— tienes que hablar con el — se quejaba Atsushi con Rashomon cubriéndolo de pies a cabeza, solo podían verse sus ojitos

— ¿como le explicó algo así?

— es tu habilidad Ryunosuke

— No se como explicarle, es como si explicara esto a mis hijos. No tiene sentido

— Ryunosuke — se quejó el albino

— Ok, ok. — suspiró — Rashomon

Su habilidad formó su típica cabeza a un lado de Atsushi.

— escúchame, lo qué pasó anoche es... es normal.

Rashomon miró al tigre, miró a su portador de nuevo de mala forma

— Mira, ya nos has visto hacer esto, solo que anoche... Bueno, a-anoche nos emocionamos un poco más. Es normal

Atsushi suspiró al escucharlo

— si te vas a quejar hazlo tú entonces — se quejó el mafioso.

— Rashomon — le llamó el agente. La habilidad lo miró — destápame por favor

Rashomon se negó

— Rashomon, haz caso

Rashomon quitó sus telas de Atsushi pero lo siguió viendo — gracias. Mira, te explico. Anoche tu papi y yo

— no soy su papi, es mi habilidad

— silencio — dijo el agente serio al mafioso

Akutagawa solo trago saliva

— como te decía, papi y mami anoche estaban muy emocionados, y tuvimos un mutuo acuerdo de lastimarnos un poquito para calmarnos. ¿Me entiendes? No significa que pasara siempre, ademas; primero lo hablamos. Estoy bien y papi también, ¿de acuerdo?

Rashomon asintió y volvió a tomar forma de perro para quedarse en el regazo del tigre — Hiciste bien

— cállate, no puedes ni hablarle a tu habilidad de sexo

— es vergonzoso

— pero no lo de anoche

— ya no lo digas

...

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