16 de octubre del 2023

Han pasado 1826 días desde que te has ido, desde que Thor dijo que habías muerto.

Han pasado 43,824 horas desde aquel trágico día, desde que tu mi amado Dios diste tu último aliento.

No puede cuidarte, no pude protegerte de ese fatídico momento.

2,629,440 minutos culpandome por haberte dejado ir, donde me pregunto cada noche, cada día ¿que hubiera pasado si...?

Nuestra historia sería diferente, estarías aquí a mi lado, al menos luchariamos juntos una única vez.

Podría verte pelear con ese característico sarcasmo que usabas cuando hacíamos el amor.

Ver usar tus dagas, tus movimientos casi felinos.

Veo a Thor y creo que a él le afecto aún más tu partida.

¿Pero acaso el tuvo un romance secreto contigo?

He vivido 157,766,400 segundos un dolor en secreto, viendo a Morgan crecer con la esperanza de que veas que tan grande es nuestra pequeña.

Te pediría que vuelvas, que regreses, que me hagas retroceder en el momento para evitar que te vayas de mi lado.

Pero nada cambiaría en mi presente o en mi futuro, no estarías aquí.

Mañana tendremos una de las misiones más importantes de mi vida.

Mañana podré ver al menos una última vez tu rostro y si tengo suerte escucharé tu dulce voz.

17 de octubre del 2023

Es temprano, he despertado primero que los demás, salgo a nuestro inmenso patio y una última vez veo al cielo.

Decido arreglarme y dejar mi último adiós a mi pequeña Morgan, tal vez aún no estoy seguro de lo que pase en unas horas, pero creo que este es el fin de un viaje que ha durado 5476 días.

Decido ocupar el mayor tiempo mi cabeza en conversiones de tiempo, ya que al pensar en esto me hace sentir que todo va más lento.

Término mi discurso, y el primero en salir es Steve, corre unos metros antes de detenerse frente al río y respirar.

Corrió hacia el y brinco sobre su cuerpo, ambos caemos al agua y aprovecho para hacer todo lo que nunca hice por miedo, por dolor, por no tener valor.

El sale del agua riendo, es la primera risa que escucho desde hace 61,320 horas, el me sostiene de mi cadera, es demasiado temprano, nadie está aún despierto, lo tomo del rostro y beso sus labios.

Cuando salimos del agua el busca desesperadamente una respuesta, no se la doy.

—Eso es por las 166,440 horas que hiciste que mi vida tuviera sentido...

Entró al complejo y veo a Nat paseando por el corredor con su bata de dormir, la abrazo y lleno su rostro de besos.

—¿Que ocurre Tony?

En mi no hay una respuesta, solo quiero amar a mi familia una última vez.

Veo a Thor y a Clint salir de sus habitaciones, a Thor lo golpeó en el brazo, mientras que a Clint le revuelvo su cabello, ellos ríen confundidos.

Cuando salimos a desayunar, veo a Rodhey y lo abrazo como tenía años no hacerlo, a Nebula la abrazo y le doy un beso en su frente.

A Rocket y a Bruce les pido que vayan a donde esta mi laboratorio, si a ese que les prohibí años entrar, y les doy el acceso completo.

Nadie entiende que es lo que ocurre, ni porque ocurre, pero yo solo puedo sonreír y levantar mis hombros.

Cuando decidimos es momento de iniciar la misión ya son casi las 12 del día.

Nos ponemos los trajes y repasamos el plan una vez más.

—Los veo en un minuto... — la voz de Nat llega a mis oídos y algo me dice que debo detener esto y abrazarla una última vez, pero ya es tarde.

Pasan 60,000 milisegundos, y durante ese tiempo cada quien cumple su misión exitosamente.

—Clint ¿y Nat?— la voz de Bruce es la primera en escucharse luego de que Clint cae al suelo.

Nos quedamos todos en silencio, mientras veo como Bruce y Steve empiezan a caer en cuenta de la situación, veo a Clint sufriendo su propio dolor, mientras que Thor solo lo mira.

Los demás no importan, no, solo nosotros, Bruce golpea el suelo, con dolor.

—¿Tenía familia?. - preguntó tocando del hombro a Steve, dispuesto a dejar que todo fuera para después.

—Solo nosotros. - su respuesta llega junto a un leve suspiró.

Thor se exalta y Clint también, discuten, ambos son diferentes lados de una misma moneda, la negación de Thor junto a la aceptación de Clint, me cala en los huesos.

Clint no pude permitir que juegue con su mente, Natasha ha muerto y nada ni nadie lo cambiará, Bruce y Steve se quedan en silencio hasta que Clint intenta convencerse de que debió ser él quien muriera.

Nos ponemos manos a la obra, más tarde podrá haber un funeral, o tal vez dos.

Son casi las 3 de la tarde, cuando por fin está listo nuestra ventana de cambiar lo que pasó hace años.

Bruce es quien usa el guante, y justo cuando podemos alegrarnos por lo que conseguimos.

Todo colapsa gracias a un ataque.

No se cuanto tiempo pasa, pero cuando vuelvo en si, escucho los gritos de los demás por lo intercomunicadores, supongo que no mucho tiempo, pero el fuego y el agua ha hecho que todo esté lleno de humo.

No enfrentamos contra Thanos, llegan todos los demás y en un momento de ilusión quiero creer que tu aparecerás en unos de los portales, sin embargo nunca sucede.

La batalla se ve ganada cuando es Carol la que llega, sin embargo aún no es suficiente, pelea contra Thanos por el guante, y cuando este por fin logra quitarse a Carol de encima, es momento.

—Soy inevitable...— su chasquido es inútil, no hay poder, no hay cambio.

—Y... Yo... Soy... Ironman...— mi chasquido provoca un cambio instantáneo, tanto e nuestra batalla como en mi.

Mi corazón empieza a fallar, una vez por fin Thanos desaparece, yo me recuesto en un resto de construcción, Peter corre hacia mí e intenta alentarme a que no muera, Rodhey esta aquí y me sonríe, Pepper se sienta frente a mi.

—Ya puedes descansar Tony.

Sonrió y con ello se va mi último aliento, cuando la vida se va de mis ojos y se que mi alma se va de mi cuerpo, mientras observo a todos arrodillados.

—Es momento de irnos...

Tu voz suena y giro, y aunque se ateo, y conozca a la perfección la mitología nórdica, nunca creí que ascendería al Valhalla, sin embargo no son las bellas valkirias las que me llevan a ese destino.

Frente a mi, tu cuerpo se hace presente, de reojo veo como cada uno se levanta y es Steve quien carga mi cuerpo.

Los veo irse escuchando a la distancia el llorar de Pepper y de Peter.

—Tony...

Tu voz me regresa a mi nueva realidad, estas más cerca, subo mis brazos y tu rostro se hace realidad, ya no es como los sueños donde solo puedo traspasar tu sonrisa, ahora puedo nuevamente sentirla.

Besas mis manos mientras me jalas hacia a ti, nos fundimos en un abrazo, veo a strange hacer un portal para que todo puedan irse, más tarde arreglaran las cosas aquí.

Todos se van excepto, Valkiria o Brunnhilda, nos ve.

—¡Loki!.— el voltea al verla y yo también lo hago.— Thor manda saludos...

Tras eso ella se va, entrando rápido al portal, cerrándose tras ella.

Loki me mira y termina besándome.

Ya no siento que sean 157,766,400 segundos, sino 1 segundo.

Nota autor:

Hola mis adorables y siempre queridos lectores.

Ha pasado un enorme tiempo desde que volví a escribir, de hecho había dejado como concluida esta historia.

Pero he vuelto, he necesitado volver.

Me comen las ansias de saber que todos estén bien y a salvo en sus casas, que no falte ni uno solo aunque no sigan leyendo este libro.

De corazón les mando toda la fuerza que necesitan en esta cuarentena y lo que falte del 2020.

Proto daré mis razones del por qué me fui tanto tiempo, porque se las merecen.

Muchísimas gracias a quien siga aquí, y muchísimas gracias a quien ha decidido darle una oportunidad a mis escritos.

Os extraño un montón!