Capítulo 23.

POV Ariana.

Emily se encontraba sobre la alfombra, seguía con vida, un charco se estaba formando debajo de su cuello, morirá desangrada, y no podremos hacer nada para ayudarla.

—¡Maldita! —gritó Pablo y corrió hasta Madison.

Ella desapareció y volvió a aparecer en la puerta, Katherine corrió hasta Emily, ella empezó a presionar su herida, pero al parecer ella ya estaba muerta.

—Tenemos que hacer algo —Katherine estaba llorando, yo solo agaché mi cabeza, no hay nada que podamos hacer.

—Ya basta, tú nos pediste ayuda, ¿Porque ahora nos quieres matar? —pregunté limpiando mis lágrimas.

—El tiempo se agota, ustedes solo se están tardando mucho, y jamás me gusto la espera —mencionó ella sonriendo.

—¿Nos vas a matar a todos? —preguntó Pablo nervioso de la respuesta que nos fuera a dar Madison.

—Emily ya está muerta —dijo Katherine cabizbaja.

—Si no averiguan rápido lo que les pedí, todos estarán muertos.

Me acerque a Emily, su piel se había puesto completamente pálida, no puede ser que en tan solo unos segundos todo se vaya a la mierda, no debí aceptar que vinieran, no debí dejarla venir.

—¿Qué hacemos con el cuerpo? —pregunté.

—Ocultarlo.

Pablo me miró cabizbajo y yo solo asentí, no hay de otra.

—Justo vamos hacer lo mismo que Madison.

—Eso no importa, Ariana, no te das cuenta que Madison nos matará a todos y no podemos hacer nada contra ella, ella es un maldito fantasma, no somos detectives para andar en busca de pistas —dijo Pablo enojado.

—Karla es la asesina, de eso ya no queda duda —dije. —Solo falta averiguar quién es el chico.

Nos quedamos en silencio un momento, Emily estaba en la sala de mi casa, ella estaba muerta, nosotros decidimos en esconder su cuerpo.

—Tenemos que llevarlo con Alex, en su casa caben más cuerpos —dijo Katherine riendo.

—No es gracioso, Katherine.

Katherine salió para ver si no había algún vecino fuera de sus casas, cuando nos indicó que no, Pablo y yo tomamos a Emily envuelta en la alfombra y la llevamos al carro de Katherine.

—Simplemente esto es demasiado —dije suspirando.

Miré hacia la calle y pude ver a César, él estaba caminando hacia nosotros.

—Oigan, César se dirige hacia acá —señalé hacia donde él venia para que Katherine y Pablo lo vieran.

—¿Qué haces aquí? —pregunté. Por un momento había olvidado que César no podía hablar, me sentí tan estúpida. —Lo siento, César

—Ariana no hay tiempo, el cadáver empezara a oler feo —Katherine entró al auto.

Le dije a César que subiera al auto, noté en su mirada que intentaba decir algo importante, pero no lo vi con su pizarra.

Después de conducir unos minutos llegamos a la casa de Alex.

—¡Alex! —grité mientras entraba a la casa.

Miré a Alex, Maritza, Juan y Carlos conversando en la sala.

—Mataron a Emily —dije cabizbaja.

—¿Qué? ¿Está muerta? —Carlos se levantó asustado de su lugar.

—Sí, su cuerpo está en el auto.

Lagrimas intentaban salir de mis ojos, pero yo lo impedía, no tenía que llorar, tengo que ser fuerte, tengo que hacer algo para que todas estas muertes paren ya.

—No puede ser —mencionó Juan triste.

Corrimos al auto, Katherine, Pablo y César ya estaban viendo la cajuela.

—La trajimos aquí, tenemos que ocultarla —mencionó Pablo.

—Rápido, no nos puede ver nadie —Alex se apresuró.

Juan y Carlos cargaron la alfombra con Emily dentro, yo los seguí, entraron al sótano, el cuerpo de Lexa y Milena seguían ahí.

Ellas olían mal, no está bien que estén aquí.

—No podemos tenerlos aquí mucho tiempo —dijo Juan cubriendo su nariz y boca.

—Lo mejor será enterrarlos —fue lo único que se me ocurrió.

César comenzó a jalarme del brazo, él quería decirme algo y por poco lo había olvidado, él se dirigió a la sala, tomó unas hojas y una pluma que estaban en el sillón y comenzó a escribir.

—Les mentí, no tuve elección, ella me obligó —puso César en la primera hoja.

—¿De que estas hablando? ¿Sobre qué mentiste? —pregunté confundida.

Karla no es la asesina, ese día no logré ver la cara de nadie, la enfermera me obligó a decir que fue Karla, la verdad es que no conozco a ninguna Karla, lo hice para poder salir, ellos me ofrecieron ayudarme con dejarme salir del hospital —escribió César.

—No puede ser, Emily tenía razón.

—Entonces, ¿Qué paso con Karla? —preguntó Pablo.

—Seguro Madison la tiene, si es que no está muerta.

Para nuestra mala suerte, Juan puede tener razón, quizá ella ya está muerta.

—Lo más seguro es que este muerta, Madison nos dijo que se nos está agotando el tiempo —mencionó Katherine.

—Ahora no tenemos ninguna pista —dijo Maritza asustada. —Ella vendrá por nosotros, teníamos a una asesina, ahora resulta que no es ella.

***

POV Karla.

Hace un día que me sacaron de mi casa, simplemente no veo nada, todo está muy oscuro, no he tomado agua, tampoco he comido nada, lo más seguro es que muera pronto, solo que no estoy lista, no quiero, quiero salvarme, tengo que decirles que yo se quienes mataron a Madison..

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Espero y les haya gustado.

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