacción en el sufrimiento y el cansancio de trabajar para obtener algo, y ni hablar de la euforia que la llena cuando lo consigue. Le gusta que le exijan y que la empujen al límite.

*ೃ༄EXTRAS

—Las agujas senbon son su método favorito para matar; es más limpio y sigiloso que un disparo y que un arma blanca, actúa rápido, y no alerta a nadie. Ha matado más hombres con esas agujas de los que se ha llevado a la cama en los últimos años.

—Perdió la virginidad con uno de sus guardaespaldas a los 18 años, luego de tener una no muy agradable reunión con su padre; estaba vulnerable, y por despecho se metió con el hombre.

—No fue a la universidad, puesto que apenas terminó la secundaria, su padre decidió involucrarla un poco más con la yakuza; y la vida de una asesina y mafiosa no va muy bien con la universidad. Pero le habría gustado ser periodista.

—Sus objetos más preciados son sus joyas; muchas de ellas fueron regalos de su madre, y tienen un gran valor emocional. Las cuida como si su vida dependiera de ello (porque en cierto sentido, sí; son una herramienta muy útil para sobornar o escapar de una situación peligrosa).

—Como ya ha sido víctima de varios intentos de asesinato, tiene un par cicatrices bastante recientes; tiene una en el costado, debajo de su última costilla de una apuñalada, y otra sobre los pechos, debajo del esternón, de una katana que casi le arranca todo. Cuenta con algunas otras más pequeñas y más viejas, pero no son tan notorias.

—Bebe alcohol pero no fuma, y de hecho le disgusta bastante el olor del cigarro. Pero tiene un par de tendencias alcohólicas, especialmente por sus episodios de migraña con aura; la única forma eficiente que ha logrado de quitárselas, es bebiendo sake.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top