-Agh ¿Por qué me siguen mirando así? -preguntó exasperada Sasha. -¡Han pasado dos días, joder!

Hop Pop, Anne y Sasha se habían animado a surtir algunos objetos de la tiendo de Leopold. Polly se había quedado entrenando con Grime y Sprig simplemente se había rehusado a acompañarles.

-Exacto, sólo han pasado dos días -respondió desinteresado Hop Pop. -Es normal que la gente aún tenga una mala, por no decir pésima visión de tí. Anne no secuestró ni amenazó a nadie y aún así le fue difícil ganarse el cariño del pueblo.

-En eso, H.P tiene razón -continuó optimista Anne. El anciano hizo una mueca por el apodo. -Esto tomará tiempo, pero estoy segura que con las acciones adecuadas podrás llevarte bien con cualquier rana de Wartwood.

-Hmf -bufó desinteresada Sasha y siguió buscando en su búsqueda por encontrar cosas interesantes.

Anne soltó una tierna risilla en reacción a la infantil acción de su amiga, Sasha le correspondió con una sonrisa de lado.

Nuevamente podía sentir su estómago llenarse de mariposas.

Una alfombra de textura suave y superficialmente brillosa atrajó su atención, sus ojos reflejantes de brillo era la evidencia de ello.
No tardó mucho para notificarle su hallazgo a la morena.

-¡Anne, mira esto! -chilló emocionada. Anne igualmente la miró con notable anhelo.

-Es... -musitó embelesada Anne.

-Perfecta -completó ilusionada Sasha. Su mirada se posó rápidamente en el ajolote dueño del lugar. -Hey, ajolote ¿Cuánto por la alfombra?

Pero Leopold ni siquiera le respondió, simplemente la miró unos segundos y nuevamente desvió su vista hacia lo que estaba haciendo. Sasha gruñó molesta.

-Leopold, amigo -llamó nerviosa Anne. -¿Cuánto por la alfombra?

-Veinte cobres, Anne -respondió servicial Leopold. Sasha abrió la boca ofendida.

-¡Tú, hijo de...! -bramó Sasha pero fue interrumpida por Anne que le tapó la boca. -¡Hnmg!

-Es mejor irnos pronto -comentó nervioso el anciano. -Me aterra que le dé rabia a tu amiga o algo.

El comentario sólo hizo enfurecer más a la rubia forcejeando más por librarse y ofender a los anfibios que se habían atrevido a afrentarla.

-Sip, creo que será lo mejor -coincidió inquieta Anne. Se le estaba dificultando tranquilizar a la contraria.

A codazos de parte de la morena hacia la rubia salieron de la tienda, dónde Anne finalmente soltó a Sasha y suspiró aliviada tras el inmediato reposo de sus brazos.

-Wow, chica -exclamó entusiasta. -Sí que tienes algo de fuerza.

-¡¿Cómo se atreve el bobo ese a ignorame así?! -preguntó exaltada ignorando el comentario de su amiga. -Agh, definitivamente odio a la gente de aquí.

-Pues eso es una mala noticia -notificó Hop Pop. -Porque aún faltan unos asuntos más que atender.

Anne le sonrió tímida a la rubia y la misma sólo resopló frustrada.

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La puerta de la casa Plantar fue abierta, para suerte, la misma no se calló. Digamos que Grime aún no la había reparado desde el inicio.

-Estoy agotada -admitió vagamente Sasha.

Y era verdad, estaba agotada más mental que físicamente. Durante todo su recorrido nadie le había ofrecido una sonrisa más allá de Anne y algunas contadas de Hop Pop.

-Anne ¿Vienes? -preguntó la rubia, para su sorpresa, la morena negó.

-Quiero hablar con Sprig -respondió tímida Anne. -Descansa un rato, aún tenemos que organizarnos más tarde para el puesto.

Para extrañeza de Anne, Sasha no replicó y sólo asintió rendida. Quizá si estaba muy cansada.

Sprig no estaba en la casa, así que la humana de tes chocolate supo dónde encontrar al menor.

Y no se equivocó, Sprig estaba junto a Bessy alimentándola con expresión serena.

-Hey, amigo -saludó nerviosa. Sprig la miró sorprendido pero rápidamente bajó su mirada.

-Anne -respondió desanimado Sprig. Parecía algo adolorido y nervioso. -¿Hop Pop me llama o algo?

-No, no es por Hop Pop que estoy aquí -respondió apenada Anne. -Soy yo la que quiere hablar contigo.

-Yo también quiero hablar contigo -coolaboró el menor. -Perdona por tratarte así, un verdadero amigo no te obliga a alejarte de alguien por sus inseguridades y sospechas.

Anne sonrió levemente y se sentó en un tronco cortado cercano.

-No, también perdóname a mí -continuó comprensiva. -Ni siquiera te escuché completamente tratando de defender a Sasha. Tú sólo estabas preocupado.

-Je, sí -admitió avergonzado Sprig. -Si tú confías en ella puedo estar muy seguro que yo también puedo hacerlo.

-Gracias, Sprig -agradeció Anne con una leve sonrisa. -¿Spranne contra el mundo?

-Spranne contra el mundo -afirmó orgulloso Sprig.

Ambos amigos se dieron la mano como forma de sellar su promesa.

-¿Regresarás a la casa? -preguntó curioso el anfibio, Anne pareció pensarlo.

-Podría hacerlo, sí -respondió pensativa. -Pero creo que me gusta más la idea de ir al lago y competir en un duelo de quién arroja más lejos las rocas.

Los ojos de Sprig se iluminaron velozmente.

-¿Y Sasha? -preguntó curioso.

-Ella puede esperar un poco -respondió segura. -Ahora ¿Prefieres seguir con el interrogatorio e ir a jugar o temes tu derrota?

-¡Sueñas!

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-¿Dónde estarán? -musitó para sí mismo frustrado.

Hop Pop buscaba a sus nietos exhaustivamente, empezaba a estresarse más que preocuparse.

-Leopold prometió que me avisaría -se recalcó molesto.

Conociendo a los chicos, estos estarían buscando peligros o jugando tontas competencias entre ellos.

Se asomó por la ventana, Grime y Polly se divertían. Por la pose arrogante del mayor podría jurar que seguramente le estaba contando historias o experiencias a la pequeña.

Suspiró frustrado. Necesitaba a alguien para un encargo, miró con cierta inseguridad la puerta del sótano.

No le inspiraba confianza la idea, podía oler el resultado pero ahora era su única opción viable.

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Sasha estaba aburrida, tenía poco rato que se había despertado de su siesta y al parecer cierta chica de cabellos esponjados aún no había llegado a la habitación.

-¿Dónde estás, Anne? -preguntó frustrada al aire.

La puerta del sótano fue abierta, emocionada dirigió su vista hacia la misma esperando anhelada a su chica.

-¡Anne! -chilló emocionada pero su emoción rápidamente decayó al no encontraste con al persona que esperaba. -Oh, eres tú.

Hop Pop rodó los ojos con fatídico al ver la expresión nada grata de su invitada.

-Sí, yo también me alegro de verte, Sasha -respondió irónico.

-¿Sabe dónde está Anne? -preguntó desinteresada. Hop Pop negó.

-Sprig tampoco está, lo más seguro es que hayan arreglado su pelea y se hayan ido por ahí a jugar -contestó seguro el anciano. -Pero vengo por otra cosa. Sé que odias a todos y quizá todos te odien a tí ahora, pero necesito que vayas a la tienda que visitamos hoy y le pidas a Leopold que te entregue un encargo.

-Oh ¿El ajolote de lentes raros grosero? -preguntó divertida Sasha. Hop Pop resopló frustrado.

-Sí, ese -afirmó cansado. -¿Crees que puedas ir? Es urgente.

Sasha lo pensó unos segundos, definitivamente su cabeza le respondía no pero hasta ella sabía que era grosero negarle un pedido al hombre que la estaba acogiendo a ella y a su grandulón amigo.

Así que perezosa asintió.

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Llegó al susodicho sitio encontrándose con la sorpresa de que el mismo se encontraba cerrada. Gruñó molesta por esto.

Es urgente.

Su mente se encargó de recordarle la importancia del asunto, fuese lo que sea, el abuelo anfibio de la chica de sus sueños le había confiado esa misión.

Miró a los lados comprobando que no hubiese nadie alrededor, suspiró aliviada cuando comprobó que las calles estaban escasas de personas ese día y se quitó un pasador del cabello.

Valía el sacrificio de su lindo pasador.

Sin problemas entró al sitio encontrándose con un desastre en el interior de la tienda ¿Un asalto?

El sonido que algunos frascos rotos en el suelo y distintas demás objetos daban el claro mensaje que el estante a su lado había sido derribado.

De repente el estante comenzó a sacudirse, Sasha alzó una ceja confundida.

-Es imposible, es demasiado peso -musitó derrotado la persona debajo del estante. -Sólo queda esperar a que alguien se dé cuenta y venga.

La humana se acercó al desastre y caminó alrededor de este hasta encontrar al supuesto dueño del lugar atrapado boca abajo del gigantesco mueble.

-¿Yo cuento cómo alguien? -preguntó sarcástica Sasha. Leopold se quedó estático para después moverse bruscamente tratando de investigar a la persona.

-Esa voz... -analizó perplejo. -¡Tú, la humana de cabellos amarillos!

-Mi nombre es Sasha -corrigió decepcionada.

-¡Cómo sea, ayúdame! -imploró el ajolote. -Llama a alguien.

Sasha analizó el estante y sonrió engreída.

-No será necesario -contestó arrogante. -Puedo hacerlo yo misma.

-¡No seas creída, sólo eres una niña! -regañó Leopold. -Sólo conseguirás lastimarte, ve por...

Ni siquiera tuvo oportunidad de reprender a la rubia cuando la presión sobre su cuerpo y cabeza desaparecieron de golpe. Estupefacto vió a la chica que cargaba el grávido¹ mueble con medido esfuerzo.

-¿Vas a seguir ahí observándome o vas a salir de una vez? -preguntó irónica Sasha, sus brazos comenzaban a flaquear. -¡Ahora!

El ajolote obededió y salió con rapidez de la trampa, Sasha finalmente dejó caer el mueble una vez que el contrario estuvo afuera.

Contraída por el esfuerzo masajeó sus hombros.

-¿Tú... Me salvaste? -preguntó incrédulo y perdido Leopold.

-Talvez -respondió orgullosa Sasha. -Que mi cara angelical no te engañe, ajolote. Soy más fuerte de lo que crees.

El gerente aún la veía estupefacto, la rubia pensó en que definitivamente se encontraba en un trance.

-Bueno... -llamó incómoda. -Venía por un encargo de Hop Pop.

-¡Definitivamente! -contestó abochornado el anfibio para desaparecer con rapidez del lugar.

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-Bueno, supongo que sería todo -habló intranquila Sasha. -... gracias.

La rubia procedió a retirarse pero fue interrumpida por un grito del mayor.

-¡Sasha, espera! -exclamó antes de meterse a la tienda para buscar algo. -Ten.

Sasha se sorprendió al recibir la adorable alfombra rosa, estupefacta miró al sujeto.

-Tómala como un obsequio por ayudarme a salir del estante -respondió nervioso Leopold mientras acariciaba su nuca. -Y lamento el malentendido de hace unas horas.

Un sentimiento de calidez apareció en el pecho de la adolescente, y orgullosa sonrió.

-No es nada -respondió tímida Sasha.

-Escuché que quieren remodelar su habitación -comentó el anfibio. -Sí les agrada algún objeto de la tienda le apuesto ofrecer descuentos.

-Seguro -contestó alegre y se despidió con la mano.

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-Vaya, realmente lo trajiste -expresó sorprendido Hop Pop. -De mera casualidad ¿Leopold sigue vivo?

-¡Hey! -regañó ofendida Sasha. -Por supuesto que no lo mataría ¿Qué clase de tipa sanguinaria crees que soy?

Hop Pop se ahorró el contestar esa pregunta para evitar problemas.

-¡Estamos en casa! -exclamó entusiasta Anne, atrás venía Sprig. Ambos lucían agitados y sucios.

-¡¿Dónde estaban?! ¡Estaba preocupado por ustedes! -regañó Hop Pop.

Los jóvenes se disculparon tras una excusa vaga, y Anne se apresuró a abrazar con cariño a la rubia.

-¡Sprig y yo somos amigos de nuevo! -notificó orgullosa Anne. -¡¿Esa es la alfombra de la tienda de Leopold?!

Sasha extendió el susodicho objeto comprobando las sospechas de la morena.

-¿Cómo? -preguntó ilusionada Anne. Sasha Sonrió nostálgica.

-Creo que hice mi primer acción adecuada -contestó simple pero alegre.

Después de todo valió el sacrificio su lindo prendedor.

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Publicar por las madrugadas es mi pasión 😔😔👌👌

Aww, la niña está creciendo emocionalmente. Además ¡Spranne contra el mundo vuelve! 🥺🥺❤️❤️

Próximo cap: ajshajjaja ni idea, sigo medio seca.

Pequeño fanart kk por el retraso ( ╹▽╹ )✨✨

En fin, no olviden votar 🖤🖤

Y ¡Nos vemos la próxima!