Cuando estaba en la escuela, cada mañana después de soñar con Harry siempre cerraba los ojos otra vez, fuertemente, intentando volver a capturar esos pequeños momentos en los que todo lo que deseaba se hacia realidad. ta vez al despertar no cerré los ojos de nuevo, no deseé volver a dormir a pesar de que estaba como todas esas mañanas, sola en mi cama.

Harry se habia ido pasadas las dos de la mañana, después de que yo me quedara dormida un poco después de "la segunda ronda", en realidad no hubo mucha separación entre las caricias de la primera vez y de la segunda, al recordarlo no podia contener la risita nerviosa y la sensación extraña entre mis piernas que se hacia cada vez más sensible.

Me habia despertado con su primer movimiento al desprenderse de nuestras piernas enlazadas pero no abrí los ojos. Dejé que él me acariciara la mejilla y se vistiera, que saliera del dormitorio y por un momento, dejé que mi mente volara.

Teníamos que hablar, eso era algo definitivo, pero mi último razonamiento la noche anterior habia sido que el Harry de carne y eso era mejor que una noche entera con el Harry de mis sueños.

Me levanté con la expectación bullendo como algo tangible debajo de mi piel, aunque no hice nada más que ducharme y preparar mis cosas para un domingo en la biblioteca.

Estaba a punto de salir cuando mi móvil sonó, debería de haberme parecido extraño de que Harry tuviera mi numero, pero sencillamente cuando escuché su voz no pensé en ello. Él dijo que teníamos que hablar y yo salí con el bolso y mis cuadernos a cuestas.

Llegué mucho antes de la hora prevista asi que traté de serenarme y pensar las cosas, me senté en una de las bancas a un costado de la entrada del edificio.

Me esforzaba por no verlo todo de un deslumbrante color rosa, a pesar de todo lo que i corazón pudiera sentir sabía que Harry y yo caminábamos por una línea muy delgada, prácticamente la noche anterior no habíamos dicho nada sustancial, era simplemente como si simplemente la bola de nieve por fin se hubiera estampado contra el bosque.

Aquella tensión, aquella atracción, los sentimientos no dichos nos habían explotado en la cara.

No me quejaba, habia agradecido no sé cuantas veces ya no haber estado con nadie más, a pesar de que sabía que de haber sucedido la experiencia con Logan no hubiera sido mala, no se comparaba a nada estar con la persona de tus sueños.

Estaba tan concentrada en mis pensamientos que no noté a Harry hasta que se sentó a mi lado. Respiré hondo y le sonrei algo nerviosa al mirarlo. Él desvió los ojos y justo en ese instante caí al suelo, me sentí como todas aquellos días en los que cerraba los ojos fuertemente deseando volver a los momentos felices y perfectos.

-No sé que decirte- comenzó mientras yo fruncía el ceño.

-Tú eres el que dijo que necesitábamos hablar- le dije más que nada porque no podia quedarme callada y permitir que el nudo en mi garganta se hiciera más grande.

-Ya basta (Tn) _______- dijo exasperado y puso los brazos contra sus rodillas, mirando hacia al frente-. Logan no va a entenderlo- dijo un momento después mientras yo me miraba las manos, quizás tuviera razón pero si le explicábamos, si estábamos juntos, si...

- Logan lo entenderá- le dije casi segura, habia conocido a Logan, a una parte de él que sabía que Harry jamás habia vislumbrado.

Quizás habría algo de enojo y orgullo herido pero Logan no me queria, no habia traicionado sus sentimientos, Logan lo comprendería... o eso esperaba.