038

🌧️

Seokjin alzó su cabeza cuando su puerta se abrió y se tapó un poco más con las delegadas frazadas cuando uno de los enfermeros de su servicio llegó a revisar sus vitales. 

—Buen día Doctor Kim, ¿Cómo se siente? 

—Estoy bien y ya me quiero ir.

—Imagino que es así, los doctores son los peores pacientes. 

Seokjin frunció sus labios y se cruzó de brazos mientras veía al enfermero ir de aquí para allá por la habitación. 

—¿A qué hora viene el Doctor Wang a darme el alta? 

—Ya está aquí, pero no nos dijo nada sobre eso, seguramente vendrá él mismo a revisar que todo esté en orden. 

Seokjin asintió —¿Quien tomó mi día de trabajo? 

—La Doctora Bae. 

—¿Volvió de su post natal? 

—Así es y está más gruñona que antes, pero eso no lo dije yo —el enfermero hizo un gesto sobre sus labios haciendo que Seokjin se riera. 

Él sabía que eran el comidilla de las enfermeras y enfermeros y también de los técnicos, esos trabajadores sabían todo lo que pasaba en esos pasillos, algunos llevaban más de veinte años trabajando en el hospital. Por lo que Seokjin se divertía mucho en sus largas horas de trabajo gracias a los chismes que corrían por ahí. 

—¿Puedes pasarme las fichas que sé me quieres pasar hace diez minutos? 

—Oh lo siento —Choi San tomó todas las carpetas que había llevado a la habitación y se las entregó a Seokjin. —Sé que debería estar descansando pero también sé que sus pacientes son importantes para usted. 

—Hiciste muy bien —el azabache tomó sus gafas para leer y comenzó a revisar los medicamentos que había dejado como tratamiento y ver la evolución de los mismos. Revisó varias fichas y se detuvo en uno de sus pacientes que al parecer estaba empeorando. 

—El señor Lee no ha mostrado recuperación y su estado ha ido empeorando. 

Seokjin arrugó su ceño y volvió a revisar la ficha, tenía que hacer algo por ese hombre, él había conversado con sus hijos e incluso había conocido a sus pequeños nietos. El señor Lee merecía el mejor tratamiento y él haría lo posible por sanarlo para que pudiera volver con su familia. 

—Bien, aumenta la dosis del señor Lee y llámame si muestra una leve mejoría. El paciente de la 205 puede irse, firmaré el alta… La señora Kim que se quede un día más para asegurarnos que el tratamiento está siendo el correcto. Mañana pasaré a verla.

Choi San asintió y recibió las fichas con nuevos tratamientos, firmas de alta y todo lo que él había estado tan preocupado pensando que tendría que darle todo ese trabajo a la Doctora Bae que pareciera que lo odiaba cada vez que lo miraba para pedirle algo. 

—Gracias Doctor Kim, espero que se recupere muy pronto. 

—Estoy bien Choi, solo fue un accidente. 

La puerta fue golpeada dos veces y se abrió para dejar ver a varias enfermeras de su servicio. Gahyeon, su enfermera preferida se acercó a él y le entregó una pequeña canasta con galletas y dulces que sabía eran su preferido. 

—Espero que ya se sienta mejor Doctor Kim, le trajimos esto. Todos nos preocupamos mucho así que estamos realmente felices que esté recuperándose. 

El azabache tomó la canasta y sonrió conmovido por el gesto. Seokjin sabía que tenía un buen trato con sus colegas y los demás trabajadores de su servicio, pero que ellos le compraran algo solo por querer hacerlo hacia que su pecho se apretara. 

—Gracias chicas, solo fue un susto, ya estoy bien. 

Los presentes asintieron y se movieron por la habitación contándole lo que había ocurrido en su ausencia que en realidad había sido muy poca pero parecía que todo lo interesante y estresante pasaba cuando él no estaba en el hospital. 

—Y el hijo de esta señora entró por el otro lado y cuando vio a su abuela se puso a vomitar Doctor, fue asqueroso. 

—Y eso que la señora Moon estaba en buen estado. 

Seokjin se rio con sus compañeros. Choi San había salido de la habitación para empezar los nuevos tratamientos y Seokjin estaba seguro que más de alguien se opondría a que él estuviera dando órdenes desde su cama de hospital pero no podía importarle menos. 

—Que fiesta es esta y porqué no me han invitado. 

Jackson entró a la sala llena de mujeres y se pavoneó haciendo que varias de las enfermeras lo miraran de inmediato. 

—Me quiero ir, Jack. 

—Lo harás, eventualmente… Señoritas, gracias por venir a ver al Doctor Kim pero necesito que vuelvan a sus labores para que nuestro pacientes no se mueran. Ellos las necesitan.

Seokjin rodó los ojos y se despidió con su mano de las enfermeras que abandonaron prontamente la habitación. 

—¿Pasó algo? 

—Consumiste más de lo que tu cuerpo puede soportar, ¿Cómo carajos no te diste cuenta lo que estabas comiendo? Ese filete tenía mucho ajo. 

—No lo sé, tenía salsa y quizá neutralizó el sabor fuerte, no tengo idea, estaba distraído. —Jin negó con su cabeza 

—Podrías haber muerto, tuviste suerte que la ambulancia llegó realmente rápido, ¿Donde mierda tienes tus medicamentos?

—No salgo con ellos, pedí que el puto filete no tuviera ajo, no es mi maldita culpa, Wang. 

—Lo sé, lo sé. —Su amigo alzó las manos —¿Harás la denuncia?

—¿Que? —Seokjin estaba realmente sorprendido —tiene que haber sido un accidente.

—Eso no lo sabes. 

—Suenas como Jimin.

—Bueno él estaba muy preocupado ayer, dijo que este tiempo que llevan juntos les han pasado cosas extrañas a ambos, cosas que no son normales. Él creé que les quieren hacer daño.

Seokjin se acomodó en su almohada cansado, había tenido la misma charla con Jimin esa mañana antes de que lo enviara a cambiarse de ropa y dormir un poco en una cama cómoda. Su novio se había quedado a su lado toda la noche para acompañarlo. 

—Fue seguramente una broma por parte de la cocina. Cuando trabajé en mi primer año de universidad de mesero las bromas eran habituales, yo nunca comí en ese lugar —Jin hizo una mueca con sus labios recordando —era una mierda asquerosa, lo bueno que los clausuraron hace muchos años… El punto es que cuando los clientes molestan o alegan demasiado el chef se ocupa de darles escarmiento.

—Esa es una mierda, no puedes justificar eso.

—No lo hago, el hijo de puta casi me mata. 

—¿Lo vas a denunciar?

—Si, ya hablé con los abogados. 

Jackson asintió más tranquilo y conforme. —Iré a firmar tu alta, te dejé los medicamentos que debes tomar y bueno, no te diré nada más porque ya sabes lo que tienes que hacer. 

—Si, lo sé y gracias. 

—De nada compañero. —Jackson guardó su lápiz en la bata blanca —tus padres están aquí. Los haré pasar. 

—Joder. 

—Mhm, ¿Ese es un no?

—Ese es un no estoy listo para discutir de nuevo con mi mamá. Jungkook dejó la escuela de negocios y a su vez ella no acepta a Jimin como mi compañero. 

—Oh bueno, eso es extraño, tu mamá ama a todo el mundo pero que bueno que seas mayor de edad y que tengas tu independencia ¿No? 

—Amo a mi familia, no quiero tener problemas con ellos o con ella. 

—Todo se soluciona hablando, imagino que debe haber sido una mierda enterarse que su hijo menor deja sus estudios a un año de titularse, pero de nuevo, Jungkookie es mayor de edad y con respecto a Jimin ella solo tiene que conocerlo más, dale tiempo. 

—No he tenido otro novio que Taehyung, no entiendo porque se puso de ese modo. 

—Quien sabe, las madres pueden ser bastante raras algunas veces. 

—Ella no era así. 

—Date un respiro hombre y también a Jimin. 

Jin asintió y giró su cabeza cuando la puerta se abrió y Jimin entró a su habitación. Se quedó viéndolo, embobado por la belleza de su novio. Su cabello rubio estaba peinado hacia un costado, su bata blanca estaba abierta dejando ver una camisa de vestir negra que Seokjin estaba seguro era de una fina tela y por supuesto costosa, como todo lo que vestía su rubio. Pantalón a juego solo mostraba los tantos atributos de Park Jimin.  Seokjin lamió sus labios al ver esa sonrisa coqueta que amaba. 

—Buenos días Doctor Kim. 

—Hola —Jin recibió un beso corto en sus labios. —¿Descansaste?

—Si, un poco en realidad. 

—¿Ya empezaste a atender a tus pacientes?

—No todavía, el primero está agendado a las nueve, pedí que corrieran las horas así que hoy me iré más tarde de lo habitual. 

—Te vas a quedar sin personal si sigues así. 

—Les dije que se fueran a su hora —Jimin se encogió de hombros —mientras ingresen a los pacientes, ya mañana les pido agendar a los últimos y listo. No quiero que la lista de espera se alargue más. 

—Eres increíble —Jin tomó la mano del rubio y se la llevó a los labios para darle un beso en la palma. 

Ambos se sonrieron y cuando se acordaron que no estaban solos en la habitación alzaron su cabeza para encontrar a Jackson con una enorme sonrisa en su rostro. 

—¿Que? —Seokjin no soltó la mano de su novio e incluso entrelazó sus dedos. 

—Nada. 

Jimin se rio bajito ante la mirada de Wang. —Estás lleno de mierda —dijo riendo entre dientes. 

—Se ven bien juntos chicos. Solo quería decirlo y ahora me voy —Jackson se despidió dejándolos solos. 

Seokjin miró a Jimin y le gustó ese rubor que se había mantenido en las mejillas del rubio. 

—Te ves bien hoy día, bueno todos los días. 

Jimin mordió su labio y de acercó para besar al azabache que se veía como un modelo de catálogo aún si el día anterior había tenido tan mal aspecto con su rostro hinchado. Jimin recordó la manera en que su corazón se había prácticamente detenido al saber que su novio estaba en tan mal estado de salud. 

—Me vestí para ti, quería verte antes de que te fueras a tu departamento a descansar. Porque eso es lo que tienes que hacer —Jimin mordió suavemente el labio inferior y un suspiro dejó salir su novio cuando juntó finalmente sus labios en un beso un poco más largo como el que había querido darle desde que entró a la habitación. 

—Amo tu ropa —Seokjin puso su mano en el cuello del rubio para darle otro beso. 

Ninguno de los dos escuchó la puerta que se abrió, solo una risa apagada les hizo saber que ya no estaban solos. 

Cuando se separaron toda la familia Kim los estaba mirando por lo que rápidamente Jimin se enderezó y se alejó un paso de la cama. 

—Buen día —Jimin saludó con sus mejillas sonrojadas levemente o al menos eso esperaba.

El señor Kim avanzó por la habitación y de inmediato le tendió su mano. 

—Buen día muchacho, me contaron que estuviste cuidando a Seokjin.

—Si —Jimin amplió su postura —no podría dejarlo solo aunque él me lo pidiera. 

El rubio giró su cabeza para ver a Seokjin y lo que vio en sus ojos hizo que su estómago se llenara de burbujas de amor. Amaba tanto a ese hombre. 

—Gracias por eso. 

El señor Kim se acercó a su hijo y Jimin miró al resto de la familia de Seokjin. Ryujin se acercó y se veía adorablemente nerviosa. 

—Hola, ¿Puedo decirte que te ves muy guapo con tu uniforme?

—Ryu —Yeojin advirtió a su hija. Jimin solo sonreía y dejó ir a la hermana de su novio mientras este la miraba con una ceja alzada ante su actitud descarada. 

Cuando llegó el turno de la señora Kim; Jimin estaba sudando bajo su camisa Gucci. Pero mantuvo la calma ya que la mujer no se veía como si fuera a decirle alguna pesadez. O eso era lo que él hubiese esperado. 

—Jimin, buen día, pensé que estarías trabajando.

—Hola señora Kim —Jimin saludó y sintió a Seokjin tensarse a su lado —hoy empezaré un poco más tarde. De todas formas ya me tengo que retirar. 

La mano de Seokjin envolvió la suya antes de que pudiera hacer algo y cuando se miraron hubo una súplica silenciosa por parte de su novio. Leyendo esos ojos marrones que amaba Jimin se quedó en su lugar sin moverse. 

—Quédate un poco más, todavía tienes una hora para atender a tus pacientes. —Jin le sonrió a su novio y luego miró a su madre. —Buenos días madre, no era necesario que vinieran.

Kim Yeojin sonrió de manera tensa y miró de inmediato a su marido buscando ayuda pero este negó con su cabeza. 

—Eres nuestro hijo, necesitas a tu familia cerca para recuperarte más rápido, ¿Desde cuando quedamos en último lugar? 

—Oh mierda —Ryujin dijo bajito. 

—Yeojin, no creo que sea buena idea querer hablar de estas cosas cuando nuestro hijo se está recuperando. 

—Yo solo digo —Yeojin se rio pero fue un sonido fabricado y difícilmente logró calmar las cosas. 

—¿Por qué viniste? —Seokjin dijo, su voz subiendo y mostrándose más enojado de lo que quería. 

Jimin apretó su mano ligeramente y cuando obtuvo su atención movió su cabeza —es mejor que me vaya, te llamaré más tarde ¿Si? 

Antes de que las cosas se pusieran más tensas Jimin se despidió de la familia Kim y le dio un beso en la frente a su novio. 

Seokjin cerró sus ojos cuando esos delicados labios hicieron contacto con su piel y a regañadientes tuvo que dejarlo ir. Esperó a que la puerta de cerrara y salió de la cama, quería cambiarse el pijama para largarse del hospital. Enojado tomó la mochila que Jungkook había llevado la noche anterior y la tiró sobre la cama bajo la atenta mirada de sus padres y hermana. 

—Hijo —su padre Kim Seokhyun hizo que detuviera sus movimientos.

El azabache alzó su cabeza y miró a su padre y como siempre se tranquilizó, su padre era un hombre cálido, seguro de sí mismo y sumamente amoroso por lo que tomó una respiración para calmarse y eso fue suficiente para hacerle frente a su madre. 

—No puedo creer que hayas venido hasta aquí y lo primero que sale de tu boca es prácticamente echar a mi novio, no tienes derecho mamá, no lo conoces, no puedes hacerle esto. Él no lo merece y yo no voy a dejar que hagas o digas lo que quieras frente a Jimin. 

—Lo conoces hace tan poco Seokjin, ¿No crees que estás exagerando al protegerlo como si fuera un niño? Tú no eres así.

—¿Cuál es tu problema con él? Exactamente dime, ¿Que te pasa con él? Ni siquiera lo conoces, no tienes idea de nada. 

—Sé lo suficiente. Taehyung me contó…

Seokjin ladeó su cabeza tan rápido que dolió, pero no le hizo caso, el solo hecho de escuchar el nombre de Taehyung hizo que sus tripas molestaran. Arrugó su ceño y avanzó lo suficiente para pararse frente a su madre. 

—¿Taehyung? ¿Estás hablando en serio? —Jin negó con su cabeza tan enojado, tan molesto que todo su cuerpo vibraba —no puedes escuchar a ese imbécil, ese mismo idiota rompió de mil maneras mi corazón, ¿Eso no te importa acaso? ¿Cuando el hijo del vecino es más importante que yo? 

Su madre parpadeó dos veces antes de echarse a llorar y Seokjin supo que todo se había ido a la mierda, quizá siempre iba a ser así y realmente no le importaba, no en ese momento. 

Seokjin miró a su padre que se veía tan sereno como siempre y por primera vez deseó que el hombre no fuera tan calmo. Su hermana se mordía el pulgar como cada vez que se sentía insegura o demasiado nerviosa para decir algo. 

Miró a su madre de nuevo y deseó saber exactamente que era lo que pasaba realmente en la cabeza de ella, el porqué de esa negativa cuando ni siquiera se había dado el tiempo de conocer a su novio. Y a pesar de que pensó que ella lo amaría de inmediato él no iba a dejar que nadie le hiciera daño a Jimin. No iba a permitir que sintiera más rechazos. 

—Si quieren verme tendrán que acostumbrarse a la idea de que tengo un novio maravilloso que me ama tanto como yo a él. —Seokjin tomó su mochila y antes de dirigirse al baño los miró nuevamente. —Me cambiaré y estaré listo para irme a mi departamento, si quieren ir conmigo serán bienvenidos pero si veo o escucho algo en contra de Jimin no serán más bienvenidos y tendrán que irse… Y si, te lo estoy diciendo a ti mamá. 

Y con esa última declaración Seokjin entró al baño para cambiarse de ropa y salir de una maldita vez del hospital. 

🌧️

Hola!! Con este capítulo se acaba la maratón, traté de avanzar un poco más en la historia ya que quiero darle tiempo a los hechos y no apurar nada. Todavía queda mucha historia para contar 🤩

GRacias por el apoyo.

Tengan una hermosa noche y sin duda lo son después de los premios que los chicos ganaron esta noche. Solo me queda decir que estoy demasiado orgullosa y amaré por siempre a estos 7 chicos Fabulosos.

💜💜💜

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top