Ya habían terminado las clases y una chica estaba muy agotada por todo lo sucedido en la cafetería.

Mente de Venus: ¿Por qué pareciera que todos son más fuertes que yo?

Mientras estaba en su casa podía ver a alguien que trataba de cocinar una especie de pulpo con un ojo.

Venus: ¿Dónde conseguiste eso?

Jade: Pescando, ¿tus amigas volvieron a sus casas?

Venus: Así parece, excepto una.

En una habitación de huéspedes se estaba quedando Adara, se había encerrado en esa habitación debido a la situación de antes, y no quiso darle explicaciones a Venus.

Jade: La chica llamada Luz,..., por alguna razón sus ojos se parecen a los de la abuela.

Venus: ¿Cómo...? Ahora que lo pienso, nunca me hablaste de tu familia, no sabía que tenías familia.

Mente de Venus: Y también esta muy calmada últimamente, pensé que iba a intentar hacerles algo a mis amigas, pero cuando vio a Luz por alguna razón se detuvo.

(cortando el pulpo)

Jade: Mi abuela fue alguien muy importante para mí, supuestamente tuvo dos hijas con dos hombres, una se parecía mucho a ella y la otra no se parecía nada a ella.

La joven militar solo podía ver como cortaba el extraño pulpo que aún estaba vivo y trataba de defenderse, pero fue inútil.

(Sonriendo)

Jade: La que no se parecía nada a ella fue mi madre y la que se parecía a ella fue alguien a quien tuvo que dejarle a otra familia.

Venus: Conociste a tu abuela y ¿Qué le paso a tu madre?

Jade: Pues... creo que murió...

Mente de Venus: Debió ser por una enfermedad o algo.

Por alguna razón hubo un momento de silencio antes de seguir hablando.

Venus: ¿Y tu padre?

Jade: El sí murió...

(silencio incomodo)

Seguía habiendo silencio y parecía una escena de terror.

Venus: Lo sien...

(interrumpida)

Jade: Pude ver como Él había tratado de matarla, la estaba asfixiando (agarrar mas fuerte el pulpo), parecía como si no quisiera soltarla, ..., entonces yo... tuve que apuñalarlo (cortar el pulpo en dos) ... Y El solo dejo de respirar...

Por un momento pudo sentir un escalofrió rodeándola.

Venus: ¿Qué edad...

(interrumpida)

Jade: Creo que solo tenia 7 años... pero después de eso me quede con la abuela... fueron los momentos mas tranquilos de mi vida, ... hasta que tuvo que irse....

Venus: (.......)

Jade: Voy a visitarla al cementerio cuando es su cumpleaños.

Mente de Venus: Si recuerdo bien, ella había sido la recluta más joven que había....

Jade: Después de eso me fui a la academia militar....

Venus: Y-Ya veo...

Jade: ¿Te preocupa no ser un Soldado?

Esas palabras la atravesaron como si fueran balas.

Venus: ¿Cómo te diste cuenta?

Jade: Desde que llegue te he visto preocupada, incluso cuando te observo por las noches te ves incomoda al dormir...

Mente de Venus: ¿Espera que...?

Jade: Esas chicas tienen algo especial....

Mente de Venus: Lo see.... Sus armas... su extraña energía...

Jade: Pero tú también tienes algo... solo que todavía no te has dado cuenta...

Después de eso la joven soldado se fue de la cocina para dirigirse a su habitación.

(hablar consigo misma)

Venus: Debo mejorar, será mejor comunicarme con ella...

Ya había investigado lo suficiente como para saber dónde vive, y también para saber que no existen registros de nacimiento ni tampoco de identidad.

(hablar consigo misma)

Venus: Debo entrenar con Sugar...

La pantalla de la computadora estaba apuntando directamente a alguien que estaba en el patio y parecía estar viendo directamente hacia el satélite que la observaba.

(mas tarde)

Sugar: Vaya, ha pasado tiempo.

Venus: Pues sí, desde el museo, cuando te pedí ayuda.

Sugar: Me refería de la vez que me observabas desde el cielo, creo que fueron unas horas...

Venus: Ehmm... ¿podríamos entrenar?

Sugar: Pues la verdad no lo sé, ahora mismo Randy esta muy feliz hablando con Theresa al teléfono y tengo que vigilarlos...

Venus: Por favor... solo serán unos minutos...

En respuesta a eso Sugar había desaparecido y estaba detrás suyo.

Sugar: Eres demasiado lenta, ¿No se supone que estas entrenada?

La soldado enseguida saco una granada y se la lanzo, pero Sugar había agarrado la punta y le había puesto un palillo de dientes para asegurarla.

Venus: Se supone que un simple palillo no le haría nada.

Sugar: Si concentras tu energía y voluntad en un objeto, este puede evolucionar y volverse mas duro o cambiar su forma.

Mientras lo explicaba podía verse como el simple palillo estaba curvándose y ahora parecía una perilla de granada, y la lanzo hacia el cielo.

Sugar: Pero si dejas de concentrar tu energía y voluntad en el, puede volver a la normalidad.

(explosión)

Venus: Pero las armas de esas chicas son...

Sugar: Solo liberaron la energía de su ninja interior...

Venus: ¿Su energía se mantiene porque son armas ninjas?

Sugar: ¿No te diste cuenta que no todas son armas Ninjas...?

Esas palabras la dejaron impresionada, desde su punto de vista parecía que las chicas a las que se enfrentaba tenían armas mágicas y únicas.

Sugar: Son armas únicas por que se relacionan con su naturaleza humana, pero fue su fuerte voluntad y su interior lo que las convirtió en armas poderosas.

Venus: Pero una de ellas puede disparar agujas infinitamente...

Sugar: Originalmente tenia limites, pero cuando se volvió una extensión de ella fue cuando pudo funcionar sin tener límites, ¿analizaste una de las agujas?

Venus: Parecía estar hecha de un material muy extraño y por alguna razón la perdí.

Sugar: No la perdiste, solo desapareció por no estar cerca de su dueño, eso sucede si pasa mucho tiempo lejos.

Venus había quedado un poco confundida, a pesar de que ese día haber recogido una de los proyectiles en el museo cuando ya no había nadie, nunca pudo entender como funcionaba, y ahora que le dieron la respuesta siguió sin entender la situación.

Sugar: La cita será mañana en el parque de diversiones Espacial...

Venus: ¿Cómo...?

Sugar: No importa, pero debes entender que si no tienes a nadie por quien luchar posiblemente no puedas sacar tu fuerza interior como las demás....

Venus: ¿Las demás tienen a alguien?

Sugar: A Randy por supuesto.

Venus: ¿Eh?

Sugar: ¿Qué sucede?

Venus: Admito que es un poco lindo...pero... no parece del tipo serio... o de alguien en quien puedas confiarle una misión...

Mente de Venus: ¿Qué es lo que le ven?

Sugar: Su corazón.

Venus: ¿Lo dije en voz alta?

Sugar: Ahora debo volver con él, además, mi deber es evitar que Howard arruine las cosas.

Mientras tanto Morgan.

Estaba entrenando rompiendo las piedras de una mina abandonada, cada golpe que hacia era con sus movimientos de ataque.

Viejo: Parece que algo te molesta...

Morgan: No es de tu incumbencia y por cierto ¿Por qué razón no has respondido mis mensajes sobre entrenar?

Viejo: Es que me encontré con alguien que emitía una energía muy grande, fue muy divertido...

Morgan: Supongo que ganaste ¿Verdad?

Viejo: La verdad no pude, solo pude darle un golpe, pero después parecía querer aumentar el nivel y tuve que rechazarlo, esa energía me estaba incomodando.

Morgan: Para ponerte nervioso, ¿Cómo hiciste para rechazarlo?

Viejo: Pues tuve que invitarlo a comer algo, esa forma de comer era muy extraña y menciono que había logrado escapar de una especie de prisión, además su perro parecía comer igual que él.

Morgan: ¿Cuál era su nombre?

Viejo: Creo que era... ¿shagy...?

Mientras tanto Randy:

Había salido después de hablar por teléfono, y la razón era que necesitaba ropa nueva.

Mente de Randy: No puedo creer que vaya a salir... con Theresa y no tenga nada nuevo que ponerme.

Estaba buscando algo y pudo encontrar un conjunto de ropa blanca mezclada con bordes azules y rojos.

Mente de Randy: Esto puede funcionar.

(grito): ¡Ladrón!

El joven ninja no pudo ignorar eso.

Randy: Estoy seguro que no me necesitan, para eso tienen a los robo-simios.

Justo después de decir eso pudo ver a un robo-simio siendo enviado cerca de él, pero en partes.

Randy: Tal vez el ejercito se encargue de él.

Se pudo escuchar explosiones de granadas de humo y también fueron derrotados quedando inconscientes, pero el agresor decidió dar un salto para cortarlos y su espada choco con la de Randy.

El Ninja: Muy bien, esto no puedo ignorarlo... ¿Conejo?

Su impresión fue bastante obvia, era un conejo con espada el que estaba tratando de darle Fatality a los soldados.

El Ninja: ¿Otro experimento de Viceroy?

El conejo vio a Randy y decidió desenvainar su espada para inclinar la cabeza en forma de disculpas, después de eso se dio la vuelta y había saltado hacia la tienda de batidos para comerse todas las zanahorias frescas.

El Ninja: Oye... Tienes que pagar por eso...

A pesar de hablarle el conejo lo estaba ignorando mientras comía hasta acabarse todas las zanahorias.

Trabajador: Si no pagas entonces llamare a la policía.

El Ninja: Espera un momento... yo lo hare...

Mente de Randy: Pero es exactamente todo lo que tengo, no me va a alcanzar para mi ropa.

Ya habiendo pagado la comida, Randy tuvo que salir corriendo por que los robo-simios y el ejercito estaban apuntando sus armas sobre él.

El Ninja: Bomba de humo.

(desaparecer)

Cuando volvió a la normalidad, y estaba afuera caminando desanimado pudo sentir como alguien lo seguía.

Randy: ¿Por qué me sigues? Fue el ninja el que te salvo, no fui yo, sabes.

El conejo siguió ignorando sus mentiras.

Randy: Si te ven conmigo entonces será un problema para mí.

(bomba de humo)

Randy: ¿Qué........?

El conejo parecía una especie normal, pero del tamaño de un perro.

Randy: ¿Puedes lanzar bomba de humo? Y esa forma tan normal...

Por alguna razón se le acerco y se puso a su lado, como si fuera su mascota.

Mientras tanto Theresa.

Se la veía cambiándose de ropa en frente del espejo, y había mucha ropa en la cama, incluyendo algunas reveladoras y vestidos muy lindos.

Theresa: Esta tiene que ser la cita mas perfecta de todas, ¿Cuál me queda mejor?

Debbie: Siempre que te respondo me dices "Pero es lo suficientemente buena para Randy"

Theresa: Numero 1(vestido negro), o numero 2(pantalones cortos con camisa muy pequeña)

Debbie: Numero 1...

Theresa: Pero tal vez a Randy le guste ver mas parte de mi cuerpo, o tal vez le guste otro color...

Debbie puso un almohadón en su cabeza y parecía estar cansada.

Debbie: Llevamos horas haciendo esto, ¿Puedo irme a mi casa?

Theresa: Pero todavía falta, ya falta poco para la cita.

Debbie: ¡Solo falta un día!