5. Arabian Nights
Arabian nights
Like Arabian days
More often than not are hotter than hot
In a lot of good ways
Arabian nights
Like Arabian dreams
This mystical land of magic and sand
Is more than it seems
"Pues lo único que consigue Kevin al espantarme a los chicos quienes se me acercan es volverme loca." Dijo Dizzy, haciendo una mueca.
"Eso, ya lo sabemos." Respondió Mal con una leve carcajada.
"¿Porque no van con nuestro padre a hacerle compañía?"- Les sugirió Claudio a sus hermanastras- "Yo le daré un recorrido a Evie por todo el reino, yo igual necesito distraerme."- Finalizó, al entrar a la habitación de su padre para despedirse de él.
"Llévate a tus hermanas a divertirse también."- Le susurró Hades a Claudio al corresponder a su abrazo- "Yo me quedó con mi amigo Nagel."- Finalizó.
"Está bien." Responde Claudio con una sonrisa.
Las Princesas del Inframundo igual se despidieron del Rey del Inframundo. Los Descendientes de Hades y la Descendiente de la Reina Malvada se fueron a sus respectivos cuartos, ya que querían despojarse de sus prendas elegantes y ponerse algo cómodo. Antes de irse a su casita, Claudio le dio la propina a Dizzy por el traje que le hizo para la boda de Hades.
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Después de haberle entregado la propina a la Princesa menor del Inframundo, Claudio se fue a su casita a cambiarse de ropa, solo que en cuanto fue a su habitación, encontró la carta que le había escrito Hades. Así que después de que Claudio se despojó de su traje y lo colocó en encima de su cama, tomó asiento en el mueble mencionado y empezó a leer la carta.
Claudio,
Quiero que sepas que estoy muy orgulloso de tenerte como mi hijo, por eso siempre te he dedicado mi atención, orgullo, admiración y aprecio. Con tu hermano Kevin no puedo ni siquiera contar por el carácter difícil que tiene. Gracias a los dioses que tu hermana Mal no salió a él, aunque en algunas cosas si son idénticos, pero ella es igual a ti.
Siempre voy a estar orgulloso de ti y del empeño que siempre le pones a tus estudios. Dr. Facilier nunca me da una queja de ti, al contrario, siempre que viene a verme o a que veces me manda llamar, siempre me dice de lo orgullo que está de ti por tenerte como su alumno. No tienes idea de cuanto me orgullece cuando me muestra tus calificaciones.
No solo le pones empeño al estudio; igual le pones empeño a tus labores aquí en el castillo. Si este reino ha prosperado, es gracias a ti.
Quiero pedirte que si llegó a faltar, cuides de este reino, pero sobre todo de tus hermanas. Mal y Dizzy también son muy importantes para mí, al igual que tú y por eso te pido que las cuides hasta con tu propia vida porque yo sé que no voy a contar con Kevin para que velé por ellas, aunque he visto que trata por acercarse a M y a Di, pero siempre acaba haciéndolas enojar y también te pido que te asegures que tus hermanas conozcan a chicos que sean dignos de cada una.
Siempre serás mi orgullo.
Tu padre,
Hades.
"Ahora entiendo porque Kevin me detesta."- Pensó Claudio en su mente al guardar la carta de su padre en una caja especial que tiene en uno de sus cajones- "Él siente que yo le he robado su lugar y el cariño de nuestro padre y hermanas."- Finalizó con su pensamiento y escoge algo cómodo para ponerse.
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Dizzy se estaba despojando de su vestido azul con blanco, adornado con flores de neón y se estaba poniendo un conjunto de falda y una blusa de arcoíris. Mal por su parte, se despojó de su vestido morado con dragones verdes, reemplazándolo con un par de leggins, una blusa estilo tie dye y un par de botas militares con una llama de fuego enfrente de color azul.
Mientras que se estaba cambiando, Evie aún seguía sin creer que su novio no tenga una buena relación con Claudio, su medio hermano. La Descendiente de la Reina Malvada seguía con sus pensamientos mientras que se estaba despojando de su vestido que Dizzy le había dado y lo reemplaza con un par de medias negras, una falda azul árabe, una camiseta del mismo color y de la misma cultura, un cinto de color rojo con azul y un par de zapatos negros de la cultura árabe.
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Ya finalmente listos para divertirse como les había pedido Hades, Claudio casi se desmayaba de la impresión de solo ver a Evie tan bella con ese traje árabe. Primero, la vio bellísima con el vestido azul que su hermanita Dizzy le había diseñado como presente de bienvenida y para que lo usará en la boda del Rey del Inframundo. Ahora, la belleza de la princesa malvada resaltaba en un hermoso traje árabe.
"No cabe duda, el azul le queda perfecto." Piensa Claudio en su mente.
Claudio, Mal, Dizzy y Evie se salieron del castillo, yéndose para el pueblo, La Isla de los Condenados; solo que ellos se fueron a pie; pues no saben si Evie sabe cabalgar o no y ellos saben que si algo le pasa a la Descendiente de la Reina Malvada, Kevin no se los perdonará.
"¿Sabes cabalgar?" Le preguntó Claudio a Evie mientras que caminaban para el pueblo.
"No." Respondió Evie con una sonrisa de boca cerrada.
"Pues aquí vas a tener al mejor maestro de equitación." Le dijo Dizzy a la princesa de cabello azul, señalando a su hermanastro, a quien miraba con una sonrisa.
"Aparte de ser un maestro paciente, también es un jinete paciente."- Concordó Mal con el comentario de su hermanita menor con anteojos y cabello castaño con mechas de arcoíris- "Mi mellizo también le tiene paciencia a Merodaque, pero Claudio es mejor jinete que él."- Finalizó.
"¿Y a todo esto? ¿Cómo fue que conociste a Kevin?"- Preguntó Dizzy- "Él nos dijo a Mal y a mí que ustedes se conocieron cuando el paseaba con Merodaque."- Finalizó con su comentario.
"Pues es verdad."- Confirmó la princesa de cabello azul- "Kevin y yo nos conocimos mientras que él cabalgaba con Merodaque. Yo estaba en una sesión de fotos con mi mejor amigo William "Will" Hearts, Descendiente de la Reina de Corazones y futuro Rey del País de las Maravillas, hasta que me di cuenta que Kevin estaba ahí cerca junto a su caballo."- Prosiguió- "Cuando terminé mi sesión de fotos, me fui acercando a Kevin lentamente, ya que estaba intrigada por saber quién era el joven quien me estaba mirando. Cuando finalmente estábamos cara a cara, me quedé atrapada en sus ojos verdosos. Desde ese momento, empezamos a tratarnos como amigos hasta que después de unos meses de amistad, me profetizó su amor y me pidió que fuera su novia y acepté."- Finalizó.
"¿Y nunca te contó de nosotros?" Preguntó Dizzy.
"Solo me dijo que tiene dos hermanas, pero nunca me dijo que tiene una hermana gemela."- Contestó Evie a la pregunta de la Princesa menor del Inframundo, refiriéndose a la pelimorada- "Por eso me quedé impresionada cuando vi que tu hermana tiene la misma mirada que él. Él nunca me habló de Claudio, ahora entiendo por qué; pero de todos modos siento que debió de haberme comentado que también tiene un hermanastro."- Finalizó con algo de desaprobación.
"Pues lamentamos que te hayas enterado así de golpe." Dijo Claudio, apenado.
"No te preocupes." Aseguró la Descendiente de la Reina Malvada, sonriendo.
Mientras que los Descendientes de Hades le enseñaban el pueblo a la princesa de cabello azul. Claudio les pidió a las chicas que lo esperarán afuera de un local que se encontraba enfrente de ellos, el cual era una joyería; las chicas asintieron con sus cabezas y el Príncipe pelirrubio del Inframundo entró al lugar, el cual le pertenece a Mirage, la Reina de Morbia y una elemental maligna.
Minutos después, el príncipe pelirrubio se reunió con Evie y sus hermanastras. Los cuatro VKS dejaron el pueblo para dirigirse hacia el monte, lugar a donde Kevin se había ido a cabalgar con su caballo Merodaque después de haber discutido con Hades.
"¿Y te gusta el modelaje?" Preguntó Dizzy, mirando a la princesa malvada.
"Si, me gusta."- Respondió Evie, con algo de desanimo- "Yo sueño con ser una bailarina. Me gusta mucho el baile; pero Kevin me dice que el modelaje es mejor que el baile, ya que destacó mi belleza en las pasarelas y que en el baile no voy a ganar mucha popularidad como la he ganado en el modelaje."- Finalizó.
"¿Y qué baile te gusta?" Preguntó Mal, cambiando de tema, pues quería hacer sentir mejor a la chica de cabello azul.
"Me gusta el baile árabe." Respondió Evie, con una sonrisa al comenzar a moverse un poco en estilo árabe.
"Pues baila para nosotros."- Animó Mal- "A mi hermanita y a mí igual nos encanta la danza árabe, al igual que su música y vestuario."- Finalizó.
"Lástima que yo no puedo usar un traje árabe con lo celoso que es Kevincito conmigo."- Dijo Dizzy, haciendo un puchero- "Imagínense si me sorprende vestida de árabe y bailando sensualmente, me mata."- Finalizó.
Claudio y Mal hicieron sus muecas, pues saben que es verdad lo que dijo su hermanita. Claudio sacó su celular del bolsillo de su pantalón para poner música árabe. Sin embargo, antes de poner la canción que había escogido para tocarla, él se acercó a la hija de la Reina Malvada, sacando de su morral un brazalete dorado con un corazón rojo en medio de él, un collar dorado con rojo y finalmente una diadema dorada con una piedra roja en medio de ella.
"¿Eso fue lo que compraste en la joyería de Mirage?" Preguntó Mal, shockeada, de tan solo ver las joyas finas que su hermanastro había comprado.
"¿Y para quiénes son? Porque no tienes novia para empezar." Añadió Dizzy, con el mismo shock que su hermana mayor.
"Yo sé que no tengo novia, aunque Ginny, Renata, Machu, Antonia y Emilia me tiren los perros; pero ninguna de ellas me interesa."- Aclaró Claudio- "Y, además, ninguna de ellas es digna de llevar estas joyas preciadas que le compré a Mirage."- Finalizó.
"En eso tienes razón Claudio, esas princesitas primorosas no son dignas de llevar unas finuras como las que acabas de comprar en la joyería de Mirage."- Concordó Mal, haciendo una mueca de disgusto de tan solo escuchar los nombres que Claudio había mencionado. A la Princesa pelimorada del Inframundo le caen muy mal esas chicas que Claudio mencionó y era imposible de ocultarlo.
"¿Entonces si no les vas a dar esas joyas a esas princesitas creídas?"- Preguntó Dizzy, sin ocultar su desagrado que también sentía por las chicas que había mencionado su hermanastro- "¿Entonces a quien le vas a dar ese hermoso brazalete, collar y esa hermosa diadema?"- Finalizó con más curiosidad.
"¿Saben a quién le voy a dar estas finuras?"- Respondió Claudio, girándose para ver a sus hermanastras, quienes negaron con la cabeza- "Estos presentes son para Evie."- Terminó por confesarles a las Princesas del Inframundo a quien le pensaba dar esas joyas.
Evie se encontraba shockeada, al igual que sus cuñadas.
"Evie."- Empezó a hablar Claudio, girándose para verla después de haber soltado un suspiro- "Yo sé que apenas tenemos unas horas de habernos conocido, pero me caíste bien. Cuando te vi vestida como estás ahorita, de bailarina árabe, pensé que estas joyas le harían un juego perfecto a tu traje."- Finalizó.
La Descendiente de la Reina Malvada no sabía que decir, ni como reaccionar; pero al final tomó el brazalete, el cual se colocó en su muñeca derecha; tomó el collar, colocándoselo alrededor de su cuello y finalmente tomó la diadema dorada, colocándosela en su frente. Claudio sentía que se iba a ir al Monte Olimpo de tan solo ver que los presentes que le había dado a la chica de cabello azul le quedaban perfectos.
"Gracias, Príncipe Claudio." Dijo Evie, sonaba tímida.
"Lo hice con mucho gusto."- Respondió Claudio, sonriendo- "Y por favor, solo dime Claudio."- Prosiguió mientras que se acercaba a la hermosa princesa de cabello azul y le tomó las manos con suavidad, a lo cual ambos sintieron una conexión eléctrica- "Me gustaría que fuéramos amigos."- Finalizó, provocando que sus dos hermanastras hicieran caras de chistes, pues están conscientes de lo que puede pasar si esta bella amistad llega a oídos de Kevin.
"A mí también me encantaría." Dijo Evie, sin pensarlo dos veces.
Después de haber aceptado la amistad de Claudio, Evie se apartó de él con suavidad, posicionándose para dar una pequeña coreografía de danza árabe. Claudio, por su parte, se dirigió a su celular para tocar la canción árabe que había encontrado, conectando su aparato en las bocinas que había conjurado con su magia.. La princesa malvada se encontraba agachada y cubierta con un velo azul. Cuando empezó la música; ella comenzó a incorporarse lentamente, siguiendo el ritmo de la música.
Imagina un lugar
Una tierra sin par
Donde ves caravanas pasar
Y ahí existen mil
Formas de existir
Es un caos pero es hogar
Cuando hay viento del este
Y hay sol al oeste
Y la hora, el reloj te da
Yo te invito a pasear
En la alfombra volar
Y en la noche de Arabia estar
Oh, imagine a land, it's a faraway place
Where the caravan camels roam
Where you wander among every culture and tongue
It's chaotic, but, hey, it's home
When the wind's from the East
And the sun's from the West
And the sand in the glass is right
Come on down, stop on by
Hop a carpet and fly
To another Arabian night
Evie se descubrió, dejando ver su rostro después de haberse incorporado, empezando a hacer movimientos con su velo que ahora tenía en sus manos, mientras que se giraba como si fuera una bailarina de ballet, daba pequeños saltos, levantaba su pierna derecha al aire, caminaba por la pista y tira el velo al suelo, hace movimientos con sus brazos, se gira con una sola pierna, se para con la ayuda de sus manos, llevando sus piernas al aire, se giraba en dirección izquierda y derecha y para finalizar con la primera parte de su coreografía, la princesa malvada se sentó en el duro suelo, cruzando su pierna derecha, mientras que levantaba su pierna izquierda al aire.
En las calles andar
De un viejo bazar
Donde todo podrás comprar
Cada especia olfatear
Y también regatear
Por las telas que encontrarás
Siempre hay música aquí
Laberintos sin fin
Es confuso y sensacional
Hechizado danzar
Y en trance avanzar
Y en la noche de Arabia estar
As you wind through the streets
At the fabled bazaars
With the cardamom-cluttered stalls
You can smell every spice
While you haggle the price
Of the silks and the satin shawls
Oh, the music that plays as you move through a maze
In the haze of your pure delight
You are caught in a dance
You are lost in the trance
Of another Arabian night
La Descendiente de la Reina Malvada se levanta del suelo, incorporándose, comenzando a girar nuevamente como si fuera una bailarina de ballet, nuevamente haciendo movimientos con sus brazos, levantaba sus pies, mientras que continuaba haciendo sus movimientos con sus brazos, volvía a girarse mientras que movía sus brazos al aire, daba pequeños saltos y volvió a girar, finalizando con la segunda parte de su coreografía.
De Arabia son
Noche y día por igual
Intenso calor
No he visto algo peor
Todo puede pasar
De Arabia son
Sueños y emoción
Hermosa región
De magia y de sol
Que es toda ilusión
Un camino que lleva al bien o a la ambición
Con deseos de poder colosal
Y tal vez confusión o fortuna y pasión
Tu destino en tus manos está
Arabian nights
Like Arabian days
More often than not are hotter than hot
In a lot of good ways
Arabian nights
Like Arabian dreams
This mystical land of magic and sand
Is more than it seems
There's a road that may lead you
To good or to greed through
The power your wishing commands
Let the darkness unfold or find fortunes untold
Well, your destiny lies in your hands
Evie comenzó a mover su cadera de una manera sensual, mientras que movía sus brazos estilo serpiente. Claudio por su parte estaba que no se la acababa, sus ojos azules no se movían para nada, pareciera como si estuvieran congelados. Mal y Dizzy estaban fascinadas con la danza que su cuñada estaba compartiendo con ellos. Las Princesas del Inframundo se dieron cuenta que su hermanastro estaba en otro mundo, pues se había ido a las nubes de solo ver a Evie bailando.
La hermanastra de Blancanieves seguía con su danza al seguir moviendo su cadera sensualmente y movía sus brazos estilo serpiente; solo que ahora daba un salto y después hace su cabeza para atrás, la cual gira junto con su cadera. Alza su pierna izquierda al aire, seguido por dos alzadas de pierna y dos giros, finalizando con una hincada, extendiendo su mano hacia Claudio.
Solo uno podrá entrar aquí
Aquel cuyo valor se oculta en su interior
El diamante en bruto
Only one may enter here
One whose worth lies far within
A diamond in the rough
Ninguno de los VKS se dio cuenta que Kevin los miraba de lejos mientras que cabalgaba con Merodaque. Dejándose llevar por la curiosidad, el Príncipe mayor del Inframundo condujo hacia esa dirección, solo que no se acercó bastante. Al tener mejor vista, ahí fue donde se detuvo.
Kevin no podía creer lo que estaba viendo al poder distinguir lo que tenía frente a sus ojos verdosos...............su novia...............su novia le estaba bailando a Claudio, al chico que siempre ha odiado desde que eran niños y con quien siempre ha competido por el amor de su padre Hades y el de sus hermanas, sobre todo por el de Mal, la melliza del propio Kevin.
¡¿Y ahora resulta que Claudio le quiere quitar a su novia?! ¡¡¡¡No eso sí que no!!!! Kevin no está dispuesto a permitir que su hermanito le quité a la Descendiente de la Reina Malvada y eso es exactamente lo que le va a demostrar en este preciso momento.
De Arabia son
Noche y día por igual
Me incita a intentar
Salir y volar
Y al mundo asombrar
En noches así
Bajo la luna fiel
Muy listo hay que ser
Para no caer
Al desierto cruel
Ajenos a que están siendo vistos por el Príncipe primogénito del Inframundo, Claudio alzó las manos al aire estilo platter, comenzando a caminar mientras que cruzaba sus piernas, acercándose a la princesa, quien estaba hincada frente a él y a quien le ayudó a incorporarse. Cada uno se giró en dirección contraria, Evie se paró en un solo pie y dio un giro. Claudio por su parte puso una mano en el suelo, haciendo una voltereta, mientras que Evie se posicionó con una sola pierna estilo bailarina de ballet, seguido a que la princesa malvada movió su cuerpo para atrás mientras que movía sus brazos y manos en el aire.
Y para cerrar este baile tan espectacular para unos y molesto para otros, Claudio y Evie se encontraban en sus propios espacios, moviendo sus brazos estilo serpiente, parándose en un solo pie al dar un giro. Después, la Descendiente de la Reina Malvada y el Descendiente de Hades caminan hacia el otro mientras que cruzaban sus piernas. Al acercarse, Claudio estiró sus brazos estilo platter, hincándose con una sola rodilla en el suelo, teniendo su pierna izquierda completamente estirada. Evie por su parte, se sujetó de la mano derecha de Claudio, levantando su pierna derecha al aire, finalizando así su baile.
Mal y Dizzy quedaron asombradas de solo ver la combinación majestuosa que hicieron su cuñada y hermanastro. Les encantó tanto que no lo pensaron dos veces y les aplaudieron, felicitándolos. La acción de la princesa de cabello morado y cabello castaño con anteojos fue lo único que le faltaba a Kevin, quien seguía espiándolos y esperaba a que el baile se terminará para acercarse y demostrarle a Claudio que no permitirá que le quité a su novia. Él no podía creer que sus hermanas.....................sus propias hermanas estuvieran alcahueteando a Claudio para que se le acerqué a su novia.
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"Wow, lo hicieron asombroso." Les dijo Dizzy con una sonrisa, la cual mostraba sus dientes.
"Si, hacen una buena química en el baile árabe." Concordó Mal, estando de acuerdo con su hermana menor, ajena a lo que va a provocar ese comentario.
"Gracias." Respondió Evie, sonriendo.
"Si, gracias hermanitas." Replicó Claudio sonriéndoles también.
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El príncipe mayor del inframundo decidió salir de las sombras y encarar a su hermanastro sin darse cuenta de desde momento el mismo haría que la peliazul se empiece a alejar de él pues al final está mostrando quien es realmente.
"Si, yupi, que lindo baile no te fue suficiente con robarme el amor de mi padre Claudio." Dijo el ojiverde molesto.
"Kevin solo es un baile relájate por favor." Suplicó la peliazul,
"Kev, yo no sabía cómo te sentías respecto a nuestro padre, solo quiero que seamos hermanos." Respondió el rubio. tratando de calmar a su hermano, pero sabía que sería difícil.
"Nunca vamos hacer hermanos menos ahora que intentas robarme a MI NOVIA, ES MÍA, MI PROPIEDAD, ASÍ QUE ALÉJATE." Gritó el Príncipe mayor del Inframundo
Mal pudo ver que Claudio se molestó cuando Kevin dijo que Evie era de su propiedad como si fuera un objeto. así que debía intervenir antes de que las cosas pasaran a mayores. La princesa malvada por su parte lo hubiera hecho, pero estaba en shock con la actitud de Kevin, ya que este era el verdadero. ¿Dónde estaba el lindo chico que ella vio la primera vez que lo conoció?
"Clau, no vayas a empeorar las cosas."- Le susurró Mal a su hermanastro, sujetando su brazo con suavidad- "Entiendo que quieras defender a Evie, pero es mejor que no agraves la situación."- Finalizó.
"No vaya a ser que nuestra amiga acabé por pagar los platos rotos." Concordó Dizzy en un susurro.
Ahí fue cuando Claudio respiró hondo, contendiéndose de lo que quería hacer, pues no se perdonaría que una chica tan linda como Evie pagará los platos rotos.
"Solo espero que Kevin no descubra que le di las joyas a Evie." Les susurró Claudio a sus hermanas.
"No te preocupes hermanito, le diré que yo se las diseñé y que se las di." Respondió Dizzy en un susurro.
"Ahora entiendo porque nuestro padre nos pidió que la cuidáramos." Dijo Claudio susurrando, finalmente comprendiendo la razón por la cual el Dios del Inframundo les había pedido a él y a sus hermanastras que cuiden de la princesa malvada.
"Yo igual." Respondió Mal en el mismo tono que su hermanastro.
"Aunque, nuestro padre no sabía que esto podía pasar, pero como ya conoce a nuestro querido hermanito como las letras de abecedario, por eso nos pidió que la cuidáramos." Masculló Dizzy.
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Los VKS se encontraban en el castillo, Claudio, Mal y Dizzy fueron a darle una vuelta a su padre sin haberle contado el desagradable encuentro que tuvieron con Kevin, pues ninguno de los Descendientes de Hades quería preocuparlo. Así que solo le contaron lo del baile y hasta ahí.
Sin darse cuenta que algo le ocultaban, a Hades le dio gusto que Claudio bailará con la Descendiente de la Reina Malvada, aunque está consciente que esto no va a traer nada bueno; pues conoce muy bien a su hijo mayor como si fuera el abecedario como había dicho su hija menor y se imaginaba que a él no le va a gustar esta nueva amistad.
"¿No vas a almorzar en el comedor?" Le preguntó Dizzy a Claudio al salir de la habitación de su padre y caminaban en el pasillo.
"Con lo que sucedió hace rato en el monte, no creo que sea buena idea."- Respondió Claudio- "No quiero que nuestro padre se vaya a dar cuenta que algo anda mal, ya bastante tiene con que este malito en la cama y darle otra preocupación." Finalizó.
"Si tú no estás ahí, yo tampoco."- Sentenció Mal- "Yo no puedo estar en la misma mesa que Kevin, menos ahora con lo que pasó en el monte, nada más de verlo a la cara, seguro se me va a hacer una piedra en el estómago y voy a perder el apetito."- Finalizó.
"Lo que hizo no estuvo nada cool, pero bueno, yo le haré la lucha de estar ahí con el tigrecito." Respondió Dizzy, haciendo una carita.
"Buena suerte con el tigrecito." Le dijeron sus hermanos.
"Gracias." Replicó la Princesa menor del Inframundo y comenzó a irse.
Evie aún seguía en shock por lo que sucedió en el monte, pues Kevin nunca la había tratado como lo hizo. Él siempre fue lindo con ella desde que se conocieron, empezaron con su amistad, la cual después se convirtió en noviazgo. Hoy era la primera vez que había celado de la forma en que lo hizo, solo porque le molestó que ella bailará con Claudio, ya que piensa que el Príncipe rubio del Inframundo le quiere robar el amor de la propia princesa malvada, así como supuestamente le ha robado el amor de su padre y el de sus hermanas.
"Hola Evie." Saludó Dizzy al llegar a la sala.
"Hola Dizzy." Respondió la hija de la Reina Malvada al saludo de la pequeña Princesa del Inframundo.
"¿Como te sientes?" Preguntó Dizzy.
"Todavía estoy en shock, tu hermano nunca me había tratado como lo hizo hace rato en el monte."- Explicó Evie, shockeada- "Kevin siempre fue amoroso, cariñoso y lindo conmigo desde que empezamos nuestro noviazgo y ahora me trató como si estuviera en sus dominios."- Finalizó con algo de desagrado.
"Además, Claudio y tú no estaban haciendo nada malo, era un baile de amigos." Concordó Dizzy con su cuñada.
"¿Sabes algo Di? Voy a confesarle a Kevin que acepté la amistad de Claudio."- Le confesó la Descendiente de la Reina Malvada- "Yo pienso que es mejor que lo sepa por mí, que a que se enteré por otra parte."- Finalizó con algo de nerviosismo, pues se estaba imaginando que su novio va a reaccionar como lo hizo en el monte.
"Pues te aconsejó que hables con él, pero lejos del castillo."- Respondió Dizzy- "Nuestro padre no sabe nada del pleito que tuvimos con Kevin en el monte; solo sabe que Claudio bailó contigo danza árabe, pero hasta ahí. No lo quisimos preocupar, debido a su enfermedad."- Prosiguió- "Y también te deseó la mejor de las suertes, porque algo me dice que cuando le digas a Kevin que aceptaste la amistad de Claudio, va a tumbar el techo de donde se vayan encontrar ustedes."- Finalizó, haciendo una carita de chiste.
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