Loki era conocido como un Dios mentiroso, solitario y muchas veces insensible.

Y tal vez en ocasiones lo era, pero en las noches, en las noches en las que vagaba en el espacio y encontraba un lugar donde descansar, esa máscara de frialdad y deshonestidad se iba.

Loki en el pasado (y aún en otras ocasiones) también fue un Dios que se acostaba con la persona que le pareciera suficiente, hombres y mujeres, muchas de ellos eran parte de los pueblos de los nueve mundos, pero nunca logro amar a ninguno de ellos.

En las noches, días o cualquier ocasión donde su mente viajaba en sus recuerdos, lo recordaba, un hombre apuesto, alto y fuerte, vivía en uno de los bosques de Midgar.

En sus días de vagar en el reino de los midgarnos lo conoció, estaba de caza, vestía únicamente sus pantalones y botas, el torso estaba desnudo.

Un Loki adolescente, deseoso de experiencia, lleno de primeriza lujuria, observaba al hombre desde lo lejos, a los segundos de verlo se empezó acercarse, el hombre en un acto de defensa giro apuntándole con su arma.

El le tranquilizó, y luego de un buen tiempo donde hablaban de la naturaleza, entraron en confianza, en ese reino no era más que un "midgarno" común y corriente, nadie le vería como el rey que podría llegar a ser.

Esa necesidad de vivir en anonimato le provocó una emoción de alegría, así que antes de que el hombre dijera otra cosa más, se acerco y lo beso.

El hombre fornido se sorprendió, mas no se alejó, antes de que Loki se alejara, fue sostenido por unos brazos fuertes, que lo abrazaban por la fina cintura.

El hombre le rodeó mientras Loki sentía la erección del hombre contra su cuerpo, el cuerpo de Loki reaccionó a las caricias y el calor ajeno.

El hombre besaba su cuello y hombros.

— Podría hacer que te maten...- Loki se tenso.— por venir e intentar perturbar la paz de un hombre con tus toques homosexuales... ¿Cuánto daría la corona por la cabeza del hijo de Odín?

Loki, se tenso al escucharlo, sentía el miedo subir por su espalda, no podía moverse con libertad en caso de necesitar huir, y si usaba su magia teniendo a ese hombre así terminaría llevándolo consigo.

—Pero... Supongo podríamos divertirnos...- el hombre lo soltó y volteo su cuerpo.— tienes cinco minutos para huir y no volver... Sino... Quédate conmigo...

El hombre le miraba no solo con deseo, había algo allí qué Loki no entendía.

Sin embargo se quedo, demostrándole aquella decisión pegándose a su cuerpo. Sentía por encima de sus ropas el miembro del hombre, el como se apego a su trasero.

Ambos jadearon al sentirse, el hombre lo volteo quedando frente a frente, besándolo con deseo, cargo de sus finas caderas y lo retuvo de sus muslos, sintiendo las entrepiernas de ambos pegarse.

—Vamos.... Vamos adentro...-Dijo Loki señalando a la cabaña que estaba detrás de ellos.— es de noche... Podrían vernos...

Intento bajar de su cadera, pero un movimiento hizo que el hombre lo apretara un más hacia su cuerpo, gruñó mordiendo su piel del cuello, Loki río al escucharle gruñir en protesta, aferrando sus piernas al rededor de este.

El hombre los llevo dentro de su cabaña, dejando el cuerpo de Loki frente a la chimenea que había en la sala.

Loki aprecio el gesto, aquel lugar era frío, y estar al lado del fuego le reconfortó.

Sintió un olor a café, volteó a ver al hombre estaba acomodando la leña.

—Hay olor a café....- se sintió atraído aún más, su libido subió instantáneamente.

—Es normal... El celo y su olor depende de cada alfa...

Loki lo miro curioso.

—¿Alfa? ¿Celo?

—Si... ¿No los conocen en Asgard?

Loki recordó la vieja leyenda de los predestinados.

—¿También... También hay omegas?

El hombre asintió. Loki sonrió con amor.

Aquella historia hablaba de como los seres para evitar perderse en el mundo tenían una persona destinada, que gracias a su olor natural y en ocasiones una marca encontrarían a su otra mitad.

El olor de los omegas y alfas, solo era atrayente para su otra mitad, sin embargo en ocasiones no se encontraban las mitades en el mundo, y tenían que esperar la muerte para reunirse.

Luego de recordar aquello el de sintió confundido, ¿Como podía oler al alfa si no era ni omega y estaba seguro que no era el destinado para ese hombre?

—¿Como... Como puedo olerte..?

—Cuando uno no tiene persona destinada... Su olor es captado por cualquiera...

Su respiración se volvió entrecortada, si Loki ponia atención podía escuchar los jadeos del hombre.

—Soy Anthony... Por cierto... No es necesario que me digas tú nombre... Tal vez soy el único en muchos kilómetros en saberlo...

Loki sintió el olor a café aún más concentrado, sabía que tal vez Tony estaba desesperado por satisfacer su celo, pero por alguna razón lo estaba aplazando.

Se quitó su camisa y pantalón con rapidez, acercándose a Anthony, abrazándolo por la espalda, ambas pieles ardían de deseó.

—¿Porque estás evitando tu celo?- pregunto besando su cuello, mientras sus manos acariciaban su pecho.

—Sera mejor... La última vez que alguien pasó conmigo el celo... Termino algo herida...- El alfa se estremecía al tenerlo tan cerca pero pronto lo intento alejar, Loki sin importarle aquello se acerco aún más el.

—No me quitaré de aqui... Alfa gruñón... A menos que quieras este frente a ti...

Anthony jadeo excitado, pasó una de sus manos por detrás de su cuerpo, sintiendo la piel desnuda de los muslos de Loki, jalo de ella y Loki sin dudarlo se movió hasta quedar frente a frente.

Los ojos chocolate de Anthony chocaron con los suyos color jade, se sentó sobre Anthony, sintiendo el pantalón de mezclilla que usaba sin pegarse a sus piernas.

Loki termino besándolo, sintiendo como si el olor a café lo envolvía, pasó sus manos por sus hombros, mientras sentía las fuertes manos de Anthony tomar con fuerza su cadera.

Poco a poco terminaron recostados, Anthony debajo de Loki, el pelinegro movió sus manos hasta logra desabrochar el pantalón de Anthony, quien suspiro de alivio.

Lo quito con cuidado junto a su ropa interior, dejándo las prendas hasta sus rodillas, frotó su propia excitación con la del alfa, el agarre en su cadera termino siendo más fuerte.

—mmmm... Loki... Loki espera...

Loki dejo de frotarse, jadeando, miro directamente a Anthony quien, le sonrió mientras esté termino quitándoselo de encima.

Se posiciono sobre él, beso su cuello, pecho u abdomen, bajo dejando un camino de leves mordidas y besos en cada parte de piel, termino frente a la cadera de Loki, aún tenía su ropa interior, la quito casi arrancándola, Loki jadeo sintiéndose expuesto.

Beso su cadera, y bajo hasta su miembro, sin quitarle la vista de encima, tomo con cuidado entre sus labios el miembro de Loki, quien gemía levemente al verlo, tomo con miedo su cabello y lo movía sobre su miembro.

La respiración del alfa se hizo pesada, dejo que Loki marcará le ritmo, sus ojos observaban como se retorcía de placer.

Se sintió relajado al verlo aún tranquilo, una se sus manos se coló entre sus piernas, tocaba su entrada, usando su propia saliva que escurría como lubricante.

Loki sentía su cuerpo convulsionar con los toques en su entrada, empujando su cadera enterrando su propia excitación en la boca de Anthony.

Anthony termino metiendo tres dedos en la entrada de Loki, sintiendo como este se contraía, la necesidad de entrar en él le carcomían.

—Anthony... Anthony... Entra, por favor hazlo ahora...

La voz de Loki salía temblorosa, sus jadeos entremedio le harían escuchar aún más sexy. Anthony se irguió, viendo el cuerpo completo de Loki, delgado, pálido, con una cintura que siendo honestos cualquier chica desearía, sus caderas definidas, sus piernas largas y estilizadas, la luz del fuego asentaba rasgos de él, su rostro se veía sonrojado, la respiración entrecortada hacia que su pecho subiera rápido y jadeba levemente, manteniendo sus labios rosados abiertos.

—Maravilloso... -La voz de Tony salía ronca, cargada de deseo.

Se acomodo entre sus piernas, Loki jadeaba y lo miraba con sus ojos casi cerrados, una de las finas manos de Loki tomo la suya, apretándola levemente.

Loki no se veía nervioso, se veía por primera vez amado, Tony sonrió viéndolo.

Entro lentamente en el, su alfa interior lograba mantenerse tranquilo, su alfa interior estaba embobado con Loki.

Podrían decir que hicieron el amor durante unas horas, durante unos días, unos meses, unos años.

Un día simplemente Loki desapareció, Tony ya era más viejo, su edad se sentaba en sus canas, miraba al cielo esperando que volviera.

Loki desde Asgard vio como aquella alma reencarnaba una y otra vez, viéndolo hacer un sin fin de cosas.

La última vez que el logro verlo, era un genio, ayudaba e innovaba a su alrededor.

Lo vio luchar guerras que no le pertenecían, luchó contra él y esperaba luchar una vez a su lado.

Tal vez solo podría hacer aquello, verlo desde el paso del tiempo viéndolo convertirse a si mismo en un héroe.