KyungSoo llegó a su casa cuando todo ya estaba lo suficientemente claro, entró a su habitación y se encerró para dormir todo lo que pudiera antes de volver a ir a casa de los Park y continuar con las tutorías, esperaba de todo corazón que ChanYeol hablara para cancelar. Pero eso nunca pasó.

Cuando su alarma sonó, eran las 12:45 pm, tomó una ducha fría y rápidamente salió en su bicicleta.

Tocó la puerta de la casa a la que iba con tanta frecuencia y para su sorpresa, fue ChanYeol quien abrió, el chico tenía el cabello húmedo y tenía un pijama de Rilakkuma puesta. Sostenía una taza con una de sus manos.

—Hola KyungSoo— sonó un poco desanimado dejando pasar al chico.

—¿Estás bien?— preguntó divertido el menor entrando a la casa.

—Me estoy muriendo ¿Cómo puedes sobrevivir a eso?— quiso saber el más alto cerrando la puerta detrás del bajito.

—Porque yo nunca tomó en esos lugares ChanYeol— KyungSoo soltó una risa y caminó hasta las escaleras listo para ir hasta el cuarto de estudios, pero ChanYeol se quedó parado en la entrada que conducía a la cocina.

—¿No quieres comer algo? — preguntó el chico.

A decir verdad el menor si quería, después de sólo dormir y darse una ducha rápida, no tuvo el tiempo ni de tomar un vaso de leche, así que bajó las escaleras animado y bajo hasta la cocina, donde sorpresivamente ya había un par de platos de comida servidos en la pequeña mesita donde veces anteriores se sentaba a tomar té o leche con la madre de ChanYeol.

—¿Y tus padres?— KyungSoo se sentó frente a un plato de comida y espero por su amigo.

—Salieron a una comida de negocios— respondió el más alto sentándose frente al contrario, tomó sus cubiertos y comenzó a comer del plato. KyungSoo lo imitó y se quedó pensando un buen rato en la respuesta del chico, ¿Acaso era una comida en la escuela? ¿Era una comida con todos los profesores de la escuela?

No hablaron mientras comían, terminaron sus alimentos en total silencio y fue hasta que sus platos quedaron vacíos que las palabras volvieron a surgir entre los dos.

—ChanYeol— KyungSoo llamó al tutor para luego beber de su vaso de jugo de manzana.

—¿Si?— ChanYeol bebió de su taza que anteriormente llevaba.

—¡Sé lo que hiciste el verano pasado! — lo acuso el menor dejando el vasos sobre la mesa de manera dramática.

—¿Cómo sabes que fui a visitar a mi abuela a Irlanda?

—¿Qué?

—Sí, eso fue lo que hice el verano pasado, fui a visitar a mi abuela a Irlanda— respondió el chico alzándose de brazos.

—No me refería a eso. Yo... ¡Sé tú más oscuro secreto!

ChanYeol abrió los ojos enormemente y miró en todas direcciones, casi se atraganta con el líquido de su taza, comenzó a toser un poco y dando leves golpecitos sobre su pecho intentó volver a hablar.

—¡¿Cómo lo sabes?!

—Algún día iba a saberlo ChanYeol, no ibas a poder ocultarlo por siempre...

—P-pero... por favor no le digas a nadie, especialmente al entrenador, por favor no se lo digas o no me dejara entrenar.

—¿Tan grave es? — KyungSoo no creyó que el que tu padre fuera el director de la escuela donde estudias fuera a ser tan problemático.

—¡Claro que sí! Es contagioso.

—¿Qué?

—¡Mi pie de atleta! Ya estoy en tratamiento pero es un poco tardado, el doctor dijo que no puedo compartir nada con nadie.

KyungSoo comenzó a reírse escandalosamente al escuchar la revelación de su amigo. Ahora tenía dos premisas.

—Eso no tonto, tu otro secreto...

—No... — ChanYeol volvió a mirar en todas direcciones y trago grueso —de nuevo te pido que no le digas a nadie por favor. Por favor no se lo digas a nadie, especialmente a SeHun.

—Oh vamos... es mi mejor amigo, no puedo no decirle— finalmente ya había caído en cuenta de que hablaba.

—¡No puedes! ¿A ti te gustaría que fuera divulgando esa clase de secretos de ti? — ChanYeol bebió un poco más de su taza y miró al joven de manera sospechosa.

—No tengo esa clase de secretos... y si lo tuviera, me gustaría que toda la escuela se enterara, así sería inmune...

—¿Cómo puede convertirte en inmune a ti que a YiXing le guste SeHun?

—¡¿QUÉ?! — KyungSoo abrió los ojos exageradamente, eso nunca se lo hubiera esperado, ahora tenía tres premisas, mira que SeHun teniendo un admirador secreto como lo era aquel drogo alumno, parecía ser más premisa que la secreta identidad del padre de ChanYeol.

—¿No era eso? — ChanYeol se alarmó un poco al darse cuenta que había contado un secreto que no era de él.

—¡NO! Me refiero a...— KyungSoo se acercó a él y habló en voz baja —a... Al Señor Park.

Una vez más el más alto comenzó a tener la actitud de una persona que está siendo interrogada, la piel se le empalideció y comenzó a sudar frío, ahora sí que sabía a qué se estaba refiriendo el bajito.

—No le digas a nadie...

—¿Si estamos hablando de lo mismos esta vez?— preguntó KyungSoo alzando una ceja.

—De mi padre— ChanYeol colocó las manos sobre la mesa y puso una expresión más seria de lo normal.

—Si... y que es el director de la escuela— el bajito mostró una enorme sonrisa.

—Si...

—¿Qué tiene de malo?— se estaba preguntando él porque del repentino cambio de actitud del mayor.

—Es que no sabes lo que lidiar con eso— habló ChanYeol dado un ligero suspiro, se levantó de su lugar y comenzó a limpiar la mesa para dejar los trastos sucios en la tarja.

—¿Cómo es lidiar con eso?— quiso saber el menor tomando una galleta de la pequeña charola de postres sobre la mesa.

—Agobiante

—¿Tan malo es?— KyungSoo también se levantó de la silla y fue hasta a un lado de su amigo y colocó una de sus manos sobre su espalda.

—Si... de verdad agradecería mucho si no le dices a nadie, tienes que prometerlo— el mayor le dedicó una mirada seria, esas que solo solía utilizar cuando la situación era realmente importante.

—Uhm... si... lo ¿prometo? — respondió inseguro pues él tenía otras cosas en mente.

Ambos chicos subieron al cuarto de estudios y ChanYeol aún en pijama se dedicó a explicarle los temas de las clases con las que KyungSoo tenía más problemas; matemáticas y lenguas extranjeras.

—Tienes un buen acento— sonrió ChanYeol cuando escuchó a su pequeño amigo repetir la oración que recién había estructurado para su clase de inglés.

—No te burles, estúpido Park— KyungSoo se cayó al ver la sonrisa tan boba que había aparecido en el rostro del mayor.

—No me estoy burlando— ChanYeol frunció el entrecejo —y deja de insultarme a la menor provocación, es un halago.

KyungSoo también frunció el entrecejo y siguió escribiendo las demás oraciones de su tarea.

El menor de los dos estaba muy acostumbrado a hablarse así con sus amigos, pero al parecer al mayor le parecía inadecuado, KyungSoo no entendía como alguien de su edad podía tener actitudes tan anticuadas, así que mejor se limitó a terminar sus deberes sin hablar mucho con ChanYeol, de todas maneras sus tutorías estaban a punto de terminar, por el increíble plan que había ideado.

—Terminé— dijo el más bajito y le extendió el cuaderno a su amigo, el orejón lo tomó y reviso con cuidado cada ejercicio, asintió un par de veces con la cabeza y le devolvió el cuaderno.

—Muy bien.

—¿Ya me puedo ir? — KyungSoo guardó sus cosas en la pequeña mochila que siempre llevaba consigo a la casa del mayor.

—Sí, si quieres— de pronto todo se había hecho incómodo, pero no era culpa de ChanYeol que KyungSoo fuera tan malcriado y estuviera siempre a la defensiva.

—Pero antes... me gustaría proponerte algo— KyungSoo se puso de pie y quedó frente al más alto.

—¿Qué es?

—Dile a tu padre que olvide el caso de que estoy bajo advertencia— KyungSoo hablaba muy enserio con aquello.

—¿Qué le diga qué? — repitió el mayor mientras cruzaba sus piernas.

—Que le digas que se olvidé de todo mi historial en la escuela, que me quite las tutorías y que vuelva a ser un alumno como el resto, sin estar bajo la advertencia de perder el año o algo por el estilo.

—No puedo hacer eso, no soy yo el que decide esas cosas KyungSoo.

—Pero eres su hijo, seguramente te hará algo de caso, además hemos estado trabajando juntos todo este tiempo, seguro que te cree aún más. Tienes que decirle que deje de catalogarme como un chico problemas— insistía KyungSoo mirando fijamente al más alto.

—No puedo hacer eso, ya te lo dije— ChanYeol se levantó de su asiento para encarar al menor —Puedes dejar las tutorías si quieres, no es exactamente obligatorio, tú las pediste cuando te enteraste que ibas a perder el año. Puedes dejarlas cuando quieras, o incluso puedes cambiar de tutor si quieres.

—No, no quiero eso— KyungSoo negó con la cabeza repetidas veces haciendo una expresión divertida —sólo quiero que mi historial y si se puede el de SeHun y el LuHan, queden intactos. Borrón y cuenta nueva ¿Si?

—No, KyungSoo, lo que hicieron se quedará en sus expedientes, no puedo hacer nada al respecto.

—¡Es tu padre! ¡Tu papá es el director de la escuela! Algo debes poder hacer— el menor seguía aferrado a la idea.

—Pero una cosa es el director de la escuela y otra mi padre, son cuestiones diferentes y no puedo pedirle algo como eso— ChanYeol comenzaba a experimentar esa incomodidad que siempre llegaba cuando alguien se enteraba que era el intocable hijo del director.

—¡Por favor ChanYeol! Convéncelo— pedía el más bajito —convéncelo o... convéncelo o le diré a toda la escuela sobre él.

ChanYeol se sorprendió por la amenaza que el más chico estaba haciendo —pero lo prometiste...

—Yo no prometí nada— se cruzó de brazos y caminó hasta la puerta de la habitación, dispuesto a retrasar.

—No puedes hacer eso KyungSoo, somos amigos.

Se detuvo en la puerta al querer girar la perilla, volteó a ver al más alto y vio su expresión de preocupación. En verdad no quería decir aquello, pero necesitaba estar fuera del periodo de prueba, comenzaba a aburrirle fingir ser el chico estudioso que todo mundo esperaba que fuera, envidiaba a SeHun cuando le platicaba de las fiestas varias que se había perdido por estar metido en la casa de los Park haciendo tareas.

—Díselo y yo no diré nada.

KyungSoo salió del cuarto y bajó las escaleras rápidamente, salió de la casa y regreso a la propia con un montón de ideas en su cabeza, si ChanYeol no hacía nada al respecto de su historial académico iba a conocer al verdadero problemático Do KyungSoo.