Me estaba cambiando lo mas rápido que podía, no quería que Cristopher entrara y me viera así.

decidí salir de la habitación,  quería despejar un poco mi mente de todo lo que me estaba pasando ahora.

 -princesa-dijo un guardia que estaba alado de la puerta

-me estaban vigilando?-

-emmm, no, es por su seguridad-

-ja claro-seguí caminado aun que el me estuviera siguiendo, quería conocer el enorme castillo que ahora era mi hogar.

-wow no pensé que saldrías-voltee a ver a Cristopher 

-pues ya ves que si-

-me alegro de que así sea- 

-puedes quitar a tus guardias?-

-solo cuando yo este contigo-

-no soy tu prisionera-

-es por si intentas huir-

-aggh no lo voy a hacer, pero que harías yo escapo a otro reino-

-te buscaría hasta por debajo de las piedras, pero no quiero pelear-

-bien-

-¿oye no quieres salir a una fiesta de gala esta noche?-

-no quiero estar es esas fiestas aburridas donde mujeres alzadas solo hablan de su dinero y sus tierras-

-ja, bueno ya somos 2-en ese momento se acerco a mi oído-yo me refiero a otras tipos de fiesta-dijo susurrando

-¡¿qué?!- dije muy sorprendida

-no pienses mal, ven-dijo agarrándome del brazo llevándome a una habitación

-Arturo un viejo amigo mío va a celebrar el primer año de su primer hijo, quiero que me acompañes para que no te aburras aquí, qué me dices??-

-¿qué es? un conde, noble-

-es un panadero-

-tu, el príncipe de garzonía, amigo de un panadero, no me lo esperaba-

-oye, por supuesto que si, es mi amigo hace mucho que me ayudo con unas cosas, no pensé que fueras una mujer selectiva,-

-no lo soy, pensé que eras un hombre que solo quería juntarse con la nobleza-

-pues ya viste que no, aun tenemos mucho de que hablar-

-si-

-¿y bien que me dices?-

-claro Cristopher, esa idea me gusta-

-vale, nos vamos dentro de una horas-  

(........)

Me estaba arreglando para la fiesta, simplemente me gustaba que no fuéramos a ver personas alzadas como son la mayoría de la realeza. me sorprendió mucho Cristopher, pensé que el era un hombre que solo le importaba las clases, pero ya veo que no, eso me agrada mas de el.

-puedo pasar?-dijo Cristopher tocando la puerta

-si- dije mientras terminaba de darme un último retoque

-wow te ves excelente-

-gracias, ya nos vamos-

-si, no tardaremos muchos-

-pues bien vamos, mi padre no sabe que voy a ir, mas bien no sabe que le sigo hablando a este Arturo-dijo Cristopher susurrando- técnicamente un rey no debería ir a estas cosas, ni un príncipe, ni nadie de la realeza 

-¿vamos a escapar?-

-técnicamente si, hay un caballo abajo nos vamos a ir en el-

-wow suena divertido-

-lo es- dijo agarrándome de la mano

-emmm por que me agarras la mano??-

-es para que no sospechen, le dije a mis guardias que nos dejaran solo-

-esta bien- 

-vale salgamos-el abrió la puerta viendo para ambos lados

-vamos-dijo agarrándome de la mano. caminábamos muy rápido por todos los pasillo para que nadie nos vieran, bajamos hasta los establos y estaba un caballo ya ensillado.

-wow ya lo tenias todo planeado-

-obvio, ven te ayudo a subir-enseguida me apoye de el y me subió, me da un poco de miedo los caballos

-bien voy yo-se subió con una facilidad que admire. se puso atrás de mi y sentía su respiración, su cuerpo muy cerca de mi

-bien agárrate-

-s...si-en seguida se puso en marcha saliendo del castillo lo mas rápido que se pudo.

Cuando llegamos encontré una casita sencilla, algo acogedora, y parecía que había una gran fiesta allí dentro.

-bien entremos-

-Cristopher-dije agarrando su ropa

-¿qué pasa?-

-tengo un poco de pena-

-ay por dios, te van a recibir con los brazos abierto, eres mi esposa-

-pero si no les caigo bien, por lo que veo son personas importantes para ti-

-eres una persona muy agradable, les caerás estupendo-

-bien, vamos-dije al momento que le agarre la mano, el me miro sorprendido

-es.... para disimular-

-ahhh vale-dijo agarrando mas fuerte. tocamos la puerta y un hombre alto, robusto, ojos cafés, agradable, nos abrió

-Cristopher, hermano-dijo abrazándolo con fuerza, después dirigió su mirada en mi

-señora un placer conocerla- dijo el señor haciendo una reverencia

-el placer es todo mío-

-vale entren están en su casa-

-quieres un poco de chocolate caliente?-dijo una mujer acercándose a mi

-si-dije amablemente. me encanta el chocolate, especialmente el que mi madre me preparaba en las noches de frio

-aquí esta, gusta algún pan-

-si se puede-

-por supuesto que se puede-

-vale, por que el rico olor del pan se huele hasta la cuadra-

-ahorita se lo traigo su majestad-

-ay por dios llame Leonor-

-jaja vale Leonor, muy lindo nombre por cierto- dijo el señor sonriendo muy amistosamente

Cristopher

-me alegro por tu primer hijo-

-yo también, ay es hermoso-

-seguramente-

-tu esposa es realmente agradable-

-si lo se, me gane la lotería con ella como esposa-

-si, pensé que seria una delicada como los de la realeza-

-hey-

-jajaja tu eres la excepción-

-lo sé, no soy tan delicado como dices que somos-

-oye espero que traigan al futuro príncipe pronto, seguramente ya están es eso-

-jajaja, digamos que si, nada me haría mas feliz que tener hijos con ella, seria la mejor cosa que me podría pasar-

-bueno pues pronto será, todo a su tiempo amigo mio-

es verdad, la idea de Leonor cargando a mi hijo en sus brazos me alegraba demasiado, realmente quería ver eso.

-este chocolate esta delicioso-

-gracias-

-y el pan esta realmente rico-

-es un honor que diga eso-

-el honor es mío por probar algo tan rico-

realmente la amo, ella simplemente es la mujer que mas amo en esta vida. El único problema es que ella no me ama a  mi, lo único que le causo es miedo, pánico, eso me destruía, esta pensando realmente dejarla ir, aun que eso sea el fin de mis días, pero solo debo ser paciente, ver qué nos tiene el destino preparado.