Empezando de nuevo

Desde el fondo de la biblioteca nadie oía los suspiros que provocaba los besos mojados de frisk en el cuello de chara.




Por mas de una razón chara amaba la biblioteca y una de ellas era que nadie entraba ahí, podía dejar escapar su voz sin la necesidad de preocuparse.




Las manos de frisk apretaban y acariciaban en círculos sus pechos desnudos cegándola por completo de placer.




El timbre de clases había sonado, frisk levanto la cabeza delante de chara, ambas con la respiración agitada chocaban alientos sin dejar de verse a los ojos.






-es... es el ti-mbre del inicio de c-clases... lle-llegaremos tarde.. ah~...- hablo con la voz cortada chara.



-no tengo problemas con eso- le respondió dominante, queriendo meter la mano debajo de su ropa interior.



-ah~... p-pero yo si... ah~... mi hermana se pondrá furiosa... ya basta-






Se separaron despacio, mientras lentamente apartaban sus manos como si se tratase de una escena suave.




Se quedaron mirando unos segundos  aun con la respiración agitada, hasta que chara se volteo y coloco su sostén de nuevo para luego abotonar y arreglar su uniforme.



En cuanto tomo su mochila, la apretó con fuerza mientras su mente debatía lo que se supone que debe o debía hacer.



Al final se decidió por voltear hacía frisk y darle un beso fugaz en los labios, a lo que esta después sonrió.






-adelantate... yo te seguiré después-






La de listones la miro curiosa, pero obedeció al instante saliendo de ahí casi al trote.





La castaña la vio irse mientras soltaba un suspiro fuerte con la boca cerrada y sin haber borrado la sonrisa.




Detrás de ella había una estantería de libros a la cual se apoyo de espalda, casi dejándose caer por esta.




Levanto la vista molesta y cruzo los brazos mirando el techo antes de hablar.






-enserio puedes ser molesto hasta para espiarnos... sans-






A lo que aquel esqueleto pequeño que se encontraba al igual que ella apoyado de espaldas del otro lado de la estantería sonrió con amplitud.






-¿debería de sorprenderme?... eres muy buena adivinando escondites...-



-o quizás eres muy predecible-






Después de unas risas suaves, ambos se sentaron juntos en uno de los muchos sillones, para conversar de verdad.






-sans... sabes que te quiero y no quiero dejar de hacerlo... quiero seguir contigo por el resto de mi vida... no tenemos que hacer de esto una batalla-



-sabes que opino lo mismo... ademas... no tienes que preocuparte... yo ya perdí-



-primero que nada... chara no es un trofeo... y segundo... no se porque dices eso... nosotras no somos nada... solo-- -



-nunca dije que lo fuera... me refiero a que... es posible que ya no tengo oportunidad... por mas que quiero intentar luchar... solo veo que se apega a ti-



-no es mi novia sans... si se lo pido, me rechazara... ella se apego a mi por que le doy que quiere... y hago esto por que es lo que siento por ella ahora... pero chara esta confundida... sigue derramando lagrimas y no solo por nosotros-



-volvimos a caer frisk... dejamos que nuevamente se apoderara ahora no solo de nuestras mentes... hace que nos volvamos a enfrentar... y lo peor es que no lo sabe-



-de un momento a otro, todo se volvió diferente... hace un mes, me sentía libre de todo, ya no escuchaba su voz y mi vida era perfecta... ahora quiero tenerla conmigo de vuelta... como si deseara que volviéramos a ser una y que nunca se aleje de mi otra vez-



-¿que pasara cuando todo esto acabe?-



-... tengo miedo de eso sans... tengo miedo de su elección final... si me elige... temo que te alejes... y si te elige... entonces temo que ambos se alejen-



-es no va a pasar... no voy a alejarme de ti aunque me cueste la vida... y yo teniendo el mismo pensamiento que tu... se que no te alejaras-



-siempre estaremos juntos... ademas del hecho de que ahora nuestro deber es protegerla y hacerla feliz, debemos unirnos para eso... ¿no es así?- comento levantando su meñique hacía el.



-amigos por siempre, pequeña tramposa-  le respondió burlón tomando su meñique con el suyo.











Chara caminaba con prisa por llegar al salón, fue mala idea haber venido con tacones.

Estaba tan concentrada por eso que  una sensación la detuvo de inmediato.




Su corazón latía con fuerza, reviviendo viejos recuerdos de dolor y tristeza que tanto atormentaron su niñez.




Desde el otro lado del pasillo su antigua amiga se acercaba con un semblante serio sin mirar a nadie.




Chara se tambaleo, su garganta se seco y no podía cerrar la boca. Aquella grotesca criatura que nadie mas puede ver, ahora tomaba sus dos hombros.




Por supuesto, ella perteneciendo al linaje de las almas oscuras, solo puede ver aquellos de maldad. Si sabia que existían también seres de luz, pero había pasado siglos desde que vio nuevamente que la parte oscura dominaba ambos semblantes.




Sintió sus piernas flaquear y trato de retroceder en lo que veía que keidy se acercaba mas.






-... f-fri-- -



-¡hey! no intentas escaparte de las clases ¿verdad?-






Al oír esa voz tan especial luego de sentir un pequeño e inofensivo golpe en la cabeza por detrás, volteo para ver a quien mas esperaba ver en su vida.






-... a-as... riel...-



-no me has respondido la pregunta pequeña traviesa-



-¡ASRIEL!-






No espero un segundo mas en abrazarlo a lo que el le respondió de la misma manera.






-que lindo que estés aquí.. ¿como es que-- -



-digamos que frisk influyo en mis padres... pero no puedo quejarme... al menos puedo verte mas seguido... aunque valla a un salón superior-



-nos veremos en el descanso entonces-



-por supuesto... ademas... hoy es viernes, no hay nada mejor que salir y divertirte... ¿que te parece si te llevo a mi casa después de clases?-






Chara parpadeo y sonrió compasiva asintiendo a su propuesta, después de unos segundos de intercambiar palabras, se despidieron para entrar a sus aulas.




Pero luego de eso, ella volvió a recordar lo de hace unos minutos y volteo la mirada, al parecer keidy ya no se encontraba y corrió hacía su salón.




En momento la morena la esperaba cerca de la puerta llamando la atención de todo el grupo, keidy sonrió con prepotencia antes de tirarle una burla.






-valla, valla... jamas espere de ti que hablaras con una cosa rara salida de suelo... ¿acaso no es suficiente con frisk?... bueno... supongo que entre monstruos se entienden- escupió delicada sin quitar su sonrisa.






Chara la miro intrigada, pero tranquilamente volvió a poner su semblante que siempre pone ante todo el mundo y con una expresión seria solo le respondió como ella sabe hacerlo.






-no es mi culpa que hasta un simple monstruo sea mas interesante que tu... te dije que lo aburrido no va conmigo... así que si tengo que elegir entre una cosa aburrida y una rara... prefiero lo raro... así que no me repliques nada-






Sin mas que decir, dejando a keidy con la boca abierta delante de las risas de sus compañeros, camino tranquilamente hacía una mesa cerca de la ventana para esperar a frisk.




Chara podía ser muchas cosas, desde lo mas fuerte hasta lo mas frágil, pero el respeto que tiene de la sociedad ya sea en su salón o la comunidad de afuera, no se lo iba a quitar nadie.










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Hola todo el mundo, muchas gracias, por ayudarme a darle tanta vida a este fic.




Aunque he tenido problemas con ciertos aparatos continuo abierta a pedidos de dibujos.


Recuerden elegir cualquier escena de cualquier capitulo que tanto les gusta.




Y aprovechen en dejar sus comentarios y/o pedidos que ya casi estamos llegando al final de la historia.




Gracias por leer~

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