nueve.

—Negativo—El señor Choi gruñó

—¿Otra vez? ¿Estas segura que pasaste tu celo con él?—Jihyo bufó

—Estoy completamente segura, desde que nos casamos hemos pasado nuestros celos juntos—Se cruzó de brazos

—¿Entonces porqué no estas en cinta? ¿Se están protegiendo?—Exclamó con enojo

—¡Claro que no!—Gritó bajo la atenta mirada de su padre, se dejó caer en el sofá de la sala que usualmente usa

Jihyo lanzó la prueba de embarazo a la mesa en medio de la sala de estar y llevó sus manos a su cabello revolviendolo con desesperación.

Desde hace seis años que Jihyo y el alfa se casaron estuvieron pasando juntos sus celos, Chan no perdía la oportunidad de tener relaciones con la omega cada vez que tenían espacio libre en sus agendas, su lobo tampoco se iba a privar de tener placer sexual pero después de dos años sus padres insistieron en que era momento de tener cachorros.

Después de un año de intentar quedar en cinta y pruebas de embarazo fallidas decidieron hacer unos exámenes y averiguar cuál era la razón por la que no podían concebir.

Los exámenes mostraron que ninguno de los dos es infertil, Chan demostró que él no era el problema pero la omega tampoco tenía problema alguno en su cuerpo, ambos son muy fértiles así que la conclusión a la que el médico llegó es que el problema está en sus lobos, el lobo del alfa o la omega no permite que conciban un cachorro.

Ésto mantenía frustrado al padre de la omega y el padre del alfa, a Chan no le importaba el tema pero formar una familia era algo importante para su familia así que hace el intento.

Actualmente, continúan teniendo relaciones y pasando sus celos sin usar protección pero las pruebas siguen dando negativo.

—Arregla las cosas con tu lobo—El señor Choi se levantó del sofá y caminó hacia la salida de la casa de su hija dejando saber su enojo mientras cerraba la puerta con fuerza

Seungmin se encontraba en la entrada de la escuela junto a Felix en espera de que sus cachorros salgan y les cuenten sobre su día.

A lo lejos pudo ver cómo ambos cachorros corrían junto a otros niños hacia la salida, Felix lucia más feliz y emocionado que los pequeños, brincaba y agitaba su mano para que los pequeños lo vieran.

—¡Mami!—Ambos niños abrazaron a sus mamás con una enorme sonrisa

—¿Como te fue hoy cariño?—Besó la frente de su hijo

—¡Muy bien! Fue tan divertido hoy—Rió

—Felix tengo que irme, el día de hoy tengo planes con mi cachorro—El rubio asintió con una sonrisa

—Vamos a casa Innie, he preparado una deliciosa comida para ti—Caminaron hacia el auto del rubio para emprender camino a su casa

—Mami ¿Qué haremos hoy? No tengo tarea—Aplaudió con emoción

—Iremos a visitar a alguien muy especial—Tomó la mochila de su hijo y la colgó en su hombro—Vive cerca de aquí así que iremos caminando

—¿Veremos a la Tía Somi?—El omega negó

—Es un omega muy lindo, estará feliz de conocerte—Sonrió un poco nervioso—Pero antes necesitamos comprar un regalo, no podemos llegar con las manos vacías

—¡Si! Compremos un pastel

Ambos caminaron a un supermercado en busca de un buen regalo para el omega que visitarían, recorrieron los pasillos en busca de algo útil para regalar, el pequeño quería un pastel pero no era suficiente para Seungmin así que se adentraron en el pasillo de cosas para el hogar.

—Mami, quiero unas galletas ¿Me las compras?—Con su pequeña mano señaló el área donde se encontraban los dulces y demás

—¿Porqué no traes algo más que galletas?—Se inclinó a la altura de su cachorro y le sonrió—Trae dos bolsas de botanas grandes—El pequeño asintió emocionado

—¿Las puedo elegir?

—Claro, ve por ellas, esperaré aquí cariño—El cachorro asintió y corrió hacia el estante donde se encontraban las botanas que le pidió su mamá

El omega veía cada producto en el pasillo, un juego de platos con flores pintadas le llamó la atención, observó cada detalle en los platos y los vasos que contenían envueltos en el mismo plástico, a su madre le encantan los platos llamativos además de que le encanta mostrarlos a quien sea que visite su casa, dejó el paquete dentro del carrito junto al pastel que su pequeño eligió y antes de avanzar una voz llamando su nombre lo detuvo.

—¿Seungmin?—El omega reconoció esa voz, maldijo por dentro y tomó el carrito listo para avanzar pero nuevamente lo llamaron—Seungmin, sé que eres tú—Caminó hacia el omega y tocó su hombro

—Hola Jisung—Sonrió de lado—Hace mucho que no nos vemos—Apoyó su brazo en el carrito

—Por supuesto, cinco años sin saber de ti—Rió sarcásticamente

Seungmin miró a la cachorra en el asiento del carrito y al otro cachorro que tomaba la mano de su mami, al final Minho y Jisung decidieron tener más de un cachorro.

—¿Son tus cachorros?—Sonrió revolviendo el cabello del niño

—Si, él es Yujin y ella es Yuna—La pequeña saludó con su mano al omega recibiendo un saludo y sonrisa de parte de él—Y éste cachorrito aún es un misterio—Brindó caricias a su vientre levemente grande

—¿Estás en cinta?—Preguntó sorprendido pues Seungmin nunca creyó que la pareja quisiera una familia grande

—Si, Minho y yo estamos muy emocionados, será mi último embarazo—Sonrió mostrando su vientre—¿Y tú? ¿Qué ha pasado contigo? ¿Por fin conseguiste un alfa?

—¿Qué es ese olor?—El pequeño cachorro de Jisung olfateó levantando su cabeza

—¿De qué olor hablas cariño?—Yujin soltó la mano de su mamá y dió un paso hacia el omega deteniendo su andar cuando un niño llegó corriendo felizmente

—¡Las conseguí mami! ¡Las conseguí!—El cachorro brincaba felizmente mostrando los paquetes de botanas

Seungmin se colocó al frente de su cachorro evitando que Jisung lo viera, tomó las bolsas y las dejó caer en el carrito.

—¿Mami?—El omega frunció el ceño, Seungmin rodó los ojos—¿Tienes un hijo?

El pequeño miró a través de las piernas de su madre, un omega tenía el ceño fruncido y sus brazos se encontraban cruzados y frente a él un pequeño omega quien lo miraba con los ojos bastante abiertos.

—¿Quiénes son ellos mami?—Se escondió detrás de los pies de su mami

—¡Tienes un hijo!—Gritó y cubrió su boca rápidamente

—Silencio Jisung, estás asustandolo—Susurró

—¿Tú...?—Miró el cuello de su amigo—Pero no tienes una marca...

—No tengo mucho tiempo Jisung, debo llegar a un lugar—Tomó la mano de su hijo y con la otra tomó el mando del carrito comenzando a caminar fuera del pasillo

Una vez que terminaron de hacer sus compras y salieron del lugar Seungmin pudo respirar normalmente, no esperaba encontrarse con Jisung tan pronto, un sentimiento de preocupación lo inundó, probablemente Jisung avise a los demás sobre su regreso.

—¡Hola Minnie!—Un omega abrazó a Seungmin—Adelante chicos

—Hola—El cachorro saludo con una sonrisa—Soy Kim Soomin

—Hola Soomin, eres un niño muy grande y hermoso como tu padre—Acarició la mejilla del pequeño—Los estábamos esperando

—Hemos traído un par de regalos—Caminaron hasta el comedor y tomaron asiento

—¡Yo elegí el pastel!—Brincó el cachorro al rededor de la mesa—Es de chocolate

—¿Chocolate? Pero a ti no te gusta el chocolate Min—El omega preguntó con el ceño fruncido

—Estar en cinta me hizo amar cualquier dulce, además Soomin es un cachorro tranquilo incluso si come dulces—Suspiró—Tuvo una muela picada por comer tantos dulces en mi embarazo—El omega rió

—Bien Soomin, siéntate junto a tu abuela—Palmeó el asiento junto a él y Soomin se sentó emocionado moviendo sus pies

—¿Y mi papá? ¿Está en casa?—Pregunto mientras ayudaba a su madre a poner la mesa

—Tu padre está terminando de arreglarse, está emocionada por conocer a su nieto por primera vez

Seungmin había estado en contacto con sus padres las últimas semanas antes de su regreso a Corea, les confesó que regresaría con una pequeña sorpresa, Seungmin quería que fuera una sorpresa pero el pequeño cachorro se coló a su video llamada, no era como esperaba pero sus padres estuvieron felices con la noticia de tener un nieto, por supuesto que no todo fue feliz después de escuchar que el cachorro no tiene un padre y el omega tampoco tiene un alfa ni una marca.

—¡Estoy aquí!—Abrió la puerta delicadamente viendo el panorama en el comedor—¿Eres Soomin?—El pequeño asintió con una sonrisa—Eres un niño muy lindo

—Siéntate Ryujin nuestro nieto no puede esperar más—La alfa tomó asiento junto al cachorro quien jugaba con un pequeño juguete—Espero que te gusten las papas que preparé

—Eunchan ¿No crees que nuestro nieto es muy lindo?—Revolvió el cabello del cachorro—¿Hablas coreano?

—Si, mi mamá me enseñó a hablar coreano desde que nací—Ryujinde sorprendió por el pequeño que domina el coreano a la perfección—También se hablar inglés abuelo

—Tienes solo cinco años y sabes hablar dos idiomas, Seungminnie has dado a luz a un cachorro tan inteligente—La alfa sonrió más satisfecha viendo como su omega deja su plato con comida frente a ella

—Soomin es bastante inteligente, tiene las mejores calificaciones en su clase—Sonrió orgulloso

Ryujin y Eunchan estuvieron encantados de comer y pasar tiempo conociendo a su nieto, el pequeño también disfrutaba cada momento con sus abuelos  contando anécdotas graciosas y lindas que tiene con su mamá, Seungmin complementaba las historias de su cachorro poniéndole un tono de voz que lo hacía ver divertido.

Cuando la noche llegó y el pequeño fue derrotado por el sueño Seungmin decidió que era hora de regresar a su hogar.

—Listo—La alfa terminó de abrochar los cinturones en la pequeña silla de su nieto

—Gracias por venir Minnie, has hecho un gran trabajo criando a Soomin tú solo—Abrazó a su hijo—Pero... ¿Qué harás cuando quiera saber sobre su padre? No puedes ocultarlo por mucho tiempo

—Los secretos no duran mucho tiempo, tarde o temprano se sabrá la verdad—Añadió la alfa—Tómate tu tiempo cariño, si necesitas ayuda, tus padres están aquí—Se unió al abrazo

—Aún no es el momento, sé que Soomin preguntará por su padre tarde o temprano—Suspiró mirando a su hijo dormir detrás del asiento del piloto—Espero que ésta vez no tenga problemas en la escuela—Susurró

Hace dos años mientras Soomin festejaba su primer día del padre en la escuela, la maestra citó a todos y todas las alfas padres de los cachorros, normalmente la escuela realizaba un concurso en el que los cachorros y sus padres competían contra otros alfas para ganar puntos y el que reunirá más puntos ganaría un increíble premio, desafortunadamente el pequeño Soomin recibió burlas de sus compañeros al ver que la persona que competiría sería su mamá.

Seungmin notó en su cachorro tristeza, después de ese día lloró tanto que sus pequeños ojos estaban bastante hinchados, conforme pasó el tiempo el pequeño aunque no lo mostrara su mamá se daba cuenta que le afectaba en su día a día escolar.

—Pueden visitarnos cuando quieran, son bienvenidos en nuestra casa—Palmeó la espalda de su mamá y deshizo el abrazo—Mañana hay clases así que mejor me voy

—Conduce con cuidado cariño—Se despidió el omega sacudiendo su mano

—¡Te llamaremos pronto! Descansa—El omega subió a la parte trasera del auto junto a su hijo y dirigió el taxi hacia su casa

Cuando llegó a su casa dejó a Soomin en su habitación y mientras aún dormía cambio su ropa por la pijama y lo cubrió con las mantas con figuras de dinosaurios.

Miró a su cachorro dormir tranquilamente, brindó caricias a su rostro y observó su pequeño rostro con más atención, tenía un leve parecido a su padre, la nariz y la hermosa sonrisa que caracterizaban al alfa lo había heredado el cachorro, el omega besó la frente del cachorro y salió de la habitación dirigiéndose a la suya para poder descansar.

¡Bienvenidxs a un nuevo capítulo!
¿Cómo estuvo?

¿Como creen que reaccionen los chicos
ante la noticia sobre el regreso
de Seungmin?

Por cierto, parece que vi a alguien
confundidx con la historia, si se
perdieron en algún momento de la
historia o tienen dudas pueden
dejar su duda aquí y les responderé :)

No olviden votar si les gustó, pueden
dejar un comentario haciéndome
saber que les agradó el capítulo.

¡Gracias por leer!

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