- ¿Enma?, ¡Enma! – Grito alegre el castaño al reconocer la cabellera rojiza que se acercaba y con mucho entusiasmo comenzó a correr hacía su dirección.

Ambos chicos tenían una gran sonrisa en su rostro pero siendo los Dames que son, antes de poderse dar el abrazo tan anhelado, los dos tropezaron, cayendo Enma encima de Tsuna, después de unos segundos ambos comenzaron a reír.

Los demás observaban el reencuentro con diferentes expresiones: Los ligados a Vongola con una sonrisa (Pequeña pero sonrisa a final de cuentas); sabían que esos dos eran como hermanos, más desde que se había arreglado todo el malentendido entre las familias junto con el fin de la maldición de los arcobalenos, los dos habían pasado mucho tiempo juntos, hasta que Enma se había ido a entrenar desde hace unos seis meses, era más claro que el cristal saber que esos dos se había extrañado.

La gente con una vida normal los miraban extrañados, el chico se les hacía demasiado conocido pero no lograban recordar el porqué, fue hasta que vieron con más atención a los dos jóvenes en el suelo que lograron recordar.

- ¡Es el perdedor Enma! – Grito con burla Mochida, captando la atención de todos los demás, quienes al escucharlo también recordaron.

- ¿Qué hace ese inútil aquí? – Pregunto el profesor Nezu con desprecio, observando como ambos jóvenes ignoraban a los demás mientras hablaban animadamente.

Nadie pudo decir algo pues los dos chicos en ese momento se pararon y se acercaron a los demás con una sonrisa.

- Es un gusto verlos otra vez chicos – Saludo Enma a los guardianes, dándose cuenta por primera vez de la demás gente, decidió no decir nada por el momento, algo le decía que era culpa de Reborn ya hablaría después con Tsuna.

- ¿Qué haces aquí perdedor? – Pregunto de mala manera Mochida, viendo con odio al par que tenían en frente.

Enma comenzó a decir cosas sin sentido ya que no sabía que decir respecto a eso, no podía decirles la verdad y era pésimo mintiendo.

- No sé porque pregunte, se nota que sigues siendo un estúpido e inútil igual que Dame-Tsuna – Hablo Mochida al ver que el da cabello rojizo no decía nada coherente, pero que al momento de decir eso el ambiente cambio por completo, Enma se había quedado callado y su cabello ocultaba su vista.

Inmediatamente la mayoría concordó con él y comenzaron a insultar a los dos jóvenes Capos, al castaño no le importaba y le había dado una señal a sus guardianes para que no hicieran nada, mientras que el portador de la llama de la tierra temblaba ligeramente.

- Retira eso... - Hablo bajo, pero siendo escuchado por Tsuna que lo miro confundido.

- ¿Enma? – Lo llamo preocupado, captando la atención de todos los demás.

- Retira todo lo que dijiste de Tsuna-Kun – Hablo Enma con una voz fría, logrando estremecer a todos los presentes pero sin levantar la mirada ni un solo momento.

- ¿Por qué? Todo es verdad – Respondió Mochida ignorando el temblor que recorrió su cuerpo.

Pequeñas cosas comenzaron a levitar, siendo esto solo visto por Tsuna y sus guardianes que miraban con preocupación a Enma, que al escuchar la respuesta de Mochida levanto la vista, viendo con furia a las personas que se encontraba delante de él.

- ¡¡¡¡TSUNA-KUN NO ES NADA DE ESO!!!! – Grito enfurecido Enma, sorprendiendo a todos.

Antes de que lograra acercarse a los demás para darles una muy buena lección por insultar a su hermano, una patada en la cabeza lo tumbo al suelo.

- ¡Reborn! – Gritaron Tsuna y Enma, uno agradecido internamente por intervenir mientras que el otro lo miraba confundido.

- ¡Cálmate Dame-Enma! – Le grito Reborn que se encontraba sobre la mesa. – Dame-Tsuna llévate a este Dame y cálmalo o lo hare yo – Le ordeno a su alumno, viendo que este asentía de inmediato para después ayudar a su amigo a levantarse e irse a la mansión.

- Boreen-sensei, ¿Qué hace aquí el perdedor de Enma? – Pregunto alguien después de que los jóvenes se perdieran de vista.

- Lo descubrirán en la cena de hoy – Fue lo único que dijo Boreen-sensei, para después volver a tomar su expreso.

Lo guardianes ya tenían una pequeña idea de lo que pasaría en la noche por lo que tenían una ligera sonrisa maliciosa en sus rostros siendo notados solamente por el Hitman que reía internamente, pensando en la cara que pondría su alumno.

Mientras que eso sucedía en el patio, el castaño había llevado al de cabello rojizo a su habitación, una vez solos el castaño comenzó a calmar a su amigo y después de unos intentos lo logro.

- ¿Enma que paso allá afuera? – Pregunto Tsuna después de unos momentos de silencio.

- No me gusta que digan esas cosas de ti – Respondió Enma, sorprendiendo al castaño.

- ¿Sabes que no me interesa la opinión de ellos, verdad? – Pregunto con una ligera sonrisa el castaño, tranquilizando más a su amigo.

- Lo se Tsuna-Kun – Contesto con su tono de voz normal y viendo a su hermano con una sonrisa.

- Mejor dime, ¿Qué haces aquí en la mansión Vongola? – Cuestiono le castaño tratando de dejar de lado el tema, no era que le desagradara volver ver a Enma, solo era la curiosidad que sentía.

- Lo sabrás en la cena – Le respondió el portador de la llama de la tierra con una sonrisa juguetona, para después reír por el puchero que ponía su amigo castaño ante su respuesta, - Yo te tengo una pregunta mejor, ¿Qué hacen todo tu grupo junto con el profesor Nezu aquí? – Pregunto con mucha curiosidad Enma.

- Reborn y algo me dice que Nono tiene mucho que ver en esto – Respondió con cierta pesadez Tsuna.

- ¿Por qué lo dices? – Cuestiono intrigado Enma.

- Intuición – Fue la única respuesta del castaño para después comenzar a reír junto con Enma.

El resto de la tarde para los que seguían en el tour por la mansión Vongola fue entretenida ya que observaron varias cosas de su interés, descubriendo que el Noveno de Vongola había creado habitaciones especiales para que un nieto, el Décimo Vongola junto con sus guardianes lo visitaran más seguido, todas estas habitaciones era de entretenimiento y relajación. Cuando faltaban dos horas para la cena, regresaron a sus habitaciones para arreglarse ya que según Boreen-sensei esa noche estarían en la presencia de varia gente importante para el Noveno y el Décimo Vongola, por lo cual debían verse bastante bien y comportarse de excelente manera.

Para los guardianes fue curioso observar lo que en unos meses seria su nuevo hogar aunque no pusieron demasiada atención ya que en sus pensamientos rondaba solo una pregunta: ¿Qué estaría haciendo su cielo con la tierra? Esto a decir verdad no es mucho misterio o al menos no para el Hitman que ya se daba una muy buena idea de lo que esos dos Dames estarían haciendo y que solo por esta vez lo dejaría pasar.

Tanto Tsuna como Enma pasaron el resto de la tarde en una sala de entretenimiento que se encontraba cerca de la habitación del castaño, habían estado jugando videojuegos y comiendo algunos postres que les había llevado la servidumbre, también habían estado hablando acerca de los seis meses en los que no se vieron, poniéndose al corriente en sus vidas. Enma le aseguraba que no solo iba estado entrenando arduamente, sino que también había viajado un poco por todo el mundo y que le había traído varias cosas de los lugares en donde estuvo; dichas palabras avergonzaron al castaño ya que no sabía exactamente que decir por las palabras y acciones de aquel que considera un hermano, por lo cual solo se sonrojaba un poco mientras le agradecía.

Se despidieron una hora antes de la cena, dándole tiempo suficiente a ambos para arreglarse; aun sin saber exactamente quienes estarían en la cena en castaño se vistió formal con un traje negro, chaleco y corbata del mismo color junto con una camisa naranja, dicha ropa era una de las tantas que su abuelo le había regalado recientemente. A pesar vestir con aquella ropa se dejó la camisa fuera y no se colocó el saco, sería demasiado raro verlo tan formal o al menos sería raro para sus compañeros, una vez listo y después de ver la hora salió de su habitación encontrándose con sus guardianes que lo esperaban afuera con unas ligeras sonrisas, a excepción de Hibari que nadie lo había visto después del desayuno; además de que vestían igual que el con la única excepción el color de sus camisas, todos con una del color de su llama y Chrome que llevaba una falda en lugar de pantalón.

Respondiendo la sonrisa que le daban sus guardianes con una más grande, todos se encaminaron al comedor topándose con Enma en su camino, el vestía igual que ellos con la única diferencia siendo el color de la camisa: La de Enma era un anaranjado pegándole a rojizo, pero lo que sorprendió a todos era el hecho de que la corbata llevaba el emblema de su familia.

- Enma, ¿Por qué traes el símbolo de tu familia? – Pregunto Tsuna.

- Pronto lo descubrirás Tsuna-kun – Aseguro Enma con una sonrisa, logrando otro puchero de Tsuna haciendo que todos se rieran un poco. – Por cierto, toma – Agrego, extendiendo la mano y entregándole algo al castaño.

- ¿Qué es? – Pregunto curioso viendo la barra de color blanca en su mano, esta contenía algo que parecía pasas y nueces.

- En uno de esos lugares que estuve fue México, ¡¡Tienen muchos dulces allá!! Así que traje varios, este se llama Alegría, está hecha de amaranto y no me acuerdo que más – Contaba alegre Enma.

- La probare después, si Reborn me ve comiendo dulces antes de la cena, me mata – Aseguro el castaño con un ligero temblor.

- Claro, también hay Borrachitos, Tamarindos... - Comenzó su lista Enma.

El camino hacía el comedor fue corto mientras escuchaban de varios dulces que había probado Enma en México, para cuando llegaron a su destino, Tsuna aseguraba que le preguntaría a su abuelito si podían ir a México para poder probar todo eso y más.

Cuando se abrió la puerta del comedor, Tsuna junto con sus guardianes se asombraron al ver a la gente que estaba en la mesa; quitando el hecho de que solamente faltaban ellos en la mesa, las personas que se encontraban en esa noche los sorprendió bastante.

- Siéntate ya Dame-Tsuna – Rompió el silencio Reborn que miraba muy divertido todo.

Aun en shock por la vista que tenía, Tsuna solo asintió mientras caminaba a su lugar siendo seguido de sus guardianes y una vez sentados vieron que Hibari también se encontraba en el lugar vistiendo de la misma manera de ellos. Antes de que pudiera decir algo Nono se levantó de su lugar, obteniendo la atención de todos en la mesa.

- Buenas noches a todos, me disculpo por no haberlos podido acompañar en la mañana, pero tenía que atender unos asuntos de la empresa – Comenzó Nono con una pequeña sonrisa. – Esta noche nos acompañan personas muy importantes, no solo para mí, sino que también para mi querido nieto; les agradezco su presencia esta noche, por favor, preséntense – Pidió Nono.

- Sera un gusto – Comenzó un rubio que todos conocían y se preguntaban que hacía ahí desde el inicio. – Todos ustedes me conocen por ser su maestro de inglés temporal, pero iniciemos de nuevo. Mi nombre es Dino Cavallone, Décimo le la empresa Cavallone que se especializa en la creación de autos, también soy el hermano mayor del Décimo Vongola – Se presentó Dino con una gran sonrisa dirigida a su hermanito

Todos los alumnos estaban asombrados por tal revelación, las chicas solo se enamoraban más de él, mientras que los chicos no sabían cómo sentirse, el profesor Nezu parecía que el alma salía de su cuerpo. Ignorando las reacciones de los alumnos y profesor, una persona se levantó con una sonrisa burlona en un rostro.

- Me presento, yo soy Byakuran Gesso, jefe de la familia Gesso. Nos especializamos en la tecnología del mañana aliándonos a Vongola, no tiene mucho que conocí al Décimo Vongola pero espero poder más tiempo con el muy pronto – Se presentó el chico de cabello blanco que no dejaba de comer malvaviscos.

- Es un gusto conocerlos a todos, mi nombre es Yuni, soy la Décima líder de la familia Giglio Nero. Nos especializamos en la tecnología para la conservación del ambiente, también soy amiga del Décimo Vongola – Hablo la más joven de la sala con una sonrisa para el castaño al momento que le quitaba la bolsa de malvaviscos al peli blanco.

- Yuni-chan – Replico Byakuran con un puchero, siendo ignorado totalmente por la ex portadora del pacificador del cielo.

Todos estaban asombrados por la gente que los rodeaba, todos ellos eran grandes aliados de Vongola y el hecho de saber que cenarían con ellos los llenaba de orgullo, más de uno pensaba en llevarse bien con ellos para poder tener un futuro envidiable, lástima que sus planes jamás tendrían éxito. Pensaron que ya era la última presentación, hasta que alguien parándose les llamo la atención.

- ¿Qué haces perdedor Enma? – Pregunto Mochida con enojo.

- Siéntese de una vez – Le ordeno el profesor Nezu, temiendo quedar mal con gente tan importante.

- Me falta presentarme – Fue su respuesta, sorprendiendo a toda la gente normal. – Mi Nombre es Enma Kozato, Décimo de la familia Simon. Nos especializamos en la tecnología más específico en la gravedad y todo eso, recientemente nos aliamos a Vongola, puedo decir que considero al Décimo Vongola como un hermano para mí – Hablo Enma con una ligera sonrisa maliciosa.

- ¡¿QUE?! – Gritaron todos los alumnos civiles junto con su profesor, casi dejando sordos a los demás que no gritaron.

- Pueden rivalizar con la cabeza de césped – Comento Gokudera en un susurro, logrando que a Tsuna saliera una gotita en la sien mientras asentía.

- No griten – Ordeno firme Reborn, logrando que todos se callaran. – Ahora que las presentaciones están acabadas le diré que harán iniciando la semana. A partir de mañana irán al colegio Vongola, ahí tomaran las clases básicas; el profesor Nezu tomara cursos con algunos de los profesores de ahí. Aquí en la mansión de les enseñara lo necesario para el día de sucesión del Décimo Vongola, no molesten a nadie en la escuela, Hibari será el encargado que mantengan el orden en ese lugar – Hablo Reborn, viendo las caras pálidas que podían casi todos con lo último dicho, mientras que el mencionado solo los ignoraba.

- Su transporte sale a las siete en punto, así que por favor sean puntuales – Comento Nono con una sonrisa.

Con esas últimas palabras comenzó la cena, en los extremos se oía algo de ruido mientras que los estudiantes comían con la mente en otro lugar. Enma que se encontraba algo alejado de su amigo se paró de su lugar y camino hacia él, llamando la atención de varia gente.

- ¿Pasa algo Enma? – Pregunto confundido Tsuna al ver a su amigo a su lado.

- Hay que aprovechar todo el tiempo Tsuna-kun – Fue lo único que dijo para después sentarse en la misma silla que el castaño, importándole muy poco como lo miraban los demás.

Para la suerte de los dos jóvenes la silla era demasiado grande por lo que no había problema alguno para sentarse dos personas en una sola.

- ¿¡Enma?! – Pregunto/Grito el castaño ante las acciones de su amigo.

- ¿Te molesta Tsuna-kun? – Pregunto el nombrado.

Sabiendo que era una batalla perdida y que no quería hacer sentir mal a su amigo decidió no decir nada, total Enma tenía razón, una vez que tomara oficialmente el título de Décimo Vongola difícilmente tendría tiempo para sus amigos.

- No Enma, ¿Me das un pedazo de pan por favor? – Respondió Tsuna con una sonrisa.

De esta manera la cena siguió su curso, los alumnos miraban con odio a Tsuna ya que este se llevaba bien con alguien tan importante. Ellos ya habían decidido acercarse a Enma, un joven de su edad y con un estatus tan alto era lo mejor para todos ellos, pensaban que acercarse a Enma y asegurar su futuro, dejando de lado la manera como lo trataron y hacer como si jamás hubiera pasado nada, sería demasiado fácil, pensaban, que equivocados estaban.

El Hitman número uno del mundo miraba interesado las acciones de los compañeros de su alumno, realmente le sorprendía lo tontos que eran; si así habían reaccionada ante la verdad de Enma, ¿Cuál sería su reacción ante la verdad de su estudiante? Realmente era algo que deseaba ver con sus propios ojos.

Su mente no le dejaba olvidar que tenía que hablar con su alumno sobre la llamada que había recibido, al parecer el plan de este iba por muy buen rumbo...

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Típico que escribiendo se te antoje algo y lo pongas en el fic XD 

¿Que les pareció el capitulo de esta semana?, ojala les allá gustado n.n

Respecto a la duda de la piña, ¿Que seria la alondra sin la piña para molestarlo?, ¡No puede faltar! Solo que tengo algo planeado para el, esperen un poco mas.

Muchas gracias a todos los que me ayudaron con lo de Enma * Les lanza galletas y jugo *

¿Creen que si les pido 10 comentarios lo logren?, me lo pensare un poco mas, por el momento lo dejo en seis como siempre n.n

Ya saben, tal vez la semana que viene sea la ultima en la que suba seguido ( Maldita escuela X_X ).

Sin mas que decir me despido, ¡Hasta la próxima! n.n/