Bayonetta vs Morrigan

Hola sip nuevo y último capitulo espero y les guste sin más que decir o por añadir comenzamos LET'S GOOOO!!!
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En el coliseo de Ragnarök, donde dioses y humanos enfrentaban en batallas que decidirían el destino de la humanidad, el aire estaba cargado de tensión esta última batalla prometía ser una de las más emocionantes hasta ahora, con dos mujeres poderosas enfrentándose cara a cara en un lado, Bayonetta, la última de las brujas de Umbra, con su encanto letal y habilidades mágicas sin igual. Del otro, Morrigan, la diosa celta de la guerra y la muerte, quien traía consigo la presencia oscura del destino inescapable.

El ambiente era solemne mientras Heimdall, el anunciador de las batallas, se preparaba para hacer la presentación. La multitud aguardaba con anticipación. Entre los dioses, se veía a Zeus con los brazos cruzados, una sonrisa juguetona en su rostro, mientras Brunhilde permanecía de pie, observando con ojos agudos, evaluando cada movimiento

Heimdall: ¡AHORA!
*Gritó Heimdall emocionado alzando su brazo al cielo*

Sin previo aviso, Morrigan fue la primera en moverse su cuerpo se inclinó hacia adelante con una velocidad inesperada, como una sombra fugaz. Cerrando la distancia entre ellas en un abrir y cerrar de ojos, lanzó un poderoso puñetazo explosivo dirigido directamente al rostro de Bayonetta. El golpe iba cargado de pura energía destructiva, como si el propio destino se volcara en el impacto.

¡BOOM!

El puñetazo conectó, enviando una onda de choque que sacudió el coliseo. El suelo bajo sus pies se fracturó instantáneamente, y una explosión de energía oscura envolvió a Bayonetta. La multitud quedó boquiabierta, y Zeus soltó una carcajada divertida.

Zeus: ¡Así se hace!
*Rugió Zeus, emocionado por la brutalidad del ataque inicial*

Sin embargo, entre los escombros y la energía que se disipaba, una figura emergió. Bayonetta, con su habitual elegancia, había bloqueado el golpe con sus brazos cruzados. A pesar del impacto, su postura permanecía impecable, y su sonrisa, más amplia que nunca.

Bayonetta: bueno, bueno... me gusta cuando las cosas empiezan así
*Dijo Bayonetta, levantando una ceja, su tono burlón como siempre*

Morrigan retrocedió un paso, sorprendida por la resistencia de la bruja, pero no dejó que eso la desconcentrara. Sabía que la batalla sería difícil, pero estaba preparada para lo que vendría

Bayonetta, sin perder tiempo, realizó un elegante giro en el aire, disparando una ráfaga de balas desde sus pistolas, Scarborough Fair las balas mágicas surcaron el aire, apuntando hacia Morrigan con precisión letal. Sin embargo, la diosa de la guerra se desvaneció en una nube de cuervos justo antes de que las balas la alcanzaran, reapareciendo a unos metros de distancia

Morrigan: Tienes estilo, lo admito, pero no te servirá contra el destino
*Dijo Morrigan, con una voz que sonaba como el susurro de la muerte*

Bayonetta sonrió, sacudiendo su cabello.

Bayonetta: ¿Destino? Querida, el destino lo escribo yo
*Respondió Bayonetta con confianza, antes de lanzarse hacia adelante en un destello de velocidad*

La batalla se volvió frenética. Bayonetta se movía con una gracia imposible, realizando acrobacias y ataques combinados mientras lanzaba hechizos y disparos en perfecta sincronía Morrigan respondía con la furia y la precisión de una diosa guerrera sus golpes resonaban con una fuerza titánica, y cada uno de sus ataques parecía estar cargado de una intención fatal

Bayonetta, a pesar de su actitud despreocupada, sabía que no podía subestimar a Morrigan cada vez que la diosa atacaba, la sensación de inevitabilidad la rodeaba Morrigan no solo era fuerte; su conexión con el destino hacía que cada golpe tuviera un peso que parecía insalvable

En un momento crítico, Morrigan invocó una legión de sombras que se levantaron del suelo como guerreros espectrales, todos cargando contra Bayonetta. La bruja, sin perder la compostura, activó su "Witch Time", ralentizando el tiempo alrededor de ella en este mundo de movimiento casi detenido, se deslizó entre los espectros con facilidad, lanzando disparos y cortes con su látigo mientras la música de la batalla resonaba en sus oídos

Bayonetta: No está mal, querida. Pero deberías saber que una bruja siempre tiene trucos bajo la manga
*Murmuró Bayonetta mientras se elevaba en el aire*

Umbra vs Guerra


La batalla alcanzó su punto culminante cuando ambas decidieron poner todo su poder sobre la mesa Morrigan, en su forma más temible, se transformó en un cuervo gigante, sus alas negras cubriendo el cielo mientras lanzaba una tormenta de muerte y destrucción sobre la arena el viento oscuro azotaba a la multitud, mientras la propia arena comenzaba a resquebrajarse bajo el peso de su poder

Bayonetta, por su parte, invocó a su demonio más poderoso, Madama Butterfly la gigantesca figura demoníaca emergió del suelo, lista para enfrentar a la encarnación de la muerte misma. El choque entre Madama Butterfly y Morrigan sacudió los cielos. La fuerza pura de ambas entidades resonaba en cada rincón del coliseo, mientras la energía oscura y mágica se enfrentaban en una batalla sin cuartel

Cada golpe, cada destello de poder, era una muestra de la magnitud de sus habilidades. Morrigan lanzó un ataque final, una ráfaga de energía oscura que parecía imposible de evadir, mientras Bayonetta, en un movimiento calculado, para ejecutar su ataque final con Madama Butterfly, para golpear con una fuerza devastadora

En el coliseo de Ragnarök, la multitud rugía en anticipación. Bayonetta, la última bruja de Umbra, había dado un espectáculo de destreza y estilo, mientras que Morrigan, la diosa celta de la guerra y la muerte, imponía su poder oscuro sobre el campo de batalla. Ambos combatientes habían desplegado toda su fuerza, pero la batalla estaba a punto de alcanzar su clímax

El choque final parecía inminente.

Bayonetta: Vamos, querida. Esto termina aquí
*Dijo Bayonetta que sonrió con arrogancia, confiando en que su invocación demoníaca le daría la ventaja definitiva*

Sin embargo, Morrigan, aunque agobiada por el poder de Madama Butterfly, no retrocedió La diosa de la guerra no era alguien que confiara en la pura fuerza bruta ella entendía el destino y la inevitabilidad de la muerte, y sabía que en una batalla, la paciencia y el cálculo eran tan importantes como el poder.

Morrigan: No puedes huir del destino, bruja.
*Murmuró Morrigan, su voz resonando a través del campo de batalla como un eco oscuro*

Bayonetta, siempre lista para un contraataque, utilizó su habilidad de Witch Time, ralentizando el tiempo para esquivar y contraatacar con precisión letal pero Morrigan, consciente de las capacidades de la bruja, había estado observando cada movimiento de Bayonetta desde el principio la diosa guerrera no solo era fuerte; era astuta y calculadora sabía que no podía vencer a Bayonetta en su propio juego de velocidad, pero también sabía que cada movimiento de la bruja dependía de su control del tiempo y del espacio.

En un movimiento Bayonetta ejecuta su Madama Butterfly, Morrigan en un movimiento que parecía desesperado, Morrigan se dejó golpear por su ataque, su forma de cuervo cayendo al suelo en una aparente derrota la multitud quedó en silencio por un momento, y hasta Brunhilde, observando desde las gradas, frunció el ceño en confusión.

Bayonetta: ¿Eso es todo?
*Preguntó Bayonetta, ajustando sus gafas mientras Madama Butterfly se disolvía tras ella. Su tono estaba cargado de burla y autosuficiencia*

Pero en el instante en que Bayonetta bajó la guardia, el verdadero plan de Morrigan se reveló desde las sombras del campo de batalla, una legión de espectros invocados por Morrigan surgió no eran simples invocaciones; eran las almas de los guerreros caídos, traídos de vuelta por la diosa de la muerte para cumplir su voluntad cada uno de ellos cargaba hacia Bayonetta, ralentizando sus movimientos, obligándola a gastar su energía en defenderse de sus ataques

Morrigan se levantó, gravemente herida, pero con una mirada de triunfo en sus ojos.

Maorrigan: Este es el destino que no puedes evitar, Bayonetta, tú juegas con el tiempo, pero yo controlo el destino de los que caen. Todos vuelven a mí al final
*Dijo Morrigan con voz fría y decidida*

Bayonetta, sorprendida por la emboscada, activó nuevamente su Witch Time, pero esta vez algo estaba mal. Su control sobre el tiempo se debilitaba, como si una fuerza invisible la estuviera deteniendo Morrigan había estado observando cuidadosamente cómo Bayonetta usaba su poder, y con la ayuda de las almas de los muertos, había corrompido el flujo temporal alrededor de la bruja. Cada vez que Bayonetta intentaba ralentizar el tiempo, las almas de los guerreros caídos la anclaban más y más al presente.

Bayonetta: ¿Qué demonios...?
*Dijo Bayonetta que frunció el ceño, sintiendo cómo su ventaja se desvanecía*

Con Bayonetta atrapada y su control sobre el tiempo debilitado, Morrigan avanzó, sus ojos brillando con el poder oscuro de la muerte la diosa celta levantó sus manos, invocando su habilidad más devastadora desde el cielo, los cuervos comenzaron a descender, envolviendo a Bayonetta en una tormenta de plumas oscuras y energía sombría

Bayonetta intentó luchar, pero cada bala y cada golpe que lanzaba pasaba a través de los cuervos espectrales sin causar daño la energía de Morrigan la rodeaba por completo, y por primera vez en la batalla, Bayonetta no pudo encontrar una salida la multitud observaba en silencio mientras la tormenta de cuervos se intensificaba, oscureciendo el campo de batalla.

Morrigan: no puedes escapar de lo inevitable
*Dijo Morrigan mientras extendía su brazo hacia adelante*

Con un último gesto, Morrigan lanzó un ataque final, una ráfaga de energía oscura que golpeó a Bayonetta con una fuerza imparable el impacto resonó por todo el coliseo, y la bruja de Umbra, debilitada y atrapada por las sombras, finalmente cayó al suelo

La tormenta de cuervos se disipó, y la figura de Morrigan quedó de pie, mirando el cuerpo derrotado de Bayonetta con una mezcla de respeto y frialdad.

Morrigan: El destino ha hablado
*Murmuró la diosa, dando media vuelta mientras el silencio cubría el coliseo*

Bayonetta, siempre desafiante hasta el final, intentó levantarse, pero su cuerpo no respondió empezó a desaparecer había perdido, no por falta de habilidad, sino porque Morrigan había comprendido que el verdadero poder no residía solo en la fuerza, sino en la manipulación del destino mismo...

La multitud, atónita por el resultado, permaneció en silencio por un momento, antes de que Zeus rompiera el mutismo con una carcajada.

Zeus: ¡Qué final!
*Exclamó, claramente complacido por la imprevisibilidad de la batalla*

Brunhilde, aunque frustrada por la derrota de Bayonetta, no pudo evitar reconocer la astucia de Morrigan había ganado no solo con poder, sino con estrategia.

Zeus: Morrigan Impresionante. No esperaba menos de la diosa de la guerra
*Dijo Zeus, mientras la diosa se acercaba a él*

Morrigan sonrió, su mirada fija en el horizonte.

Morrigan: siempre gano, Zeus. Después de todo, la muerte siempre tiene la última palabra
*Dijo Morrigan tranquila*

Después de caminar un rato en uno de los pasillos Morrigan cae al suelo y empieza a desaparecer la pelea le dejo secuelas irreparables pero dando una última victoria a los dioses...

FIN...
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yo viendo el final que escribi:

Okno xdd pero bueno espero que les haya gustado y bueno escribi 1845 palabras ahora sí sin mas me despido chau chau

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