Como seguir tus pasos con tan poca luz.

No diviso tu cara entre la multitud.

Naufragó entre el pasado y el presente.

Soy esclavo de mi mente y del eco de tu voz

Maddi se despertó desorientada

Volteo a ver a su alrededor, estaba en una de las habitaciones del Salvation. A su lado Jazmín seguía en trance.

Limpio las lágrimas de sus ojos, se levantó y fue directo al baño de la habitación a ducharse para calmarse un poco.

Cuando terminó, aun no despertaba Jazmín y como no podía verla así , salió al bosque.

Subió a un árbol para asegurarse de que nadie la viera, subió sus pies a la rama, y se recargó en el tronco.

Se quedó allí, viendo al sol salir en el horizonte, en silencio. Hasta que noto que alguien daba vueltas debajo del árbol. Era Erick y estaba llorando.

Maddi no quería que se diera cuenta que estaba ahí, no quería molestarlo, pero por accidente rompió una rama cercana a ella, así que la noto.

--Hey, Maddi – la saludó sin voltear a verla, limpiando sus lágrimas --. Supongo que hemos sido los primeros en despertar.

-- Sí, supongo -- le contestó.

-- ¿Quieres compañía?

Aunque Maddi no quería a nadie cerca, tampoco quería estar sola, así que asintió.

Erick subió a la rama, ella le hizo espacio doblando sus piernas y él dejó sus pies colgando.

-- ¿Estás bien? -- le preguntó Erick, pero después lo pensó mejor --. Dioses ¿Qué clase de pregunta es esa? Claro que no estás bien, ninguno lo está.

-- No creo que nuestra cordura esté bien en un tiempo -- le dijo Maddi después de soltar una pequeña risa.

-- ¿Quieres hablar sobre ello?

-- En realidad no.

Maddi soltó un suspiro y dejo sus pies colgando. Erick intentó colocar su mano en el hombro de Maddi como apoyo, pero ella se apartó tan violentamente que casi cae del árbol.

-- ¿Estarás bien? -- le pregunto Erick al verla apartarse.

-- Sí, lo estaré.

Hubo un momento de silencio algo incómodo.

-- Es cómico, ¿no? – Habló Erick por fin, soltando una pequeña carcajada – Somos leyendas, historias que se cuentan entre los mortales, temidos por muchos de ellos, pero aún no podemos superar esa pequeña parte de nuestra vida que pasamos entre ellos.

-- Sí... -- río por lo bajo– Supongo que hay cosas que te marcan para siempre.

-- Supongo – suspiró – Aun así, esas son las cosas por las que estamos aquí, ¿no? Hubo algo bueno.

-- No lo parece...

-- Tal vez cada vez son más pesados porque no los afrontamos – dijo el chico --. Todos nosotros evitamos nuestros pasados, tal vez ese es nuestro problema, lo evitamos hasta que regresa, porqué siempre regresa, y siempre que regresan parece peor.

-- Me ha funcionado – le dijo desanimada

-- ¿En serio? ¿Ha funcionado? – La miro a los ojos y ella solo desvió su mirada -- Yo estoy harto. Harto de todo está mierda. Te lo contaré.

«Ponte cómoda, que será algo largo.

«Okey, empecemos desde el comienzo:

«Nací hace muchísimo tiempo ¿sabes? En el reino de España, llaman a la época Edad Media – Maddi se sorprendió y él soltó una pequeña risa --. Ni siquiera recuerdo el año exacto, ¿1414? Quizás 18....

«En fin, esa época es conocida ahora por la quema de brujas, aunque ahora le atribuyen todo al confundir ciencia con magia. Ja. Si supieran que sí había brujos, pero no nos justaba que nos llamaran así, éramos hechiceros.

«Vengo de una extensa línea de hechiceros, línea que terminó conmigo. Era hijo único y los hermanos de mi padre murieron antes de que pudieran tener hijos.

«Cazaban a los que eran como yo: encerraban a algunos, torturaban a otros, quemaban a varios; en el mejor de los casos solo los humillaban. Era una masacre de nuestra especie. Aunque algunos de los que atrapaban no tenían ni una pizca de magia en su cuerpo. En eso tienen razón, confundían muy fácil la magia con ciencia. Estoy seguro de que nunca entendieron que era la magia.

«Cuando nací, ya había muy pocos hechiceros, los que quedábamos sobrevivíamos como podíamos. Escondiéndonos. Escondiendo nuestros poderes.

«Muchos habían intentado esconderle la magia a sus hijos para evitar que tuvieran que huir. Pero las cosas salían peor: la magia debe aprender a controlarse, es una poderosa fuerza que no puede reprimirse, cuando una persona que no conoce su poder tiene alguna emoción fuerte, la magia encuentra una fuga, sale, y nadie puede controlarla...

«Los niños que les paso solo sufrían más, se asustaban por no saber que pasaba, destruían lugares, algunos morían entre los destrozos, otros sobrevivían, los atrapaban y los mataban.

«La Inquisición atrapó a mi mamá cuando yo solo tenía 4 años. Puede que ya no recuerde su cara, pero nunca podré olvidar su voz, la recuerdo a la perfección cantándome una canción de cuna. Era muy hermosa.

«La mandaron a quemar en la hoguera, no había ya nada que pudiera hacer mi padre por ella, y alguien debía cuidarme, así que escapó antes de que pudieran hacerle preguntas por su esposa.

«Mi padre me crio y me enseñó a controlar mi magia. Fue mi única compañía por mucho tiempo. Me protegía como podía y nos escondíamos como podíamos, aunque sabíamos que solo era cuestión de tiempo para que nos encontraran.

«Yo solo tenía 14 cuando pasó, me dijo que corriera, que los distraería y después me alcanzaría, pero él no salió de la casa. Lo atraparon... lo atraparon y lo único que pude hacer fue huir.

«Tenemos magia, podíamos con ellos, pero a mi padre nunca le gustó usar nuestro poder para atacar a otras personas, fuera en defensa o no – soltó una risa irónica –. Si me viera ahora.

«En fin, mandaron a que le cortaran la cabeza en la plaza del pueblo ese mismo día. Obligaron a todo el pueblo a verlo. Me obligaron a verlo. – Una lágrima resbaló sobre su mejilla. – Yo mismo me obligue a verlo, creía que estaba ahí por mi culpa, tenía que verlo.

«Salí del pueblo al día siguiente, antes de que recordaran que el hombre tenía un hijo. Sobreviví un tiempo. No podía trabajar, era solo un chico y sospecharían de mí en algún momento. Mi única salida era robar algo de comida con magia. 

«No pasaba mucho tiempo en un mismo lugar, pues la gente empezaba a sospechar.

«La verdad, no pasó mucho tiempo para que me encontraran a mí también.

«Un poco más de un año después de la muerte de mi padre, use mi magia para proteger a una niñita que acusaban de ladrona, el tipo la estaba lastimando y yo debía hacer algo.

«Me atraparon, pero no me asesinaron, dijeron que no matarían a un niño. Me encerraron con otro chico un poco mayor que yo, también tenía magia, no sé cuánto tiempo llevaba ahí, pero se veía muy mal. Nos tenían como criminales, solo por nacer con un poder especial. Nos privaban de comida por días, nos torturaban, nos humillaban...

«Al menos tenía compañía. -- Sonrío --. Me volví amigo del chico rápidamente. Mateo, aún después de milenios no lo he olvidado.

«Pasábamos las noches en las que no podíamos dormir hablando. – Su sonrisa se ensanchó --. Me contó que lo atraparon junto a sus padres, pero a ellos los mataron; le conté mis sueños, y él me contó los suyos; me apoyó en las noches que recordaba a mi padre, se sentaba junto a mí y me abrazaba; lo apoyé cuando ya no podía seguir y decía querer terminar con todo, lo tomaba de la mano y le explicaba que no me podía dejar solo; nos distraíamos los días que nos dejaban en ayuno para no pensar en el hambre; tomaba mi mano cuando me hartaba de todo eso. -- El chico suspiró --. Fue mi ancla durante todo ese tiempo, y quiero creer que yo fui la suya.

«Nuestra amistad termino siendo un poco más. Cuando me atreví a besarlo fue complicado ¿sabes? En esa época eso era castigado con muerte, pero ya estábamos sufriendo un castigo solo por nuestro poder, así que sus leyes no nos importaron mucho.

«Aun así fue difícil al comienzo, pero nos quedamos juntos, y lo enfrentamos juntos... – Erick lanzó un profundo suspiro, Maddi soltó una risita y el chico se sonrojó y se puso nervioso –. Fue hace muchísimo tiempo... y fue mi único apoyo en...

- No debes explicarme nada, Erick – lo interrumpió Maddi poniendo una mano en su pierna, el chico se calmó y continuó su historia

-- Bueno, pase un poco más de un año en esa cárcel. Fue el tiempo que nos tomó a Mateo y a mí atrevernos a escapar. Teníamos un plan... Bueno, una pequeña parte de un plan. 

«Mateo consiguió recordar un hechizo para hacer un hueco en la pared de la celda, no teníamos ni idea de que haríamos después, sabíamos que los guardias nos atacarían, pero éramos optimistas.

«Aun así, nuestro optimismo no nos ayudó cuando nos atacaron. No podíamos contra ellos, habíamos pasado mucho tiempo sin hacer magia y se nos complicaba lograrla. 

«Recuerdo el momento exacto en que una ballesta le dio a Mateo en el pecho – una lágrima volvió a cruzar su mejilla –. Recuerdo sus ojos mirándome fijamente, parecía asustado. Recuerdo que corrí para sujetarlo antes de que tocará el suelo, lo recuerdo en mis brazos mientras repetía su nombre, esperando que despertara y contestara.

«Me tomó un momento asimilar que no contestaría a mi llamado nunca más, pero cuando una fleca paso rosándome el rostro tuve que volver a la realidad. 

«Y entonces, me giré hacia los guardias que habían matado al chico que me mantuvo cuerdo. Ellos lo habían asesinado y ni siquiera les importaba. Eso fue suficiente para que la magia encontrara una fuga. Salió y yo no estaba dispuesto a controlarla.

«No recuerdo mucho de lo que pasó después, pero logré escapar. Con un premio. -- Desenfundó su puñal –. Este puñal era el recordatorio perfecto de que lo perdí frente a mí, de que no hice nada, cada vez que veía mi mirada reflejada, podía ver sus ojos asustados. – Miró el puñal para que reflejara sus ojos –. Ahora lo único que veo es la mirada comprensiva que me daba en las noches difíciles.

«En fin, terminé volviendo a las calles. A mi vida anterior. Sobrevivía como podía, pero debía esconderme más, pues me buscaban por sus guardias muertos.

«Estaba solo de nuevo, sin familia, ni amigos, ni nadie... pero Caos me salvó, me entrenó, me enseñó aún más sobre la magia y me cuidó.

«Caos solía decirme que fui dotado con un don, por mucho tiempo yo no pude creerle. -- Hizo flotar en el aire su arma. -- Pensaba que mi poder era una maldición. Pensaba que para lo único que me sirvió fue para quitarme todo... y a todos.

«Hasta que un día Caos me dejó mi primera misión: Ayudar a los soldados en una batalla entre franceses y españoles. No estaba en ningún bando, sabes que a Caos no le gusta tomar bandos, dice que no vale la pena. Salvé a algunos soldados, estaba seguro de que ninguno de ellos merecía morir.

«En ese momento me di cuenta de que sí tenía un don, podía salvar personas, podía ayudar... Así que me dediqué a seguir haciéndolo y nunca me detuve, siglos después encontró a Jazmín, y entonces le surgió la idea de formar un ejército.

«Ya no hay hechiceros en la actualidad – soltó, tras un corto silencio. -- Terminaron con todos. Créeme, los he buscado. Soy el último con este poder...

Erick volvió a un profundo silencio, hasta que Maddi lo rompió.

-- ¿Así que es verdad? – Le preguntó Maddi pareciendo seria -- ¿Nacer en la edad media era una mierda? – cambio su seriedad por una pequeña sonrisa que Erick imitó, asintiendo.

-- Lo que... lo que viste – dijo la chica nerviosa, desvaneciendo su sonrisa -- ¿Fue la muerte del chico, Mateo?

Erick asintió.

-- También a mi padre – le dijo triste con la cabeza gacha --. Los vi morir de nuevo, una y otra vez. Y después estaba solo, sin poder hablar con nadie, solo sobreviviendo. Nada más.

«Supongo que eso fue lo peor, después de perder a mi familia y a Mateo ya no tenía nada, solo sobrevivía, y ni siquiera sabía por qué seguía, muchas veces quería rendirme, pero algo me detenía, no sé que era...

«Pero me alegro de haberlo hecho – una nueva sonrisa tornó sus labios.

«Sí, fue una mierda, pero paso hace tantos milenios... Lo he venido cargando todo este tiempo. Pensando que evitarlo haría que desapareciera, pero no funciona así.

«Debía afrontarlo, y contártelo ha sido una buena forma de hacerlo. Siento que tengo un peso menos encima.

-- Espero que haya servido, porque ahora voy yo – le dijo Maddi

-- No tienes que hacerlo si no quieres... – explicó Erick, pero Maddi lo interrumpió con un gesto de su mano.

-- No, quiero hacerlo...

¿Cuántas lagrimas debo derramar

para asumir que tu ya no te quedaras?

-. -. -. -. -. -. -. -. -. -. -. 

Nuevo capítulo. 

Okey, esta historia me costo un poco, creo que no es perfecto, pero a mi me gusta. 

Bueno, amiguitos, solo para aclarar, por si las dudas o lo que sea. Erick es bi.

En fin, no sé si esto este muy largo. Si es muy largo y en un punto se vuelve tedioso y repetitivo pueden ponerlo en los comentarios, así yo lo sabré y podré reducirlo un poco.

Oh, y sobre las frases, yo sentí que encajaban perfecto en el sentimiento de perdida de Erick y porque la artista me encanta. Es de la canción "Tu camino" de Mila.

Si no conocen a esta artista deberían escucharla.

Ya saben, si les gusta voten. Y comenten todo lo que se les ocurra.

Y ya por ultimo, quiero su opinión: ¿Creen que Erick sufrió lo suficiente o le falto más dolor?

Los quiero ❤. Bye.