Disclaimer: los personajes de esta historia pertenecen a Masashi Kishimoto. Obra inspirada a fin de entretener y sin fines lucrativos.

"....." pensamientos
-.....- diálogos
●●●● cambio de escena

— Familiares de Fugaku Uchiha — un doctor con una tablilla en mano entró en la sala de espera. 

— Aquí — Naori, Sasuke e Izumi se acercaron de inmediato hasta él, identificándose como tal.

— ¿Cómo está mi esposo? —

— ¿Qué tal está? — dijeron al mismo tiempo, haciendo suspirar al mayor.

— Ahora está estable, pero... — centró su atención en la joven de cabellos morados — Necesitamos discutir algo sobre la condición de su esposo — el moreno apretó los dientes al escucharlo.

— Bueno entonces... —

— No es su esposa legalmente — la interrumpió — Es mi padre, así que puede discutir el asunto conmigo —

— Sólo el familiar directo puede tomar la decisión — se explicó al ver la mirada de la chica — Entonces, si me permiten — el doctor se apartó junto al pelinegro, dejando a ambas mujeres. Una de ellas preocupada y otra indignada. 

— ¿Y bien? — él no era un hombre muy paciente.

— Verá, su padre sufrió dos infartos consecutivos. Pero gracias a la circulación colateral pudo sobrellevarlo lo mejor que pudo — toda aquella palabrería le sonaba a chino, él sólo quería saber como mejorar su condición  — Es necesario realizar una cirugía para colocar un catéter y necesitamos su firma para la autorización —

— ¿Eso es todo? ¿Estará bien después de la cirugía? —

— Es lo que esperamos — sin pensarlo demasiado firmó, y le entregó el documento legal al doctor — Despertó hace unos minutos, puede pasar a verlo. Una enfermera le guiará —

Caminó hasta la habitación luego de agradecer al doctor por sus servicios, entró al cuarto y vio a su padre conectado a un sinnúmero de máquinas, cuál de todas más molesta, pues cada una emitía ruidos diferentes.

— ¿Cómo te sientes? — silencio fue lo que recibió por su parte — Los doctores dicen que deben operar — pero no dijo ni una palabra tampoco. Así que decidió aproximarse a la camilla.

— Es culpa tuya — paró en seco al escuchar su ronca voz — Si no fuera por tu ineptitud Itachi no habría ido a esa viaje y ahora no estaría muerto —

— ... — en definitiva, era la segunda cosa más cruel que le había dicho.

— Si no fuera por ti mi muchacho aún estaría con vida — se quebró en llanto, mientras las máquinas aceleraban sus pitidos.

— Por primera vez, estamos de acuerdo — salió de allí antes de que llegaran las enfermeras.

Recibió una llamada de la oficina, así que debía ir de inmediato, una junta de emergencia con los inversionistas. Realmente ya se lo esperaba, pero hacerlo tan pronto le dejaba un mal sabor de boca. Se despidió de su cuñada y la dejó a cargo de su padre, no quería que volviera al edificio y viera la horda de periodistas ansiosos por tener una primicia. 

No tardó en llegar a la empresa y como predijo la entrada estaba repleta. Colocó lentes oscuros en sus ojos, le hizo una señal a su guardaespaldas quien no tardó en socorrerlo. Jūgo había estado con él por mucho tiempo, desde antes de reafirmar su camino. A empujones y miles de preguntas ignoradas, entró al lugar y fue directo a la zona de juntas. Los hombres allí parecían nerviosos, no paraban de murmurar preocupados por el futuro del negocio y sus acciones.

— ¿Cuál es la razón de una junta tan apresurada? — después de saludarlos, se colocó liderando la mesa, recibiendo toda la atención de aquellos hombres.

— Sasuke-san, en vista de los acontecimientos es necesario para nosotros velar por el futuro de la empresa —

— Así es, nos urge planear quién tomará la cabeza ahora que el fundador y el antiguo líder están fuera de juego —

— Quizá considerar a otro miembro de la familia... — la risa sin gracia del pelinegro hizo que todos callaran abruptamente.

— ¿Fuera de juego dicen? — la molestia era muy evidente — Que divertido —

— ¿Está bien, Sasuke-san? —

— ¿Ustedes qué creen? — apoyó ambos codos en la mesa, y miró a cada uno de ellos — Padre está hospitalizado y aún no hemos enterrado a mi hermano. Pero ustedes creen que es más importante buscar quien maneje la empresa cuando es un asunto obvio —

— Yo tomaré el cargo de la empresa — los demás se miraron entre sí, pues eran bien sabidas las tensiones entre padre e hijo — Están ante su nuevo presidente, así que no lo olviden —

— Disculpe las molestias, Sasuke-san — habló uno de ellos al notar la tensión de la habitación.

— Hmph — asintió sin importarle demasiado — Ahora si me disculpan, tengo un velorio al cual asistir —

●●●●

El sepelio fue llevado a cabo inmediatamente el cuerpo fue trasladado desde la zona de impacto hasta su ciudad. Sasuke tuvo que ir e identificar los trozos de cadáver de lo que una vez había sido su hermano mayor, y sólo cuando vio su magullado rostro pudo sentir que todo era real. Su hermano no estaría más allí junto a él, aunque no se lo pidiera.

Allegados de todas partes hicieron lo posible por asistir, la mayoría de empresas aliadas a la suya también había mandado representantes para presentar sus condolencias. Al llegar Naruto, se dejó abrazar por alguien ajeno a su cuñada por primera vez esa tarde, era el único que genuinamente entendía su pena pues Itachi lo había visto crecer al igual que a él.

— Lo siento, en verdad lo lamento —

— Lo sé —

El rubio procedió a hacer lo propio con la devastada viuda, que ni siquiera había tenido la oportunidad de llegar a ser novia antes de perderlo todo. A él le siguieron Kakashi, Guy y los señores Namikaze, quienes lo habían tratado como a su propio hijo.

— ¿Cómo está tu padre? — estaban preocupados, el joven había tenido que pasar por mucho en unas cuantas horas.

— En cirugía, lamenta profundamente no estar aquí —

— Ya me lo imagino hijo, ya me lo imagino — la pelirroja lo envolvió en un abrazo maternal, que casi logra quebrar su impasible expresión.

Ino y Hinata, por su parte, veían toda la escena con pesar. Era una pena lo que le había ocurrido al pelinegro, no tuvieron la oportunidad de conocerle a fondo, pero sabían de sobra que era una hermosa persona. 

— Es una pena, parecía ser un buen hombre  — la rubia no tenía ánimos de ser positiva en momentos como ese — Pobre Izumi-chan —

Conocían a la joven debido al trabajo, en cada convención, junta o reunión allí estaba ella desempeñando su mismo papel. Así que habían compartido ciertas conversaciones y experiencias en el tema laboral, era una chica muy agradable.

— Los buenos siempre se van primero —

Hinata detestaba los cementerios con todo su ser al igual que las salas de hospital. Había pasado gran parte de su juventud en ambos lugares, donde habían muerto sus esperanzas millones de veces. Era simplemente repugnante.

— Deberíamos ir ahora —

Se acercaron cuando fue su turno de dar las condolencias. Expresaron sus sentimientos de pesar con la castaña primero, quien les agradeció profundamente el gesto. Luego fue el turno de hacerlo con el moreno, al cual Ino abordó de inmediato y de forma breve. Cuando llegó su momento de hacerlo, se pasmó por unos minutos, donde lo contempló a detalle. Se veía cansado, desgarbado y herido.

— M-Mis más sinceras condolencias — la miró un poco más y luego asintió aceptando sus palabras. No hubo altanería o desdén en sus ojos al hacerlo, sólo el vacío de la pérdida.

La ceremonia terminó luego de acabadas las palabras del capellán, quien dio su bendición para la familia y elevó una prédica para darle paz a sus restos. Los más cercanos allegados depositaron rosas blancas sobre el ataúd antes de que este descendiera tres metros bajo tierra. Ese fue el momento de quiebre para su cuñada, quien se tiró a los pies de la zanja excavada para el descanso eterno de su hermano, llamando su nombre y llorando como nunca antes en su vida.

Aprovechando que las lluvias volvían a caer, Sasuke ordenó despedir a todas las personas del lugar. Más para que no vieran a la castaña en ese estado, que porque le preocupara el clima. La sostuvo en sus brazos un largo rato, hasta que cansada se rindió al sueño que le sobrevino luego de lastimar su garganta. Él se mantuvo firme, y una vez comprobó que dormía profundamente, ordenó a su nana y a Jūgo que la llevaran hasta su departamento.

Cuando se quedó solo, en medio de la fría noche y siendo empapado por la lluvia, se permitió derramar su pena contenida en silencio. Lágrimas se mezclaban con las gotas que resbalaban por su rostro, el dolor era creciente en su pecho casi sofocándolo hasta sentir los pulmones arder. Pero todo eso no se comparaba al dolor de saber que no lo vería nunca más. 

Podía escucharlo regañándolo cada día, las discusiones constantes por su actitud, la forma protectora en la que le aconsejaba dejar el tabaco, pero singularmente podía revivir en su mente sus últimas palabras.

"— No te pongas celoso, también te amo a ti, tonto hermano menor —"

Como un tonto no había respondido, se guardó esas nimiedades pues se sentía seguro de que pronto se encontraría con él. Pero cuán equivocado estaba, y lamentaba de todo corazón no haberlo hecho. Si supiera de ante mano que esto pasaría se lo habría repetido mil veces, pero eran cosas que no se podían prever.

— También te amo, 'Tachi — tenía la esperanza de que pudiera escucharlo donde quiera que estuviera, pero sabía bien que ya era muy tarde. 

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Pd: aprecien a sus seres queridos, no se averguencen de decir te amo si lo sienten. Porque podría ser la última vez que tengan la oportunidad de hacerlo.