Querido Diario:

Los días siguientes pasaron sumamente rápido que apenas lograba percibir el transcurso del tiempo.

Él día viernes cuándo regrese del bachillerato tuve qué apresurarme a realizar mis labores de la tarde, por fortuna ese día sólo me tocan tres clases de los cuáles ningún docente dejó tarea.

No tenía idea de lo qué debía llevar así que sólo me límite a guardar dos mudas de ropa con lo que me sintiera cómoda, unos tenis converse azules, mi teléfono móvil y claramente mi diario para relatar los momentos que considere importantes del viaje.
Aunque al no saber el destino resulta difícil crearse expectativas del lugar.

Tuve qué dormirme más temprano de lo qué acostumbro porque saldríamos temprano al día siguiente. Y justamente cuándo mi sueño se encontraba en lo más profundo Consuelo me despertó de mi cálido aposento.

Quejándome tuve que subir a la camioneta de papá, alcance a mirar la  hora que marcaba su reloj y eran los cinco de la mañana, no lo podía creer. Lo único que me limité a hacer fue soltar un pesado suspiro antes de dejarme caer en él asiendo trasero.

Intente descansar en el respaldo de la puerta del vehículo sin embargo no logré conseguirlo debido a lo incómodo de la posición en que me encontraba.

Conforme avanzábamos lo único que observaba por la ventanilla era los edificios de la ciudad cubiertos por la oscuridad de la fría mañana.

Mi padre y Nadia empezaron a hablar entre ellos que mejor opté por sacar mis auriculares y conectarlos en mi mi teléfono celular y dejarme perder en la voz del cantante.

Debí haberme quedado dormida porque cuándo recupere el sentido nos detuvimos en una tienda a comprar cafés instantáneos, los bebimos y seguimos nuestro recorrido. Después de esa parada ya no pude volver a dormir me.

Pasé cerca de dos horas despierta con los ojos cansados antes de llegar a nuestro destino, qué era una reserva natural ubicado a las afueras de Galicia, España.

Al principio me desconcertó él lugar, no comprendía porqué papá nos había llevado ahí pero después lo entendí. Estar rodeada de la naturaleza me ayudó a despejar la mente, puesto qué los últimos días me encontraba demasiada estresada porqué se aproximaban las evaluaciones de final de curso.

Mi padre debió notarlo o seguramente él y Nadia se encontraban en la misma situación que deseaban pasar tiempo juntos alejados del trabajo.

Mirar tanto paisaje hermoso me llenó de mucha inspiración qué espero usar cuándo regrese y tenga tiempo libre.

Realmente fue una grata experiencia pasar tiempo de calidad en esté parque natural llamado: fragas do eume.

Nos leemos pronto Diario.

Att. Kim