Narra Ranma.

-¡Esto es el colmo, yo no tuve la culpa!- rompí el bloque de cemento de un solo golpe.

Ahora ___ estaba enojada conmigo por lo que pasó en el baño, ¡Ni siquiera es mi culpa que Shampoo apareciera y se metiera en la bañera junto a mi!.

-¡Apareció de pronto, yo jamás le haría una cosa así!- me dí media vuelta y le dí una patada a una botella de vidrio, causando que se rompiera a la mitad.

-¡Espero que me crean que fue un accidente!- terminé por golpear un trozo de madera que tenía cuerdas enrolladas en el.

Me detuve un momento para mirar a mi alrededor, todo estaba hecho un desastre.

-¡Ya voy a dejar de ofrecer disculpas!, ¡mientras más lo hago más me meto en problemas!,¡Yo sé que no he hecho nada malo- grité al aire. Ojalá que todos en la casa me escucharan decir eso.

Comencé a caminar hasta que me encontré con Akane, la cual estaba limpiando el patio.

-Oye Akane...¿Viste a ___?- pregunto mientras me acerco a ella.

-Ah, hola Ranma- me sonrió, mientras dejaba de limpiar-¿Y para qué quieres ver a ___?- me preguntó.

-Bueno, es que quiero que hablemos sobre lo que pasó anoche- ella ladeó un poco la cabeza, sin quitar su sonrisa.

-¿Qué pasó anoche?- suspiré. Al menos ___ era discreta y no se lo contaba a todos como solía hacer Akane cuando se enojaba.

-Pues me encontró en la bañera con Shampoo- coloqué una mano en mi nuca.

-Ah, ya claro. Pues ___ ha salido dela casa desde esta mañana y no ha vuelto, pero te dejó dicho esto- se dió la vuelta y tomó un balde con agua y me lo lanzó, causando que me volviera chica- ¡No quiere saber de ti!- me golpeó haciendo que saliera disparado al techo de la entrada.

Miré irse a Akane mientras gruñía.

Me fijé que en el cielo algo brillo, y una anciana cayó junto a un palo.

-¡Te saludo!- intentó atacarme con el, pero yo fuí más rápida y pude esquivar el golpe.

Lo hizo dos veces más y las dos veces lo volví a esquivar.

-¿Q-Quién es usted?- cuestioné, sin quitar mi pose de lucha.

-Vaya, al fin te encuentro. Así que tu eres el novio ¿eh?- fruncí el ceño.

-¿Cómo que novio?- ella comenzó a reír, antes de saltar sobre mí.

-¡Hasta luego!- otra vez su risa rara, mientras saltaba de tejado en tejado.

-Una sorpresa tras otra-.

[...]

-¡¿Qué está haciendo ella aquí otra vez?!- no podía creer que Shampoo había vuelto nuevamente a la casa, después de los problemas que me había causado con ___.

-Pusieron un negocio de sopas chinas en nuestro vecindario- expresó Kasumi mientras me miraba.

-¡Ranma pruébalo!, Para ti- Shampoo sostenía un tazón de sopa mientras me sonreía.

-Si Ranma, está bastante bueno- miré a Akane que tenía un tazón en su mano, a medio comer.

-¡La llegué!, ¡Que buen aroma!- los pasos rápidos de ___ sonaron por el pasillo.

- _-___- la miré y caminé un poco hasta ella. Se limitó a cruzar a un lado mío sin hacerme el menor caso posible.

-¡Sopa!- gritó emocionada, luego vió a Shampoo y su gesto se descompuso.

-¿No quieres ___?- le preguntó Kasumi.

-Ni hablar- ___ se cruzó de brazos y volteó la cara, para no tener que ver a nadie.

-Que pena, será un desperdicio...Aunque podemos guardarla para después- el sonido de alguien más comiendo llamó mi atención.

-Descuida, yo la comeré- Kasumi miró a la abuela.

-Oh disculpe no la había visto, ¿vino de visita?- parecía sorprendida.

-¡La ví hace poco!- señalé a la señora.

-Quiero presentarles a mi bisabuela- miré a Shampoo sorprendido.

-Ya Shampoo me contó todo sobre ustedes, espero que la boda se lleve a cabo pronto- siguió comiendo su sopa.

-¡¿Y qué boda?!- gritamos ___ y yo a un mismo tiempo.

-¡Ranma es el prometido de Akane y hace mucho tiempo que eso está decidido y se han preparado para compartir la vida juntos!, así que más vale que no venga con esas ideas raras- El señor Soun se levantó, mientras le daba aquel sermón a la abuela.

-En china a través de 3000 años de historia en nuestra familia, las mujeres nos hemos casado con hombres fuertes- el señor Tendo retrocedió un poco, antes de volver a mirarla gruñendo, y que ella le gruña igual, y luego casi le diera un beso.

-Vaya que habla bien el castellano usted, señora- comentó Kasumi.

-No en balde llevo viviendo 3000 años-.

-Además, se ve muy joven para su edad- la vieja rió.

-¡Ya estoy cansado!, ¡¿Por qué todos quieres decidir con quién me voy a casar?!, ¡esa decisión es mía!- Shampoo se levantó y me miró.

-Ranma, ¿quieres acompañarme?- la miré confundido, luego miré a ___ que nos veía de reojo.

-A mí no me veas, tú haces lo que te de la gana- comenzó a caminar en dirección contraria a nosotros, por el patio.

Acompañé a Shampoo y me llevo nuevamente al baño, donde comenzó a desnudarse.

-¡¿Qué estás haciendo?!, ¡Si crees que puedes chantajearme así estás equivocada!- ella caminó hasta la ducha y la tomó. Comenzó a mojarse con ella.

-¿Qué crees que estoy haciendo?- el agua la empapó-¡Solo quiero ducharme, eso es todo!- vi como se convertía en un gato y quise salir corriendo.

[...]

-¡Por eso me convierto en gato!, Ranma, ¡todo esto es culpa tuya debes entenderlo!- la miré.

-¡¿Pero por qué voy a ser culpable?!- recibí un golpe en la cabeza.

-¡Por qué lo eres!- había sido la anciana bisabuela de Shampoo. -¿No sabes que no debes hacer llorar a una chica?, ¡es una descortesía imperdonable!- gruñí.

-¿Y yo qué culpa tengo?, ¡ella es quién me persigue!- traté de propinarle un golpe, pero ella fue más rápido y lo esquivó.

Luego cayó sobre mi nuca gritando "¡Toma!".

-Ranma- Shampoo me miraba aparentemente sorprendida.

-¡Anda ven a atacarme si es que puedes!-.

-Ya verá quién soy- salió del baño y yo tras ella.

Corrí por toda la casa tratando de atraparla, mientras ella se reía de mi.

-¡Jovencito que no puede con una anciana de 3000 años, debes practicar estás demasiado débil!- la familia de Akane, y mi padre de paso, nos miraba.

Se escuchó el golpe seco y la anciana cayó al suelo, levanté la vista y ví a ___ sosteniendo el palo de la bisabuela de Shampoo.

-Débil su difunta, señora- le tiró el palo, que rápidamente la mujer agarró.

-¿Pero que tenemos aquí?, es bastante buena- la miré.

-¿Pues que esperaba?- le pregunté orgulloso- es ___ al fin y al cabo- volví a mirar cómo ___ salía del comedor.

-¿Quién es esa jóven?- preguntó mientras se volvía a colocar sobre su palo.

-Ella es mi sobrina- el señor Soun se levantó.

-Y también es, al parecer, la novia que Ranma escogió sin nuestro permiso- agregó papá.

-Bueno, al menos sé que Shampoo tiene buena competencia, esa chica no parece ser ordinaria-.

-¡Pues claro que no lo soy!- gritó ___ mientras aparecía a un lado de la puerta.

-Si, pero con todo y que eres fuerte estás fuera de práctica- ___ desvío la mirada.

-¿Cómo lo supo?- cuestioné mirando a la señora.

-Su golpe no fue tan acertado- todos miraron a ___.

-¿Y qué esperaban?, últimamente estoy ayudando más en la casa y he dejado de lado los entrenamientos...- Akane asintió.

-Tiene días que no viene a practicar conmigo, lo estoy haciendo con papá, sola o con Ranma- me levanté.

-Oye ___, ya que estás nuevamente en casa debemos hablar- ella me dió la espalda.

-No debemos hablar de nada- comenzó a caminar, para alejarse de mi.

Apresuré el paso y la abracé a medio pasillo.

-¡Ranma!, ¡Sueltame!- se removió inquieta.

-¿O qué?- cuestioné, sin soltarla- debes escucharme y no andar ahí por la vida molesta por todo- volvió a removerse y yo la tomé entre mis brazos.

Narra ___.

-¡Ay bajame, Ranma Saotome!- cruzamos el comedor y todos se nos quedaron mirando sorprendidos, yo no pude evitar ponerme roja por completo, oculté mi cara en su cuello, mientras mantenía mis manos en sus hombros- C-Cielo ya bajame por favor...- aún sin verle, supe que sonreía.

-¿Ah?, ¿qué dijiste?, No te escucho nada- me sentí pequeña en sus brazos.

-Ranma...Cielo bajame ya...- sin embargo él no detenía su caminar.

-Así me gusta, sin embargo no te voy a bajar hasta que me digas que ya no estás enojada y sea cierto-.

No me valió llamarle de todas las formas románticas posibles, Ranma dió la vuelta a la casa conmigo en sus brazos, y después comenzó a saltar por los tejados.

No me quedó otra que decir que ya no estaba enojada, aunque lo estaba. Al final volvimos a casa después de un rato, y Ranma se la pasó peleando con la bisabuela de Shampoo, este muchacho que no deja de dejarse provocar.

Movilizaron la pelea hasta fuera de la casa, yo les seguí y traté de ayudar en la batalla.

—Que muchacho tan fuerte, pero no lo suficiente— me molesté.

—¡Calle bisabuela!— traté de soltarle un puñetazo, pero ella lo esquivó. Ranma me tomó de la cintura, evitando que perdiera el equilibrio.

—¿Estás bien?— me preguntó mientras me miraba.

—Si, lo estoy—.

—Mas vale que no intentes atraparme chico podrías arrepentirte— ambos miramos a la abuela.

—¡Hola!—Ranma se subió al mismo arco donde ella se encontraba— es usted una persona muy abusiva— colocó las manos en su cintura, se veía tan lindo...

—Debi admitir que hiciste bien en acercarte sin hacer ningún ruido, ya veo por qué Shampoo quiere casarse contigo— apreté los puños.

—¡No importa lo que ella quiera, no me casaré!— ¿Por qué todo tiene que ver con matrimonio en estos días?.

—Oh vaya, también eres muy simpático cuando te enfadas...¿Si no quieres casarte con Shampoo por qué no lo haces conmigo?— me sorprendí.

—¡¿Qué dijo señora?!— grité.

—¿Qué?, ¿no cree que es un poco vieja para mí?— cuestionó Ranma, notoriamente nervioso, a lo que ella rió.

—Ers solo una broma, no te pongas nervioso— se volteó y ví como iba a tocar el pecho de Ranma con su palo.

—¡NO!— salté a tiempo y me coloqué en medio, causando que hiciera presión su palo en mi pecho.

—¡___!— gritó Ranma, detrás de mí.

—Tranquilo, estoy bien— mentí, sabía que no lo estaba.

Esa señora presionó en un punto que no debía, ahora no podré soportar el agua caliente...Lo que significa que no podré tomar baños junto a Ranma.

—Oh vaya, esto no me lo esperaba— retrocedió y sonrió, pero será mucho más divertido ver cómo sufres— luego miró a Ranma— en unos días vendrás rogando por casarte con Shampoo, espero que ella aún esté dispuesta para entonces— saltó del tejado y se fue, riendo.

[...]

—¡AYYYYYY!— grité con todas mis fuerzas cuando Ranma trató de enterarme con el a la tina llena de agua, no me adivinan, caliente.

—Ay vamos ___, no seas exagerada no está tan caliente— me solté de su agarre.

—Tu...No lo entiendes— salí rápido del baño, dejándole desconcertado.