La mayoría de las tropas ya se encontraban distribuidas por toda la aldea en diversas funciones. Ya a estas alturas, Konoha, había recibido a miles de personas provenientes del sonido. Algunos heridos y la mayoría solamente venían asustados, al grado del shock. Al verlo dedujieron que la situación allá no estaba fácil y que tenían que actuar rápido. Mandaron escuadrillas de medic-nin para ayudar a Sakura, quien les mandaba con Katsuyo los pacientes que requerían una atención especial y tan delicada que no podría atender en medio de una batalla.
Esto en especial le preocupo a Itachi ¿Tan mala era la situación? Pensando en esto no lograba encontrar la tranquilidad en ninguna ocupación. En leves momentos obtenía la calma al jugar con sus pequeñas, quienes habían estado con tranquilidad y alegría desacuerdo a lo que estaban viviendo pero en sincronía con la dicha de su inocencia. Al verlas desearía volver a ser un niño como ellas y olvidarse de cualquier maldad en el mundo, desconocer la guerra entre su gente.
Pero con eso el azabache no quiere decir que las niñas no tuvieran sus propios problemas, justo ahora frente a sus ojos Yukii peleaba con Kohana por un juguete.
Fue por otro y le dio uno a cada una. De inmediato se encontentaron y volvieron a jugar en armonía. Se sentó con ellas, observando con admiración su belleza y lo frágiles que eran. Tenía que protegerlas a toda costa. No iba a dejar que nada malo les pasase en ningún instante. Y por mas que no deseaba dejarlas solas tampoco podía abandonar a Sakura y a su hermano.
Por eso tomó la iniciativa de dejarlas en el refugio. Solo necesitaba encontrar a alguien de confianza que fuera capaz de protegerles. Tomó la lista de las personas registradas en los refugios y se sorprendió de sobremanera al ver un nombre en particular:Hyuga Hinata.
¿Porque una Hyuga no iba a participar en la pelea? Ellos eran parte de los clanes más fuertes que poseía la aldea. Y Hinata había demostrado su talento y fortaleza desde un inicio.
Releyo buscando un error pero no había equivocación. Decidió de inmediato buscarla. Si lo que decía el papel era verdad, ella podría cuidar de sus niñas. Tomó las pañaleras perfectamente equipadas y dos cobijas para cada una. Era un día muy frío y sombrío y no deseaba que se enfermaran. Salió de su casa junto las niñas y resintió la soledad absoluta de las calles. El ambiente figuraba una aldea fantasma pero hizo a un lado la sensación de soledad y corrió en dirección al refugio donde debía de encontrarse la muchacha de ojos perlados.
En medio camino se encontró con un gran amigo, Naruto. Quien se acercó a él con gran entusiasmo pero no lograba ocultar el gran pesar que llevaba por dentro.

-¡Voy a ser papá! ¡¿Itachi, puedes creerlo?! - Grito a todo pulmón mientras daba saltos de alegría. El Uchiha sonrió en respuesta y lo felicito sabiendo la gran felicidad que generaba esa noticia pero el enorme pesar que provocaba vivirla en una situación tan crítica.
Ahora entendió todo. La Hyuga no estaba en condición de luchar, por más que lo deseara.

-Felicidades, Naruto, de verdad me da alegría saberlo. Serás un gran padre.

El Uzumaki asintió sin borrar su sonrisa.

-¡No me has dicho rubio teñido! - Exclama sorprendido. Itachi suelta una carcajada un poco más liviano, Naruto nunca dejaría de ser ese chico fuerte, entusiasta y único al que tanto querían y admiraban. - Por fin has aceptado mi genial rubio natural. Aunque debo de admitir que eres muy lento para no darte cuenta antes. Pero da igual ¿Ya nos vamos con el Dobe y Sakura-Chan? - Dice ante la atenta mirada del Uchiha quien al verlo tan decidido siente vergüenza. ¿Desde cuando se había vuelto tan cobarde? Si bien recordaba que nunca le habían gustado las guerras y peleas sin sentido pero, mientras fueran para proteger aquello que quería no lo dudaba y daba todo de si. Esta era una situación que requería todo de él y divagaba en dar el primer paso. Mecio a sus pequeñas ya dormidas en sus brazos y tomó la iniciativa. Tenía que luchar para proteger a sus niñas, a su hermano y la dueña de su corazón.

-¿Puedo pedirle un favor a Hinata? - Confundido asiente. Le pide que le acompañe y juntos parten hacia el refugio. Llegando ven a toda la gente agrupada, algunos aparentemente despreocupados y otros exaltados. El lugar ya estaba adaptado para que hubiera espacio suficiente para todos y en caso de verse amenazados caminarán por ratos por un túnel que dirigía a la Aldea Oculta de la arena.
Proporcionando mayor seguridad a los refugiados.
Fueron buscando entre la gente a la Hyuga pero no la encontraban. Naruto empezó a impacientarse porque sabía que la oji azul anhelaba luchar para su gente y no dudaba que se haga escapado. Estaba a punto de empezar a gritar cuando a lo lejos escucho un dulce "Naruto-kun" volteo hacia ella y cuando llego junto a él la abrazo logrando dar calma a su corazón asustado.

-¿Qué sucede?¿Por que están aqui? - Hablo con timidez al ver al portador del Sharingan frente a ella. Si bien se conocían desde hace un tiempo ambos se tenían respeto ignorando la diferencia de edades .

-Vengo a pedirte un favor, Hinata. Pero antes felicidades, serás una gran madre y deseo de todo corazón que todo salga bien. - La chicha sonrió sonrojada como respuesta. - En fin, quería pedirte de favor si podrías cuidar a las niñas.

En cuanto término su oración, la joven Hyuga, sonrió cálidamente y tomó a las pequeñas en brazos. Itachi tomó eso como un si y rebosando de agradecimiento le sonrió. Trayendo a su alma un poco de tranquilidad entre tanto caos.

-Tranquilo, daré lo mejor de mi. Vayan con cuidado. - Les deseo la mejor de la suerte.
Naruto se acercó a ella y le dio un beso de ¿despedida? No, eso era un Hasta pronto. De igual manera apapacho a las pequeñas Uchiha.
Itachi le agradeció a Hinata y se acercó a pegarles a sus pequeñas con su dedo en su delicadas frentesitas.

-Hasta pronto.....- Se despidió de ellas, marchando a su destino.
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Hola!
Lamento la tardanza pero soy un desorden viviente. De verdad vivo porque soy tan distraída como para morir.
En fin, ¿Cómo han estado? ¿Ya listos para navidad? Espero que si porque solo se vive una vez al año.
Les deseo felices fiestas y actualizaré pronto. El cap es corto pero el próximo será más largo y aparecerán Madara, Sakura y Sasuke.
Mi propósito es que esta historia acabe antes de que lo haga este año. Espero y sea así y les guste el final.
De todo corazón les digo que la historia es para ustedes y de ustedes. Gracias por sus 6000 lecturas y a todos los que han votado y empezado a seguirme.
Aquí le dejo por que si no me voy a poner nostálgica y para que quieren.
Nos leemos hasta pronto.