Capitulo 19: Descent into madness
Nos encontramos con nuestro querido blondo despidiéndose tanto de Sabrina como Chloe y Kim mientras que aún estaban ahí Nino y Luka.
—Bueno... ¿Y al final qué? — hablo en ese momento Luka que se encontraba junto con el moreno
Adrien solo dio una risita y este los vio para andar hacia ellos, un poco torpe por el dolor de caderas que tenía y se apoyó en los hombros de estos dos muchachos.
—Podéis quedaros aquí un rato más, iros arriba y cambiaos, me apetece pasear un rato con ustedes—
Adrien dio una dulce sonrisa para en eso besar la mejilla de Nino, los tres iban a irse a la habitación hasta que en eso se percató de reojo Nino de algo que lo dejaría muy sorprendido. Vio al padre de Adrien pasar en una sala que había.
Nino tomo a Adrien y se lo llevo a ver, ni le pregunto a Luka que se confundió por aquello y les siguió y vieron lo que estaba sucediendo.
— ¿No se había ido a una cosa de modelaje? — susurro Luka al darse cuenta de esto.
—Eso pensaba yo— hablo Adrien.
En eso los tres vieron que Gabriel intento tocar unas teclas de ese cuadro de la madre de Adrien y de pronto apareció una extraña trampilla como si fuera un ascensor de debajo que él y se fue.
—Oh no... esto no me da buenas vibras— hablo Nino mientras veía esto.
Cuando vieron que el hombre ya no estaba, los tres se acercaron y en eso el rubio se apoyó en el cuadro para empezar a revisar los botones.
—Id a por un miraculous, creo que necesitare ayuda— hablo el blondo. Nino y Luka solo le hicieron caso y se fueron.
Adrien empezó a ver por todos lados y en eso vio un extraño rotulador permanente y empezó a ver y recordar lo que vio, las teclas que toco su padre por lo que fue uno a uno y las marco con una cruz cada tesela del cuadro.
En eso Luka y Nino llegaron a allí, Luka llevaba en ese momento el miraculous del perro y Nino el miraculous del zorro.
—Vamos, no podemos quedarnos aquí— hablo Adrien con seriedad. Plagg también apareció y se apoyó en el hombro del rubio.
— ¡Plagg, garras fuera! — exclamo el de ojos verdes para en eso transformarse en Chat noir.
En eso el chico con los dos jóvenes empezó a pulsar las teselas en las que había pintado las cruces y en eso esa plataforma que se había llevado a Gabriel haciendo que los tres se bajasen a dirección a donde se debería de ir.
Mientras en el camino, tanto Nino como Luka se transformaron en Renard Picard y Wild-dog respectivamente y llegaron a ese lugar. Lo que vieron les revolvió el estómago y dejo en shock al blondo.
Estaba ahí un fenetro donde se podía ver a una mujer que Adrien reconocia a la perfección y allí delante estaba el villano que tanto daño había hecho a Paris, Shadow Moth.
Adrien empezó a encajar piezas en su cabeza y acabo dándose cuenta de quién era en realidad.
— ¡Hijo de puta! — exclamo con furia el blondo vestido de héroe.
Este en eso corrió y fue en contra de Shadow Moth, por lo que los otros dos héroes se fueron de irse en contra del villano, pegándole una patada al rostro de este.
—Inmovilizarlo— hablo con seriedad el blondo.
Tanto Wild-dog como Renard Picard agarraron en el suelo al hombre y en eso el muchacho felino se acercó muy furioso y procedió a darle un potente puñetazo al rostro al adulto, para seguido tomar ambos miraculous que poseía el hombre, destransformandose y viéndose que era Gabriel.
Chat noir en eso se levantó y en eso susurro.
—Garras fuera...—
Adrien se des transformó y vio a Gabriel ahí, su mirada se había vuelto de uno de un loco, de un loco maniaco, se agacho y a puño limpio decidió darle un potente puñetazo en el rostro a su padre
—Maldito bastardo... ¿Qué más has estado ocultándome? ¿¡Que tan vil puedes ser maldito hijo de puta!? — grito el blondo colérico para seguido de esto volver a meterle un fuerte puñetazo al rostro a su padre.
Se sentía su cólera hervir viendo a su padre, volvió a golpear el rostro con sus nudillos... volvió a golpear de nuevo, estaba iracundo.
— ¡Responde maldita sea! — grito Adrien para en eso agarrar la camiseta de Gabriel.
De los ojos de aquel chico salían lágrimas iracundas, estaba enfadado, estaba impotente...
—Adrien... Todo esto lo hice por tu madre, quiero los dos miraculous para recuperarla... Si no hubiera hecho eso tu madre todo sería normal— hablo con un poco de debilidad el hombre.
Cuando escucho esto Adrien, lo dejo en shock pero eso no le aclaraba absolutamente nada.
— ¿El qué hizo? ¡Responde! ¿¡Que hizo mamá para que le ocurriese eso!? — exclamo iracundo el rubio.
—Tu madre te quería tanto que no le importo crear a un nuevo tu para volver a ser feliz— hablo el hombre.
Adrien se levantó, estaba completamente asustado, enfadado, iracundo ¿Su existencia fue creada? ¿El acaso era un sentimonstruo? Sus padres... Sus padres eran unos monstruos.
—Wild-dog, deja tomarle el brazo que estas agarrando a mi padre— hablo el de ojos esmeraldas.
Wild-dog en eso tomo de la muñeca a Gabriel y Adrien le tomo el brazo para seguido hacerle una llave al brazo del adulto, se escuchó el brazo del adulto crujirse y al adulto Agreste pegando un grito de dolor.
—Renard Picard, ¿Puedes traer una cuerda? — pregunto con seriedad el blondo de ojos esmeralda.
El moreno se levantó de allí, siendo que Adrien cambiase y lo inmovilizase ahí en el suelo y el chico zorro se fuese a buscar lo que pidió el chico de ojos verdes.
—Cariño, tranquilo... Todo está bien, todo va a estar bien— hablo el chico perro intentando tranquilizar al muchacho de cabellos rubios.
Luka en eso se acercó a Adrien y lo beso dulcemente para tranquilizarlo, el blondo se intentó tranquilizarlo pero no le ayudaba a Adrien.
— ¿Y encima eres maricon? — hablo con furia aquel hombre al ver esto. Luka cuando escucho esto le pego una potente patada al adulto.
—Con él no es con el único hombre con el que me he acostado— simplemente respondió el blondo a su padre
Renard Picard volvió y tomo la cuerda para en eso estos tres apoyarlo en la baranda y atarlo con la cuerda y con esa misma cuerda amordazarlo.
—Subíos ustedes, yo subiré en nada— hablo con seriedad el chico de ojos verdes. Los dos muchachos solo le hicieron caso al blondo y se fueron.
Cuando se fueron, Adrien tomo el anillo de plata que en esos momentos tenía el adulto maniatado y se lo puso en el dedo índice izquierdo. Y de pronto el chico rompió a llorar, pero sus ojos mostraban algo aterrador, se había sumido en la locura y de pronto empezó a reírse como un maniaco que había perdido la cabeza porque... Al final se había convertido en eso.
—Oh padre... convertiré a ese infecto mundo en uno donde me quieran de verdad y donde ustedes, monstruos desdichados, no me hubieran creado, que mi existencia no estuviese encadenada a un objeto— hablo en lágrimas aquel muchacho que había pinchado ya su mente.
Este era el claro punto de que Adrien Agreste había perdido la cabeza. Tan solo le quedaba un miraculous, el que para el... Le iba a ser tan simple y por fin obtendría lo que tanto anhelaría.
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