✗ ❰ Errores ortográficos no corregidos ❱ ✗

Mire mi alrededor, los colores pastel, el olor a perfume, algo extraño para ser ciertos.

Yo rei levemente, y no sabia por qué.

" ¿Por que te ríes? "

pregunto mi subconsciente, yo solo ignore eso, no tenía ganas de escuchar esos sermones, los cuales yo nunca hacia caso.

" No me ignores... "

Yo solo solte un suspiro molesta.

" ¿Que quieres? "

Pregunte yo molesta en mis adentros. Odiaba cuando Akari empezaba hablar, y si, le puse un nombre a mi subconsciente.

" Nada. Solo queria molestar. "

Dijo ella, no sabia si era yo, pero su tono se escuchaba burlón.

Yo solamente ignore todo eso y me fui a mi closet. Necesitaba algo lindo he inocente, algo que llamara la atención, pero a la vez no.

¿Quien entenderia todo esto?

Yo solo tome una falda color morado pastel, una blusa blanca con la carita de un gato de manga corta, y unos zapatos morados.

Me mire al espejo y solte un suspiro.

Cuatro años habían pasado, cuatro años sin verlos, se sentia algo extraño pero a la vez no.

" Rompe corazones...? "

Dijo confundida mi subconsciente.

Rompe corazones, si, eso es lo que podría describirme en estos cuatro años.

Uno, tras otro, tras otro, yo rompía.

¿A quien le interesa eso?

Es mi vida, no la tuya.

" Grosera "

Dijo molesta mi subconsciente.

Y si, era grosera, aunque ni tanto. Yo solo decía mis bellas opiniones.

Estoy cansada de que personas te controlen.

Tal vez te digan que calles tu boca, pero eso no para nuestras opiniones.

Hermano, cometiste un error al elegir a Lisanna. Aunque siempre me pregunte algo...

" ¿Por que hizo eso? "

Pregunto mi subconsciente.

Eso tenia respuesta, y mi respuesta es por que es Lisanna.

" ¿Que no los villanos tienen razón para ser villanos? "

Pregunto otra vez mi subconsciente.

No sabia que decir.

¿Los villanos tienen razones para ser villanos?

Una parte de mi decía que si, y otra parte de mi decía no.

" Dices que tal vez digan que te calles, pero eso no calla tu opinión. ¿No crees que deberíamos escuchar la opinión de Lisanna? "

Decía mi subconsciente.

Por esa razón jamás la escuchaba, solamente decia tonterías.

O tal vez no.

" Callate "

Fue lo único que pude decir.

¿Y si era verdad?

¿Y si solamente necesitabanos escuchar su opinión, su razón?

Los villanos no tienen razón.

Dijo una parte de mi.

Y tal vez era verdad, tal vez los villanos eran solamente villanos.

Mi cabeza era un guerra, entre lo bueno y lo malo, si es que había una de esas dos cosas.

― ¡Lucy! ― Escuche como Erza gritaba desde abajo.

Sabia que Lucy tal vez hizo algo, o tal vez no. Últimamente Erza no andaba de humor, y no sabia por que.

Tal vez era por que vio a Jellal, pero no creo que fuera tan malo ese reencuentro.

" Tu ni siquiera te has encontrado con Romeo "

Hablo mi subconsciente, su tono sonaba algo serio, algo que era normal para mi.

Mi subconsciente siempre estaba seria.

― Callate... ― Susurré yo en voz baja, para luego agarrar mi mochila y bajar abajo.

Vi a Mira cosiendo, algo que ella siempre hacia. Levy leyendo su libró, como siempre. Juvia mirando sus cabellos azules, algo que era raro, pero que hacía cuando estaba nerviosa.

Y Lucy... ella estaba mirando a Erza con una mirada suplicante, y si, Erza estaba enojada con ella.

― ¡Lucy! ¡Te dije que no tiraras el pastel! ― El tono de Erza sonaba enojado, muy pero muy enojado.

Yo mire a Erza, sabia que hacer en momentos como este.

― Erza-San... Yo tire el pastel... Gomenasai... ― Fue lo único que pude decir, aunque yo ni siquiera sabía de que pastel hablaban.

Mire como la expresión de Erza cambiaba de enojada, a seria.

Ella simplemente solto un suspiro y se fue de allí.

― G-Gracias... Creo... ― Dijo Lucy lo último con una sonrisa nerviosa.

Sabia por que estaba así, Erza se había enojado, lo cual era raro de ella. La mayoría de las veces Erza era calmada, pero al parecer hoy no estaba de humor.

Yo solo le sonreí levemente.

Las horas pasaban y teníamos que ir a la escuela.

Sentía las miradas de todos. Afuera me veía como una chica que no le importaba éso, pero la verdad era qué... me sentía vulnerable...

Siempre me sentía así cuando sentia esas miradas. Cada vez que las notaba, sentía que esperaban a que cometiera un error para burlarse.

Y si, odió que me miren.

Siento que cuando te miran te crítican, siento que cuando te miran eres el centro de atención.

Cada paso que doy, siento que soy vigilada por esas miradas. Odio las miradas, por que cada vez que las hacen, siento todo eso.

Las chicas se despidieron, dejándome sola, totalmente sola.

Aunque soy una de las chicas mas positivas, tengo que mantener una sonrisa, para no preocuparlas y hacerlas sentir mal.

" No ocultes tus sentimientos... "

Dijo mi subconsciente.

No los ocultó, solo que no quiero preocuparlas por estos pensamientos que tengo.

" No tengas miedo... "

Hablo mi subconsciente otra vez.

No es que tenga miedo, solo que... me acostumbre a ocultar lo que siento...

Familia.

¿Que es eso?

Una palabra que solo te confunde, una palabra que solo te hace sentir soledad, por que al final, la palabra familia no esta en mi vocabulario.

" ¿Que no tus amigas son tu familia? "

Preguntó mi subconsciente confundida.

Ella solo es mi subconsciente, tal vez le puse nombre, pero eso no quita que es solo mi subconsciente.

― ¡Romeo! ― Escuche un grito molesto, un gritó de alguna de esas chicas molestas.

No se si fui yo, pero todo paso en camara lenta.

Un chico de cabellos azabaches, corriendo rápidamente hacia mi lado.

Ese momento duro demasiado tiempo, para mi, claro.

Mis cabellos azules obscuro se movieron levemente cuando el chico paso.

Y allí sali de mi realidad.

¿Como salí de mi realidad?

Vi que ese azabache beso a una peli-rosa, y al parecer esta correspondió gustosa.

Al parecer ya lo había encontrado, Romeo y Chelia...

El pasado se encontró con el presente, y esto no era bueno.

Se me había olvidado eso, ellos dos eran novios, lo cual hacía esta venganza mas difícil de cumplir.

No se por que sentía esto, no se por que me sentía vacía, todo esto era extraño.

Y solo sabía algo, solo sabía algo que decir...

― Romeo-Kun... ― Susurré yo, susurre el nombre que no había pronunciado hace cuatro años. Lo que susurre era, como le llamaba antes.

Romeo-Kun...

El nombre que llevo a mi destrucción.

No sabia por que decia el kun, si yo prometí jamas llamarlo de esa manera.

Por que me siento así.

¿Que no me debería de sentir feliz ante todo esto?

Quien me entiende... soy Wendy después de todo...

Espero que les haya gustado esta nueva versión de la narración original.

Pregunta para ustedes.

¿Que les pareció este capítulo?

¿Debería continuar escribiéndolo así?

Si no les gusto algo, solo diganlo. Me gusta ver qué es lo qué opinan ustedes.

¡Nos vemos luego!

¡Otaku Lover Fuera!