𖥻017
𖥻 ♡̶!
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Jungkook bloqueó su celular y se levantó del sofá, se acomodó el cabello y ató sus agujetas mientras Taehyung lo miraba atento a su lado.
—¿Que haces?—Preguntó aún bebiendo de la botella que tenía en la mano.
—Ya me iré.
Taehyung tenía una mirada neutra y tranquila, bebía el líquido lentamente mientras veía las acciones de su amigo. A su lado el celular de Jungkook vibró y brilló al anuncio de un mensaje, él no era de las personas que se metían en los asuntos de los otros por que no le importaban pero no pudo evitar mirar de reojo de quien era el mensaje pues creía que la salida de Jungkook se debía a alguien.
No se sorprendió al ver un mensaje de Jimin que claramente decía "me mandas un mensaje cuando estés en la puerta", rodó los ojos algo cabreado.
Miró nuevamente a su amigo colocándose un abrigo que Namjoon le había prestado porque Jungkook había llegado a la casa sin ninguna prenda abrigadora, inconscientemente posó su vista en el chupeton que adornaba el cuello de Jungkook, no pudo evitar sentirse enojado pues aquel chupeton tenía el toque de Jimin.
Si, él mismo le había dicho a Jungkook que podía salir con Jimin, en un principio había hecho todo para ayudar a Jungkook con su gran flechazo con Jimin y claro, para fortalecer su relación con Jimin, pero esto segundo era sólo el acto de reflejo sobre su ayuda con Jungkook. Pero le cabreaba de sobre manera saber que ellos dos estaban pasando un buen rato juntos, se tenía que ser un estupido para no saber qué Jimin y Jungkook se frecuentaban muy a menudo, el chupeton en el cuello de Jungkook y su prisa para ir hacia Jimin se lo confirmaban.
El enojo y los celos le recorría por las venas y le nublaba los pensamientos, no ayudaba en nada el que este borracho.
Espero que disfrutes mucho tu tiempo con Jimin.
—¿Enserio te iras Jungkook?—Preguntó Seulgi viendo como su amigo se arreglaba la chaqueta antes de irse.
—¿El deber llama?—Se burló Wonho mirando de reojo a Taehyung esperando la reacción cabreada que les había regalado toda la noche.
Pero Taehyung solo tenía una sonrisa en el rostro, terminando su bebida en silencio.
—¿A donde vas con tanta prisa? ¿Acaso es más importante que tus amigos?—Se levantó de su lugar para caminar hacia Jungkook.—¿Con quien te iras a ver?
—No te importa.—Dijo Jungkook con un tono amigable, pues notaba el tono ebrio de Taehyung.
—Ah, entre mejores amigos no hay secretos ¿lo recuerdas?–Señaló.
—No tengo que ventilarte sobre mi vida personal, Tae.
—¿Si? antes lo hacías...¿que fue lo que cambio? ¿por qué es tan especial que la o lo escondes de nosotros?—Lo abrazo de los hombros.
Jungkook ignoró las provocaciones de Taehyung, por que siempre llegaba a ponerse algo fastidios cuando estaba ebrio, no quería darle importancia.
—Ah Jungkookie, si que tomaste mi palabra y empezaste a salir con Jimin, creía que lo llegarías a pensar mejor.—Acusó.
—No estamos saliendo.—Se defendió.
—¿Ah no?—Empezó a frotar su cabeza con el cuello de Jungkook.—Hoy Jimin me dijo que estaban en una cita...
Atento a la reacción de Jungkook, sonrió con burla, los ojos de Jungkook se iluminaron al oír aquellas palabras.
Sus demás amigos se percataron de la tensión que empezaba a formarse entre Tae y Kook, así que Jennie tuvo que interrumpir lo que llegaría a formar una futura pelea, alejo a Taehyung del lado de Jungkook y se puso en el medio de ambos.
—Ya, Tae deja que se vaya.
—Si si, tiene que ir a su nueva cita~—Se burló.
Jungkook decidió dejar todo aquello y no responderle nada a Taehyung pues sabía muy bien que estaba borracho, no quería desgastarse hablando con un borracho Taehyung. Se dirigió a paso lento a la puerta y antes de llegar a salir Taehyung nuevamente hablo.
—¿Sabes, Kook? Me importa con quien te iras a ver por qué literalmente iras a la casa de mi ex.—Acusó enojado.
—Tú mismo me dijiste que podía salir con Jimin ¿no es así?–Se defendió de regreso.—¿Entonces por qué te molesta tanto?
Taehyung sonrió de forma socarrona.—Por qué quiero proteger tu corazoncito.
Jungkook rodó los ojos y salió de la casa de Namjoon.
Taehyung soltó un suspiro y nuevamente se replanteó las cosas ¿Que estaba haciendo? era obvio que Jungkook no dejaría su flechazo por Jimin, alargar esto solo lo iba a confundir más e iba a quedar más flechado aún. Era hora de terminar todo el estupido juego que había empezado, el estupido juego que había hecho para Jungkook y su flechazo por Jimin.
Las palabras de Jimin volvían a su cabeza, ya estaba, el mismo Jimin le dijo que nadie iba a ser como él, era lo único que necesitaba para terminar su estupido juego.
Terminar todo antes de que las cosas empiecen a salir mal.
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—Creí que no llegarías.—Puchereo subiéndose a horcajadas de Jungkook.
—No podría negarme a ti y tus pedidos ¿no?—Tomó la mano de Jimin y le planto un suave beso que hizo al rubio sonreír.—¿Tus papás no están?
—Nop.—Dijo empujando suavemente a Jungkook para que se recueste en la cama.—Se fueron a una fiesta y es probable que se queden a dormir por ahí, los veré solo en el almuerzo.
Se encogió de hombros mientras empezaba a repartir besos por la mandíbula de Jungkook y bajar lentamente hacia su cuello para dar lamidas mientras balanceaba sus caderas sobre Jungkook.
Jungkook miró devotamente como el pequeño cuerpo de Jimin estaba encima del suyo, suavemente empezó a acariciar sus caderas animándole a que no detenga sus movimientos,
acaricio las desnudas piernas de Jimin y se degusto con los suaves que estas eran. Disfruto hasta el más mínimo roce que Jimin lograba darle, estaba en el paraíso.
Jimin subió sus besos hacia los labios de Jungkook y se fundieron en un beso tan cálido que llenó el corazón de Jungkook de fuegos artificiales. Se separaron del beso mientras Jungkook acunaba las mejillas de Jimin con sus palmas y le repartía besos que hacían reír suavemente a Jimin.
—Me encantas mucho, Jimin.—Confesó dando un pequeño beso a los labios del nombrado.
—Demuéstralo.–Sonrió coquetamente mientras devolvía el beso de Jungkook pero de forma más caliente.
Jungkook jadeó mientras sentía como Jimin nuevamente continuaba con los movimientos encima suyo, con la mirada llena de orgullo Jimin se separó de Jungkook para desvestirse ante los atentos ojos de su tatuado acompañante. De forma lenta y tortuosa se desvistió dándole una exquisita vista a Jungkook sobre su bonito cuerpo.
Solo faltaba que la baba cayese por los labios de Jungkook, recorría con pasión cada porción del cuerpo de Jimin, mirándolo devotamente mientras este gateaba hacia él con una sonrisa pícara en el rostro. Jungkook se sentía como el hombre más afortunado en la faz de la tierra.
No dejo a Jimin atrás pues también empezó a deshacerse de sus prendas con un atento y juguetón Jimin mirándole.
—Tienes el cuerpo más caliente que haya visto.—Halago Jimin mientras trazaba el abdomen de Jungkook con su dedo índice.
—Tú no te quedas atrás.
—Lo sé.—Nuevamente se subió a horcajadas de Jungkook.
Tomando su rostro entre sus pequeñas manos unió ambos rostros para compartir otra ronda de besos calientes.
Habían cambiado las posiciones y era Jimin que estaba abajo con un Jungkook absorto besándole el cuerpo encima suyo. Los besos y los pequeños roces le estaban volándole la paciencia, los besos le sacaban incontables jadeos de frustración, ya no quería seguir ansiando sentir a Jungkook dentro suyo.
Jungkook solamente se podía dedicar a besar cada porción del rostro de Jimin, quería que Jimin se sintiera como él lo hacía, que sintiera esa sensación de ser la persona más afortunada del mundo por tenerle besándole, adorándole con devoción. Pero no era así.
Mientras que para Jungkook era un intento vago para que Jimin se sintiera adorado, para Jimin era una acción que le arrebataba la paciencia.
Las súplicas de Jimin fueron escuchadas y sintió un gran alivio cuando dejó de sentir los incontables besos de Jungkook sobre su rostro.
Gimió alto cuando los dedos largos de Jungkook empezaron a prepararle y gimió aún más cuando Jungkook se enterró en él. No pudo evitar clavar sus uñas en la gran espalda de Jungkook mientras gemía en el oído de este.
Jungkook repartía besos sobre el cuello de Jimin mientras embestía suavemente, Jimin tenía su boca muy cerca del oído de Jungkook por lo que pudo deleitarse muy bien escuchando los gemidos que Jimin le regalaba.
—Ah~ s-si, s-sigue así.—Se mordió el labio intentando acallar con los sonoros gemidos.—L-lo haces tan~ bien Jungkookie.
—¿Te g-gusta?—Preguntó mientras mordía el cuello de Jimin.
—Mmh~si, me encanta.
—Tú también me encantas, Jimin.—Beso los labios del rubio acallando los gemidos de Jimin.
El único sonido que se podía escuchar era el de las pieles chocando, los gemidos robados y los suspiros placenteros. Jungkook levantó de las caderas a Jimin ligeramente mientras empezaba a arremeter con más fuerza sobre el pequeño cuerpo. Acariciando con sus dedos la estrecha cintura de Jimin y apretando en ella.
Desde su lugar pudo apreciar una de las más bellas obras de arte: Jimin le miraba con los ojos llorosos, las mejillas sonrojadas, los labios mordidos e hinchados y el cabello desordenado colándose a su frente por el sudor.
Todo en Jimin era un desastre y no pudo no enorgullecerse de siempre ser el causante de aquello, adoraba ver y sentir a Jimin deshecho en placer, rogando por él y solamente por él. Le hacía sentir que Jimin era suyo.
Aunque no lo fuera.
Pero eso iba a cambiar, pronto Jungkook tendría las agallas para sincerarse con Jimin.
Ambos llegaron al orgasmo con un gemido ahogado, Jungkook se desplomó en Jimin con el cuidado de no lastimarlo. Salió lentamente de él mientras aún recuperaba el aliento.
Se quitó el condon y lo amarró para luego tirarlo a la basura, fue hasta el baño de Jimin para traer algo con que limpiar el cuerpo del más pequeño.
Volviendo a la habitación viendo a un Jimin acurrucándose para dormir sonrió con ternura, se sentó a su lado y pasó el trapo mojado por los muslos y entrada de Jimin, para así quitar la esencia de Jungkook de estos. Cuando su labor fue terminada se sentó al lado de Jimin, el pequeño aún le daba la espalda.
Contorneó la espalda y cintura de Jimin, mientras trataba de contar los lunares que tenía en el omóplato, Jimin se dio la vuelta y le sonrió. Jungkook podría quedarse toda la noche hipnotizado por la belleza de Jimin, podría gastar miles de millones para congelarlos ahora mismo y disfrutar de la bonita sonría de Jimin.
Jimin subió su mano hasta acariciar la mejilla de Kook y este cual un cachorro pidió más por sus caricias, a lo que Jimin no se pudo negar, se le hacía muy tierno ver aquella faceta adorable de Jungkook. Pues todo el tiempo en el que lo había conocido siempre creyó que era alguien frío y serio, se había basado en la apariencia y la fama de Jungkook para catalogarlo de esa manera, pero no era así, llegando a conocer a más profundidad a Jungkook pudo descubrir muchas facetas de él, las cuales le encantaban.
—Ya me tengo que ir.—Anuncio Jungkook.
—No, quédate conmigo, durmamos juntos y mañana vamos los dos al colegio.—Pidió.
Y Jungkook no pudo negarse, no cuando los ojitos de Jimin le suplicaban que se quede. Se hizo un espacio en la cama de Jimin y se acomodó en esta con el rubio mirándolo frente a frente. Se sonrieron con ternura y se dieron un beso de buenas noches.
Después de un rato de estar frente a frente Jimin se volteó dándole la espalda a Jungkook, dándole una pequeña invitación para que se acerque más. Jungkook tomó esa invitación y envolvió la cintura de Jimin en sus brazos mientras recostaba su cabeza en el hombro de Jimin.
—Buenas noches, pastelito.
—Buenas noches, Jungkookie.
Jungkook amaba mucho a Jimin. Tanto que no podía esperar ni un segundo más para confesarle sus sentimientos.
𖥻 ♡̶!
aaa re tarde actualizaba jejej
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