Palabra: Cita en el café

Tiempo de la historia: AU (universo alterno)

N/A: Insinuaciones al ship NorEmma y RayAnna.

Escritora: Eli_lxz_

Un azabache, llamado Ray, de 21 años, se encontraba firmando su entrada primera hora del día (7 de la mañana) en su puesto de trabajo para luego irse a ponerse el uniforme y el mandil del lugar.

El lugar era una cafetería, una dónde era muy buena en cuanto a calidad y atención al cliente, se le podría considerar una de las mejores de la ciudad por lo que varias personas iban a menudo ya sea por un simple café mañanero o comer postres por la tarde.

La verdad a él no le gustaba ser mesero pero por sus necesidades las cuales era comprarse una moto lineal le motivaba a seguir dando lo mejor en su puesto.

Ni menos terminó de alistarse una chica peli naranja, de nombre Emma, entró a la habitación de empleados y lo llevó afuera.

Emma.- Es sábado y hay muchas personas, vamos tenemos que atender- Lo dejó y fue hacia la caja registradora para empezar a atender a aquellos que pedían para llevar.

Ray.- ¡Lo sé lo sé! No era necesario que me traigas, yo mismo iba a venir -Reclamó con molestia hasta que intervino su otro amigo, de cabellos blancos y ojos azules.

Norman.- En vez de reclamar mejor anda a tomar los pedidos, se te va a acumular gente.

Ray ya ni quiso responder y fue junto con su bandeja donde encima llevaba paquetes de servilletas para aquellos quienes se sentaban en las mesas.

Ese día podría haber sido aburrido como cualquiera, pues realmente no pasaba nada interesante aparte de atender órdenes, limpiar las mesas y también el suelo de vez en cuando, dar la cuenta y ver como se iban las personas para luego llegar otras, hasta que hubo algo que ni Emma ni Norman habían presenciado.

A las 10 de la mañana llegó a una joven rubia de ojos celestes con una mirada baja y algo triste, llevaba un maletín colgado en uno de sus hombros y libros sostenidos por sus brazos, y se sentó en una mesa.

Emma.- Oh pobre chica ,parece que es de la universidad ,sus libros tienen el escudo de allí ,ese lugar le exige mucho a sus alumnos y puede llegar a ser mucho para ellos - Le decía a Ray y Norman quien la prestaba atención.

Ray le importa poco, y aunque suene duro era la verdad, así que sin más fue con un paquete de servilletas hacia aquella chica y lo puso en la mesa.

Ray.- Buenos días ¿Qué desea para tomar o comer?

- Por favor solo un café- Pidió de forma amable pero se le notaba el desánimo que tenía.

Ray.- Enseguida -Volteó y se fue.

Como era un simple café fue preparado rápido y al entregarlo ella se lo tomó en un instante, como si no necesitara.

Emma.- A esa chica le puede dar un choque si se toma el café tan bruscamente - Se dijo a si misma mientras veía como aquella dejó la taza a un lado y empezó a leer sus libros.

No saben cuánto tiempo pasó cuando Ray luego de estar ocupado atendiendo a otros, notó al voltear a la mesa de la rubia y ver qué había dormido apoyando su cabeza y brazos enrollado este, sobre sus libros, al parecer el café no fue lo suficientemente concentrado para anular su cansancio o sueño.

Pero no la despertó, supuso que era mejor que esté allí y se despierte por sus propios medios, total, solo quería que cuando ella se vaya le entregué el dinero por el café.

Pasando más de una hora, Emma estaba limpiando las mesas hasta que de un susto por parte de la chica rubia quien se levantó de golpe de la mesa dando un pequeño gritó.

-¡Me quedé dormida! oh dios no... -Miró su reloj de mano.

Emma.- ¿Se encuentra bien?- Se acercó a la ojiazul que recogía sus libros.

- Debí irme hace 30 minutos, acabo de perder la mitad de mi clase -lágrimas abundaban en sus ojos y sacó de su bolsillo dinero -perdone la molestia, gracias por la atención -Ni menos lo dejó en la mesa se fue corriendo.

Emma.- ¡Espera, tu cambio falta!- quiso decirle pero ella ya se había ido.

Ray quien llegó al lugar de las mesas pues se había ido al baño, se quedó algo confundido.

Ray.- ¿Qué acaba de pasar?

Emma.- A veces los clientes llevan una vida difícil- Contestó y se encogió de hombros

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Al día siguiente Emma esperó a la joven con el dinero que ella se había olvidado recoger, ya era como las 7 de la tarde y como la gente cada vez más disminuía así que pensó que no volvería.

Hasta que la ojiazul apareció unos minutos antes de cerrar la tienda.

-Hola ¿Aún siguen atendiendo?- preguntó con voz baja y evitando hacer contacto visual con la peli naranja.

Emma.- Si, adelante. - Aquella de sentó. -¡Ray atiende!

Ray.- ¡Esta bien pero no grites!- Salió de la cocina y vio a la rubia. -"Es la misma chica"- Pensó al acercarse. -Buenas tardes ¿Desea algo para beber o comer?

-S-Solo quiero un café, de nuevo- murmuró lo último con la cabeza agachada.

Ray.- Enseguida.

Cuando el azabache volvió a la parte donde le daban los pedidos Emma le entregó un dinero.

Emma.- Cuando le entregues su pedido le das esto, se olvidó ayer por lo apresurada que estaba.

Ray asintió sin preguntar, poniéndolo en su bolsillo de la camisa para que no se le pierda.

Pasando los minutos cuando el café estaba listo lo puso encima de su bandeja y lo llevó.

Ray.- Aquí está. - llamó la atención de aquella chica que al parecer leía un libro y puso la taza en la mesa para luego irse.

-Gracias... - agradeció sin verlo a los ojos y tomar el café.

Ray se fue pero a los pocos instantes recordó lo del dinero, dio media vuelta y volvió hacia ella.

Ray.- Oye se te olvidó ayer es...- Se quedó callado al ver como la ojiazul levantó la mirada y notar que estaba llorando, sus lágrimas hacían una cascada en sus mejillas terminando al inicio de su cuello.

- O-Oh lo siento... - Se limpió con su abrigo sus lágrimas y tomó el dinero con rapidez. - Muchas gracias. - Bajó la mirada a la mesa como si estuviera avergonzada de verla llorando.

Ray esta vez sí se sintió mal, sabía que la universidad es una presión y estrés que saca tus mayores debilidades pero el hecho de llegar a llorar por eso, no lo creía, aunque también pensaba que podría tratarse de problemas en su vida personal, sin embargo el mismo se sorprendió cuando de su boca preguntó.

Ray.- ¿Por qué estás llorando? ¿Te ocurrió algo?- Hablo seriamente pero se notaba una diminuta preocupación. -"¿¡Por qué acabo de preguntar eso!?"

- Bueno... Cosas de la universidad realmente, tengo una presión horrible pues estoy en riesgo de desaprobar el año. -rompió en llano y se tapó la cara con sus manos. - perdón si lloro, dios... soy una tonta, por favor no te burles...

Ray.- Claro que no, no soy alguien para estar criticándote o burlarme de ti, está bien si lloras, es tu forma de desahogo.

"Que acabo de decir, solo le hubiera dicho que 'no lo iba ni voy a hacer' para luego irme."- pensó en sus adentros.

- Sé que no te conozco de nada pero ¿Permites que te cuente mis problemas? No tengo a nadie con quien hablar y eres única persona que me ha comprendido un poco, aparte de la chica de cabello naranja pero ella ahora mismo parece ocupada conversando con otro personal, pero si no quieres no hay problema, tienes todo el derecho de rechazarme.

El azabache lo pensó mucho, miró como dos veces a Emma quien le hacía señas que estaba ocupada por lo que nos tuvo más remedio.

Ray.- Está bien, te escucho pero no creas que te daré consejos, no soy muy bueno para darlos sinceramente...

- No importa con eso, mil gracias por aceptar y escuchar, siéntate si deseas- Le invitó a la silla del frente de ella mesa y el contrario hizo caso - Si te aburres pararé de inmediato, dime con la verdad cualquier incomodidad, por cierto, me llamo Anna, un gusto. -Extendió su mano en forma de saludo con una pequeña sonrisa.

Ray.- Soy Ray -aceptó y estrecharon ambas manos por unos segundos hasta que se soltaron y él me prestó atención.

Al principio creyó que sería algo aburrido escuchar la conversación de alguien, más si era de su vida pero al analizar la situación, las experiencias de Anna eran casi en un punto dramático.

Contó que había pensado que la universidad no sería tan difícil en entrar y estudiar dentro pero cuando ni menos pasó, sus estudios fueron un completo estrés para ella, quiso aliviar con ello pero comenzaron problemas en su familia donde ya no había con qué dinero pagar la mensualidad para que siga ,debía mucho a la universidad por lo que cada día que llegaba al campus le presionaban a que debía pagar y constantemente era molestada por las alumnas, de allí vino el problema del día anterior, debía entregar una tesis pero de su mochila que lo había dejado en el salón por un tiempo ,al querer darlo no lo encontraba, mientras que a una esquina un grupo de chicas reían a sus espaldas, quiso reclamar pero los profesores no lo hicieron caso , quedándose sin la nota que era sus últimas oportunidades de poder pasar el año, así que solo lo que podría mejorar su situación era el examen que había tomado hoy, pero la entregarlo se puso en duda sus resultados, llegando a un punto de miedo y pánico, por ver el resultado que sería en 2 semanas.

Ray.- ¿Tantos problemas hay en tu hogar para que descuides tus estudios?

Anna.-Es que mis padres no son buenos que digamos, y no me prestan atención así que debo hacerme cargo por mí misma pero no llego a tener el dinero suficiente apresar de que trabajo en las noches hasta fines de semana -contestó mirando su café y girando su cuchara dentro en círculos.- ¿Tu estudias en alguna universidad?

Ray.- No, quiero dedicarme a la fotografía aunque suene malo pero me gusta.

Anna.- No suena para nada malo, es un oficio muy bonito ¿Entonces estudias en una academia o algo así dónde te enseñen a perfeccionar esas cosas?

Ray.- Aún no, prefiero trabajar por ahora, tener dinero y comenzar con eso, por ahora estoy bien teniendo trabajos así.

Anna.- Tú si tienes tiempo para poder aprender lo que te gusta, en cambio la carrera que elegí debo esforzarme desde ahora, pero estoy tirando a la basura todo mi esfuerzo que no llega a servir para nada.

Ray.- No digas eso, no te conozco pero según lo que he escuchado te has esmerado por conseguir llevar el ritmo aunque no es suficiente seguro podrás hacer más adelante, si logras pasar el año podrás demostrar que pudiste a todo pero si repites de año igualmente puedes también demostrar que puedes vencer todo.

Anna.- Es que tengo tantos obstáculos que me tropiezo cuando quiero comenzar a mejorar.

Ray.- Tienes que aprender a separar esos obstáculos de tu camino en la universidad, suena difícil pero nunca podrás salir adelante si mezclas problemas en algo importante.

Anna.- ¿Y cómo haré eso?

Ray.- La verdad no sé...- a la ojiazul se le escapó una risa y por fin se la pudo ver con una sonrisa -Lo que dices que sufres abuso en la universidad intenta darles frente, pero también hay la posibilidad de que te maltraten así que no te recomiendo eso pero la única solución es decirle a los directivos.

Anna.- Traté una vez pero no me hicieron caso porque esas chicas son unos angelitos frente a ellos, pero como dices tengo que aliviar con eso, acostumbrarme, eso me queda.

Ray.- Pero no dejarte, ten en claro eso.- La rubia asintió.- Con lo de tus problemas familiares igual, separa esos malos momentos cuando estés en tu universidad y concéntrate en lo tuyo, los del dinero tampoco lo sé, intenta ganarte una beca ¿Existe eso allí?

Anna.- Si pero eso son para los que tienen excelentes notas y esfuerzos.

Ray.- Entonces no creo que te lo den, pero trata con tu trabajo pagar hasta que puedas ir a otro empleo que llegue a cubrir todo, eso es todo lo que puedo decir.

Anna.- Oh vaya, me has dado consejos muy útiles que parece que son los más claros pero recién los puedo pensar como una solución, muchas gracias aunque antes dijiste que no sabías dar consejo.-rio de nuevo.

Ray se avergonzó y se paró de su asiento.

Ray.- Si no hay nada más, me retiro, fue entretenido hablar contigo.

Anna.- Igualmente- Tomó con rapidez de lo que quedaba de su café y también se paró. - Toma, la paga por el café, adiós.- Le dio en su mano el dinero

Ray.- Si, claro. -lo metió en el bolsillo de su mandil -nos vemos

Él vio como se iba la rubia y de la nada alguien le golpeó en el hombro.

Emma.- Intentando conquistar una chica en el trabajo es algo estratégico, Ray. -Habló de forma burlona y el nombrado se molestó.

Ray.- ¡Solo hablé con ella!

Emma.- Si, como digas, como si fuera tan fácil hablar ti, tú no eres de aceptar tener una charla con alguien, aquí hay algo.

Él solo rodó los ojos para luego comenzar a cerrar la tienda pues ya el tiempo de atención había terminado.

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Ray pensó que sería la última vez que la vería pues al siguiente Anna no fue, ni a la siguiente, ni a la otra hasta que pasó dos semanas.

Está de lo más tranquilo atendiendo hasta que la chica rubia entró a la tienda, se le notaba nerviosa.

Anna.-Hola Ray- se acercó al chico quien al dejar el pedido de una persona, se acercó a ella.

Ray.- Hola hace un tiempo que no te veo.

Anna.- Si bueno... traté de hacer tus consejos estos días y realmente me ha ido bien, mejoré mis participaciones y desempeño. Muchas gracias. Y también hoy es el día en el que serán publicadas las notas del examen que te comenté, entonces te quería pedir si podríamos ir juntos a la universidad donde habrá un muro donde pondrán los apellidos de los aprobados ¿Te gustaría?

Ray.-Lo siento pero ahora estoy en horario de trabajo, no puedo sa...

Emma.- No te preocupes Ray, tu ve que yo puedo cubrirte.- El azabache volteó hacia ella y la miró con ojos serios.

Ray.- ¿Y quién se hará cargo de tu puesto?

Norman.- Yo, en la cocina hay varios ayudantes donde puedo faltar sin hacer diferencia, no tienes por qué te, podemos encargarnos nosotros.

Ray.- "Estos dos seguramente están haciendo eso para molestarme"-pensó para luego volver a ver a Anna que esperaba una respuesta- como acabas de oír ya estoy libre, podemos ir, pero no mucho tiempo, una vez los dejé solos a cargo de la tienda y hubo una revolución por parte de los clientes.

Anna le hizo gracia lo último y comenzó a reírse de forma que Ray consideraba adorable y bastante tierno.

Luego de que Ray se haya quitado el mandil del trabajo y se haya puesto un suéter para que no se le vea el uniforme de mesero, fueron hacia la universidad que quedaba a 10 minutos de la tienda.

En el trayecto los dos comenzaron a hablar de cómo podría quedar la ojiazul, el chico intentaba animarla pero solo hacía que ella se pusiera más nerviosa, sin embargo le hizo hacer que confíe en sí misma.

Al llegar había un montón de personas, todas dirigiéndose al mismo sitio donde había un gran papel pegado en una pared donde se encontraba muchos nombres y apellidos junto con un título la parte superior "Estudiantes aprobados"

Anna.-Allí está -Señaló y el azabache se quedó atrás. -¿No vienes?

Ray.- Mejor te espero, no quiero incomodar a los alumnos estando en un espacio que puedo dejar libre.

Anna asintió y fue hacia la pared a leer.

Pasaron bastantes minutos, y ella seguía sin aparecer a donde estaba el chico, él ya empezaba a preocuparse, tal vez no encontraba su nombre pero trató de calmarse hasta que la ojiazul salió entre con una cara neutra.

Ray.- ¿Y bien? ¿Aprobaste?

Anna.- N-No...- Miró abajo y comenzó a sollozar. -no encuentro mi nombre ni apellido.

Ray definitivamente se sintió mal por ella quien sus manos taparon su rostro hasta que la abrazó protectoramente contra su torso.

Ray.- Yo lo siento mucho, en realidad pensé que ibas a pasar.

Anna.- Supongo que es mi merecido, tendré que empezar otra vez el próximo año -decía mientras su voz que quebraba y lloraba más fuerte.

Ray.- Tengo que volver a la cafetería pero allí te podría invitar un poco de pastel para que te calmes ¿Vamos?

La rubia se separó un poco para verlo a los ojos y asintió.

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Llegando a la cafetería Emma le iba a preguntar a Anna porque estaba con lágrimas pero Ray la hizo callar diciendo que luego le explicaría así que solo le quedó esperar y ver como aquella se sentaba en una mesa tratando de calmar sus lamentos.

Emma.- Ohh entiendo -comentó a la explicación de Ray - ¿Es necesario repetir año entero? ¿No puede haber una recuperación?

Ray.- Por lo que me comentó ella, es muy exigente la universidad así que no, debe iniciar desde marzo.

Emma.-Pobre de ella, no merecía haber estado en esta situación.

Ray.- Pienso lo mismo, pero intentaré subirle el ánimo -miró a Emma quien lo miraba con una sonrisa traviesa -¿Qué pasa?

Emma.- Das mucho apoyo eh Ray.-dijo sarcásticamente y rio.

Ray.- ¡Solo trato de ayudar, aunque es las primeras personas que a la que la tengo tanta importancia, solo me preocupo!

Emma.- Si claro y yo no estoy enamorada de Norman -sonrió y por lo último fue hacia el puesto de postres -ahora traigo el pastel que pediste.

Ray esperó hasta que le trajo el pedido y lo llevó a Anna.

Anna.-Gracias, estás siendo muy bueno mí, no es necesario lo hagas, suficiente era con acompañarme.

Ray.- La verdad no puedo quedarme de brazos cruzados la verte triste- decía mientras dejaba el postre en la mesa- e-eres muy linda para estar así -ella se sonrojó ligeramente y él se dio cuenta de sus palabras- "¿Por qué dije eso? Bueno es la verdad pero... ¡Ya basta voz mental!"- se daba el mismo una pelea en sus pensamientos.

Anna.- Esta bien, pero no te preocupes por eso, voy a estar bien, me diste valor para confiar con mi misma y lo voy a hacer.- Trató de sonreír.

Ray.- Vale -dio media sonrisa -Tengo que ir a atender a las demás personas, luego hablamos.

Anna dijo que si y se fue, ella trató de pensar serenamente en su situación

Ray de vez en cuando iba hacia Anna para preguntarle o hablar de cómo estaba y si ya estaba más tranquila a lo que ella siempre respondía que sí y le comentaba un poco de su "solución" de afrontar su carrera.

Luego de aquel día ella comenzó a ir casi todos los días ya sea para descansar tomando su café o hasta solo para comer postres que empezó a amar desde que Norman le invitó uno de sus brownies de chocolate.

Pasó un buen tiempo y el azabache comenzó a tenerle más importancia a la rubia, pues poco a poco se daba cuenta que desde que le dio su número de celular, hablaban a menudo y ni que diga que cuando ella llegaba a la cafetería, Emma tenía que estar llamándolo para que él no se quede en la mesa de la ojiazul.

Hasta le había reservado una mesa solo para ella y que no esté esperando ella a que se desocupe alguna.

Ray a los siguientes meses pudo por fin comprar su moto de línea ,en cualquier momento podría dejar su trabajo en la cafetería, sin embargo no lo hizo pues creía que además de haber encontrado unos buenos amigos como Emma y Norman, este era el lugar en el que veía a Anna, lo que fue suficiente para quedarse.

Anna llegaba un día como cualquiera hasta que notó que afuera de la cafetería había una moto, no le tomó tanta importancia.

Entró y saludó a Ray y Emma quienes le dieron el saludo, y se sentó en su mesa.

Ray.- Buenos días Anna, que sorpresa verte por acá tan temprano.

Anna.-Buenos días es que no te comenté pero hoy tengo una prueba en la universidad, es para ver el nivel de conocimiento que tengo, no tiene casi nada que ver en mi carrera pues no me ayuda a pasar de año pero mi nota en ese examen podría ser añadido a mis calificaciones y borrar mi peor puntaje, me lo avisaron la semana pasada pero no te lo quise decir hasta ahora porque quería que sea una sorpresa

Ray.-Eso suena bien, me alegro que den otra oportunidad ¿Has estudiado?

Anna.-Claro que sí, me he concentrado en toda la semana solo a eso y netamente a ello, supongo que ya he aprendido mi lección. -sonrió sincera

Ray.- Y para ir a tu prueba tal vez quieres un café concentrado para que te despierte, te lo tra-

Anna.- Creo que por hoy no, no he desayunado así que ahora necesito leche con chocolate por favor.- Respondió rascándose la mejilla.

Ray.- Bueno está bien, ahora a mismo lo traigo.

Anna.-Muchas gracias -él de fue así que sacó un libro para estudiar un poco más

Después de que se le haya entregado la leche con chocolate a la rubia, no sabe cómo entre las atenciones que le daba a los clientes, el azabache al voltear a ver a Anna ella estaba durmiendo encima de la mesa, como la primera vez que fue a la cafetería.

Él no quiso despertarla, sin embargo el pasar de los minutos aumentaban y se preocupó por el examen que para peor no le había preguntado la hora en el que debería ir a la universidad así que intentó despertarla.

Ray.-Hey Anna, despierta -la movió con delicadeza y la nombrada de removió incómoda

Anna.-Hmm...¿Eh...Ray? -levantó su cabeza y se sobó los ojos hasta entrar en razón- ¿¡Q-Que hora es!?

Ray.- las 11:10 de la mañana ¿A qué hora inicia tu examen?

Anna.- ¡En 5 minutos! Soy una tonta, tomo leche para quedarme dormida, que gran idea -se golpeó con su mano en la cabeza -No llegaré a tiempo a pesar de que corra.

Ray.- Podría llevarte en mi moto, es la que estaba afuera, la que viste estacionada.

Anna.- ¿¡Es tuya!? ¿Desde cuándo la tienes?

Ray.- Desde hace un par de semanas ero tengo licencia y todo ¿Quieres que te lleve?

Anna.-Si, gracias -lo abrazó pero duró poco tiempo porque tienen que salir ya pues los minutos pasan

Ray.-Emma ahora vengo, no me tardo- dijo mientras se sacaba el mandil y lo dejaba a un lado del muro de atenciones hacia la cocina

Emma.-Si está bien -entendía la situación ella a la perfección

Por suerte llegaron justo antes de que la puerta cerrara y pudo entrar pero no sin antes Ray tome una gran valentía y le dé un beso en la frente acompañado con un "suerte".

Anna se sonrojó pero tuvo que entrar rápidamente quedándose con las ganas de contestarle al azabache.

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Pasaron varias horas desde que había dejado a Anna en la universidad, él ya había vuelto a su trabajo y estaba esperándola ansiosa a saber cómo le había ido.

Pensó que ella se habría ido a su casa a descansar y pensaren si misma hasta que la ojiazul apareció con una gran sonrisa y saltó para darle un abrazo que casi le hace caer los platos sucios que llevaba en su bandeja en una mano.

Ray.- ¿Qué pasó? ¿Pasaste el examen?

Anna.- ¡¡Siii!! Los resultados me lo entregaban ese mismo día así que esperé en la universidad hasta que me dijeron que saqué una de las mejores notas -lo decía en un tono tan alegre que Ray no pudo evitar sonreír

Ray.-Que gusto escuchar eso, tus esfuerzos traen fruto ¿ves?

Anna.-En serio mil gracias Ray, si no fuera por ti, no sé qué hubiera hecho con mi vida -empezó a sollozar tapando si rostro en el cuello de él.

Ray.- Ya tranquila, no pienses en lo malo, ahora disfruta este logro con alegría así que no llores acarició el cabello de la joven quien asintió aferrándose a este

Se hubieran quedado así hasta que alguien hizo estallar su burbuja.

Emma.-Siento interrumpir su momento pero hay un montón de personas esperando al mesero que les de sus pedidos.

Ray.-Cierto, me da olvidé de eso.

Anna.-No tengo nada que hacer hoy así que puedo esperar hasta que termines de trabajar y allí hablamos ¿te parece?

Ray.- ¿Segura que quieres esperar? Termino como en dos horas

Anna.-No hay problema, espero sin importar cuánto tarde

Ray.-Bueno está bien, ¿Quieres algo para tomar o comer?

Anna.-Un plato con lo brownies de Norman ¿sí?-pidió amablemente y Ray asintió

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Luego de que hayan pasado las horas, Ray por fin pudo firmar su salida así que fue hacia Anna que estaba de lo más tranquila leyendo un libro.

Ray.- ¿Qué estás leyendo? -preguntó mientras se sentaba al frente de la chica.

Anna.- Un libro sobre ciencias del espacio, me encanta ver este tipo de cosas- cerró el libro y lo guardó en su mochila - ¿Ahora estás libre?

Ray.- Si, solo hay que quedarnos aquí hasta que Emma y Norman limpien y cierren la tienda.

Anna - ¿No debes ayudar?

Ray.- Por suerte hoy no me toca, nos reunamos de a dos, además es buena estrategia para juntar al NorEmma.

Anna se rio por lo último y comenzaron a conversar de cómo le había ido en el examen ,seguido de la historia de la moto recién comprada por Ray, y su trabajo, junto con temas derivados a estos.

Norman.-Ahora si podemos cerrar la tiendo, hay que voltear las sillas y-

Emma.- Espera, con solo poner cerrado en la puerta nadie entrará y Ray y Anna están conversando muy felices, dejémoslo así en ese ambiente.

Norman.- Desde el primer día en que vino Anna has intentado juntarlos ¿Los quieres ver cómo pareja?

Emma.-Desde el primero día no, es que cuando la vi me pareció una pobre chica que necesitaba algún apoyo pero desde que comenzó a hablar con Ray tengo la certeza de que quedarán juntos. Así que ahora ha esperar que terminen su cita -sonrió y abrazó a Norman quien se sonrojó pero correspondió el abrazo

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Ray.- Anna ya es muy tarde, es mejor ya irnos pero aún no sé porque no cierran la tienda Emma y Norman.

Anna.- Tal vez estén ocupados -comentó hasta que el par apareció y se acercó

Emma.- ¿Ya terminaron su cita? ¿Y cómo les fue?

Ray: ¡No era una cita! No hemos ido a ningún lado y solo hemos conversado.

Norman.- Conversando por horas riendo y disfrutando con compañía mutua.

Emma.- Y una cita no es que deban ir a un lugar especial y grande, es cuando dos personas pasan el tiempo interactuando entre ellos conociendo las cualidades del otro, sea cual sea el sitio en el que pasan ese rato romántico y eso acaba de hacer ustedes aunque lo nieguen.

Anna sintió su rostro ponerse muy rojo mientras que Ray llevaba una expresión neutra, nadie lo sabía pero él en serio se puso a pensar a fondo sobre su relación hasta ese entonces con la ojiazul.

Anna.-S-Será mejor que nos vayamos, muchas gracias por lo de hoy Ray, y gracias a ti también Emma y Norman, nos vemos.

Emma.- Adiós Anna.

Anna al ver que Ray no se despidió de ella, es más, bajó la mirada y no dijo ni una palabra, pensó que tal vez a él se había incomodado lo que le había dicho Emma así que salió de la tienda.

Emma.- ¿No te vas a despedir? Que mal educado eres.

El azabache no dijo nada hasta que unos segundos de estar quieto caminó fuera de ella tiendo en busca de Anna, se había decidido a hacer algo que solo en su mente pensaba que ocurriría solo allí.

Ray.- "¿Será que este es mi oportunidad? Definitivamente si"

Ray.- ¡Anna espera! -gritó al ver que la ojiazul quería entrar a un bus hasta que lo escuchó y paró su camino para voltear.

Anna.- ¿Uh? ¿Ray?- sintió como era tomada por los brazos por el nombrado y fue acercada hacia el chico.

La cual fue tan poca distancia que terminó en un dulce beso en los labios.

Ray.- Muchas gracias... por la cita de hoy, me gustó haber estado más tiempo contigo que cualquier otra de tus conversaciones

Anna.-A mi igual -aunque su cara estaba demasiado roja, y hasta botaba humo por las orejas -eres la mejor persona que pude haber conocido.

Ray.-Te amo mucho, Anna.

Anna.-Yo también te amo mucho, Ray.

Ray.- ¿Te parece si mañana salimos a otro lugar que no sea la cafetería? Puedo pedir el día libre e ir a cualquier lugar que quieras.

Anna.-Claro que si -asintió ocultando su rostro en el torso de él pues lo estaba abrazando, pero le entró una duda -y ahora... ¿Somos novios?

Ray.-Yo diría que sí, puedo decir que me gustas y tú también gustas de mí

Anna.- Ohh entonces, somos pareja -se sintió muy bien al decir la última palabra- Siempre soñé con tener a alguien que me ame sobre todo lo que venga encima y sé que eres el indicado ,desde el primero día que nos vimos me has ayudado en todo ,siendo compresible y más apoyo del que pensaba

Ray.-Esto es recién el comienzo, desde ahora voy a estar a tu lado más de lo que estábamos en la cafetería, te protegeré y guiaré a salir de tus problemas, te lo aseguro -le dio una cálida sonrisa y ella no pudo evitar y lo besó

A un lado se podía apreciar como Emma y Norman veían con conmoción la escena, poniéndose a pensar en que todas las veces que Anna iba a la cafetería y hablaba con el azabache se le consideraría citas, pues hablaban, se bromeaban y descubrían cosas del uno del otro.

Niegue quien niegue, sus citas si fueron y fueron citas con café.

 Pido perdón por la demora,  ¡Espero que les haya gustado el día dos!