Pov Aiden.

Ya solo me queda un día para volver a casa, para enfrentarme a la realidad en la que Ariadna y Evan están juntos.

Solo de pensar en eso me ponía enfermo, no se si seré capaz de soportarlo.

Esta semana lo único que he estado haciendo ha sido entrenar, y encerrarme en mi habitación, mis compañeros no han parado de preguntarme que es lo que me pasa, y de pedirme que saliera con ellos un rato.

Así que me encuentro en mi habitación, preparándome para dar una vuelta con ellos, ya que hoy es nuestra última noche aqui, mañana llegaremos ha casa.

Escucho como llaman a mi puerta, y no tengo ni idea de quien puede ser, todavía es temprano, hemos quedado dentro de una hora en el hall del hotel.

- Pasa, la puerta esta abierta.

Me giro hacia la puerta y veo que es
Aimar.

Aimar es uno de los jugadores del equipo y uno de mis mejores amigos, lo conozco desde que tengo diez años, cuando se mudo con su familia desde españa.

A diferencia de mi Aimar es moreno de piel y de pelo y tienes los ojos marrones, pero no es tan alto como, me llevo muy bien con el, es un buen chico en el que se puede confiar.

- ¿Que pasa Aimar, todavía es temprano?

- Si lo se, por eso he venido hablar contigo, ¿Que te pasa Aiden? Llevas bastantes días muy serio, con la cabeza en otro sitio.

- Si, lo se tío, perdona estos días he estado muy cansando con los entrenamientos.

- A mi no me engañas Aiden, tu estas así desde antes de que vinieramos aqui. Y me atrevo a decir, que todo se debe a la chica del domingo pasado en el partido. ¿O me equivoco amigo?

- No, no te equivoca, todo se debe a Ariadna, me vine aqui para ver si podía sacarmela de la cabeza por lo menos estos días y ha sido imposible.

- Y ¿Se puede saber porque quieres sacarla de tu cabeza? Es una chica bastante guapa y parecía agradable.

-  Que es guapa salta a la vista, y para mi es mas que agradable. Aimar estoy enamorado de ella.

- Entonces ¿Cual es el problema?

-  Es difícil de explicar.

- Bueno inténtalo aqui estoy para escucharte, para eso estamos los amigos.

- Esta bien lo intentare, mira a ella le gusto, pero tambien le gusta mi primo Evan. Ella en ningún momento me ha engañado con esto. Entonces yo le pedí que saliera con los dos para que se decidiera.

- Tu ¿Estas loco? Sabes como es Evan.

- Si, lo se y ahora me arrepiento, pero ya no hay marcha atrás.

Le conté todo lo que había pasado con Ariadna, Evan y yo hasta el día del partido a Aimar.

- Aiden, no te das cuenta que te has rendido antes de tiempo.

- Por que dices eso, esta mas que claro que lo que ella iba ha decirme es que se había decidido por Evan.

- Yo no lo veo así, esa chica se tomo muchas molestias para hablar contigo idiota y, no la dejaste.

- No podía escucharla, no tenía el suficiente valor.

- Claro y, es mas facil salir hullendo y dejarla allí con Evan.

- ¿Que podía hacer? No tenía fuerzas para afrontarla.

- Sabes, si yo estubiera en tu lugar, primero la escucharía, y segundo aunque me dijera que se queda con Evan, seguiría luchando por ella, demostrándole que la quiero. Rendirse es facil Aiden, lo difícil es luchar. Pero cuando se lucha por lo que se ama hay que darlo todo.

- Sabes Aimar, tienes razón, todavía no estoy preparado para rendirme y dejarla escapar de mi lado.

- Eso es amigo, lucha por lo que quieres y pelea hasta el final.

- Si, eso haré, el problema es que llevo tantos días en tensión, que antes de hablar con ella necesito relajarme y despejar mi mente, ya sabes soltar adrenalina.

- No te preocupes, de eso me encargo yo, mañana llegaremos  por la tarde, antes de hablar con ella, tu y yo nos vamos a ir a mi casa de campo y, vamos a coger las motos de enduro, veras como te relajas y, luego ya sabes a coger el toro por los cuernos y a por ella.

- Gracias Aimar, eres un gran amigo.

- No es nada, y ahora bajemos y divirtamonos un poco con los demás, mañana será otro día.

Después de la charla con Aimar y de salir un rato con mis compañeros me sentía mucho mejor, poder desahogarte con alguien y que te ayudara a ver las cosas de otra manera era lo mejor.

Me quite la ropa y, me acosté en la cama, mañana seria un día largo.

Me desperté con el ruido del despertador, desde que llegue aqui, es la primera noche que he dormido y, la primera vez que he necesitado el despertador para levantarme.

Hablar con Aimar es lo mejor que me pudo pasar y, ahora estoy mas seguro que nunca que voy a seguir luchando por el amor de Ariadna.

Me ducho y empiezo a preparar la maleta para volver a casa, una vez lo tengo todo listo salgo de la habitación, dirigiendome al hall del hotel donde hemos quedado todo el equipo antes de coger el autobús de vuelta.

Entro en el autobuses​ y me siento, al cabo de unos minutos siento como alguien se sienta a mi lado, levanto la vista y me encuentro con Aimar sonriéndome.

- ¿Que tal tío? ¿Preparado para el día de hoy?

- Si, pero a cada minuto que pasa me pongo mas nervioso.

- No te preocupes, cuando lleguemos haremos lo que te dije ayer, veras como te sientes mejor para hablar con Ariadna.

- Gracias Aimar.

Llegamos a Londres sobre las cuatro de la tarde y, como dijo Aimar nos dirigimos a su casa de campo.

- ¿Listo Aiden para pasar un buen rato y soltar adrenalina?

- Eso siempre Aimar.

Después de mas de dos horas en las motos, estaba mas que relajado, además había pasado un buen rato, algo que realmente necesitaba.

- Aiden, vamos a ducharnos y quitarnos el barro antes de volver a la ciudad.

- Si vamos, Aimar gracias por todo, te debo una amigo.

- No es nada Aiden.

Me encontraba en la puerta de mi casa, eran ya las diez y media de la noche, y solo de pensar en entrar y encontrarme con Ariadna me ponía nervioso.

Vamos Aiden, se hombre y entra en casa ya.

Pov Ariadna.

Me desperté en la cama de Aiden, con su camiseta puesta, lo acerque a mi nariz y inspire para que su olor inundara  mis pulmones, lo echaba tanto de menos, tenía tantas ganas de que volviera.

Fui a mi habitación y me prepare para  un día mas de universidad, por suerte hoy era viernes.

El día en la universidad se me había hecho largo y pesado, en ningún momento había podido sacar a Aiden de mis pensamientos.

Los chicos me invitaron a ir con ellos a cenar y al cine, pero les puse la excusa de que me dolía la cabeza y, que solo quería descansar.

Seguia pensando en Aiden, no sabia con exactitud cuando llegaría, y yo solo quería verlo.

Después de tomar una ducha y cenar subí para acostarme, no tenía ganas de nada. Pero como la noche anterior, entre en la habitación de Aiden y me puse su camiseta.

Parecía una tontería, pero estar aqui con su camiseta puesta me hacia sentir mas cerca de el. Y eso era la único que quería en ese momento.

Estaba pensando en como le diría a Aiden todo lo que sentía por el, y sin pensarlo, me senté en su escritorio y me puse a escribir una carta en donde le habria mi corazon y le decía todo lo que sentía por el.

Cuando termine de escribirla, la deje sobre el escritorio y me acosté en la cama de Aiden, dejándome llevar por los brazos de morfeo.

Pov Aiden:

Entre en casa y no había nadie, deje la maleta en la entrada y subí las escaleras, ¿Quizás Ariadna se encontraba en su habitación?

Llegue hasta su puerta y llame, como no me contesto decidí abrirla, pero allí no había nadie. La desilución se apodero de mi. Que estúpido había sido, como podía creer que un viernes por la noche Ariadna estaría en casa, seguramente este con Evan divirtiendo quien sabe donde.

Sin nada mas que hacer me fui a mi habitación, ya no tenía ganas de nada, me acostaré a dormir y mañana será otro día.

Cuando entre en mi habitación, me quede con la boca abierta, no podría creer lo que mis ojos estaban viendo.

Ariadna se encontraba en mi cama, con una de mis camisetas puesta durmiendo, esto no podía ser real,
Pero ¿Que hacia ella aqui? Y con mi ropa puesta.

¿A caso ella tambien me habria extrañado?

Me senté en silla del escritorio y me quede mirándola un rato, nunca me cansaría de verla, Dios como la había echado de menos.

No sabia que hacer, si despertarla o dejarla dormir. Me deje caer sobre la mesa y, me fije que sobre ella había un papel. Era una carta escrita por Ariadna y estaba dirigida a mi.

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Lo prometido es deuda y aqui les dejo el capitulo de Aiden. Espero que les guste, si es así dejenmelo saber votando y con sus comentarios.

Nos leemos prontito, y gracias por vuestro apollo sin el esto seria imposible.

Alexa.

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