"Si vuelve a pasar algo como esto, ten por seguro que hablaré con los padres de esa omega para que se la lleven lejos de aquí Yoongi, y sabes que yo si lo haría. De aquí en adelante vas a respetar tu matrimonio como debe ser, yo no crié a ningún adúltero"

Le había dicho Kazuha, cuando fue a la casa de los padres de Jimin a despedirlos.

"Nuestra madre y yo nos encargaremos de que no se sigan regando falsos rumores sobre tu separación, así que agradecenos. Sería muy horrible que papá sea dado de alta y se topé con ese tipo de comentarios."

Chaewon le había susurrado al oído antes de que se subiera al auto junto a Jimin.

"Yoon, trata de por favor tranquilizarte, no te adelantes a las cosas. Es verdad, eso de que la pastilla del día después no es cien por ciento efectiva en híbridos, pero no asegura nada, así que confiemos en que todo saldrá bien, al menos en ese sentido"

Fueron algunas de las palabras de despedida de parte de SeokJin. Él era el único que sabía que Yoongi se había tomado "la pastilla del día después" (un medicamento anticonceptivo que se ingiere cuando tuviste relaciones sin protección y no quieres concebir), el farmacéutico les había dicho que la pastilla no solía ser efectiva en híbridos, pero Yoongi de todos modos la tomó con la esperanza de que en él si hiciera el efecto deseado.

Todo aquello daba vueltas en la cabeza de Yoongi, mientras su mirada estaba hacia la ventana, viendo el paisaje pasar.

¿Que si lo que ocurrió con su madre y lo dicho por su hermana le había dolido y fastidiado? Pues claro que si, él no era de hierro. Ahora que se encontraba de regreso a Busan, había terminado de procesar que su plan se había hecho añicos por culpa de una cosa y la otra. Entre ellos, otra vez estaba involucrada su familia.

Había tenido a Jihyo tan cerca, en sus brazos, había percibido su aroma, pero todo fue tan efímero y temporal. Tuvo que pasar por una segunda dolorosa despedida.

Pero nada de eso se comparaba al miedo, impotencia e incertidumbre que estaba sintiendo en ese momento.

¿Él podría estar embara...?

Apretó sus ojos conteniendo sus lágrimas de frustración. Ni siquiera podía mencionar esa palabra sin sentir un miedo ferviente en todo su ser.

Un cachorro sería la gota que colmaria el vaso de su miserable vida.

¿Un hijo con Jimin? Tan solo esa idea le espelucaba la piel y su pelaje. ¡Eso no podía suceder! ¡No!

- ¿Amor? ¿Sucede algo, te sientes mal? - le preguntó Jimin después de abrir la puerta copiloto.

Yoongi abrió los ojos, dándose cuenta que ya habían llegado a casa. Su casa.

Jimin estaba parado frente a él, mirándolo con preocupación, ya que su expresión no indicaba algo favorable.

- Si, solo, me dio sueño. - se quitó el cinturón y se bajó del auto, Jimin sostuvo uno de sus brazos.

- Adelantate, yo entraré las maletas - Jimin dejó un beso en su sien, y fue a la cajuela.

Yoongi lo quedó viendo unos segundos. En la expresión del alfa había un atisbo de nostalgia y alivio cuando vio las maletas de Yoongi.

Sin más, Yoongi entró a la casa.

No habían sido muchos días que estuvo alejado completamente de este lugar, pero él se había ido con la intención de no volver jamás. Y ahora estar otra vez parado en medio de la sala, y ver todo lo que tanto Jimin como él se tomaron el tiempo de adornar y arreglar - acomodar su hogar - ,le trajo muchos sentimientos de todo tipo.

Todo estaba tal cual lo dejó. ¿Por qué habría de haber cambiado algo? Se respondió así mismo.

Viendo todo su alrededor, y estando consciente que tendría que hacer una buena limpieza, su mirada se dirigió hacia una caja de pastel encima del mesón. Frunció su ceño curioso.

- Si, hay que hacer una buena limpieza - dijo Jimin detrás de él después de haber terminado de entrar las maletas de Yoongi. - pero el viaje ha sido largo, lo dejaremos para mañana.

Se acercó a Yoongi, y lo envolvió en sus brazos, mientras lo miraba con una expresión que a Yoongi le daba mucho cargo de conciencia. - Por un momento, de verdad pensé que no volveríamos a estar en nuestra casa. Tuve mucho miedo de perderte.

Yoongi tragó grueso, mientras Jimin se aferraba más a él. - De todo lo que las parejas suelen pasar, tengo que admitir que jamás pensé que nos ocurriría algo así. Se siente horrible.

El omega de Yoongi, acarició con su cola el muslo de su alfa, levantó una mano y acunó la mejilla de Jimin, este se arrimó a su toque. - Mi reacción fue muy exagerada, yo...

Jimin sonrió negando y tomó la mano que estaba en su mejilla, acariciandola. - Incluso esta experiencia, me sirvió para darme cuenta cuanto te amo, y que jamás podría estar con alguien que no seas tu.

- Ahora lo sé...- susurró Yoongi.

- No hablemos más de eso. Quedó atrás, ya no importa. - Jimin dejó un besito en su nariz. - ¿Nos duchamos juntos? Podemos desempacar el resto de tus cosas después.

- Claro amor, ¿por qué no? - Yoongi le sonrió, alegrando aún más el corazón de Jimin, aún si era todo una farsa.

Para Yoongi no fue sorpresa la felicidad y alivio de todos, cuando supieron que habían arreglado todo y que había sido un gran malentendido, por culpa de aquella chica.

Yoongi se sentía con un peso en sus hombros cada vez más. Sobre todo cuando se encontró con Taehyung.

El omega nunca le reclamó por haber actuado tan apresuradamente o sin pensar, como de seguro muchos pensarían cuando él se fue de casa sin antes hablar con Jimin. Pero no fue así. Taehyung le sonrió y lo abrazó casi con lágrimas en sus ojos. El omega estaba más que contento de que todo se haya solucionado y que un hermoso matrimonio como el de ellos no se viera roto por culpa de una "resbalosa", como le decía el omega de oso.

Entre tantas charlas, Yoongi confirmó que Min Jeong lo habia llamado. Cuando Taehyung le dijo eso, Yoongi revisó detenidamente su celular, y notó aquel número desconocido. Jungkook le mencionó en baja voz que Min Jeong le había dicho que la persona que contestó fue su madre. Yoongi ya lo sabía, pero escuchar aquello solo he hacia recordar lo que sucedió con su madre en aquella habitación.

Dejando ese tema a un lado por el momento, se sintió muy feliz por Taehyung, quien les dio la noticia de que estaban esperando un pequeño osito o tigresito. Todos su allegados sabían que lo esposos Jeon hace tiempo estaban en busca de su primer cachorro.

Claro, si era de aquella manera, ¿quién no estaría feliz? Pensaba Yoongi.

Al pasar más días, Yoongi poco a poco iba perdiendo las secuelas de vergüenza que tenía por lo sucedido. Pero la culpa aún seguía allí, y aquello era una carga muy pesada, eso y el saber que bien pudo haberse ido con Jihyo sin importar nada, aquella tarde cuando se vieron en la universidad.

Pero ahora era tarde.

Ahora no solo tenía aquellas luchas internas, ahora tenía que tratar con el nuevo accionar de Jimin.

No le prohibía cosas, aún, pero era muy sobreprotector, y lo marcaba con su aroma aún si solo iba atrás de la casa a la mini bodega de víveres.

Siempre iba con él a hacer las compras, si Yoongi quería salir a caminar a visitar a Taehyung, o a su amigo Hoseok, Jimin siempre que podía iba con él.

Yoongi trataba de comprenderlo. Sabía que era su culpa el que el alfa quisiera estar con él todo y siempre. Jimin estuvo a punto de perderlo, y aquello había hecho que tanto su alfa como él, aumentaran la posesividad hacia su omega.

El omega de Yoongi, por supuesto estaba más que encantado por aquella actitud del alfa. Amaba que lo cuidara y estuviera a su lado la mayor parte del tiempo.

Cuando Jimin se iba al trabajo, le pedía a Taehyung o a uno de los shifters - siempre omegas - que se quedaran con Yoongi o lo cuidaran de lejos.

Una parte de Yoongi comenzaba a molestarse por ser tratado como un niño pequeño, pero inmediatamente desechó ese sentimiento de enojo, pues su subconsciente le repetía que lo tenía bien merecido, por haber jugado de esa manera con los sentimientos del alfa.

Así que, solo se dedicaba a sujetarse a lo que Jimin quería y decía.

El trato amoroso y comprensivo de Jimin, jamás cambió, todo lo contrario. Su posesividad estaba acompañada de su característica linda personalidad.

- Mi amor

- ¿Si?

Ambos estaban acurrucados en el sofá, disfrutando el tiempo libre de Jimin. El alfa estaba muy cansado, así que Yoongi le sugirió que solo se quedaran de esa manera.

- En unos días es tu celo.

Yoongi tragó grueso, y asintió.

- ¿Debería comprar supresores?

Jimin levantó suavemente su barbilla para verlo a la cara, y rió.

- ¿Es una broma?

Yoongi mordió su labio inferior.

- Mi gatito, es tu primer celo juntos, así que no son necesarios los supresores, o es que ¿eres muy agresivo en tus celos? - Jimin acarició sus orejitas.

- Tu eres el alfa aquí, yo debería preguntar eso, ¿mi fuerte aroma no te hará agresivo verdad?

Jimin alzó una ceja. - No te prometo nada...lo que si te prometo, es que daré todo lo que tu omega me pida.

- ¿Entonces? ¿Qué dice el exámen doctor?

Yoongi había encontrado la forma de hacerse la prueba de embarazo de sangre, a escondidas.

El doctor abrió el sobre y lo leyó durante unos segundos.

- Por ahora no esta encinta señor Park. Me sorprende, pues está próximo a su celo y aquello aumenta la etapa fértil. Pero pues supongo que aún no es su tiempo - sonrió el doctor.

Yoongi sentía que le volvía el aliento de vida al cuerpo.

No es tiempo de cachorros gente 👀🤙😬