Capítulo 2
Hace unos meses comenzó a tener sueños extraños, sueños en los que sonreía, donde era feliz, tenía dos bebés en sus brazos. Mientras los arrullaba, unos fuertes brazos lo rodeaban por la espalda, podía sentir los besos de esta persona sobre su cuello, su respiración, como su piel se erizaba con deseo de más, se sentía tan malditamente real que lo asustaba, sentía tanta maldita envidia a su yo del sueño que despertaba llorando de frustración, no podía ver el rostro de la persona que lo hacía tan feliz.
Flashback
Hace una semana Kurama lo llamó a su espacio mental -cachorro, tenemos que hablar -el rubio con las ojeras rojas y marcadas veía con cuidado al zorro -¿sucede algo malo Kurama? -su rostro denotaba amargura, a pesar de ser con el único que ablandaba su mirada -quiero hablarte de esos sueños, los he estado analizando -el rubio lo vio con molestia, pero decidió escuchar -no son sueños, son fragmentos de tu vida en otra dimensión, no sé qué está sucediendo -Naruto abrió sus ojos con aún más tristeza y envidia, sus ojos comenzaron a soltar lágrimas -mi yo de otra vida sí es feliz al parecer -el Hokage bajó su rostro con algo de coraje apretando sus puños -¿quieres saber cuál es el rostro de la persona que aparece en tus sueños?- el rubio levantó la mirada con sorpresa, asintió lentamente -estuve hablando con Isobu ¿recuerdas la primera vez que lo viste bajo el agua en aquel lago de kiri? él se encontraba en otra dimensión -el rubio confirmó lentamente recordando un poco -podríamos distorsionar un poco esa dimensión que te permite ver en tu sueño esa vida, podrías ver a través de los ojos de ese Naruto unos minutos -el Uzumaki mordió su labio con miedo -prepararé todo, cuando te decidas, estamos a tu lado cachorro - confirmó lentamente.
Fin flashback
Esa mañana recordó las palabras de su amigo, decidió salir de la aldea buscando un lugar para distorsionar un poco la dimensión, necesitaba estar solo y aislado, no quería comprometer la aldea si algo salía mal, estaba decidido a conocer a esa persona que lo hacía feliz y que en esta dimensión no estaba a su lado, no tenía un lugar específico, sólo avanzaba por instinto, esperaba encontrar el lugar indicado, sacó de su pergamino una capa para el frío, la lluvia comenzaba a caer mientras corría por los árboles, podía identificar la dirección en la que iba, recordaba la pelea de Sasuke con su hermano, de repente paró de golpe en un árbol observando a su alrededor, faltaban kilómetros para la fortaleza Uchiha, se le hacía conocido ese lugar en específico, trataba de recordar qué era, bajó del árbol revisando de abajo a arriba la zona, se sentía cálido en ese espacio, tocó los árboles tratando de buscar una explicación, respiró hondo absorbiendo ese aroma que lo tranquilizaba, un aroma a bosque, se dejó caer al suelo, la pequeña brisa había terminado.
Cerró sus ojos con los brazos abiertos. Cuando los abrió sintió una brisa cálida rozar su mejilla, marcó el ceño -¿crees en el hilo rojo del destino? -escuchó un pequeño susurro -Naruto abrió sus ojos con sorpresa, giró su rostro, una anciana lo observaba -tu hilo está roto, te arrancaron tu otra mitad niño -el rubio con la peluca observaba a la anciana -¿de qué habla?- la anciana amable sonrió con cariño y tristeza -sientes un gran vacío, tus ojos no mienten, esa soledad te está asfixiando -Naruto abrió sus ojos con sorpresa -mi hija tenía esa misma mirada cuando asesinaron a su marido, existe una leyenda, todos nacemos con nuestro predestinado unido a nosotros por medio de un hilo rojo, invisible para nuestra vista. Cuando esta persona muere, tu vida se vuelve vacía. Muchos nunca conocen a su destinado, terminan por morir en la soledad, otros ignoran su llamado y sus vidas se hacen miserables, muchos otros lo encuentran y una gran felicidad inunda sus vidas -
El Hokage la escuchaba atentamente analizando sus palabras -yo no sé porqué me siento así, simplemente un día mi corazón comenzó a sentirse vacío, como si me hubieran arrancado una parte, ese vacío se ha ido incrementando con los años, veo a mis amigos seguir con sus vidas- tragó pesado con dolor -crece en mí ese sentimiento de envidia y tristeza -la anciana lo vio con tristeza, el rubio no sabía porque le había contado eso a la anciana -tal vez esta persona murió y nunca la conociste o tal vez ignoraste el llamado del destino y ahora es tarde, te lo dije, tu hilo está roto -Naruto apretó sus puños con coraje dejando salir un poco de su amargura, cuando se giró para mandar muy lejos a la anciana, ya no se encontraba en el lugar, volteó los ojos con fastidio, respirando lentamente tratando de calmarse.
Cerró sus ojos nuevamente sintiendo un nuevo susurro, pero esta vez esa voz lo hizo sentir tranquilo, trataba de recordar dónde la había escuchado, eran tan imponente y familiar -Naruto -se dejó arrullar por la voz que lo llamaba que terminó por dormir, las imágenes de aquella vida que pudo ser suya aparecían nuevamente. El susurro que hace unos momentos escuchó no era para él, se dejó caer sobre sus rodillas con tristeza, podía verse dormir con sus bebés de lado y esa persona que lo llamaba era su pareja, susurraba con tanto amor que le destrozaba el corazón, podía sentir las caricias en su rostro, anhelaba ver a esa persona que se encontraba tras esa niebla que no lo dejaba ver su rostro.
-Kuramaaaaa, Kuramaaaa, quiero ver, quiero ver, quierooo, yo quiero esa vida -lloraba desconsolado en su soledad, lloraba desesperado anhelando un poco de ese amor -yo quiero ese amor ¿Qué hice para merecer tanta soledad en mi vida? -su imagen mental cambió, el zorro acariciaba su espalda con sus colas con bastante cariño -¿por qué debo estar solo? mis padres, Ero-sennin, jiji, siempre solo -el zorro sabía que a pesar de estar con él, no era lo mismo, no podía sustituir la compañía de su familia y de una pareja.
Los ocho bijus rodeaban al zorro y al niño, Isobu cerró su ojo reuniendo chakra. Cuando terminó una gran neblina los cubría a todos, el rubio trataba de calmarse, levantó su vista, pudo observar la imagen de hace unos momentos, pero con un Naruto despierto besando a un chico azabache, el cabello del chico caía sobre su rostro cubriendo sus facciones, había algo en él que se le hacía bastante familiar, se dio cuenta que en realidad era un hombre con el que estaba, estiró su mano tratando de tocar al sujeto, la detuvo antes de tocarlo cuando el beso terminó -buenos días dormilón, llevaré a los bebés a cambiar en lo que te das una ducha -el rubio negó con una sonrisa -¿si mejor tomamos la ducha juntos? un clon puede cuidarlos ttebayo- el azabache se levantó con una sonrisa, lo cargó como si fuera una chica, entró al baño con él.
Naruto tenía sus ojos tan abiertos de sorpresa, no podía creer lo que estaba viendo, ese sujeto que le hablaba con tanto amor, él que fue su enemigo por años, aunque al final todo lo que hizo fue para proteger a su hermano, ese sujeto fuerte, varonil, elegante, hermoso, era su pareja en aquella vida que no era suya, sus ojos se movían de un lado a otro analizando su vida, abrió sus ojos con sorpresa negando con miedo, ahora recordaba, ese lugar en el bosque donde estaba dormido fue el último lugar donde lo vio con vida, donde el azabache le regaló aquella sonrisa que lo dejó embobado casi por una hora, ese lugar cálido que lo llamaba hace un momento extrañamente, bajó su mirada en shock recordando el momento en que empezó a sentir ese vacío, regresando de la misión de rescate a Sasuke, después de la batalla de los Uchihas "tu hilo está roto, te arrancaron tu otra mitad niño".
El Hokage comenzó a negar con miedo -¿Kurama? -el zorro estaba igual de sorprendido, había pensado que si encontraban a la persona trás las escenas en sus sueños, podían buscarla y su cachorro podía ser feliz -lo lamento cachorro, creí que podríamos encontrar a esa persona quien te quitaría esa gran tristeza, pero ahora entiendo- el rubio mordió su labio, sonrió con tristeza -lo hiciste para verme feliz, ustedes no tienen la culpa -Naruto salió de su espacio mental, abrió sus ojos sintiendo esa presencia cálida en el ambiente -ya entiendo, mi destino es estar solo lo que resta de mi vida ¿no es así?-
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