Realmente en la vida no hay un solo momento que la haga a esta aburrida. Es más, si cada quien escribiera su vida con lujo de detalle y luego la leyera sería lo más divertido que hagan leído. Porque al final de cuenta el mundo nunca se está quieto, gira e interactúa a nuestro alrededor. A lo mejor nosotros no tenemos nada planeado pero alguien más si lo tendrá y nosotros nos enteraríamos ya cuando lo interesante esté ocurriendo.

Ejemplo de lo anterior es que Sakura no tenía planeado encontrarse aquella tarde con Uchiha Itachi, pero el sí. Ni estos dos anteriores hubieran planificado encontrarse con Uchiha Sasuke, pero el azabache ya lo había predestinado. Y no porque fuera un genio - aunque sí lo era - solamente tenía que escuchar a sus miedos para saberlo.

Otro ejemplo que hace a la vida entretenida, es cuando n que uno planea no sale como tal. Eso le paso a nuestro querido Uchiha menor. ¿Qué planeaba? Algo de lo que su loca mente le había convencido: disculparse con Sakura. Porque sus propósitos trataban de alejarla de su hermano mayor y de todo aquello que le hiciera recordar algo, solo por la seguridad de su compañera de equipo y la de su hermano. Pero eso no le daba el derecho de tratarla como la había tratado y aceptaba totalmente que se había comportado como un idiota.

Se hubiera desahogado, le hubiera contado toda la verdad, solo si la hubiera encontrado en la habitación al lado de las gemelas. Pero él hubiera es algo tan lejano...

Lo único que se le ocurrió al ver la bola de chackra en la habitación usurpando el lugar de Sakura, es que la pelirosa había recuperado todos sus recuerdos. Ninguna ex ninja, como le conto que era, habría podido hacer eso que requería un enorme control sobre el chackra y vaya que la antigua Sakura lo tenía.

Por primera vez, después de un mes le hablo a Karin solo para que cuidara a las niñas si despertaban. Al principio la Uzumaki se había alegrado al saberse necesitada, pero luego al ver los ojos vacíos de Sasuke un ligero temblor recorrió su cuerpo.

-Karin, rastrea el chackra de Sakura - Hubiera ignorado la situación al no ser por la voz tenebrosa de Sasuke. Por reflejo dio un ligero brinco y se dispuso a buscar.

-N-no lo encuentro.

Como respuesta recibió un gruñido de frustración que retumbo en toda la habitación al igual que el portazo que dio Sasuke al salir de la habitación. Entonces Karin se dio cuenta que había retenido el aire o tal vez que este se había vuelto tan pesado con la presencia del Uchiha que respirar se había vuelto una verdadera hazaña. Su corazón tenía miedo por lo que pudiera ocurrir. Pero no era el mismo que estaba sintiendo Sasuke, más bien este sentía un gran pavor. Era sorprendente que, a pesar del dolor en todo su cuerpo y, sobre todo en su pecho, no hubiera desfallecido. Porque la presión era el peor enemigo de todos en diversas situaciones y para una persona normal tanta presión lo hubiera llevado al colapso. Pero Sasuke lo único que pensaba era en encontrar a Sakura antes que nadie. Recorrió de lado a lado la aldea, donde había gente y donde no. En el bosque... en las casas... en los puestos... pero nada. Caminaba de lado a lado sin rumbo fijo, porque si paraba sus piernas le fallarían.

Sasuke era conocido por hacer todo solo, a veces porque realmente no necesitaba ayuda y otras veces porque su orgullo no le permitiría no poder hacer algo por su cuenta. Pero sabía con quienes contar en especificas situaciones y en esta tenía la esperanza de que Karin le fuera de utilidad, pero no. Ahora su única oportunidad era ella. No tenía nada en su contra pero realmente era incomodo verla. Tal vez por las cosas que habían vivido juntos o porque ella le miraba con tristeza mientras le insultaba. Pero no era el momento de sentimentalismos tontos, así que sin demora se dirigió a casa la casa de la pelinegra, que más bien era una cabaña situada a las afueras de la aldea a petición de ella. Porque él le había ofrecido ir a vivir junto a todos en la mansión del Otokage, como forma de agradecimiento por todo lo vivido y porque tenerla de su lado era de gran ventaja, aunque se sintió aliviado de que no aceptara cooperar con él, ya que su petición era muy egoísta, sobre todo después de esa noche...

Flashback.

-Puedes vivir aquí... - Sugirió el chico mientras miraba el techo.

-¿Sabes que tonterías estas diciendo? Suelta pura mi**da por el agujero equivocado - Dijo la chica de piel nívea mientras se paraba de la cama y se ponía la ropa. Durante unos instantes nadie dijo nada, esperando que alguien diera el primer paso. - Esta es la última vez, antes eras soltero idiota. Ahora no me rebajare a ser tu amante... si lo hacía es porque te quiero y guardaba la esperanza de que algún día me correspondieras como era debido. Que la atracción sexual era un avance y que haiga sido tu primera mujer me ponía un paso adelante. Pero la verdadera estúpida soy yo - Ya había soltado unas cuantas lagrimas que el Uchiha no noto, ya que esta le daba la espalda - Soy tan estúpida, no te reclamare nada, porque no me ofreciste siquiera un hasta pronto. - Se limpió las lágrimas y con su máscara de vanidad se dirigió hacia él y le dio un casto beso en los labios. El Uchiha no reacciono, no la empujo, no se movió el pero tampoco correspondió.- Te amo - Dijo mientras se alejaba de él.

-Corina... únete a mí, ya no tendré que seguir con esta farsa si tú me ayudas. Todo esto acabara pronto y no tendremos siquiera que luchar...

-Bonita manera de interrumpir una declaración - Interrumpió - O de rechazarla, no me uniré a tí. Tú sabes mi salud mental está muy delicada como para unirme a tus berrinches, así que, no. Hasta pronto Sasuke Uchiha. - Salió de la habitación de manera arrogante mostrando todo el orgullo que la ayudaba a estar de pie, pero realmente era tan frágil. Al cerrar la puerta se derrumbó. Sasuke la conocía y no podría reclamarle nada como su padre. Se aferró a la pared buscando algo tangible. Ser rechazada después de tanto, dolía. Al final de cuentas ella sabía cómo salir a delante, ya que nadie le había querido nunca.

Fin del flashback.

Al llegar a la cabaña la chica pelinegra quedo de lado. No paro, con decisión se fue acercando. Podía sentirlo, esos chackras tan conocidos, tan reconfortantes pero que ahora le daban tanta ansiedad. Oculto su chackra y observo con detenimiento si había alguien más en el lugar y no encontró a nadie más. El camino hacia la cabaña parecía largo y cada paso que daba desaparecía en automático, dejándole una extraña sensación de estar estancado en el mismo lugar por horas o incluso por años. No quería verlos pero lo predestinado era inevitable.

Así fue como después de tantas cosas ese trio se encontró. Sasuke miraba sin emoción cuando ellos salieron de la cabaña. No hicieron ni dijeron mucho pero lo que sucedía en ese lugar lo dejaron al borde de una crisis nerviosa. Pero ellos no tenían la culpa, claro que no pero esas jodidas palabras lo hacían querer destruir todo a su paso y ellos estaban en su camino.

-Te recuerdo...

Su mente repetía mil veces como disco rayado, lo que sus conocidos delante de él dijeron, queriendo hacer su agonía más grande. Sus planes se vinieron de un solo golpe abajo, sin dar más tiempo de prologa. Y vaya que su mente funcionaba, nuca le había dado tantas ideas estúpidas en un instante. Pero él era Uchiha, solo, debía ignorarlas y también podía hacer eso con ese par. Solo debía dar un paso atrás e irse como si nada hubiese ocurrido. Dar por perdido ese día y ya. Así todo sería más rápido y fácil. Y así es como lo decidió pero, la vida no era aburrida.

-Sasuke.

Bien, alcanzo a dar el paso hacia atrás, hacia una vida "tranquila". Pero no contó con el montículo de hojas secas detrás de él y que estas serían su alarma de localización. Ambos pares de ojos se posaron sobre él. La primera persona en abrir los labios fue su hermano. Debería estar feliz de verlo después de tanto tiempo aunque ¡joder, las malditas circunstancias! Entonces entendió que ese paso fue el que lo hizo caer, que siempre había estado en el borde de un abismo y que el mismo fue el que se dejó caer de espaldas sin pensarlo dos veces.

-¡Sasuke! - Grito una pelirosa al ver el rostro trastornado de su compañero. Parecía ido pero a la vez les miraba de una manera inquietante que le hacían saber que su mente estaba en la realidad de ese instante. Trato de acercársele para darle ayuda y saber que estaba sucediendo, pero con un sonido sordo Sasuke la empujo al suelo cuando esta estaba a punto de tocarle. Itachi acudió rápido a ayudarla y se puso en frente de ella en ademan de protegerla, lo que hizo sacar más al azabache menor de sus casillas. Hizo el intento de tomar a Sakura para llevársela de ahí, pero con una gran habilidad Itachi tomo la mano de Sasuke para detenerle. Sus miradas se confrontaron y el Sharingan adorno ambos pares de órganos.

-Crisis nerviosa - Susurro el azabache menso al darse cuenta de lo que estaba sucediendo en ese lugar. Lo mejor sería dormirlo y después confrontar la cosas de una manera más civilizada y pacífica. Pero no lo haría. El conocía esos ataques, porque él también los tenia, como ambu vio a muchos caer en esas situaciones también y muchos nunca se calmaban. Aprendió de sí mismo y de lo demás que inducirlos al sueño solo empeoraba las cosas cuando despertaban porque en sí, no pudieron desahogarse.

-Tranquilo, Sasuke. - Este reacciono zafando bruscamente su brazo del agarre de su hermano - Estas sufriendo así que lo único puedes hacer, sin importar que tan fuerte seas, es no cargar todo tu solo y cuando quieras llorar, llora, cuando quieras huir, huye, cuando quieras reír, ríe. Pero no guardes ni fuerces tus sentimientos porque eso de hace daño, otouto-baka. - Golpeo su frente como siempre lo hacía, tratándole de dar todo su apoyo y cariño.

-¡CALLATE! - Sasuke retrocedió - ¡Tú no sabes nada!

Esa frase basta para que la única persona presente como publico participara en el show. Sakura trono sus dedos preparándolos para lo que venía. Se sacudió por completo y sin que ninguno de los hombres se diera cuenta de sus movimientos golpeo a Sasuke en el estómago mandándolo a estrellar contra un árbol.

-Tú no sabes nada - Remedo - Entonces supongo que tú lo sabes todo ¿no? - Los Uchihas la miraban expectantes y ninguno dijo nada. Itachi porque no era su turno y tal vez dejo a Sasuke sin palabras o porque todavía no se recuperaba del golpe. Se acercó a el totalmente furiosa. Sabía que a Sasuke le gustaba hacer todo por su cuenta y sin ayuda de nadie y eso le hartaba de sobremanera. Podrías darle mil veces una paliza y el azabache no daría un paso atrás sobre sus planes. Eso a veces era bueno pero en ocasiones retractarse y pedir ayuda no estaba de más.

Se paró enfrente de él y a perspectiva de Sasuke, ella se vio más fuerte, grande y admirable desde ahí abajo. Su pose mostraba seguridad y un poco de altanería en sus movimientos. Torció la boca y se paró encarándola. Eso no bastaba, ninguno de esos dos seria lo suficientemente fuerte para derrotar a una bestia como Madara Uchiha. Deberían dejar de jugar a las muñecas y de tratar de vivir una novela, porque la vida no era así y nunca sería un cuento de hadas. ¿Qué esperaban? Recordar todo y vivir felices para siempre. Ñoñerías.

Tomo a Sakura rápidamente de la cintura, mostrando sus grandes poderes de ninja, y la acerco lo suficiente para besarla en los labios de una manera, que solo los amantes más cercanos lo harían. Sakura quedo en shock, ella era quien le estaba golpeando y ahora el hacía de un momento a otro ese movimiento tan íntimo, que si lo que quería era sacarla de combate, lo había logrado.

Cuando reacciono ella estaba ya lejos de Sasuke y una batalla se llevaba a cabo en frente de ella, que llevaba ganando Itachi. Se oyó el sonido de un golpe en seco. La cabeza de Sasuke cayo duramente al suelo como si se tratara de la de un muñeco. Itachi parecía que a pesar de eso quería continuar y ella no podía seguir viendo eso. Rápidamente se interpuso entre los hermanos, abrazando completamente a Sasuke para protegerlo. Itachi se paró y se alejó un poco tratando de controlar su enojo, Sakura aprovecho y empezó a examinar a Sasuke y a curarlo. A simple vista estaba bastante mallugado y cuando termino su examen médico básico comprobó que aún se encontraba bastante débil y afectado de su último decaimiento. Le curo lo mas que pudo y lo recostó en sus piernas. Itachi se acercó y los observo, hizo una mueca de disgusto y se sentó al lado de ellos. Bufo y se recostó en sus piernas como niño haciendo berrinche. Sakura lo observo un poco más tranquila, y recostó su cabeza en su hombro.

-Eres una bestia - Le regaño.

-Tal vez, solo me guie por mis instintos - Coincidió. - Pero no era necesario que intervinieras, no lo iba a matar.

-Eso no parecía hace un rato - Se enderezo para encararlo e Itachi se sonrojo.

-Soy buen actor, querida - Ambos rieron ante lo dicho, podía serlo, a veces. Itachi miro a Sakura reír y sonrió, recorrió el contorno de su cara de manera delicada haciéndola suspirar. - Extrañaba verte. - Sakura no dijo nada, solo asintió levemente. Se seria tonta por comportarse como una adolescente enamoradiza, pero los nervios que él le provoca, la emoción de verle, de sentirle, no daban otra conducta de parte de ella. Porque realmente estaba enamorada de aquel hombre. Las distancias entre sus caras se fueron acortando y cuando sus labios estuvieron a punto de tocarse una mano se interpuso recibiendo ambos besos.

-No toques a mi esposa - Se oyó la gutural voz de Sasuke. Su miraba se notaba oscura y daba a notar que no estaba jugando. Sakura volvió a tensarse en automático.

-No lo será más por mucho tiempo. - Dicho lo anterior ambos hombres empezaron a reír. Sakura se paró confundida. Itachi logro capturar la cabeza de Sasuke en el aire antes de caer en el suelo.

-¡¿Qué está pasando aquí?! - Exclamo una Sakura exaltada.

-¿Le vamos a explicar? Sería una molestia tener que contarle todo. Yo no lo hare - Dijo Sasuke que seguía acostado y con la cabeza recostada en las manos de su hermano. Conservando una pose tranquila e impasible.

-Creo que sería más rápido hacerle como con nosotros - Sugirió Itachi cerrando los ojos. Sasuke asintió. - Bien, manos a la obra. - Aplaudió al mismo tiempo que la cabeza de Sasuke caía al suelo. -Ups, lo siento, otouto-baka

-Eres un traicionero, estúpido - Itachi como respuesta exclamo lastimero.

-Nada más crecen y se vuelven insolentes. Antes cuando eras niño andabas acosándome, como Sakura contigo cuando eras gennin.

-¡ESO NO ES CIERTO! - Exclamaron ambos compañeros.

-Ya, aja. Podrá causar mareo y un poco de dolor de cabeza. Pero pasara rápido. Sakura - La ludida iba a seguir peleando por lo que había dicho antes Itachi, ignorando lo que le acaba de decir. Pero basto un pestañeo para cambiar el paisaje. "Genial, genjutsu" pensó Sakura y empezó a caminar entre la oscuridad del lugar. Recorrió el sito por varios minutos hasta que diviso a dos cuerpo uno frente a otro. Acercándose un poco más logro ver claramente a ambos Uchihas que siempre le atormentaban en cualquier momento. Estaban hablando. Itachi sonreía abiertamente mientras Sasuke se encontraba llorando.

-¿Me he convertido en mi propio enemigo? - Pregunto Sasuke al viento.

-Tal vez... yo diría que en realidad, nuestro peor enemigo siempre es uno mismo. - Respondió de igual forma. - Pero ahora el enemigo más peligroso para los demás es Madara Uchiha. - Suspiro cansado. La situación era preocupante y no dudaba que la tercera guerra mundial ninja estallara en poco tiempo. Pero eso quedaba de lado al ver a su hermano menor frente a él. Recordando todo lo que había hecho para protegerle a él y a Sakura. Grito como fan girl al ver a su personaje favorito y lo abrazo. - ¡Gracias, Sasuke!

-¡D-déjame en paz! - Trato de alejarlo pero al ver que no tenía intención de separarse de él, se rindió. - ¿No me odias? ¿Por qué te tomas todo esto tan bien? Yo separe a Sakura de tu lado, ahora es mi esposa y las niñas ante los demás son mías. Te quite todo lo que por derecho es tuyo. Les mentí y mi propósito era que nunca se volvieran a ver. Hice complot para destruir la aldea que tanto amas. Odiarme es lo que deberías hacer, es lo único que me merezco.

-Odiar es una sentimiento muy fuerte, otouto-baka. La gente siempre tratara de juzgar a los que le hicieron daño, sin saber que esa persona es la que más sufre por ese daño. Tuviste que soportar tú solo la gran carga de proteger a Sakura, a la aldea y a mí bajo las sombras. Y... sobre lo de morir...morir forma parte de la vida, así que es ridículo temerle a la muerte, porque eso conlleva tenerle miedo a la vida. Te amo, otouto-baka... - Sasuke correspondió al abrazo, haciendo este en una más tierno y unido. Eran hermanos, un par con una singular unión que siempre lo mantenía juntos. El complemento del otro, eso era lo que eran. Y con orgullo podrían decir que ahora eran de los pocos que habían roto la maldición del odio que cargaba el clan Uchiha consigo y eso se lo demostrarían al viejo greñudo de Madara.

Sakura sonreí con su rostro bañado en lágrimas. Era tan feliz se puso a brincar de alegría mientras miraba la conmovedora escena pero paro de repente, ¿había oído Madara Uchiha? Que tenía que ver ese loco en este cuento. Y como si Sasuke la hubiera escuchado cambiaron de escenario ahora solamente ellos dos aparecían observando la oficina de Sasuke, quien platicaba con un sujeto de mascara rara, al que reconoció Sakura como tobi, miembro de Akatsuki.

-Madara planea atacar Konoha y su cómplice seria Itachi Uchiha - El Sasuke que estaba a su lado empezó a hablar - Te mataría a ti, para que Itachi enloqueciera. Haría pasar tu muerte como un homicidio de parte de Konoha para que de una vez por todas odiara la aldea. Y después de destruir Konoha lo mataría. Solo el Uchiha más fuerte debería sobrevivir...

A Sakura se le dificulto escuchar las últimas palabras. Las imágenes frente a ella se iban borrando como humo y el suelo bajo ella se empezó a temblar y cuando sintió que caía trato de aferrarse al Sasuke ficticio pero su mano lo traspaso y cayó sin detenerse.

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