💙 3 💙
Habían llegado a la casa de Tom donde se celebraría la fiesta de bienvenida de los Agreste. Todos celebraban y bailaban, pero faltaba la azabache y cierto rubio esperaba volver a verla.
-_____- lo miro sorprendida- ¿Has visto a Marinette?.
Las ilusiones de la castaña que la reconociera, se fueron al carajo al preguntar por su amiga y antes de que pudiera responder, la oji-azul apareció con un hermoso vestido rojo con lunares negros y unos tacones altos del mismo color. El rubio se quedó perplejo, su amada era hermosa tal como lo había imaginado, era muy afortunado. Por el lado de la castaña miraba nostálgica, tenía muchísimas ganas de llorar pero no lo hizo, en cambio sonrió viendo llegar a su amiga. Marinette se colocó a lado de la oji-café mientras miraba coquetamente a Adrien.
-¡Adrien! Ayúdame con la comida- grito Emilie desde la cocina.
Adrien se dirigió a la cocina no sin antes lanzar una última mirada a la azabache.
-Pensé que la gente olvidaba su cultura cuando se iba al extranjero- hablo Tom.
-Me fui al extranjero, pero mi corazón estaba aqui- respondio Adrien con un guiño a la azabache.
Marinette lo miro sorprendida pero le respondió con una sonrisa mientras que nuestra protagonista los miraba muy extrañada.
-¡Que maravilla, que cultura! El "Señor América" guiñando.
-¡Marinette- la oji-café la miró divertida.
-¡_____!- dijo en el mismo tono la oji-azul.
Todos comieron tranquilamente y los Agreste hablaban de cómo era Inglaterra; cuando terminaron de comer, todo se dirijieron a la sala, pero el rubio aprovecho y se acercó coquetamente a la azabache.
-¡Eres increíble!- suspiró- Con ese vestido te vez tan hermosa- la miró de abajo hacia arriba.
-Ojala pudiera decir lo mismo de ti- y se le acercó para después darle un empujón y subir a su habitación.
De lejos los veía la castaña quien los mira tiernamente.
[...]
Al dia siguiente, los tres amigos habían decidido ir a esquiar a Chamonix, Marinette y _____ llegaron muy tempranp asi que esperarian a que Adrien llegaría después.
-¿Y te gusta Adrien?- la pregunta que _____ se había hecho desde que llegó Adrien por fin la había dicho, temia la respuesta pero sea cual fuese, ella apoyaba a su amiga.
-No lo sé- respondió la azabache sin importancia.
-¿Entonces no te gusta?- pregunto sorprendida.
-No es que no me guste, es lindo, pero eso chicos guapos suelen tener su ego hasta el cielo y deben ser traídos a la tierra.
-Marinette ¡Adrien no es así- grito exasperada.
-¿Así? Tú pareces muy interesada en Adrien- la oji-cafe jugaba con sus manos- Tal vez mientras escribías las cartas te enamoraste de Adrien.
Las castaña la miró sorprendida no podía creer que su amiga se diera cuenta de sus sentimientos.
-¡Es broma! Quita esa cara, tú no tienes tiempo para enamorarte, de seguro si tú padres te escogieran un esposo tu lo aceptarías sin problema- dijo en un tono burlón.
-¡Marinette!- respondió la castaña con un gran sonrojó.
La oji-cafe se quedó pensativa, le volveria a preguntar a Marinette si quería a Adrien.
- Pero responde bien mi pregunta, ¿Te gusta Adrien?- trato de no sonar nerviosa.
-Marinette no se enamora de los chicos, los chicos se enamoran de Marinette- hizo su cabello hacia atrás.
-Si hablas de amor, seguro mencionaste mi nombre- respondió Adrien atrás de las chicas.
Ambas voltearon sorprendidas pero _____ sonrió tiernamente mientras que Marinette hizo una sonrisa burlona.
-¡Eso quisieras!
-¡Hola Adrien!- hablo la castaña entusiasmada.
-¡Hola!- hizo un ademán- Marinette ¿Te acuerdas que de niños faltábamos a clases y veníamos a esquiar aquí?.
-Y _____ solía traer nuestra tarea- la miró- ¿Que nos trajiste hoy _____?.
-A Adrien- susurró pero al parecer los chicos la habían escuchado.
-¿Yo? ¿Cómo es eso?- la miró confundido.
La castaña se habia puesto tan palida que parecia un fantasma pero, afortunadamente su amiga se encontraba ahí para salvarla.
-¡Hey!- llamó la atención del rubio- Señor América ¿Apuestas? Ganaré hoy, así como cuando éramos pequeños.
El color volvió a la cara de la oji-cafe, sintió un gran alivio y esperaba que Adrien no sospechara nada.
La azabache se colocó sus lentes y avanzo hasta el punto de partida.
-¡Dios! Ella está loca y yo estoy loco por ella- comento acercándose a la castaña- ¡Hey Marinette, aquí voy!.
_____ solo soltó una pequeña risita, Adrien era feliz y eso era lo único que a ella le importaba. El rubio llegó a lado de la azabache y la miró coquetamente.
-Veamos quien gana.
-Jamas acepto la derrota- lo miro de arriba a abajo- Adrien.
-Ah ¿Si? Yo disfruto de perder- se acercó a sus labios.
-¿Disfrutas perder en una carrera?- pregunto confundida.
-¿Quien habla de la carrera?
-¿Entonces?- preguntó confundida
-Hablo de perder mi corazón- justo cuando estaba a punto de darle un beso a la azabache está le dió la espalda.
-¿Porque tanto apuro por perder?- lo miro de reojo.
-No tengo apuro, porque ya lo perdí- estiró su mano para estrecharla con la oji-azul.
-No estrecho mano con alguien que pierde- y tomo impulso para adelantarse.
Adrien soltó un suspiro enamorado y también tomo impulso para colocarse a lado de la azabache, ambos iban muy parejos pero, como la misma oji-azul lo había predecido, ella ganó.
-Vamos, déjame estrechar tu mano para felicitarte.
Marinette le respondió con una sonrisa y le tendió su mano, mientras Adrien depositaba un beso en esta, la azabache se sonrojo al instante y retiro su mano rápidamente.
-Asi es como conviertes una derrota en una victoria- hablo Adrien.
-¡Muy astuto!- lo miro divertida y lo empujó.
-¡Hey Marinette!- intento levantarse pero, no pudo.
-¡Adiós Adrien!- soltó una carcajada y se fue de ahí.
-¡Hola!- se escuchó otra voz femenina- ¿Quien ganó?- pregunto la castaña
-Primero perdí, pero ahora...
-¿Ahora?
-Ahora todo está en la manos de él- señaló el hermoso cielo despejado.
[...]
La azabache ya en su casa y después de haber tomado una ducha, como todas las noches tomo la foto de su madre antes de acostarse y empezó a contarle lo que sentía.
-Por primera vez mire a un chico y sentí algo pero, esto no puede ser amor, en las películas no ocurre así- frunció el entrecejo- pensé que cuando me enamoraría diría "Estoy en el cielo"- estiró sus brazos- Pensé que sentiría pena de mirarlo, pero no es asi, aún así el me gusta. Es fácil ser divertida con cualquier chico- se recostó- pero el tema del amor es algo en lo que no se nada- miro la foto de su madre- Así que tú tienes que ayudarme en el amor ¿Okey?- se tapó con las sábanas- ¡Buenas noches mamá- y así cayó en los brazos de Morfeo.
💙🗨️💙
¡Hola!
Que tengan linda noche. Los quiero. ❤️
Atte. Leela ✨
Fecha de publicación.
01/12/19
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