Querida libreta...

Bueno, las cosas se calmaron un poco, al menos Gothika y Bonn volvieron a hablarse, y solucionaron todo, o eso creo.

Bueno, fuera de eso, quería contarte otra cosa.

Ayer vi una sombra en la ventana del cuarto dónde me estoy quedando, y oí la misma risa que oí en mi casa.

Creí que aquí estaba a salvo, pero veo que me equivoco.