Capítulo 38.

POV Luna.

Maritza inmediatamente cayó al suelo, poca sangre comenzó a salir de su herida. Comencé a leer la carta, esto le partirá el corazón a Ariana.

Subí a Maritza a su auto, puse su pie en el acelerador, cerré su puerta, y como pude comencé a empujar el auto, luego cayó por el barranco, unos segundos más tarde, se escuchó una pequeña explosión.

Tengo que ir a dejar esta carta en casa de Ariana. Cuando llegué, no había nadie, borré los mensajes que tuve con Maritza, puse el celular sobre la cama y salí de ahí.

Cuando llegué a mi auto recibí un mensaje.

Mensaje:
"Luna, ¿Dónde demonios estás? ¿Todo bien? Tienes que venir, vamos a casa de Alex, Ana murió, te espero, no quiero que andes levantando sospechas.

Mi cómplice no sabe nada, es mejor que no lo sepa, al principio yo estaba muy arrepentida, pero ahora, no quiero que nadie se entere que yo asesiné a Madison, la principal era Ariana, ella es la que tiene más pistas mías.

***

POV Madison.

Alex solo se quedó callado, por un momento creí que estaba pensándolo otra vez, pero no, decidido tomó el vidrio y comenzó a deslizarlo por su muñeca en forma vertical sin yo poder hacer nada.

Rápido corrí hasta él, lo detuve cuando estaba por cortarse la otra mano.

—¿Qué hiciste, Alex? —pregunté.

—Nos volveremos a encontrar, Madison.

—Ellos tienen la culpa, los voy a matar a todos.

Alex comenzó a negar mientras que de su mano seguía saliendo mucha sangre.

—No, la culpa la tienes tú, por querer ser vengativa —dijo Alex, para luego cerrar sus ojos.

—Alex, no puedes morir, por favor, despierta —grité muy asustada. —Vamos, Alex, despierta.

Malditos, ustedes tienen la culpa, todos pagarán, por haberme insultado y por matar a mi hermano, la pagarán.

—Lo siento, Madison —habló Chris desde la puerta.

—Cállate, quiero tu tonto disfraz de ghostface.

—¿Para qué? —preguntó Chris.

—Buscare quien tome tu estúpido lugar, ellos van a pagar.

***

POV Ariana.

Cuando llegamos a la casa de Alex, ahí estaba Luna, le pregunté por Maritza, creí que ella estaría aquí, pero no.

Caminé hasta Pablo.

—Pablo, ¿Dónde está Maritza?

—No sé, yo al principio creí que estaba contigo, cuando fui a tu cuarto ella dijo que estabas en el baño —respondió Pablo.

—Qué raro, yo salí de la casa cuando ustedes estaban viendo televisión.

¿Por qué Maritza le diría a Pablo que estaba conmigo? No tiene sentido, algo raro está pasando con ella.

—Estoy preocupado por Alex —mencionó Lucas.

—Tranquilo, él estará bien, son hermanos, no creo que Madison le vaya hacer algo —mencionó Carlos tranquilo.

—Madison es capaz de todo, ella es una perra. —me acerque a César, él estaba muy nervioso, podía notarlo en su cara. —César, ¿Estás bien?

Por un momento olvidé que él no podía hablar, miré cómo sacaba su celular y empezaba a escribir en un mensaje.

Estoy algo nervioso, todo lo que paso es muy loco —escribió él.

—Tranquilo, te traeré algo para que bebas, tus labios están muy secos —dije y me aleje de él.

Me dirigí a la cocina, tomé un vaso y lo llené de agua.

—Hola, Ariana —dijo Luis, él también iba a tomar un poco de agua.

—Hola, Luis, ¿Qué tal?

—Aún sigo algo mal por la muerte de Ana, no es que esté acostumbrado a ver morir gente —se rio.

—No, jamás logras acostumbrarte a estas cosas —dije. —Pero creo que debemos hacer algo contra Madison, ella no descansará hasta que estemos muertos.

—Tienes razón, pero, ¿Que podemos hacer?

—No lo sé, hasta hace poco creía que los fantasmas solo eran ficción, pero ahora con todo esto, comienzo a pensar que la ficción es real.

César entró a la cocina, le di su vaso de agua y se quedó escuchando lo que Luis y yo platicábamos.

—Tal vez venga algo en internet —mencionó Luis.

—¿Tu qué crees de esto? —pregunté mirando a César.

César sacó su celular y comenzó a escribir.

—Tal vez debemos de buscar a alguien experto en el tema, por ejemplo, un vidente o algo así.

—Tienes razón, pero creo que creerán que estamos locos cuando mencionemos a un fantasma real, para mí son puros estafadores, solo quieren dinero.

Lo he visto siempre, esas personas que dicen ser brujas o videntes, lo único que quieren es el maldito dinero de las personas, oh vaya, como los putos asesinos de Madison.

—Hace algunos años, una chica llamada Rocío me dijo que ella veía fantasmas, pero creí que estaba mintiendo —mencionó Katherine mientras entraba a la cocina.

—¿Crees que Rocío sepa cómo deshacernos de Madison? —pregunté, esperando una respuesta positiva.

—No sé, habría que preguntarle.

—Aquí vamos de nuevo, ¿Quién es Rocío? —preguntó Carlos entrando a la cocina también. —Por si no recuerdan, nosotros metimos a Elena en todo esto, ella murió por nuestra culpa, ahora quieren embarrar a Rocío.

—Carlos tiene razón, Elena está muerta por nuestra culpa, además ella solo nos dijo que Madison había matado a Matt, lo cual no es nada relevante con lo que estamos buscando —Katherine agachó la mirada apenada.

No era nuestra intención que Madison acabará con ella, y me siento tan culpable de no haberla podido sacar del teatro.

—Claro que tiene relevancia, ella fue sospechosa, Matt era su amigo, bueno aún sigue siendo sospechosa, ella pudo haber matado a Madison para vengar a su amigo —dijo Luis.

—Luis tiene razón, pero, Madison ahora es un problema, ella nos odia.

—Mira, Ariana. Katherine, Lucas y yo buscaremos a Rocío, no la vamos a traer aquí, ella no merece ser embarrada de algo que ni siquiera a de conocer —mencionó Luis. —Mientras ustedes traten de seguir pistas para llegar con los asesinos de Madison, eso es lo importante.

Luis tiene razón, si encontramos a los asesinos, tal vez Madison nos deje en paz.

—Está bien.

Al llegar a la sala, vimos que Chris entró por la puerta.

—Tengo que decirles algo, tiene que ver con Alex, él está muerto —dijo Chris muy agitado.

—¿Alex? —preguntó Pablo.

—No, pero si ellos son hermanos —Dylan comenzó a negar. —Ella no lo pudo haber matado.

—Él se cortó las venas, Madison no lo hizo, ahora ella cree que es su culpa, ella va a...

Chris fue interrumpido por Juan, él lo golpeó con un martillo en la cabeza.


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Espero y les haya gustado.

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