025
🌧️
—Te pregunté que mierda haces acá.
Seokjin no soltó la mano de Jimin y se paró en toda su altura frente al hombre que ya no sonreía como antes y que lo miraba con una mirada que él había visto un par de veces a lo largo de los años.
—Vine a dejarle algo a tu mamá, ya me iba y solo para que sepas no tenía idea que llegarías a eata hora.
Seokjin se rió entre dientes no creyendo en esas palabras. —Lo que sea, no te aparezcas por acá el fin de semana.
—No iba a hacerlo.
Jimin observó al otro hombre y la mirada de desafío que había visto minutos antes había desaparecido y ahora Jimin podía ver dolor en esos ojos marrones que cada cierto rato miraba sus manos unidas.
—Más te vale, todavía no olvido lo que le hiciste a mi novio.
—Jin —murmuró Jimin. Jamás había visto a Seokjin tan enojado, podía sentir su cuerpo vibrar y él estaba rogando por que nadie se asomara y vea una escena siendo la primera vez que pisaba ese lugar.
Seokjin se giró hacia Jimin y tomó una respiración, los ojos hermosos de su novio lo calmaron enseguida. Asintió y volvió su mirada hacía su ex novio. No se molestó en despedirse, no le interesaba en lo más mínimo quedar como una mierda sin educación.
Jimin miró por sobre su hombro y pudo ver a Taehyung de espaldas a ellos congelado en su sitio sin moverse mientras ellos caminaban lejos hacia la puerta principal.
Pararon en la entrada, habían flores y una pequeña fuente a un costado, el lugar era hermoso pero Jimin no pudo mirar, ni tomarse el tiempo de observar todo ya que de nuevo sentía que Seokjin estaba teniendo problemas para mantenerse en control.
Este era un nuevo lado que Jimin veía y odiaba tener que presenciarlo precisamente por el maldito ex novio de Seokjin.
—Lo siento —Jin se pasó su mano libre por el cabello que caía abierto sobre su frente y suspiró.
—No lo hagas, no sabías que él estaría aquí.
Jin miró hacia la puerta de la casa de sus padres y de pronto ya no se le apetecía entrar. Su ánimo había caído en picada.
—Bien, como sea —Jin volvió a suspirar, dio un paso hacia la casa pero Jimin no lo dejó.
—No hagas esto.
—¿Que?
—No dejes que arruine este día, este fin de semana. —Jimin soltó sus manos —es lo que haces siempre, dejas que se meta en tu cabeza y lo dejas jodidamente ganar, ¿por qué haces eso? ¿por que todavía siquiera te importa ese imbécil?
Seokjin arrugó su ceño y negó con su cabeza ante la acusación —eso no es cierto, ya no es así.
Jimin odiaba el hecho de conocer las dos versiones de Seokjin de esa manera. Su novio era un hombre dulce y encantador cuando estaban solos, pero si algo se trataba de Taehyung se volvía inestable y se veía como un cachorro perdido en medio del bosque.
—Estás fuera de control y el tipo no dijo nada.
—No lo quiero cerca de nosotros, cerca de ti.
Jimin se talló los ojos y bajó sus hombros, quería escapar de la inseguridad de tener rondando a Taehyung cerca, que este visitara a los padres de Seokjin solo le decía que había una buena relación y que quizás él no sería tan bienvenido en ese hogar si todavía el ex novio de Seokjin rondaba por esos lugares teniendo una relación que él jamás tendría con los Kim.
—Ha pasado poco tiempo desde que ya no estás con él —susurró el rubio abatido por el día que se estaba desmoronando ante sus ojos y aunque no quería que sucediera la inseguridad y el poco tiempo que llevaba junto a Seokjin ganaron la batalla.
—Nunca estuve con él, eso era sexo y nada más, lo sabes, te lo conté todo y aún así desconfías de mi.
—¿Me culpas? Tienes un ex novio que todavía ronda en tu vida y aunque queramos escapar siempre está cerca, ¿cómo te sentirías tú si fuera al revés? Ni siquiera me contaste que él frecuenta la casa de tus padres.
Seokjin deslizó sus ojos nuevamente hasta la puerta y luego sin pensar demasiado tomó la mano de Jimin y caminó de vuelta hasta la entrada. No lo soltó aunque Jimin parecía bastante confundido y solo cuando estuvieron en la acera, fuera de la casa es que él habló.
—Vamos a ir a conversar, tú y yo. Luego volveremos aquí y te voy a presentar a mi familia como corresponde.
—¿Que? —Jimin negó de inmediato —podemos hablar más tarde, ellos nos están esperando.
—Ellos entenderán, además ni siquiera se han asomado, deben estar en la parte de atrás, les enviaré un mensaje.
—Seokjin.
Jin cerró sus ojos y los abrió de nuevo —vamos a ir a caminar y jodidamente vamos a hablar de todo esto para que así, cuando llegue la noche, podamos irnos a dormir sin preocupaciones, sin malos entendidos.
Jimin miró hacia la casa y luego asintió lentamente. Sus dedos se entrelazaron con los del azabache y él comenzó a caminar justo al lado del hombre serio pero que no se veía enojado.
Rodearon varias casas y luego cruzaron por una calle poco transitada hasta llegar a un lugar, una especial de parque abierto que no tenía nada más que pasto corto de un lindo color verde oscuro.
Jimin se asombró por el clima de Jassel, era lo bastante cálido como para acostarse sobre el pasto y disfrutar de la tarde.
—Aquí solía venir con Jungkook cuando éramos niños. Traíamos una pelota y pasábamos toda la tarde aquí hasta que venía mi mamá para avisarnos que la cena estaba lista —Seokjin sonrió y sin soltar la mano de Jimin él se sentó en el pasto.
—Es un lugar bonito.
Se sentaron y la brisa de fines de mayo movió sus cabellos. Ambos se quedaron en silencio un rato solo mirando hacia los árboles enormes que se podían ver al fondo del silencioso parque.
—Mis padres y los de Taehyung son amigos hace años. El hermano de él y Jungkookie son mejores amigos. —Jin giró su cabeza y observó el perfil de su novio, sabía que era un tema complejo y no era para nada de su agrado hablar de Taehyung, pero si tenía que aclarar las cosas para que Jimin confiara en él y en sus sentimientos entonces tenía que ser honesto. —De alguna u otra manera él siempre está cerca, no de mi, ya no, pero sí de mi familia.
Jimin miró sus botas y asintió sin decir nada. Y no era como si tuviera mucho que decir al respecto.
—Está bien, realmente no es un gran problema… Es otra cosa lo que me preocupa.
—¿Crees que todavía lo amo? —preguntó Seokjin sincero.
Jimin se encogió de hombros y miró de soslayo al azabache que estaba esperando por una respuesta. —No lo sé, me gustaría estar seguro de que no sientes una mierda cuando lo lo ves pero hasta yo sé que uno no puede olvidar tan pronto a alguien.
—Últimamente en lo único que pienso es en ti y eso ocurre desde el día en que nos conocimos.
El rubio lamió sus labios y resopló —estamos arruinando completamente este fin de semana.
—Tienes razón —Jin sonrió y se acostó sobre el pasto, llevó sus brazos hasta bajo su cabeza y se acomodó mirando las pocas nubes que a esa hora se movían lentamente por el cielo. Cuando vio que Jimin se quedó sentado lo atrajo para que se acostara a su lado. —Ven, te quiero decir algo.
Jimin se puso de lado y apoyó su mano izquierda sobre el pecho de su novio y luego de varios segundos se acercó un poco más hasta apoyar su cabeza también. De inmediato sintió los latidos rápidos de Seokjin y sonrió levemente mientras la brisa movía ligeramente sus ropas.
—¿Que es?
—Sé que es difícil pero debes confiar en lo que te digo. Yo no voy a jugar contigo, no lo estoy haciendo. —Jin acarició sobre la tela de la chaqueta que se había puesto Jimin y lo acercó aún más a su cuerpo —desde que te conocí quiero estar todo el tiempo que pueda a tu lado, besarte, cuidarte… Contigo me siento yo mismo, no finjo ser otro para agradarte porque desde el día uno me aceptaste así y eso no se encuentra en todos lados… Soy un poco tonto a veces, pero no tanto como para no darme cuenta que eres una persona especial. Que eres todo lo deseé alguna vez y que aunque llevamos tan poco tiempo quiero que esto se prolongue por mucho más tiempo.
Jimin mordió su labio y alzó su cabeza para observar los ojos sinceros de Seokjin. Tragó saliva ante esas palabras pero no dijo nada porque Seokjin volvió a hablar.
—Pierdo los estribos cerca de Taehyung porque no puedo olvidar que te golpeó. No voy a dejar que se meta entre nosotros nunca más, no puedo permitir eso. No contigo.
—Tengo miedo, Jin. Miedo de dar todo lo que tengo y que luego tú lo deseches porque te diste cuenta que sigues enganchado de alguna u otra manera a ese hombre. —Jimin se incorporó y se sentó con sus piernas cruzadas —hace unas semanas me dijiste que él era todo lo que conocías y ese es mi mayor temor. No poder darte lo que necesitas, no ser suficiente.
Bien, pensó Seokjin, nunca había tenido una conversación tan sincera con alguien. Y era algo a lo que no estaba acostumbrado ya que la mayoría de las personas jamás dicen a ciencia cierta a lo que temen o realmente desean y eso podía aplicarse en una relación de pareja, amistad o laboral.
Y es por eso que le gustaba tanto Jimin, el tipo además de ser encantador y sumamente adorable también era sincero y contundente a la hora de decir las cosas.
—Eres más que suficiente para mí, incluso me estás enseñando cosas que yo nunca había experimentado porque jamás había tenido la posibilidad de mostrarme tal cual soy, te lo dije una vez, yo antes no tenía voz y contigo si la tengo y amo cada minuto de eso.
Jimin cerró sus ojos y luego los abrió cuando Seokjin imitó su posición sentándose frente a él.
—Creo… No —se detuvo el rubio —siento que podría cambiar mis planes por ti, Seokjin.
El azabache se acercó más y alcanzó las mejillas de Jimin con sus manos —hazlo —besó rápidamente sus labios y se alejó un poco de esa boca tentadora —lo que sea que signifique eso, solo hazlo.
Jimin se sonrojó ante el alcance de esas palabras y lamió sus labios tocando también con la punta el labio inferior de Seokjin.
—Hay algo que debes saber.
—Dímelo y así podemos pasar a la parte divertida.
—¿Si?
Seokjin asintió lentamente —ya sabes, la parte en donde tu lengua y la mia se juntan.
—Eso me gustaría así como ahora mismo.
Jimin abrió su boca y ladeó su cabeza para recibir el beso, Seokjin frente a él cerró sus ojos acercándose y cuando sus bocas se tocaron Jimin suspiró como si nunca hubiese probado esos maravillosos labios.
Estaba tan feliz que ni siquiera le importó que estuvieran un parque besándose de una manera que invitaba a estar más cómodos, como en una cama.
—Dime si hay algo más que deba saber antes de entrar a tu casa y conocer a tu familia.
Seokjin lamió por última vez el labio de Jimin y se separó un poco, solo para poder hablar.
—Mis padres no saben que veía a Taehyung de vez en cuando en Rain, ellos creen que todo acabó cuando me fui hace años.
—Oh…
—Si, mi madre lo adora —Seokjin suspiró, quizá no debería haber llevado a Jimin. No quería que se sintiera incómodo.
Jimin odiaba cuando estaba en lo cierto, había tenido la pequeña intuición de que la familia Kim tendría apego por ese idiota y ahora lo confirmaba, pero y aunque eso en algún momento lo hubiese hecho escapar, ahora quería demostrarle a todos ellos que él era tan bueno o incluso mejor que ese tal Taehyung.
—No voy a dejar que ella te incomode, suele ser muy directa y sin filtro, no es una mala persona pero a veces no sabe callarse —Jin se disculpó antes de tiempo mirando los hermosos ojos de Jimin —eres el segundo novio que traigo a casa… Ella está contenta por eso pero en algún momento se va a acordar de Taehyung, solo quiero que lo tengas en cuenta y no lo tomes a mal ¿si?
—Está bien, no se puede hacer nada contra la historia ¿cierto?
—Eres mi decisión ahora mismo, la primera vez fue casi una obligación. —Jin sonrió y atrajo a Jimin para besarlo nuevamente y amó su rostro sorprendido por lo que dijo. —No voy a dejar que nadie te haga sentir incómodo, aunque sea mi madre.
—Gracias por eso. Me gusta —Jimin lo abrazó por el cuello y ambos cayeron al pasto, se besaron de inmediato sin preocuparse si alguien los estaba viendo.
Sus lenguas se encontraron y manos se deslizaron por el cuerpo del otro ante la mirada atónita de dos hombres jóvenes que los miraban a lo lejos.
—¿Ese es Seokjin?
—Creo que si.
—Oh vaya ¿ellos van a hacerlo aquí?
—No seas tonto.
—Tu hermano siempre me pareció tan correcto, hasta aburrido pero míralo ahora.
Jungkook se echó a reír y asintió —se ve cómodo —el rubio miró hacia el cielo —por fin encontró a alguien mejor que tu hermano.
—¡Oye!
Jungkook se encogió de hombros, luego miró a su hermano que se veía como un adolescente riendo sobre el pasto mientras un hombre delgado y muy rubio estaba en medio de sus piernas.
—No deja de tener buen gusto —Jungkook se rió y luego silbó realmente fuerte haciendo que la pareja se detuviera enseguida.
—Oh mierda, ese es Jungkook —Seokjin giró su cabeza y sonrió de inmediato al ver a su hermano a lo lejos.
—Mira la presentación que tendré ante tu familia, primero salí corriendo y ahora voy a conocer a tu hermano hecho un desastre.
Jin se puso de pie imitando a su novio, tomaron sus manos y comenzaron a caminar para encontrarse con Jungkook que todavía los miraba con una sonrisa enorme en su rostro.
—Estás perfecto, podrías ponerte una bolsa de basura y aún así te verías increíble.
Jimin sonrió y miró hacia sus manos unidas cuando sintió el calor llegar hasta su rostro.
Cuando se pararon frente a los más jóvenes de inmediato Jungkook estiró su mano para saludar.
—Él es mi hermano, Jungkook y su amigo Mingyu.
Jimin los saludó a ambos estrechando sus manos. Mientras Seokjin abrazó fuerte a su hermano para luego comenzar a caminar todos juntos de vuelta a la casa.
—Mamá los vio salir.
Seokjin asintió —necesitábamos hablar, ¿te mandó a buscarme? —preguntó incrédulo.
—Algo así —Jungkook se encogió de hombros —fue más bien como, Kookie, anda a ver a tu hermano, quizá le pasó algo. Dile que traiga a su novio y que se deje de esconder. —Imitó la voz de su madre haciendo reír a los otros hombres.
—Oh si, eso suena a mamá completamente.
Seokjin apretó suavemente la mano de Jimin mientras caminaban, le sonrió para calmarlo si es que estuviera nervioso y como era de esperar las mariposas dentro de él revolotearon feliz al ver una bonita sonrisa en los labios de su novio.
Ahora sí estaban listos para visitar a los Kim.
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Un pequeño capitulo porque quería escribir esta historia ❤️
Gracias por el apoyo 💛
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