——————————————————

En estos meses la vida había cambiado bastante o por lo menos cambios notables. Si bien no hemos tenido que lidiar sobre cosas relacionadas con el mundo en el que he vivido toda mi vida, hemos pasado por más cosas. Un ejemplo de ello era Malia y Stiles, quienes habían terminado su relación; mi prima me contó que ya no sentía lo mismo con el chico y que una parte de ella sabía a que confundió la ayuda que le proporcionó con amor. A ciencia cierta no sabía lo que sucedió entre ellos y si la Tate no quería contarme, no la iba a presionar a hacerlo.

Otra cosa que relativamente cambió fue en tanto a Chris y a mi; a pesar de que ya vivíamos juntos porque poco a poco el hombre había llevado mis cosas a su departamento; habíamos iniciado una relación. Si bien dijo que no le gustaba decir que éramos novios porque eso no abarcaba todo lo que quería que fuéramos, si éramos una pareja formal. Me lo había pedido hace seis meses en una cena que él preparó. Todo fue sumamente increíble. Siempre estaba presente en mi memoria el hermoso momento que pasamos. Y hace unas dos semanas tuvimos una cita para celebrar los meses de relación, lo que no me esperaba fue la sorpresa que me dió.

Inicio flashback

Al entrar al loft de mi hermano, que era donde el hombre de ojos azules me había citado, lo primero que vi fue un camino de velas guiándome a una zona alejada de la entrada, donde pude ver un enorme ramo de tulipanes, haciéndome sonreír. Fruncí mi ceño confundida al no percibir su aroma ni escuchar su corazón, por lo que me acerqué a las flores y alcancé a ver un papel asomándose entre ellas. Lo abrí y decía: "te espero arriba, no tardes."

No perdí el tiempo y salí del departamento para poder dirigirme a la azotea. Al llegar la imagen que me recibió fue Chris con el atardecer de fondo junto a otras cuantas velas, totalmente serio y esperándome. No sabía que estaba pasando, pero mi corazón latió desbocado. Nadie había hecho nada tan bonito como esto para mi.

-¿Qué es todo esto?- cuestioné, pero no recibí respuesta alguna. Solo una invitación a acercarme, haciéndolo sin dudar.

-Podrá parecer muy pronto, pero que más da. Literalmente fuimos hechos para esta juntos y sé que tanto como tú y como yo nos queremos. No pienso perder ni un segundo más contigo. Quiero poder decirle a todos que eres mi mujer y nada me haría más feliz que aceptaras esto.- estaba sonriendo como idiota enamorada y quedé con la boca abierta al ver al hombre frente a mi arrodillarse. No pude más que mirarlo fijamente hasta que sacó una caja de su bolsillo y viéndome con una sonrisa. -No es el tiempo ni la persona y tengo la certeza de que quiero vivir mi vida junto a ti y para eso no se ocupan años de relación. Cuando la conexión es muy fuerte no necesitas demasiado tiempo para estar con la persona que realmente amas, porque te amo Alice, te amo como nunca pensé hacerlo con alguien y nuestra conexión es más que fuerte. Cuanto antes empecemos, antes podremos disfrutar de la vida que tenemos y tendremos. Lo quiero todo contigo. Espero que me digas que si, porque si no... no quiero presionarte.- dijo mientras me guiñaba un ojo para que no viera lo nervioso y ansioso que estaba por saber mi respuesta a la pregunta próxima por hacerme, aún así, yo ya estaba llorando de felicidad al escuchar sus palabras. -No veo porque esperar, así que Alice Hale ¿aceptarías a este ex cazador como tu esposo?-

No pude responder nada, simplemente asentí y al instante en que él se levantó me lancé a abrazarlo. Capturé sus labios en un beso necesitado y no fue hasta que nos faltó el aire que nos separamos. -Te amo. Eres el único con el que quisiera pasar el resto de mi vida.- murmuré sobre sus labios.

Sus ojos estaban plagado de emoción. Esta ocasión fue la primera en la que le dije "te amo", él con anterioridad me lo había dicho, pero no creía merecerlas, así que simplemente quise huir y evitarlo, pero afortunadamente me detuvo y me hizo saber que no esperaba que le respondiera, que con mis acciones era suficiente, pero sentía que debía decirlo. Además nunca supe lo que esas palabras implicaban en una pareja, nunca lo supe y me asustaba hacerlo. Él merecía todo y yo estaba dispuesta a dejar mis traumas para demostrarle mi amor, tanto con palabras como con acciones.

Me alejó de su cuerpo y levanté mi mano temblando, instantáneamente colocó la argolla en su debido lugar.

-Chris, es hermoso.- murmuré viendo el anillo.

-¿En verdad lo crees?- cuestionó. Levanté mi vista para poder verlo y noté que a pesar de que portaba una sonrisa enorme, sus ojos estaban bañados en preocupación y nerviosismo.

-Por supuesto, pero no creo merecerlo. Se ve demasiado costoso.- comenté.

-No arruines el momento.- pidió.

-No deberías gastar tanto.- me lo retiré y estiré mi mano para devolverle el anillo.

El cazador negó con la cabeza, pero aún así no retraje la mano. -Tu gastas demasiado.- apuntó.

-Sí, pero mi dinero. No el tuyo. Además deberías gastarlo en tu hija.- dije.

-El dinero que gano es para mis hijos y mi mujer.- tomó la mano que estaba estirada y agarró el anillo, para después colocarlo en mi dedo anular, luego dejó un beso en mis nudillos. -Es tuyo, lobita. Nadie más sería capaz de portarlo. Nadie, más que tú. Fue hecho exclusivamente para ti.-

Lo vi sorprendida, bajando la mirada hacia la joya. Era un anillo con un enorme diamante en el centro, rodeado de otros más pequeños y la argolla tenía otros cuantos más. Básicamente puros diamantes.

-Sabes que me gustan las cosas brillantes, pero me casaría contigo con anillos de papel.- informé.

-Lo sé.- respondió y sentí que colocaba su mano bajo mi mentón para levantar mi cabeza y poder mirarlo a los ojos. Él tenía una enorme sonrisa, lo que provocó que me la contagiara. Lo siguiente que sentí fue sus labios sobre mi frente.

Fin flashback

Al enterarme de que estaba hecho especialmente para mi no puede evitar pensar la posibilidad de que mi mate le colocara un rastreador, lo que confirmé cuando le dió un collar a su hija y una pulsera al rubio, aunque claro no le diría nada por ello. Si esa era su manera de asegurarse que tenía una manera para encontrarnos lo más rápido posible, no le diría nada. Sabía que lo hacía para cualquier emergencia

Los chicos ya sabían que el hombre me pensaba pedir matrimonio, pero aún así se emocionaron bastante y nos felicitaron. Allison le llamó a Lydia y le dió la noticia y me pidieron planear la boda. Los de la manada se enteraron por Isaac y de igual manera recibimos sus felicitaciones. Yo no podía y sigo sin poder con la felicidad, por lo que inmediatamente al llegar a casa le llamé a mis hermanos y a Deucalion, aunque a Cora no le agradó mucho enterarse que mi mate era un Argent, aún así se emocionó y ni que decir de Derek, amenazó a Chris, pero después nos dijo que estaba feliz por mi. Mi padre prometió venir a vernos.

——————————————————

Estábamos en el supermercado ya que nos hacían falta algunas cosas y los chicos habían decidido acompañarnos. Hacían tiempo en lo que llegaba la noche para hacer cierta actividad que solo llevaban acabo los de último año.

Nos encontrábamos en el pasillo de los tés, cuando una señora se nos acercó. Probablemente tenía unos 60 o la vida la había tratado muy mal.

-Esto no se ve todos los días.- comentó, viéndonos fijamente, no podíamos evitarla como si nada.

-¿A qué se refiere?- cuestioné confundida.

-Ya sabes querida. Que salieran a ayudar a su padre con las compras. Los jóvenes de ahora ya no quieren salir con sus padres. Es muy dulce de su parte que lo acompañen, a su edad se van perdiendo capacidades y su fuerza disminuye.- dijo como si nada.

Abrí la boca impresionada por todo lo que dijo. En primera no sabía si sentirme halagada u ofendida por verme menor, aunque considerando que nos llevábamos 18 años, si podría pasar como su hija. En segunda estaba asombrada que asumiera que Chris era mucho mayor, o sea, si tenía canas y eso, pero todas sus capacidades estaban bastante bien, bastante bien. Yo lo molestaba con su edad, pero él sabía que solo lo hacía en broma; esta señora solo asumía sin saber.

Estaba por hablar y sacar mi lado Hale, cuando Allison habló por nosotros. -No quiero ser grosera con una señora mayor.- dijo. -Pero ella.- me señaló. -Es mi mamá y él.- señaló al cazador. -Es mi padre. Llevan casados mucho tiempo, así que le pido de la forma más amable posible que dejé de asumir cosas sobre la vida de los demás.-

La señora nos miró como si eso no fuera posible, así que Argent mayor me tomó de la cintura, formando un abrazo y pegándome a su cuerpo; para dejarlo aún más en claro me hice el cabello para atrás, tratando de que al hacerlo, viera mi anillo.

-Que insolente, ¿dejaran que me hable así?- cuestionó realmente enojada. ¿Estaba mal que le gruñera y encendiera mis ojos para que se fuera?

El cazador al ver mis intenciones pellizcó la piel que se podía ver de mi cintura, lo volteé a ver mal. -No le dijo nada malo. Así que le pido que nos deje en paz y siga con lo suyo.- ella se fue maldiciéndonoslo en voz baja. Las carcajadas de los menores no se hicieron esperar.

——————————————————

-Alice, ¿puedo hablar contigo?- el rubio llamó mi atención. Los chicos solían llamarme por "mamá", pero cuando me llamaban por mi nombre completo, sabía que querían hablar de cosas más serias.

Asentí de inmediato. -¿Qué sucede?-

Jugueteó con sus manos nervioso. -Sabes lo que haremos hoy en la noche, ¿cierto?-

Creo que me hacía una idea de a donde quería llegar, pero quería que él me lo confirmara. -Pondrán su firma en la biblioteca. Él mío y el de mis hermanos debe de estar por ahí.- comenté.

-Bueno, yo... no, no sé...- comenzó a balbucear muchas veces. Sabía que no iba a decirlo, así que decidí ayudarlo.

Tomé una de sus manos para que dejara de jugar con ellas y me mirara, ya que sus ojos estaban fijos en ellas. -No sabes que apellido poner.- afirmé.

Él liberó un suspiro y asintió. -Es que me has cuidado tanto, me adoptaste, me diste una casa, me compraste un auto, pero sobretodo me aceptaste y quieres como un hijo y siento que te decepcionaré si pongo "Lahey".-

-Oye, escúchame con atención.- pedí. -Jamás me voy a sentir decepcionada, jamás. Y entiendo si quieres poner "Lahey", a pesar de que legalmente eres un Hale, tuviste tu apellido muchos años, no te voy a juzgar si decides ponerlo. Es tu elección.- dije.

Se lanzó a abrazarme. -Gracias por escucharme.- se separó y dejó un beso en mi frente, para después salir corriendo para irse junto a Allison a la escuela.

——————————————————

CHRIS

Seguimos entre besos y caricias un buen tiempo haciendo que me pusiera totalmente duro con solo unos besos, pero tenía a mi mujer vestida solo con una camiseta y claro, con sus perfectas piernas en mis manos... ¿Cómo no iba a excitarme?

Al escuchar el timbre de la entrada, dejé un beso sobre los labios de Alice, se bajó de mi regazo y me levanté del sillón para poder recibir la comida. Fui por las pizzas con una enorme erección, pero ella me había lanzado un cojín para taparme, claramente riéndose de mi.

Cuando abrí la puerta un hombre, de aproximadamente la edad de la Hale, estaba entregándome las pizzas que encargamos. Las recibí y me giré para poder dejarlas en la mesa de la entrada y así pagarle.

En el momento en el que le tendí los billetes, me percaté de que su mirada estaba fija en el interior del departamento, tenía una boba sonrisa y parecía hipnotizado. Me volteé para ver lo que veía tan intensamente y vi a mi loba pasando de un lado a otro, seguramente sacando servilletas y vasos para lo que fuéramos a tomar, claramente seguía con mi camisa. Le encantaba robarme y usar mis prendas. Seguramente yo la estaba viendo con una sonrisa de tonto enamorado como cada vez que la veía, pero no podía evitarlo, no cuando tenía a mi lado a la mujer más hermosa que mis ojos alguna vez vieron. Me seguía sorprendiendo que tuviera tanta suerte para que la Luna me diera la oportunidad de estar con alguien tan magnifica como ella.

-Es guapa mi mujer, ¿no?- le pregunté al repartidor al regresar a verlo.

Boqueó como pez fuera del agua y su cara se tornó roja de la vergüenza. Se fue después de que aceptó el dinero. La verdad me ponía celoso que la vieran de ese modo, pero luego recordaba que ella estaba conmigo y no podría fijarse en alguien más. Además, me encantaba presumirla por todos lados.

Tomé las pizzas y me encaminé hasta donde estaba la Hale, quien me veía con una sonrisa divertida, la cual seguramente se debía por hacer avergonzar al chico; tenía los labios rojos e hinchados por la sesión de besos que habíamos tenido, al igual que su cabello despeinado. Me recibió las cajas y se movió hasta dejarlas en la mesa del centro. Verla ahí con una sonrisa, sus piernas a la vista, el ver su anillo solo me hizo sonreír aún más como idiota.

-Te amo demasiado, lobita.- dije. Se giró y me sonrió, pero al ver que no me movía de mi lugar soltó una carcajada y se dirigió hasta donde estaba.

Desde hacia mucho estaba más que seguro del amor que le tenía a la Hale, pero sabía lo difícil que era para ella aceptar esas palabras. La última vez que las escuchó fue en su madre, justo antes de ir a la escuela el día que sucedió el incendio. Ella se sentía culpable por no haber podido salvarlos o tan siquiera responderle, porque un día antes de habían peleado. Después de eso no creía que fuera merecedora de ellas.

Al principio se asustó por y quiso irse de la casa para evitarme, pero le dije que no esperaba una respuesta de su parte, que era suficiente con sus acciones y sabía que ella no tenía idea de el significado de las palabras en respecto a una relación. Jamás tuvo una y no tenía idea de lo que implica, era por eso que le expliqué su significado. "Te acepto tal y como eres. Que no quiero cambiarte, que no me importa si eres tan común o diferente. Te amo y me encantas asi como eres, pero si quiero que crezcas y que seamos mejor al resto de la gente. Que luchemos por nuestros sueños y alcances eso que tanto quieres. Quiero contigo brillar, reír, llorar, estar ahí en el proceso, y podernos ayudar, en las buenas, en las malas, pero contigo. Siempre juntos." Esas fueron mis palabras.

-Me perdí por completo en el momento en que te encontré.- murmuró. Subió sus manos a mis hombros y dejó unas cuantas caricias en mi nuca, al mismo tiempo que yo colocaba mis manos en su espalda baja y la pegaba a mi cuerpo. -Te amo.-

——————————————————

Disculpen la hora. Espero les guste y no olviden de votar y de dejar algún comentario.

Les gustaría que tuviera una hora definida para subir capítulos y en caso de que digan que si, déjenme la hora y el país del que son por eso de la diferencia horaria.

Hay alguna canción que les recuerde a este fic? Me gustaría agregarle una playlist.