Disclaimer: los personajes de esta historia pertenecen a Masashi Kishimoto. Obra inspirada a fin de entretener y sin fines lucrativos.
"....." pensamientos
-.....- diálogos
●●●● cambio de escena

— ¿Matrimonio? — rió sin gracia por su comentario — Esto es un negocio, un contrato con cláusulas al cual atenernos Hinata — conectó con su mirada, clavándola en su lugar — No debes permitirte esperar más que eso —

— N-No entiendo —

— Lee la última hoja, lo más importante está resumido ahí — lo vio meter un chicle en su boca, y disponerse a revisar su celular para darle tiempo.

Hizo lo que le había dicho, justo al final de los papeles se encontraba una lista con la palabra cláusulas escrita en ella, eran alrededor de quince. Iban desde lo más sencillo a lo más complejo, parecía más un contrato de ventas que de un negocio entre dos personas. Cada cláusula conllevaba consecuencias, y la duración del matrimonio sería por diez años más o menos. Si lo cumplía, ella recibiría un monto fijo de dinero, tanto que le parecía absurdo.

— Acaso... ¿está comprándome? — se arriesgó a preguntar cuando vio el acuerdo de confidencialidad, al cual también le añadió un precio por su silencio —  N-No necesito todo este dinero — lo vio alzar su ceja, como si se hubiera vuelto loca.

— No usaría el término comprar, señorita Hyūga — se le veía mucho más serio — Es más como si fuera su moneda de cambio. Usted me usa y obtiene lo que quiere, así de simple —

— ¿Y qué gana usted? — el moreno frunció el ceño, parecía molesto.

— Cláusula #1 —

"No te metas en mis asuntos" leyó inmediatamente las palabras salieron de su boca, pero si él esperaba que le obedeciera ciegamente, estaba muy equivocado. Como había dicho, era un contrato de dos partes así que su voz también valía.

— N-No soy un objeto — tomó un poco de coraje para decírselo — No puede esperar que cumpla todo esto sin una explicación —

— Ohh... claro que puedo — cuadró sus hombros para parecer intimidante — Usted accedió a esto al aceptar mi propuesta —

— Pero usted me buscó — no quería dar su brazo a torcer — E-Es decir que me necesita —

"Que molesta es" si no fuera porque en verdad necesitaba aquello, la habría mandado a freír espárragos.

— ¿Qué es lo que quieres? —

— Sus cláusulas... ¿dónde están? —

— ¿Disculpa? — se mofó un poco, ¿de qué iba esta mujer?.

— #5, no puedo tener una aventura pero no dice nada de usted — no es como si ella estuviera realmente interesada.

— Porque no deben haber escándalos que me dejen en ridículo —

— ¿Y-Y qué hay de mí? ¿Usted no tendría que cumplirla? —

"Ya entiendo" se dijo a sí mismo cuando la vio sonrojarse, ya se hacía una idea de qué le preocupaba, no por nada le decían mojigata.

— ¿Piensas atender tus deberes de esposa? — la encaró — ¿Vas a tener sexo conmigo? — los colores se intensificaron en su rostro — Desde ya te advierto, no soy responsable si te enamoras de mí —

— ¡N-No voy a hacerlo!, c-como dijo, esto es un contrato no un matrimonio real — se apresuró a responder — S-Sólo quiero añadir mis condiciones, es lo justo —

— Hmph — aburrido de todo aquello, y con la necesidad de volver a casa, decidió que ya era suficiente de esa tonta charla — Haz una lista y modificaremos el contrato —

— Bien — musitó sintiéndose más aliviada. Lo acompañó hasta la puerta, ansiosa porque dejara su hogar lo más rápido posible.

— Una cosa más — se giró luego de colocarse sus gafas oscuras — No llevarás ese costal de pulgas a mi casa, tenlo claro —

Y dejando las palabras en su boca, se acercó hasta su auto y se marchó a toda velocidad.
"Qué grosero" fue lo único que pudo pensar mientras se recluía en su departamento otra vez.

— Además, no tienen pulgas — musitó por lo bajo, para después ponerse manos a la obra. Tenía una casa que limpiar.

●●●●

— ¿Esto es todo? —

— S-Sí —

— ¿Para esto necesitaste toda una semana? — la joven volvió a asentir.

Le había llevado las condicionantes que se agregarían según su criterio, eran pocas para su suerte, y nada parecía ser demasiado exigente. Sólo pedía que asegurara el tratamiento de su hermana, una buena plaza para que su primo pueda terminar sus estudios y posteriormente incorporarse al mercado con su ayuda, un lugar para que estos puedan vivir y habitaciones separadas. Cosas triviales para él, si comparaba el costo con el beneficio que le daría, pero una de ellas llamó su atención.

"Cuando el contrato acabe, quiero mi libertad" leyó con indiferencia, aparentemente otra de sus preocupaciones se había resuelto, aquella mujer parecía no querer nada más y eso estaba bien para él.

— ¿Y tus quejas sobre tener un amante? — no pudo ocultar su curiosidad.

— M-Mientras yo pueda hacerlo, y sea discreto, está bien — se la veía incómoda — P-Pero, si llegara a enamorarme debe darme el divorcio —

Mesó su cabello, exasperado, aquello iba en contra de las condiciones que había puesto su padre, pero ella no tenía que saberlo. Al menos no ahora, ya se le ocurriría una forma de inclinar la balanza a su favor una vez tenga su firma.

— ¿Lo firmaste? —

— Sí —

— Muy bien — él también procedió a firmar el papel, ya sólo quedaba ajustar unos cuantos detalles.

— ¿Ahora qué? — 

— Trabajarás para mí a tiempo completo, ya arreglaré los detalles con Kakashi — lo veía atentamente, como si fueran órdenes en vez de un plan a seguir — Serás mi secretaria personal, me acompañarás a juntas y demás. Hasta que llegue el momento de presentarte como mi prometida — se reclinó en su asiento, aburrido.

— Vivirás conmigo, así que tienes una semana para organizarlo todo, si necesitas días libres puedes tomarlos. Te presentaré a mi padre una vez te acostumbres a esto, no puedes aparecer frente a él con esa cara de terror que pones cada vez que estoy cerca —

— Lo siento — chasqueó su lengua e hizo un ademán con su mano, restándole importancia.

— Tu familia vendrá en un mes, después de que inicien con el tratamiento de tu hermana — era lo que más le tranquilizaba, saber que Hanabi estaría bien — De lo demás, ya te advertiré después —

— E-Entonces si me disculpa, volveré al trabajo —

— Puedes retirarte. Y no lo olvides Hinata — llamó su atención antes de cruzar la puerta — Oficialmente serás mi esposa, así que cuida lo que haces —

Cualquiera pensaría que eran celos lo que le movía a hablar así, pero era una amenaza, una que entendió fuerte y claro.

"Si lo arruinas te destruiré, no lo olvides"

~~~~~
Y si les digo que ya tengo el final XD, sólo me falta plasmarlo.
Loco, ¿no?

Eaton fuera (✿◠‿◠)