Palabra: Crossover

Tiempo de la historia: AU (Universo Alterno)

Escritora: Autorasama

Desde las profundidades de un bosque en la oscuridad de la fría noche, muy alejado de un reino, en aquel lugar se podían escuchar los llantos de una bebé siendo cargada, cubierta solamente por un delgado manto, mientras una mujer cubierta por una capa se seguía adentrando al bosque hasta encontrar una torre.

Cabello corto y rubio platinado oios azules opacos,  el nombre de la mujer era Matilda la ex-reina de un reino en ruinas del cuál aquellos que lo derrocaron quieren a ambas muertas, madre e hija, la reina y la princesa, aquella pequeña era muy parecida a su madre así que si se quedaban en ese lugar tarde o temprano las atraparían acabando con la vida de ambas sin piedad.

Matilda: Aquí es, el lugar donde será tu nuevo hogar pequeña princesa.— Afirmó la dichosa mujer, mientras buscaba la entrada aquella torre.— Descuida estas a salvo.

Sus lágrimas de desconsolación por lo sucedido fueron secadas luego de escuchar la risa de la pequeña que yacía cubierta con una débil manta de tela fina, aún así la infante con su inocente risa animo a su madre para continuar.

Matilda: Descuida Anna, Mamá te cuidará hasta que sea seguro salir, hasta entonces,— La mujer alzó a la infante levemente mientras giraba.— Se una buena niña, ¿si?

^^^

Los años pasaron volando, la torre fue arreglada por la propia madre aunque costo muchos escapes al exterior que fue prohibido para la niña que creció mirando por la ventana como su madre se iba por varias horas.

Fue costumbre dejarla más de un día, cosa que no era nada para Anna, que por cada año que pasaba su cabello crecía más y más.

Hasta llegar a los actuales años, número 18 de la rubia de cabello lacio y largo que media 21 metros, nunca se corto el cabello por que mientras su madre iba recolectando información para mantener la torre segura se usaba una puerta pero esta fue cubierta por rocas cuando el cabello de Anna llego a una altura que solo se necesitaba una palanca externa en la ventana para que no duela.

Cuando la madre usa el apoyo del cabello de su hija para bajar o subir.

Anna tenía gran fuerza en los brazos y en su cuello por semejante caballera que siempre anda jalando por todo lo que conoce como casa.

Anna: Increíble tal vez deba considerar pedirle una mascota a mamá.— La joven normalmente solía hablar en voz alta no hay pena por que literal no hay nadie cerca, podía hacer lo que quiera.— Pero...¿se podría? según este libro necesitan un espacio grande...

Estuvo estirando mientras de paso cepillaba su larga cabellera al compas de su propio tarareo, era una canción que de alguna manera le sonaba nostálgica pero de alguna manera le era raro ya que toda su vida estuvo encerrada.

Solo conocía las canciones que su madre, cuando esta distraída impulsivamente comienza a cantar.

“Estoy de regreso” era un grito de alegría por parte de la madre hizo que la rubia que vestía un sencillo vestido color verde aguamarina asomarse por la ventana, para ver a su madre quitándose su capucha mientras la saludaba mostrando su canasta llena de comida.

Anna: Bienvenida, ahora tiro mi cabello mamá ¡espérame tantito! —Normalmente lo hacia parada pero por como la chica creció, más de lo que pensó su madre, para evitar problemas en el cuello la joven buscaba una silla mientras usaba una almohada para apretar su cuello, cómodo y sin consecuencias.— ¡Ahí va!

Matilda: Muchas gracias Anna, ¿como estas, no te dolió el cuello? — La joven negó contenta de ver a su madre, tanto así que la abrazo.— Lamento a ver estado fuera dos días, te traje varias cosas que te alegraran, no me iré hasta mañana al medio día.

Pudieron jugar ajedrez, hacer varias actividades y aunque sea algo aniñado a Anna le encantaba que su madre le leyera cuentos de cualquier tipo, quisiera escuchar la voz de su madre antes de dormir por que sabe que se volverá a ir y sabe que es por su bien por eso tiene miedo a que su madre no regrese, sabe que corren riesgos más no sabe su origen.

^^^

El reino que por derecho le pertenecía a Anna fue tomada por un reino vecino que luego de derrocar al Rey el difunto padre que la chica no podrá recordar, el poder fue pasado a una familia de la nobleza leales al reino que mando a matar la reina y princesa

Qué gran coincidencia que descendiente para ser exactos el hijo de aquella familia noble que tomo el control del reino que por derecho y justicia le pertenece a Anna.

En ese entonces solo era un infante de dos años, cabello rebelde color azabache, ojos grises el cual tenía memoria desde que era un bebé, inclusive fue testigo del escape de la ex-reina junto al bebé que para ese entonces era la única charla creyendo que el menor nunca lo recordaría por tener solo 2 años.

Ray ese era el nombre del actual príncipe heredero con 20 el cual es considerado un total rebelde por el echo de que siempre esta escapando de su cuarto, del castillo y deambulando por el reino y hasta las afueras montado en su fiel caballo color negro cual su cabello por negarse a casarse para asumir al trono pertenece a alguien más...

— ¿¡Por que demonios me estas siguiendo antena?!— Renegó el muchacho. — Se supone que tu eres una princesa compórtate como tal.— El ruido desde la copa de un árbol lo hizo gruñir de frustración. — ¡Antena, suéltalo, ahora!

Luego de afirmar eso un suspiro resignado se escucho y un joven de cabellera blanca cayó al suelo seguido de el asomó de una chica de cabello corto de color naranja, los nombre de ambos era Emma la princesa de un reino lejano que renuncio al trono de su reino para vivir en el reino de Ray como una noble, aparte por que lo apoya en su misión ya que es su mejor amiga , y el otro chico se llamaba Norman.

Ray: se nota que tu familia no tiene arrepentimientos ¿no Norman? — Recalco el azabache mientras le pasaba una cantimplora a su amiga en el árbol.— Me sigo preguntando ¿por que nos sigues siguiendo? por tu culpa debemos volver siempre antes de la noche.

Norman: Pues disculpa príncipe "no quiero lo que no es mío" solo me arrepentiré cuando la vea con mis propios ojos ya que yo no tengo la culpa ¡tenía 2 años! ¿crees que le mande a mi abuelo a acabar con el rey?

Emma: No vayan a pelear.— La chica de un salto aterrizo en el suelo parada con los brazos llenos de manzanas.— Ya tenemos.ñ comida para nuestros caballos, Norman ya está atardeciendo ¿por que no mejor regresas?

Norman: No me agrada la idea de dejarlos a ambos solos... —Se cruzo de brazo ante la mirada extraña de sus amigos. — Ray seria capaz de dejarte abandonada en medio del bosque o viceversa y nos meteremos todos en problemas.— Contesto luego nervioso.

Ray tuvo que a la fuerza regresar al lado de sus mejores amigos, por que el principito blanco no aguantaría una noche en el frío bosque.

Ray: Son unos fastidiosos, aunque me moleste por que Emma siempre me sigue es más útil que tú Norman, despierta serás un Rey, hasta tu abuelo que fue albino toda su vida tuvo valor y pudo matar a alguien, tu hasta necesitarías a alguien que mate a un mosquito.

Norman: ¡ya, cállate!

El azabache estaba frustrado regresar solo significa un regaño de su madre y ya estaba cansado así que viendo como sus amigos se adelantaban hablando el decidió cortar las riendas de los caballos de sus amigos para montar su caballo e irse.

Fue tan rápido que ni Emma pudo seguirlo.

Emma: ¿Ahora que le diré a su mamá? literal mi estancia en su reino depende de mi amistad con Ray.— Miró a Norman que estaba aferrado a su caballo.— ¿En serio? necesitas clases de autodefensa, andando Norman, regresemos, Ray estará bien.

^^^

Anna: Adiós Mamá nos vemos mañana, por favor cuídate ¡y mucho! — Le recalcó la jovencita mientras estaba recogiendo su cabello.— Por favor.... vuelve.

Esa era su rutina siempre desear que su madre regresara a salvo luego de eso y recoger su cabello continuaría a leer un nuevo libro que su madre le compro, permaneció de esa manera hasta el momento en que comenzó a llover, era tarde y le preocupaba su madre ya que esta no traía nada con el cual protegerse de la lluvia.

Anna: Ojalá se encuentre bien.— Mirando desde la seguridad de su torre el torrencial de lluvia caer.— Es refrescante el tan solo sacar mis dedos....Quisiera poder sentir la lluvia en todo mi cuerpo y pasear afuera. — intiendo como la lluvia paraba lentamente aun con la mano afuera negó muchas veces con la cabeza.— No, mamá hace lo imposible con tal de mantenerme a salvo no podría hacer eso.

Con el libro en su otra mano que era una especie de historia que relataba sobre una princesa desaparecida de su reino que vivía como plebeya, historias como esa la hacían suspirar de alegría ya que explicaban la vida normal de la gente así sentía que pertenecía a algún lado.

Anna: Sería asombroso vivir una vida como esta hermosa historia...lastima que es falsa. — Sintió que la lluvia paso y estaba por retirar totalmente su mano de la ventana cuando algo la sujeto y arrastro.

Claro que la joven soltó un grito cuando por el peso de quien se a que la sujetara la obligo a golpear su cuerpo desde la parte del abdomen para abajo contra la pared en donde con su otra mano se aferro al marco de su ventana cerrando sus ojos haciendo fuerza para soltarse.

— Finalmente.... — La respiración agitada de alguien la hizo abrir sus ojos de golpe asustada pero confundida por el tono que uso, era uno de alivio, lo contrario a que alguien que trata de dañar a alguien haría.— Logre encontrarte...

Una sonrisa, el cuerpo de aquel sujeto de ojos grises estaba todo lleno de agua debido a la lluvia su cabello que yacía lacio y partido hacía que la rubia de larga cabellera pudiera ver ambos ojos del sujeto, era el primer chico que veía en su vida y no parecía ser de edad tan avanzada a la suya solo seria una diferencia de pocos años, su apariencia, buen vestir, aquella aliviada sonrisa y aquellas palabras, la rubia giro a ver su libro que soltó para volver a ver al chico con gran prisa mientras su cara se tornaba roja.

Sus palabras antes de que este chico entrara parecían ser salidas del mismo libro y así de nerviosa al sentir el chico ahora subiendo su mano por el brazo de la rubia ella tiro con fuerza hacía adentro de la torre y como recordemos ella tiene fuerza en el brazo lo que causo que literal el sujeto extraño acabara cayendo al suelo.

Anna: Esto no puede estar pasando, esto no puede estar pasando.—Comenzó a caminar en círculos aferrada al libro mirando al extraño levantarse.— ¿cómo? ¿cómo llegaste hasta aquí? ¿por qué?

Se presento como Ray afirmando ser solo un chico que su propósito tenía que ver con el encontrar a un mujer y a su hija para regresarlas a salvo a donde pertenecen, otro motivo del cual la jovencita rubia Anna estaba sentada siendo envuelta por su larga cabellera como si fuera una caracola.

Ray: El nombre de tu madre es Matilda y tu eres Anna ¿cierto?— La rubia solo permaneció callada envuelta en su propio cabello, solo dejando ver sus ojos. — Por tu apariencia y modo de actuar como alguien que nunca se relaciono socialmente con alguien.— Explicó. “ Y pensar que lo único que necesitaba era alejarme de Emma y Norman” — Pensó.

— Tenemos mucho de que hablar

La rubia solo pudo sonrojarse en el momento en que el chico le dijo que la protegería si iba con el, que tendrían un trato y fuera de eso la rubia ya no podía escuchar más de lo centrada que estaba en su mente disculpándose con su madre por ser tan débil al caer ante el encanto de la historia que ante sus ojos se hacía real.

N/A:  De seguro algunos pensaron en Nat camaleón no? pues me dio pena por que si es animal no hablara así que no habrá ni camaleón ni Nat... Lo siento.

¡Espero que les haya gustado este sexto día!