—Mis padres salieron de viaje urgente— comentó el viernes durante el almuerzo a sus amigos.

KyungSoo dejó de comer cuando aquella oración se incrustó en su cerebro como el fusible de una gran idea. Volteó a ver a su gigante amigo con una sonrisa de oreja a oreja.

—Tienes que hacer una fiesta.

—¿Qué?— preguntó ChanYeol ante esa descabellada idea del menor.

—Tiene que estar como una experiencia en la vida de todo adolescente— comentó KyungSoo —hacer una fiesta cuando tus padres se van de viaje.

—Pero van a regresar.

—¡La fiesta no va a durar toda la vida ChanYeol! ¿Cuándo regresan?— quiso saber el menor mientras hacia planes mentales de lo que debían hacer para la fiesta.

—El domingo en la mañana— respondió el mayor inseguro.

—¡Tienes que hacer una fiesta!— se emocionó el bajito.

—¡Tienes que hacer una fiesta!— apoyó la noción JongDae —estamos en el último grado y nunca hemos ido a una fiesta los tres juntos, el año que entra ya no vamos a estar unidos ¡Es ahora o nunca, ChanYeol!

—¡Que sea ahora, que sea ahora!— animó YiXing golpeando sus cubiertos contra la mesa.

ChanYeol no estaba muy seguro de querer llevar a cabo ese plan, pero meditó las cosas un segundo. Era cierto, era su último año de escuela antes de entrar a la Universidad y ser un aburrido estudiante de leyes.

—De acuerdo— ChanYeol aceptó la propuesta y sus amigos celebraron la respuesta.

—¿Cuándo la hacemos?— quiso saber JongDae.

—Hoy mismo— inquirió el menor, todos voltearon a verlo —si la haces hoy, tienes todo el día de mañana para reponerte a ti y a la casa, así el domingo parecerá que nada pasó.

—Ahhh— hablaron al unísono los otros tres.

—Hoy después de tu partido, tienes que invitar a todos a la fiesta en tu casa— habló KyungSoo a su amigo.

—Está bien ¿Cómo lo hago? ¿Imprimo invitaciones?

—¡No!

—¿Lo anunciamos por el alta voz?

—No es mala idea... pero no, no queremos que los profesores le digan al director ¿O queremos eso?

—NO— respondieron los tres al mismo tiempo.

—Les dirás de manera natural "¡Fiesta en mi casa!" porque es obvio que van a ganar hoy.

—Hoy es partido amistoso.

—Es obvio que van a ganar hoy, ChanYeol— repitió el ojón.

—De acuerdo— sintió un nudo en el estómago y suspiró.

Al salir de clases, los cuatro chicos se fueron a la casa del más alto a preparar todas las cosas para la fiesta. Bajo la dirección de KyungSoo reunieron comida chatarra suficiente, grandes tazones con bebidas y escondieron todas las cosas de valor y que pudieran romperse fácilmente, le indicó a ChanYeol que cerrara con pestillo todas las habitaciones y pusiera una especie de trampa para que nadie subiera al piso de arriba. KyungSoo fue hasta su casa por un par de luces que servirían para alumbrar la fiesta, colocó los vasos de plástico y conectó el equipo de sonido en la sala de estar.

—Bien, chicos son las 5pm, debo ir al partido, se quedan en su casa— ChanYeol se colgó la mochila donde guardaba su uniforme y caminó hasta la entrada de la casa.

—¡Yo voy contigo! No confió mucho en tus habilidades de invitar a una fiesta— KyungSoo se levantó del escalón donde estaba sentado y fue con el mayor. Los dos salieron de casa y fueron a la escuela para el partido.

KyungSoo se sentó en la gradas, nunca había ido a ningún partido de ningún equipo, se sentía emocionado, toda esa gente gritando y charlando animadamente, ver el campo d futbol y el nombre del equipo en el tablero y se emocionó aún más cuando la banda de la escuela comenzó a tocar y las animadoras salieron a la cancha para motivar al público y al equipo.

—¡Vamos zorros! — gritaron todas las animadoras al mismo tiempo y a la par que la tribuna se levantaba para aplaudir y gritar, el equipo salió a la cancha, KyungSoo buscó con la mirada a su amigo, y por su altura no le fue difícil encontrarlo, lucía muy diferente con el uniforme puesto.

—Wow...— quedó impresionado por lo varonil que lucía el chico, solía verlo vestir de aquella manera anticuada y aburrida, pero ya había conocido su faceta de estilo más juvenil, ahora que lo veía en su etapa deportista, le gustaba demasiado lo que veía, se sentó en su lugar y puso atención al partido.

El juego se extendió pero finalmente terminó con la victoria del equipo de la escuela, todos celebraban el triunfo, el bajito saltó con cuidado a la cancha y caminó muy emocionado hasta donde el equipo estaba celebrando junto el entrenador y las porristas.

—¡Bien hecho!— animó el bajito dando unas palmadas sobre la espalda del jugador con el número 61 en su espalda.

—¡KyungSoo!— ChanYeol tenía el casco sostenido por la parte delantera, dedicándole una enorme sonrisa, estaba sudado y el cabello húmedo le caía sobre la frente, un par de gotas de sudor rodaron desde su frente hasta su barbilla y el menor se perdió en la imagen tan imponente de su amigo en ese uniforme.

—Este... la fiesta— recordó entonces él porque estaba ahí en primer lugar.

—¡Cierto!— levantó uno de sus dedos y se dirigió al resto del equipo —chicos vamos a una fiesta— pero el tono de voz del alto paso casi desapercibido entre tanta celebración.

Entonces KyungSoo tuvo que intervenir —¡FIESTA EN LA CASA DE CHANYEOL!— gritó el menor, todos voltearon a ver al mencionado quien asentía de manera nerviosa.

Todos celebraron aún más y se pusieron de acuerdo para llegar a la casa del chico aquel, el capitán del equipo de futbol ofreció a llevar de regreso a ChanYeol y KyungSoo a la casa, junto un grupito de porristas que no paraban de cuchichear en los asientos de atrás.

—Nunca habías dado una fiesta ¿Y ese giro en la trama, Park?

—Fue idea de KyungSoo— pensó que aquello era algo malo por lo que se deslindó de toda culpa.

—Bueno, al menos alguien si te hace cambiar de opinión— se burló el chico que conducía en su camionota hasta la dirección de la casa Park.

Llegaron y otro par de autos se les unieron, había al menos un par de docenas de personas fuera de la casa de ChanYeol, quien nervioso abrió la puerta de la casa dejando a todos entrar.

YiXing y JongDae ya habían apagado todas las luces y lo único que iluminaba ahí dentro eran las luces de fiesta que KyungSoo había llevado, cuando JongDae vio a la gente entrar, puso la música lo más alto que podía tolerarse y fue hasta donde sus otros dos amigos.

—¡Si trajeron gente!— se emocionó Chen.

—Claro que sí, pero aún falta un poco, haré un par de llamadas— KyungSoo se apartó unos minutos de ellos para llamar solo a un par de personas, personas que sabía invitarían a muchas otras personas que invitarían a otras tantas personas.

La gente comenzó a servirse de las bebidas, hablaban animadamente entre ellos y otros más bailaban por ahí. Parecía una fiesta tranquila y agradable. El ambiente le gustó al dueño de la casa así que se unió a la plática que estaban teniendo unos miembros del equipo de futbol, por su parte YiXing bailaba con gran entusiasmo en lo que parecía ser una batalla de baile y JongDae charlaba de manera coqueta con una de las porristas.

KyungSoo por su parte veía el ambiente desde la mesa donde habían puesto las bebidas, le parecía un ambiente agradable pero no era su estilo de fiesta, cuando escuchó el timbre, corrió a abrir y recibir a una horda de chicos que lucían bastante como él, con looks desalineados, algunos tatuados o con perforaciones, llegando con cajas de cervezas y botellas de alcohol.

—Llegamos— anunció un chico que lideraba a aquel pequeño grupito.

—Bienvenue— habló el bajito abriendo la puerta para dejar pasar a todos los nuevos invitados.

—Oh lalalá señor elegante.

Uno de los chicos que había llegado con el grupo fue hasta el aparato de sonido y conecto una pequeña tornamesa con la que comenzó a hacer mezclas de música, las melodías eran más animadas y un poco más ruidosas que la que antes tenían.

Otros chicos invitados de KyungSoo se esparcieron por la casa para charlar y bailar. Otros más fueron hasta la mesa donde tenían las bebidas para preparar sus propios cocteles.

—Ten— una de las chicas que recién había llegado, le extendió un pequeño frasquito con pastillas varias en su interior, KyungSoo sonrió al recibir aquello. Fue hasta la mesa de bebidas y tomó un par de vasos para servir uno de esos cocteles de muerte que tenían más de una bebida alcohólica y mucha azúcar. Echó el contenido de una capsula en cada vaso y caminó entre la gente hasta el anfitrión de la fiesta.

—Bebe algo— le extendió el vaso con una ligera sonrisa.

—¿Tiene alcohol?— preguntó ChanYeol en voz alta antes de recibir el vaso.

—Obviooo— KyungSoo rodó los ojos y bebió de su propio vaso.

ChanYeol de manera desconfiada aceptó el vaso y le dio apenas un sorbo, el problema con aquellas bebidas caseras era que el dulce sabor de frutas disfrazaba por completo cualquier indicio de sustancia ilegal en ella, así que bebió de su vaso sin mayor preocupación.

—¿Una galletita?— uno de los nuevos invitados se acercaba a todos los grupitos de amigos ofreciendo aquel aperitivo.

—Bueno— ChanYeol se levantó de hombros y tomó una de las galletas con chispas de chocolate.

KyungSoo comenzó a reírse al imaginarse desde ya como es que iba a terminar su amigo tras la carga de alcohol y drogas que acababa de hacerle consumir.

Y tal y como esperaba el bajito, la fiesta se animó más cuando ya todos hubieron probado de los pequeños regalos que sus invitados habían llevado, todos parecían estar alegres y parecían disfrutar más de la música, todos bailaban efusivamente y hablaban en voz muy alta.

KyungSoo finalmente se sintió en su ambiente y comenzó a mover su cuerpo al ritmo de la música, sosteniendo su vaso con una de sus manos y con la otra un cigarro que definitivamente de tabaco no era.

YiXing estaba observando las formas de una lámpara de lava con las pupilas bien dilatadas —Mágico... ¿Cómo ponen eso ahí dentro?

JongDae por su parte estaba contando anécdotas que nunca habían sucedido entre una risa que no podía controlar a un grupo de desconocidos —Y entonces caperucita le dijo al lobo "Cómeme esta"

ChanYeol estaba tirado sobre la alfombra de la sala de estar, estaba viendo el techo mientras se concentraba en la música que tocaba el DJ improvisado, el chico más alto sentía de pronto todo más nítido, sentía que escuchaba todo con mayor detenimiento y que todo iba en cámara lenta, veía a las personas bailar a su alrededor de manera lenta y sensual. Movió sus manos por la alfombra y cada milímetro de piel de sus palmas percibió cada una de las fibras de la tela. Giró su cabeza suavemente hacia el pasillo y entre el mar de gente que bailaba y se atravesaba en su camino, divisó al bajito bailando solo —K...y...u...n...g...s...o...o— deletreó el nombre de quien estaba observando, se levantó con lentitud y caminó tambaleándose hasta donde su amigo se encontraba.

—ChanYeol— lo saludó el menor agitando su palma en el aire.

—Otra vez... alguien... le puso... algo... a las bebidas...— ChanYeol hablaba pausadamente pues en su mente, estaba hablando muy rápido y quería que su pequeño amigo le entendiera.

—Lo... sé...— imitó a su grandulón tutor con una sonrisa enorme en los labios —¿Te... diviertes?

ChanYeol asintió con la cabeza mostrando sonrisa que reflejaba su estado de ánimo. La música seguía sonando, todos estaban muy animados, tan animados que todas las sensaciones de ChanYeol aterrizaron sobre el sonido de los platos estrellándose contra el suelo de la cocina. Corrió en dirección de aquel lugar, seguido de KyungSoo, ambos entraron a la cocina y vieron como un par de chicos estaba vaciando las alacenas y rompían platos y vasos mientras se reían.

—¡Hey!— ChanYeol fue a detenerlos pero sus cinco sentidos no estaban coordinados, por lo que le costó un poco de trabajo hacer que aquel par se detuviera. Luego escuchó como un cristal se rompía en la sala, ChanYeol corrió en aquella dirección y KyungSoo lo volvió a seguir.

Alguien había lanzado un libro por la ventana y el cristal estaba hecho trizas. Un par de chicos comenzaron a pelear de la nada, una parejita parecía estar teniendo relaciones sobre su sillón, alguien había derramado un tazón de bebida sobre la alfombra, ese chico que les había estado ofreciendo galletas jugaba a que encendía el librero de la sala. ChanYeol se alarmó, fue hasta el vestíbulo para asegurarse de que nadie había subido al segundo piso pero lo que se encontró fue un poco peor, uno de los miembros del equipo de futbol había llevado un balón y estaban jugando por toda la casa, con los tenis llenos de lodo del partido. Las porristas por alguna extraña razón habían estado ocupadas rayando las paredes con su lápiz labial y se podían leer frases como "ChanYeol ur so HOT" "Fck me" e incluso vio como YiXing había tomado una barra de chocolate y la restregaba contra la pared escribiendo "Te quiero dar, S..." y un rayón después de la S pues JongDae había llegado para salvarlo de su suicidio social.

ChanYeol quedó horrorizado por la jungla en la que se había convertido su casa, vio aún más horrorizado al capitán desnudo sobre las escaleras, seguramente se había quedado dormido y alguien o alguienes lo habían desvestido.

—Esto está fuera de control...

KyungSoo también vio todo aquello preocupado, sabía que nada iba a hacer que salieran de la casa de los Park, así que tomó su celular para llamar a las personas más capacitadas de terminar con una fiesta.

—De verdad... los necesito.

Le colgaron la llamada del otro lado y espero con todas sus fuerzas que fueran a atender su llamado, pues alguien había sacado un extintor de quien sabe dónde y estaba rociándolo por todo el lugar.