—Aun no puedo creer lo de Jeongguk —expresa Suzy con un puchero. Destapa su botella de agua y luego de beber un poco continua —Jeongguk parecía muy encariñado contigo ¿Qué salió mal? No lo entiendo ¡Es tan molesto!

Min Ji trata de sonreír pero no puede, Suzy tiene razón ¿Dónde salió todo mal?

—Yo también sigo sin creerlo —confiesa la rubia mirando hacía un punto fijo en el patio —A veces me pregunto que hubiera pasado si entraba al baño ¿Saldría más lastimada que ahora o me hubiera resignado por fin?

—No hay un "hubiera" Min Ji, solo debes de darte cuenta que Jeon es un imbécil.

Los chicos detrás de la puerta escuchan la conversación de ambas chicas, por que aunque este mal, no pueden evitar hacerlo. Están justo a lado de ellos.

Yoongi trata de no reír por las palabras de Suzy pero le es casi imposible, ya que las palabras de la castaña y la forma en como las dice le causan gracias. Jeongguk con la mirada le ordena que se detenga.

—Jeongguk no es un imbécil —defiende Min Ji mirando a Suzy —Es es una muy buena persona, realmente se preocupa por los demás, es tierno y divertido.

Suzy suspira cansada ya que no es la primera vez que la rubia habla de Jeongguk como si fuera "el único chico del mundo".

—No entiendo que les vez —cuestiona Suzy cruzándose de brazos —Jeongguk no es el único chico, Min Ji. Hay muchos chicos que quieren salir contigo y tu solo piensas en Jeongguk.

—Suzy... —trata de llamar Min Ji para detener a su amiga.

—¡Es la verdad! Es tonto de fabrica pero a veces tiene sus recaídas, y en esta situación llego más abajo que un fósil.

Jeongguk presiona los dientes y cierra los ojos intentando calmarse para no salir y reclamarle a Suzy que él no es ningún tonto, en cambio, Yoongi tiene el rostro rojo por tratar de reprimir las ganas que tiene de reírse de Jeon, pero estas son más fuertes, que termina soltando una pequeña risita

Jeongguk enseguida se voltea a verlo para reprocharle con la mirada el haberse reído.

—¿Escuchaste eso? —pregunta Suzy quedándose paralizada en su lugar —Escuche risas.

—Yo no escuche nada.

—Sí, fueron risas —Confirma Suzy caminando hacia el cuarto de almacén que hay en la azotea.

Apoya la cabeza en la puerta tratando de escuchar algo, con el ceño fruncido toma la perilla de la puerta para abrir, pero antes de que lo haga Jeongguk sale sorprendiendo a amabas estudiantes.

—¿Jeongguk? —cuestiona Min Ji.

—Hola Minji —saluda Jeongguk con una voz alegre — Suzy ¿Cómo están chicas?

—¿Qué haces aquí? —pregunta Suzy con la vista fija en el castaño.

—Pasando el tiempo ¿Y ustedes? Deberían de estar abajo.

—Tu también —replica Suzy — ¿Estas con alguien?

—No, no, no. Estoy solo.

Suzy entrecierra los ojos sin creerle pero decide aparentar que sí lo hace.

—Quiero preguntarte algo, y espero me respondas con sinceridad.

—Adelante, pregunta lo que quieras Suzy.

—Creo que debes de estar enterado lo que se dice de ti en toda la escuela, pero como dije, son solo rumores. Y quiero que tu me lo confirmes —habla directo y sin titubear —¿Tienes novia?

Las dos tienen la vista puesta en Jeongguk esperando por su respuesta. A Suzy no le gusta el chisme, es más, no le va ni le viene pero este asunto sí era de su incumbencia por involucrar a su mejor amiga.
Min Ji por otro lado ruega por que la respuesta sea "No" y que todos esos rumores se conserven en eso, solo rumores.

Jeongguk internamente suplica que la campana suene para no tener que responder, y antes de excusarse con algo se escucha claramente el ruido de las cajas caer dentro de la bodega.

Sin esperar un segundo Suzy se dirige hacia la puerta del almacén para averiguar de quién se trata pero Jeongguk se le adelanta corriendo y le impide el paso.

—¿Es tu novia? —pregunta Suzy sin vacilar.

Jeongguk no tiene ni idea de cómo responder, nuevamente esta en una situación que sale de sus manos, sumando a esto que Min Ji no deja de mirarlo de tal forma que le remueve el estomago.

Suzy siente el nerviosismo de Jeongguk, y sin esperar su respuesta toma la perilla para intentar abrir la puerta.

—Sí —responde Jeongguk haciendo que Suzy se detenga y lo vea a los ojos —Sí, esta mi novia dentro, por favor no se lo digan a nadie o estaré en problemas —pide. Suzy ahora sabiendo la verdad se niega a soltar la perilla —Min Ji, por favor.

Busca ayuda con esa mirada de conejito que fácilmente convence a Min Ji de ayudarlo. Min Ji toma el brazo de Suzy.

—Suzy, vamos a la cafetería. Tengo hambre, vamos —pide Min Ji arrastrando a su amiga hasta la entrada de la azotea.

—Esto no se termina aquí Jeongguk —puntualiza la castaña con los ojos entrecerrados.

—Nos vemos Suzy —se despide con una sonrisa triunfante.

Suzy es la primera en desaparecer por las escaleras con el entrecejo fruncido. Min Ji se gira a ver a Jeongguk quién le articula, muy claramente, "Gracias princesa" junto a una sonrisa de conejito. Min Ji le sonríe sutilmente para luego irse.

Jeongguk entra a la bodega cerrando la puerta tras de sí.

—¡Eres un idiota! ¡¿No te puedes quedar dos minutos quieto?!

—Yo no tengo la culpa. ¡Había una rata! ¡Paso por mis pies! —exclama Yoongi —Me quejaré con el director por la falta de higiene.

—Ahora sí estamos en problemas. Suzy y Minji te escucharon y tuve que mentir. Saben que estoy con mi novia ahora, y sabrán que ella es de este colegio por que durante el recreo no se permiten visitas.

—Esto no es culpa mía, lo hubieras pensando antes de aprovecharte de mí en el baño —se defendió.

—¡Yo no me aproveche de ti! Fue un favor.

—Al que yo no accedí. ¿Sabes qué? ¡Jodete! Yo no diré nada y sí se llega a saber esto—apunta a Jeongguk y luego a él —les diré que me obligaste —amenaza Yoongi saliendo de la bodega.

—¡Yoongi!

—No quiero escucharte ¡cierra la boca ya!

Yoongi baja por las escaleras sin voltear a ver a Jeongguk, y se detiene en seco al escuchar las voces femeninas de hace unos minutos.
Jeongguk, quien lo estaba siguiendo, le toma del brazo para que de una vez le preste atención.

Jeongguk tiene intenciones de hablar, Yoongi lo sabe y decide taparle la boca. Jeongguk frunce el ceño, e intenta apartar la mano de Min pero Yoongi señala con la mano en dirección en donde se escuchan las voces.

El castaño baja un escalón, asoma la cabeza por el pasamanos y ve claramente las cabezas de Suzy y Min Ji. Rápidamente saca la conclusión de que esperan por él y su novia. Ambos suben nuevamente a la azotea para encerrarse en la bodega.

—¿Qué relación tienes con esa chica? Es la misma de ayer ¿no? —inquiere el de cabellos café con una ceja arqueada.

—Es amiga mía, nada más.

—Creo que es más que una amiga. Si fuera cualquier persona no te hubieras molestado en inventar una novia.

Jeongguk se queda en silencio mientras mantiene la mirada de Yoongi. Tiene razón, Min tiene razón pero nunca lo confesaría en voz alta. Aparta la mirada de Yoongi para enfocarse en las cajas detrás de él.

—Tengo una idea pero debes de ayudarme.

—¿Otra de tus brillantes ideas? Que honor.

—Si quieres salir de este lugar debes de ayudarme.

Yoongi sin tantas opciones factibles decide aceptar pero enseguida se arrepiente al escuchar la idea de Jeongguk y cree que treparse por las paredes como el vecino de New York de traje azul y rojo no es tan descabellada.

—Solo debes de colocarte la falda, yo te cubriré el rostro con mi chaqueta e iremos al baño —explica nuevamente el castaño.

—Si claro ¿y luego? ¿Me voy a quedar en el baño hasta la hora de la salida? Estas estúpido. El lunes tenemos examen de psicología, no puedo perder clases, tengo cosas que consultar.

—No sera hasta la hora de salida, sólo por este periodo. A la hora del comedor buscaré tu ropa y te la llevaré. Y no te preocupes por los apuntes, los haré por ti.

—¿Tú? No haces ni tu propia tarea. Mejor salgamos, le dices que nunca hubo tal novia y sólo eras tu gimiendo mientras te hacías una felación ¡Ya sé! Puedes decir que tienes un fetiche con gemir tu nombre.

—Yoongi, no. Quedaría como un maldito depravado, sin mencionar —Jeon se detuvo —¿Acabas de decir felación?

—Hablo con propiedad.

Jeon no pudo evitar soltar una risa burlona, Yoongi a veces solía decir palabras que muy pocos jóvenes a su edad decían o conocían.

—Como decía, les dije que estaba con mi novia ¿Qué dirán si me ven saliendo contigo?

Yoongi le mira dudoso.

—Prometo consultar todas tus dudas, e incluso tomar apuntes. Yo no soy tonto, sólo soy flojo. Lo haré bien.

Yoongi suelta un suspiro.

—Esta bien —Jeongguk sonríe y festeja dando pequeños saltitos en su lugar —pero debes de apuntar todo en mi libreta roja. Esta en mi mochila. Las paginas están enumeradas, en la pagina 113 se encuentran las preguntas, son veinte en total. Tienes que utilizar una lapicera negra para escribir.

—¿No puede ser azul?

—Debe de ser tinta negra.

—Esta bien, lo entiendo —Jeongguk toma de los hombros a Yoongi para caminar hacía los uniformes —Veamos cuál es tu talle.

Jeongguk busca en los estantes las faldas que cree correctas para Yoongi, la mayoría anchas para la cintura de Min. Luego de la "ardua" selección, según Jeongguk, encontraron la correcta.

—Quién lo diría eres talla S en falda

—¿Lo estas disfrutando no, idiota? —pregunta Yoongi con los brazos cruzados.

—Bastante —le responde mostrándole una sonrisa de satisfacción —Vamos, ve a probarte esto.

Yoongi quita con furia la falda de manos de las Jeon y con pasos firmes va hasta el improvisado probador de la bodega, y con improvisado nos referimos a estar detrás de un estante. Yoongi se saca las zapatillas, el pantalón y se coloca la falta, luego toma sus zapatillas nuevamente para enredar sus cintas.

La campana suena justo cuando Yoongi sale del probador. Jeongguk lo observa complacido con una sonrisa y saca su celular con intención de tomar una fotografía.

—No aprecias tu vida ¿cierto?

—Me gusta tomar riesgos —admite Jeongguk guardando su celular nuevamente, puesto a que Yoongi tiene la vista fija en él.

—Bien, vamos antes de que me arrepienta —advierte Yoongi caminando hasta la salida de aquella bodega.

—Espera —Jeongguk le detiene tocando su hombro haciendo que Yoongi se gire para verlo.

Jeongguk arregla la falda de Yoongi, también su camisa queriendo introducirla debajo de la falda.

—¡Ya! No me toques —ordena Yoongi apartando las manos de Jeongguk de forma brusca.

—Sólo te estoy arreglando la falda —le informa Jeongguk tomando nuevamente a Yoongi por la cintura para continuar.

Yoongi lo mira con curiosidad, y por un momento se siente nervioso por sentir las manos de Jeongguk en esa zona. Y como si leyera su mente, Jeongguk se aparta para luego acomodar el blazer de Min, para finalmente quitarse la chaqueta americana azul y blanco con detalles en rojo.

—No pienso colocarme eso —Yoongi apunta hacía la chaqueta.

—Vamos, esta limpia la eh lavado el sábado.

—Jeongguk, hoy es viernes.

—Si te hace sentir mejor le coloque perfume.

—No me siento mucho mejor, no me pondré eso.

Y ahí estaba Yoongi con la chaqueta de Jeongguk pero no cubriendo sus hombros o con ella puesta, la chaqueta cubría toda la cabeza de Yoongi. Jeongguk tiene sujetada la cabeza de Yoongi a un costado de su cuerpo como si fuera un balón de basketball.

Los pocos alumnos que se dirigen a sus clases no pueden disimular el interés que les causa la pareja. Sin evitarlo tiene la vista puesta en ambos, más en ella que en él. Y es que a Min se le puede ver un poco más arriba de los muslos.

Las dos mejores amigas se quedan perplejas al ver como la pareja camina de lo más tranquila por los pasillos, de una forma extraña, pero tranquila.

Suzy frunce el ceño, da un paso al frente pero es detenida por Min Ji. No es su mejor amiga por nada, sabe que Suzy puede ir y pelear con la novia de Jeongguk por esa razón decide llevarla hasta su salón de clases, cree que son muchas emociones por hoy.

—¡Me estas ahogando idiota! —exclama Yoongi golpeando, como puede, la espalda de Jeongguk.

—Nos falta poco, ya llegamos —le informa Jeongguk con una sonrisa en el rostro.

Dicha sonrisa nunca se pierde ni cuando ve a un grupo de chicos de grados menores observar demasiado a Yoongi.

—¿Se les perdió algo? —inquirió de forma serena. Los chicos niegan con la cabeza siguiendo con sus cosas.

Ambos chicos llegan hasta el baño adentrándose a un cubículo vacío. Yoongi empuja a Jeongguk contra la pared.

—¡Eres un hijo de puta!

—Ya paso, no vivas en el pasado —le tranquiliza bromeando.

Yoongi quiere rechistar pero se detiene al ver a Jeongguk en acción de abrir la puerta y marcharse.

—Jeongguk

—¿Hum? —Jeongguk se gira a ver a Yoongi.

—No me falles.

—No lo haré, te lo prometo —sonríe el castaño saliendo finalmente del baño.

Yoongi se sienta en el inodoro con la tapa cerrada y la chaqueta de Jeongguk debajo. Al principio se siente escéptico sobre Jeon pero al pasar los minutos decide confiar en su enemigo.